Augusto Hortal Alonso es un doctor titulado en filosofía de la universidad de Munich; su trabajo de posgrado se tituló: Pretensiones normativas de la Sociología del conocimiento de Karl Mannheim (1975) Trabaja en la Universidad Pontificia Comillas de Madrid como profesor de ética y filosofía; actualmente imparte la clase de Ética Profesional en la licenciatura de traducción e interpretación; entre sus obras más destacadas están: Ética General de las Profesiones(2002), Los cambios de la ética y la ética del cambio (1989) y Ética: I. Los autores de la vida moral (2005) (Desclée De Brouwer. s,f) Con base a los principios de la ética profesional, realiza aportes a disciplinas específicas como son: Enfermería (2002), Trabajo Social (2002), Profesiones Jurídicas (2006), Profesorado (2010) entre otras. Su análisis del principio de beneficencia parte de la diferencia entre bienes intrínsecos y extrínsecos. Los primeros hacen referencia a la correcta elaboración de la práctica profesional, en cuanto a lo segundo refiere a los beneficios monetarios, de prestigio o de poder que se obtienen por la práctica. Las acciones realizadas por beneficios personales se corrompen, contrario a los bienes intrínsecos (Adler, 2013). De hecho, Hortal (2002 citado en García, 2006) sostiene que los universitarios en muchas ocasiones no cuentan con una adecuada formación ética, ya que los docentes que la imparten si bien poseen bases filosóficas, no son especialistas en el área profesional propia de la carrera, de ahí que la preparación idónea se da a partir de un “bilingüismo”, concepto utilizado para hacer referencia a que el docente está preparado tanto en el lenguaje filosófico como en el lenguaje de la profesión.