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Cólera en México – Actualización

Brotes epidémicos

13 DE NOVIEMBRE DE 2013 - El Ministerio de Salud de México ha notificado


otros cuatro casos de infección por Vibrio cholerae O1 Ogawa: dos en el estado
de Hidalgo y dos en el de Veracruz.
Desde el principio de este brote, en septiembre de 2013, hasta ahora se han
notificado en el país 180 casos confirmados de cólera por Vibrio cholerae O1
Ogawa, uno de ellos mortal. De estos 180 casos, 2 se han registrado en el
Distrito Federal, 159 en el estado de Hidalgo, 9 en el estado de México, 2 en el
estado de San Luis Potosí, y 8 en el estado de Veracruz; 92 de los afectados
son del sexo femenino y 88 del sexo masculino, y sus edades oscilan entre los
3 meses y los 88 años.
Las autoridades sanitarias de México siguen reforzando la investigación del
brote y la vigilancia en todo el país, además de garantizar la disponibilidad y
calidad de la atención prestada en unidades médicas. Los profesionales
sanitarios de los diferentes niveles del sistema de salud están recibiendo
capacitación sobre la prevención y el tratamiento de la enfermedad. Se están
tomando medidas para garantizar el acceso a agua salubre y saneamiento
básico en el ámbito comunitario y se están realizando campañas de
sensibilización, sobre todo con respecto al consumo de agua y alimentos
salubres, tanto en español como en lenguas indígenas.
El Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos ha realizado
antibiogramas de Vibrio cholerae O1 Ogawa que demuestran que la bacteria es
sensible a la doxiciclina y al cloranfenicol, tiene una sensibilidad reducida al
ciprofloxacino y es resistente al trimetoprim/sulfametoxazol.
Esta es la primera transmisión local del cólera que se registra en México desde
la epidemia de 1991-2001. Desde el punto de vista genético, las bacterias
aisladas en pacientes mexicanos son muy similares (95%) a la cepa que está
circulando actualmente en tres países caribeños (Cuba, Haití y República
Dominicana), y diferentes de la cepa que circuló en México durante la epidemia
de 1991-2001.
La OMS no aconseja la imposición de restricciones a los viajes ni al comercio
con México en relación con este evento.
¿Dónde se encuentra distribuido el cólera?
En México ha estado presente en el país desde la epidemia de los años 90, y en los
últimos años se han registrado casos aislados, como los ocurridos en los 2010, 2011 y
2012 en el estado de Sinaloa, siendo el mismo tipo de bacteria que ha circulado desde la
década de los noventa la que continua presente. En 2013, se originaron brotes y casos en
el Distrito Federal, Hidalgo, Veracruz y San Luis Potosí. Actualmente, el cólera en el país
se mantiene bajo control epidemiológico.

¿Es posible prevenir el cólera?


Si, siendo el cólera una enfermedad diarreica, la clave para limitar y controlar la aparición
de casos y brotes de diarrea y sospechosos de cólera, es importante un abordaje
multidisciplinario basado en la prevención, la preparación y la respuesta, aunado a un
sistema de vigilancia eficaz.
La prevención está enfocada en reducir el riesgo de que el agua y alimentos que consume
la población estén desinfectados y seguros de no contener a la bacteria del cólera. Por lo
anterior es importante que se cuente con sistemas de abastecimiento de agua
debidamente clorada, si como el adecuado manejo de excretas mediante sistemas de
drenaje, uso de letrinas y tratamiento y disposición de aguas negras.
Si vives donde se ha detectado la circulación de la bacteria o han ocurrido casos de
cólera, debes tomar las medidas preventivas como:
· Lavado de manos después de ir al baño y antes de preparar o consumir alimentos.
· Lava y desinfecta frutas y verduras.
· Consumir solo agua desinfectada con cloro, plata coloidal o filtrada y hervida.
· Evitar consumir alimentos en la calle.
· Consumir pescados y mariscos bien cocidos o fritos.
Si viajas hacia donde hay casos de cólera debes cuidar tu salud, por eso es importante
que sigas las medidas preventivas que aquí te mencionamos:
· Toma agua hervida o purificada (embotellada)
· Come sólo en lugares limpios.
· Consume solo alimentos cocidos, fritos y calientes.
· Cuida la higiene de los alimentos que consumes.
· Lávate las manos antes de comer y después de ir al baño.
· Si tú o algún miembro de tu familia presentan algún síntoma consulten de inmediato
al médico. Los enfermos deben tomar abundantes líquidos y no dejar de consumir
alimentos.
Aparentemente importado de España, el cólera llega a nuestro país a través de las
costas, en la primavera de 1833, con una mortalidad de alrededor de 14 mil entre
agosto a noviembre de 1833 (I). Hacia el año de 1961, la OMS declaró en
Indonesia la séptima ola pandémica de cólera, la cual se difundió prontamente a
otros países de Asia, Europa, África y, finalmente, en 1991, llegó a América Latina,
parte del continente que había estado libre de la enfermedad durante más de cien
años. El cólera se propagó apresuradamente en esta región, causando casi
400,000 casos notificados y más de 4,000 defunciones en 16 países de las
Américas durante ese año (XIV).

Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que cada


año en el mundo se producen entre 3 y 5 millones de casos de cólera y entre
100,000 y 120,000 defunciones por esta misma causa. Con el consabido período
de incubación de esta bacteria, que ondula de un par de horas hasta cinco días,
se amplifica el carácter potencial mente explosivo de los brotes epidémicos. Tan
sólo en 2011 se notificaron 589,854 casos en 58 países, que incluyeron 7,816
defunciones. El déficit en la información recabada entre otras causas se debe a las
limitaciones de los sistemas de vigilancia, así como el temor a las sanciones en
materia económica y social que afectarían de manera sustantiva la derrama
económica de estos países en desarrollo (IV).

De acuerdo al boletín epidemiológico de 2013, México confirmó 184 casos de


cólera, cuya cepa fue identificada como O1 biotipo Ogawa, siendo uno de ellos
mortal. El mayor número de casos se concentró en el Estado de Hidalgo con 157
casos, sin embargo, también se vieron afectados el Distrito Federal, Estado de
México, San Luis Potosí y Veracruz. En lo que va de 2014, hasta la semana 48,
los datos reportados son: 13 casos en el estado de Hidalgo (siete hombres y seis
mujeres) y la Secretaría de Salud del estado de Querétaro reporta un caso (XV).

Estamos de acuerdo en lo que señala el Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica


(SINAVE) de nuestro país en que el aumento incontenible de los grupos de población
vulnerables que viven en condiciones de máxima pobreza; los deficientes (o la falta de)
servicios públicos básicos; la poca o nula educación en salud de nuestros conciudadanos;
así como la migración de las minorías hacia las macropólis, son factores que coadyuvan
al resurgimiento de esta enfermedad (III).
Si queremos un control eficaz de la enfermedad, la advertencia sería dirigida en
regularizar el uso de sistemas de purificación para eliminar la contaminación del
suministro del agua, consumir sólo agua clorificada embotellada y la aplicación de
medidas adecuadas para evitar la contaminación de los alimentos, así como un manejo
adecuado de las aguas residuales. No obstante, en México, en relación con las
condiciones de saneamiento, se estima que el 90.9% de la población del país recibe agua
de redes públicas de abastecimiento, y la red de alcantarillado cubre 89.6% de la
población, pero aún hay entidades federativas que carecen de estos servicios, como es el
caso de Guerrero y Oaxaca, donde el porcentaje de las viviendas que no cuentan con
este servicio son 72% y 70%, respectivamente (VI).

En efecto, en lo que se refiere a la calidad del agua, de un total de 122 países, México
ocupa el lugar número 106. La calificación en materia de calidad se obtiene al identificar
principalmente los materiales y sustancias que lleva disueltos o en suspensión y los
microorganismos que ahí se encuentran, siendo los principales indicadores la
concentración de fosfatos y de nitratos, la demanda bioquímica de oxígeno y el número
total de coliformes fecales, factores todos involucrados con las principales fuentes de
contaminación de las aguas en nuestro país (VII).

En la actualidad, sólo el 30% de las aguas servidas reciben algún tipo de tratamiento. La
Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) estima que el 52% del total de los recursos
hídricos superficiales está muy contaminado, mientras que el 39% está contaminado de
forma moderada y sólo el 9% es de calidad aceptable. En nuestra opinión, consideramos
que el gobierno federal debe mejorar las condiciones del agua que llega a los hogares de
todo México para evitar la contaminación de todos aquellos que consumen esta agua de
baja calidad y evitar enfermedades infecciosas que en nuestros países de América siguen
cobrando víctimas año con año por deshidratación y diarreas (IX).
Para prevenir el contagio de cólera en México y cuidar la calidad de vida de sus
habitantes, la Secretaría de Salud (Ssa) recomienda seguir los siguientes pasos:

1. Lavarse las manos con agua y jabón, así como utilizar alcohol en gel
desinfectante, antes de comer, después de ir al baño y antes de preparar los
alimentos.
2. Usar agua hervida, desinfectada con cloro o embotellada para beber y
preparar alimentos.
3. Lavar frutas y verduras con agua y jabón, así como utilizar tres gotas de
cloro por litro de agua para desinfectarlas.
4. Consumir alimentos bien cocidos o fritos
5. Evitar la ingesta de comida cruda en la calle
6. Agregar un cuarto de taza de cloro al depósito de agua (tinacos)
7. Si almacenas agua en cubetas, agregar una cucharadita de cloro por cada
20 litros
8. Visitar al médico ante cualquier caso de diarrea, náusea y vómito
9. Evita auto-medicarte.
Como resultado de la epidemia de cólera que se dio en nuestro país en 1992, se
implementaron medidas higiénicas que mantenemos hasta la fecha como son la
cloración del agua y el consumo del agua embotellada. Con estas acciones, no
sólo se controló la enfermedad, sino que se presentaron algunos efectos
colaterales como la reducción de las enfermedades diarreicas y la mortalidad por
estas.

Pandemias mundiales. En el mundo se han registrado siete pandemias de


cólera, la primera en 1817 y la última en los años noventa. La bacteria
regularmente se encuentra en Bangladesh o el norte de la India.

Lo anterior, implica fortalecer las acciones de promoción a la salud y control de


enfermedades que al paso de los años han demostrado ser efectivas, asimismo se
requiere innovar en estrategias encaminadas a mantener bajo control
epidemiológico al cólera y que además impacta en otras enfermedades con las
que se comparten los mecanismos de transmisión y las medidas de prevención y
control. Lo anterior, con la participación activa de la sociedad y la industria de
manera organizada en el marco de la Estrategia Nacional de Prevención y
Promoción de la Salud.

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