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La historia psiquiátrica
El examen del estado mental.
Las escalas o cuestionarios para detectar o valorar la severidad de
síntomas o problemas específicos psiquiátricos
El examen físico
Los test psicológicos
Los exámenes de laboratorio
Historia psiquiátrica
Pasos de la historia clínica:
1) Extraer los datos útiles de la historia y del examen del estado mental
para formular un diagnostico diferencial y un posible diagnostico.
2) Evaluar los factores genéticos, familiares, orgánicos, psicodinamicos,
sociales, conductuales, psiquiátricos.
3) Con base a lo anterior puede empezar a formular un pronóstico, un plan
de trabajo y selecciones los métodos terapéuticos convenientes para el
paciente.
Examen físico y neurológico
Físico: este no solo puede ayudar a revelar la presencia de un síndrome
cerebral orgánico, sino también dar a conocer su etiología.
Pruebas psicológicas
Se utilizan en psiquiatría para tratar de esclarecer preguntas específicas a
ciertos pacientes que no se puede contestar en la entrevista psiquiátrica.
Estas pueden ser en relación al diagnostico diferencial, para determinar el
nivel de funcionamiento intelectual o para ayudar a determinar si un
paciente con problemas de aprendizaje pudiera beneficiarse de un programa
especial.
Estandarización
Credibilidad: siempre que se realice a la misma persona, esta debe
administrar los mismos resultados.
Validez: capacidad con el que el test mide lo que se propone medir.
Pruebas de inteligencia: miden la capacidad de razonar y de resolver
problemas impersonales y racionales, lo que requiere una concentración
consciente y prolongada.
Pruebas de personalidad: intenta evaluar rasgos o características de la
personalidad y otros intenta revelar los factores dinámicos como
motivos, defensas y conflictos.
Pruebas neuropsicológicas y de daño organico: miden el déficit
intelectual y daño cerebral (Winscosin, Bender-Gestalf)
Pruebas vocacionales y de actitud: miden actitudes e intereses
potenciales del paciente.
Pruebas para evaluar a conducta.
Exámenes de laboratorios
Sangre y orina: pueden clarificar el diagnostico de un síndrome
orgánico.
Radiografía de tórax: mejor diagnostico en pacientes febriles.
Rayos X simple de cráneo.
Punción lumbar: tiene utilidad ilimitada en la investigación de
síndromes orgánicos crónicos, pero en ocasiones pueda tenerla en
síndrome agudo.
Electroencefalograma (EFG): útil para evaluar presencia de
convulsiones de los lóbulos temporal y frontal que pueden presentar
conductas complejas.
Tomografía computarizada.
Resonancia magnética.
Pruebas toxicológicas: para pacientes que reciben medicaciones
psicotrópicas.
Pruebas neuroendocrinológicas.