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Capítulo 1
Introducción a la psicopatología
del trabajo
~

l.; ¿Qué es la psicopatología


del trabajo?
La psicopatología del trabajo estudia la relación psíquica del trabajo. En
el comienzo de este proceso de conocimiento se encuentra el interés por co-
nocer las é'ons~cuencias del trabajo sobre la salud mental de los trabajado-
res, ya sea qué' estas consecuencias sean nefastas --"--Cn ese caso el trabajo se-
rá entonces pat6geno- o que sean favorables --"--Cn cuyo caso el trabajo se-
rá estructurante.
La psicopatología vuelve a interrogar de manera decidida, apoyándose
en la concepción psicoanalítica del funcionamiento psíquico, el impacto de
la reaHdad exterior sobre el sujeto y, por lo tanto, se aventura fuerai:lel cam-
po eStriCtamerite limitado por un psicoanálisis que habitualmente SóIÜ se in-
teresa por las fuentes endógenas del sufrimiento (estas últimas relacionadas
con la historia precoz y la repetición inconsciente de los conflictos resueltos
de manera insuficiente, heredados de la infancia).
Además del interés acordado a la salud mental de los trabajadores, la psi-
copatología del trabajo se preocupa por las condiciones para la transforma-
ción del trabajo.
Debemos hacer resaltar tres puntos:
- Si las condiciones de trabajo (estudiadas por la medicina del trabajo,
la psicología industrial y la ergonomía) están específicamente relacionadas
con los daños infligidos a la salud del cuerpo de los trabajadores, es necesa-
rio identificar lo que, en la situación de trabajo, pone específicamente en
cuestión al funcionamiento psíquico. La psicopatología del trabajo asigna la
función patógena (o estructurante del trabajo, según los casos) a la organi-
zaci6n del trabajo, es decir, la división de las tareas por una parte y, por la
otra, la división de los hombres (es decir al dispositivo de control, de vigi-
lancia, de jerarquía, de mando, de asignación de las responsabilidades, etc.).
- La organización del trabajo a menudo es peligrosa para el funciona-
miento psíquico. Sin embargo, la gran mayoría de los trabajadores llega a
conjurar la locura o, en términos más técnicos, la descompensación psiquiá-
trica. Para designar este equilibrio (inestable), que no llega a ser enfermedad
Trabajo y desgaste mental~ Chris.tophe Dejours Introducción a 1-a'psicopatología del trabajo· Christophe Dejours

mental, hablaremos de sufrimiento. De hecho, la psicopatologfa del trabajo dad y muerte en el trabajo.
se interesa sobre todo en la investigación del sufrimiento más que en la bús- La defensa colectiva exige Ja participación de todos los trabajadores sin
queda de enfermedades mentales específicas del trabajo, que son relativa- excepciones, y ejerce un poder de exclusión y de selección frente a los tra-
mente raras, si es que realmente existen, ya que tenemos buenos motivos pa- bajadores que se resisten a las reglas de conducta establecidas por la defen-
ra dudar de ello. sa colectiva.
El sufrimiento, estado de equilibrio inestable, implica entonces una con- Podemos entonces observar que se perfilan una serie de paradojas. La
frontación entre los factores patógenos provenientes de la organización del defensa contribuye a unificar a los trabajadores y a unir profundamente al
trabajo y los procedimientos defensivos elaborados por los mismos trabaja- grupo de trabajo para miniffiizar el sufrimiento. En estas condiciones, nada
dores. Es así como la psicopatología del trabajo se interesa muy particular- · impide que las defensas puedan ser explotadas por la producción: podemos
mente por el estudio de estas defensas que, a diferencia de las descompen- demostrar que Ja productividad está estrechamente ligada a la eficacia de la
saciones psiquiátricas, están marcadas por las obligaciones organizaciona- defensa colectiva, que al principio se construye para combatir el sufrimien-
Jes, contra las cuales fueron levantadas. to. La defel)sa colectiva puede incluso, en ciertos casos, estimular Ja produc-
- Si el trabajo puede ser patógeno, también puede ser fuente de placer ción de "sécre>os del oficio'', sin los cuales ninguna producción es posible;
e incluso contribuir de modo original a la lucha para conquistar y defender en efecto, siempre hay un desfasaje, como lo .demostraron los ergónomos,
la salud. El interrogante que se plantea entonces apunta a las características entre organización del trabajo prescripta y organización del trabajo real: si
de las organizaciones del trabajo que dan acceso al placer, a Ja salud mental los obreros aplican estrictamente la organización del trabajo prescripta, co-
y también a Ja salud del cuerpo, por más que hagamos referencia a las con- mo en las huelgas o conflictos de trabajo a reglamento, la producción se tor-
cepciones psicosomáticas. na rápidamente imposible. Los "secretos de oficio" resultan ser vit_ales para
la producción. Podemos entonces estudiar lo que conviene llamar la explo-
Esta dimensión puesta en evidencia por la piscopatología del trabajo ha- tación del sufrimiento.
ce posible un acercamiento al problema de la transformación de la organi-
zación del trabajo. Otra paradoja que surgió a raíz del estudio de los procedimientos defen-
sivos contra el sufrimiento es la de que, cuando estas defensas funcionan
bien, llegan a controlar en forma eficaz el sufrimiento. Cuando funcionan
2. Los sistemas defensivos demasiado bien, pueden incluso producir una suerte de anestesia, es decir,
una insensibilidad al sufrimiento que ya no es más percibido conscientemen-
Encontramós procedimientos defensivos específicos en función de cada te por los trabajadores. Esto, sin embargo, plantea a su vez un problema: que
tipo de organización del trabajo. Podemos, así, poner en evidencia las defen- en estas condiciones las defensas estabilizan la situación y obstaculizan los
sas que fueron esencialmente utilizadas por los individuos y las defensas esfuerzos necesarios para repensar y transformar la relación con el trabajo.
construidas por los grupos de trabajadores. A estas últimas se las llama "de- A partir de ese momento, las defensas excesivas toman la forma de una re-
fensas colectivas", y se analizaron particularmente en la construcción y en las sistencia al cambio. Entonces, se amplía e1 campo específico de Ja alienación
obras públicas, en la petroquímica, en la energía atómica, entre los marinos- en el trabajo.
pescadores, el ejército, etcétera. Estas defensas fueron elaboradas para lu- Cuando estos procedimientos defensivos sirven de base a Ja construcción
char contra las diferentes formas de sufrimiento y, sobre todo, contra el mie- de un sistema de valores, que llevan a promover la defensa como un fin en
do que origina trabajo. sí mismo, ocultando así su vocación principal de defensa contra el sufri-
Éstas funcionan según una lógica rigurosa asegurada por un sistema de miento o, lo que equivale a lo mismo, cuando logramos transformar la de-
prohibición de ciertos comportamientos, de silencio en todo lo que se refie- fensa en deseo, en meta, en objetivo en sí, entonces ya no se trata de una de-
re al miedo, de valorización del discurso heroico, de comportamientos de fensa colectiva, sino de lo que llamamos una ideología defensiva del oficio,
bravura y de desafío frente al peligro, de rechazos paradójicos de las consig- cuyo impacto sobre las relaciones sociales es altamente problemático.
nas de seguridad y de prácticas colectivas lúdicas que ponen en escena situa- Esto sucede sobre todo si no limitamos la investigacíón a los trabajado-
ciones de riesgo que hay que menospreciar, y a veces bromas peligrosas que res reducidos a tareas de ejecución, sino que consideramos también lo que

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siempre están centradas sobre las cuestiones de peligro, accidente, enferme-

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Christophe Dejours Introducción a la. psicopatología del trabajo · Christophe Dejours

ocurre .del lado de la supervisión y de la dirección. Constatamos, entonces, A pesar de que la sublimación es ante todo un proceso subjetivo singular,
que los ejecutivos también tienen que defenderse del miedo que implica el sería un error creer que ella no implica procesos subjetivos colectivos. La su-
hecho de trabajar en, por ejemplo, el campo de la energía nuclear o de la in- blimación, que e& correlativa de las actividades de concepción, particular-
dustria química. Constatamos además que, por encima del miedo a los acci- mente favorecidas por el trabajo de oficio, recluta al colectivo. Pero ella re-
dentes, tienen específicamente miedo a los obreros que ellos suponen diri- quiere de otra forma de constitución, regulación y funcionamiento de este co-
gir. De modo tal que los ejecutivos también contruyen sistemas defensivos lectivo, en comparación con lo que se mencionara acerca de los "colectivos
específicos, que contribuyen a radicalizar los antagonismos y los sufrimien- de defensa". El trabajo de oficio termina sobre todo en colectivos del tipo
tos de ambas partes. "comunidades de perten...encia'\ estructurados por reglas que no controlan so-
lall)ent6 los 'comportamienios frente al sufrimiento, sino que, é_c;tmo conse-
cuencia de la tecnicidad y de los saberes productivos, controlan sobre todo su
3. El placer en el trabajo
conservación, transmisión y evolución. Se desprende de esto una forma par-
ticularmente desarrollada de cooperación obrera, que volvemos ciertamente
A diferencia de las defensas contra el sufrimiento, que pueden ser obje- a encontrar entre los trabajadores dedicados a tareas de ejecución pero, sólo
to de una elaboración colectiva, el placer sigue siendo una dimensión estric- en estado lmbrjonario si comparamos la manera en que se despliega en los
tamente individual, derivada del deseo (dato irreductiblemente subjetivo). El colectivos de ó'ficio, "colectivos de regla'' o comunidad de pertenencia.
estudio del placer en el trabajo se basa en el análisis del proceso conocido
en el psicoanálisis bajo el nombre de sublimación. Este último consiste, muy
esquemáticamente, en tomar el campo social, y ei1 particular el trabajo, co- 4. La organización del trabajo
mo Un teatro donde uno puede volver a actuar, donde se ponen en escena
nuevamente sus deseos (o las 'mociones-pulsi'onales) que no pudieron ellcon-
trar en la sexuaiid~d_las_.C,()JJdil::jQ_nes,,propicias para su satisfacción. Es así co- Bajo está perspectiva, la psicopatología del trabajo ya no considera la ore
mo el trabajo es el mediador privilegiado entre inconsciente y campo social. ganización del trabajo como el resultado de una definición técnica, sino más
De hecho, el trabajo es capaz, bajo ciertas condiciones, de ofrecer una vía de bien como una relación social. No como una relación social de simple po-
salida favorable al deseo y, además, puede inscribirse como una herramien- der sino como una relación social de trabajo, que interviene específicamen-
ta en la conquista del equilibrio psíquico y de la salud mental, al lado de la te en la cuestión de decidir cómo debe realizarse el trabajo. Tanto los estu-
sexualidad y el amor. El trabajo se denomina entonces estructurante. Es de- dios psicopatológicos como los estudios ergonómicos nos indican que la or-
cir que en las tareas estrictas de ejecución, sobre todo cuando son parciali- ganización prescripta del trabajo nunca se respeta en la realidad y que, en de-
zadas, no hay lugar para negociar la puesta en escena necesaria que ponga finitiva, siempre resulta de un compromiso procedente de una negociación
en juego la sublimación. Podemos incluso llegar a hablar, en ese caso, de or- entre el colectivo de conducción y el colectivo de ejecución. Este compro-
ganizaciones del trabajo antisublimatorias. Se trata de tareas desestructuran- miso es, por otra parte, altamente inestable y singularizado de una empresa
tes o potencialmente patógenas. a otra, en función de la historia de los colectivos en cuestión. Es así como la
misma fábrica instalada copiando fielmente la casa motriz no funciona para
¿Cuáles son las características de las organizaciones del trabajo estructu-
nada como su equivalente implantada en el país de origen. En forma análo-
rantes? Esquemáticamente, podemos admitir nuevamente que ellas son las
ga, dos destilerías de alcohol instaladas en dos regiones diferentes del Bra-
que permitieron situaciones donde se le confía al trabajador una parte signi-
sil generan dos organizaciones del trabajo realmente diferentes. Incluso den-
ficativa de la concepción del trabajo. Las tareas de concepción brindan a me-
tro de una misma central nuclear, podemos a veces observar diferencias con-
nudo las condiciones necesarias para la instalación de teatros de Ja sublima-
siderables en la organización del trabajo si compararnos una sección (o reac-
ción. Por eso, convenimos, a partir de ahora, oponer las actividades de con-
tor) con otra, donde cada una cuenta con su propio personal y sus propios
cepción a las actividades de ejecución, en vez de recurrir a Ja oposición clá-
equipos de control y de mantenimiento.
sica entre el trabajo intelectual y el trabajo manual (sabemos muy bien hoy
en día, con la informática y la automatización de la información, que nume- Estas diferencias nos hacen pensar que de un lugar a otro, de una situa-
rosas tareas cognitivas son tan estereotipadas y peligrosas para la salud co- ción a otra, la imaginación, la inventiva y las capacidades creadoras de los
mo las tareas manuales). trabajadores, no cristalizan ni evolucionan en forma idéntica. Es esta varia-

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bilidad la que nos lleva a afirmar que la organización del trabajo puede ser punto que una parte importante de la psicopatología general de la infancia y
transformada basándose en las capacidades creadoras o, mejor aún, en lo que de la adolescencia merece redescifrarse completamente a la luz de la psico-
podemos denominar las aptitudes de los trabajadores para la investigación patología de los padres. No podemos dejar de lado que, al mismo tiempo,
sobre su trabajo a pesar de que, a menudo, en nuestras sociedades, estas ac- gran parte de las consecuencias psicopatológicas del sufrimiento repercuten
titudes sean frenadas y aplastadas. Ahora bien, es esta misma actividad la que sobre terceros.
expresa socialmente la movilización de los procesos subliminatorios, que son En la vía abierta por la economía de las defensas y su cascada de conse-
centrales en la cuestión del placer y de la salud mental en el trabajo. cuencias, podemos abQfdar la cuestión de la división internacional del traba-
jo y de los riesgos, sobre.todo de los riesgos psíquicos. Corno ya señalára-
5. De la división sexual mós, la economía de las defensas contra el sufrimiento en el trabajo no po-
dría analizarse en un marco limitado sólo al individuo. Implica los colecti-
a la división internacional del trabajo vos de trabajo, las·relaciones domésticas entre los cónyuges y las relaciones
con los hijos. Más allá de eso, las estrategias elaboradas e implementadas
por los trabajadores para luchar contra el sufrimiento tienen una cierta efica-
La confrontación de los resultados de la psicopatología con la sociolo-
cia sobre Ja olganización del trabajo, cuya evolución se enfrenta, eHa tam-
gía de la división sexual del trabajo nos muestra que la situación de las mu-
bién, al obstáculo humano. Una de las maniobras de los empresarios para ha"
jeres no se asemeja en nada a la de los hombres en lo que se refiere al. su-
cer frente a esto consiste en exportar hacia los ,países en vías de desarrollo
frimiento psíquico y a los procesos defensivos que están en situación de po-
las organizaciones del trabajo que encuentran una-resistencia demasiado or-
der elaborar. Numerosos argumentos sugieren que las defensas colectivas
ganizada en los países industrializados. Exportando los procesos de trabajo,
de oficio son molestas para Hevar a cabo, por causa de las dificultades es-
los países del norte exportan también una parte importante de la psicopato-
pecíficas (puestas en evidencia por los sociólogos) que enfrentan las muje-
logía del trabajo.
res al querer constituir colectivos en el trabajo. Algunos datos clínicos dis-
ponibles sugieren que, en las fábricas de mujeres, cuando las defensas co- Aunque ciertos datos preliminares nos indiquen que bajo muchos puntos
lectivas funcionan, suponen distorsiones importantes impuestas a la identi- de vista, los procesos defensivos elaborados por los trabajadores del Brasil,
dad sexual de la mujer. En otros términos, la psicopatología del trabajo de por ejemplo, son muy parecidos a los que podemos observar en Europa en
las mujeres parece indicar que éstas tienen que padecer un sufrimiento su- situaciones de trabajo similares, por el contrario, la evolución de la relación
plementario con respecto a los hon1bres; no se trata de un sufrimiento más, psíquica del trabajo, inducida por la división creciente de las tareas y por la
sino que se produce un desfasaje sobre la problemática psicopatológica en automatización, donde las actividades de concepción son ampliamente con-
su conjunto. Sin embargo, en ese campo, queda aún por hacer lo esencial de fiscadas, desestructuran en gran escala las condiciones necesarias para los
las investigaciones. procesos de sublimación.
El otro problema que plantea la confrontación de la sociología con la di- Por razones bastante complejas, aunque elucidables, una de las conse-
visión sexual del trabajo se refiere al uso que los trabajadores hacen de las cuencias psicopatológicas de lo raras que son las tareas sublimatorias, con-
relaciones domésticas de dominación, como procedimiento defensivo contra duce a un aumento correlativo de la violencia social. En efecto, podemos de-
el sufrimiento ocasionado por la organización del trabajo. Una parte de la mostrar que la sublimación, única mediación entre inconsciente individual y
restauración psíquica de los hombres frente al sufrimiento en el trabajo se campo social, es un proceso que absorbe y transforma principalmente las
realiza en detrimento de las mujeres (desviación de la violencia de las rela- pulsiones llamadas parciales, que, justamente por falta de salidas sublimato-
ciones de trabajo contra las mujeres). Aquí también la situación no es la mis- rias generan principalmente perversiones, violencia compulsiva y patología
ma para las trabajadoras que no pueden contar con las relaciones domésticas psiquiátrica grave (psicosis, sornatizaciones, toxicomanías). Esto quiere de-
para aliviar el sufrimiento que resulta de su relación con el trabajo. cir que, considerando la psicopatología del trabajo desde una perspectiva in-
ternacional, esto nos conduce a destacar que una cantidad importante de la
Finalmente, hay que subrayar que, si las mujeres son víctimas indirectas
locura generada por el trabajo se acumula en los países del tercer mundo
de las defensas contra el sufrimiento de los hombres, ellas no son las únicas.
(luego de haber sido parcialmente evacuada de los países ricos), y que la vio-
Según distintos procesos, los niños también tienen que padecer las deriva-
lencia social en las ciudades es la principal forma de expresión clínica.
ciones de los problemas psicopatológicos de los padres trabajadores hasta tal

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Trabajo y desgaste mental · Christophe Dejours ./

Bibliografía Capítulo 11
La metodología en
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de production. (Etude anthropologique de deux destilleries situées psicopatología del trabajo
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Kergoat, D., Les ouvrieres, París, Le Sycomore, 1982.
l. La investigación inicial
o pre-encuesta

Para que una investigación se inicie, debe estar basada en una demanda
que puede emanar tanto de un grupo no institucionalizado de trabajadores,
de algunos trabajadores inicialmente aislados o de un grupo sindical, de una
comisión sindical de empresa o de la CHS-CT (Comisión de Higiene, Segu-
ridad y Condiciones de Trabajo, implantada en Francia en julio de 1985 en
sustitución de las antiguas Comisiones de Higiene y Seguridad). Más ade-
lante, volveremos al trabajo que implica la demanda formulada. Por ahora,
nos vamos a detener en este punto: un pedido sólo puede ser considerado si
proviene de los propios trabajadores. En otras palabras, no aceptarnos nin-
guna demanda que no sea formulada por los propios interesados.
Una vez recibida Ja demanda, es necesario preparar la investigación en
sí. cosa que toma bastante tiempo, genera1mente varios meses. Primero es
necesario definir quiénes participarán en el estudio como investigadores.
Generalmente, hay dos o tres investigadores y por lo menos uno de ellos no
es psicopatólogo, sino que puede ser sociólogo, ergónomo o economista.

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