LISSETTE VILLAFUERTE FRANCO

La perversin de cuenta de
una posicin subjetiva.

"Pegan a un nio" es el
fantasma confesado por
neurticos, investido como
"sentimientos placenteros
en virtud de los que se ha
reproducido innumerables
veces o sigue
reproducindose"

La
frase
del
fantas
ma
pega
n a un
nio

La perversin no es la
pulsin sexual. (Las
prcticas o
comportamientos sexuales
no constuyen la estructura
perversa

Es el fantasma
inconsciente lo
determinante para orientar
y encontrar la
especificidad subjetiva de
la estructura perversa

Los persversos no
despliegan su fantasma
durante anlisis (no es
localizable)

Estos sentimientos llevan a

una satisfaccin onanista
de carcter compulsivo.

Este fantasma del

neurtico, si se reproduce,
lo hace como un ritual
mental, acapara al sujeto,
cifra una intensificacin
onanista, sujeta al sujeto,
es una potencia de
imposicin que opera a
pesar de su voluntad

En el neurtico, los rasgos

perversos estn en que el
fantasma fuerza el
pensamientom y en la
perversin, empuja al
pasaje al acto

La fantasa aparece como

punto de fijeza silenciosa
en la cura, las palabras se
detienen y aparece la
verguenza y culpabilidad

El rasgo primario de
perversin es el resultado
de una fijacin que tuvo
lugar en la infancia. De all
la fijacin infantil.

Ese fantasma "pegan a un

nio" es el resto de esa
fijacin bien antigua. Su
lgica es una lgica de
subjetividad

Ese fantasma puede descomponerse en tres fases, mediante un

enunciado:
La primera fase de las fantasas en nias corresponde a una poca
muy temprana de la infancia. El autor del fantasma nunca es el nio
azotado. La persona que azota es un adulto y ms tarde se lo ubica
como al padre. "El padre no ama a ese otro nio, me ama slo a mi"
LA FANTASA DE LA POCA DEL AMOR INCESTUOSO

La segunda fase: es cierto que la persona que pega sigue siendo la misma, el
padre, pero el nio azotado ahora es otro, es el nio fantaseador mismo "yo soy
azotado por el padre. Esta fase pasara a ser la expresin directa de la
conciencia de culpa ante la cual ahora sucumbe el amor por el padre, la
fantasa ha devenido masoquista.

La tercera fase: "pegan a un nio" La persona que pega nunca es el

padre. La persona propia del nio fantaseador ya no sale a la luz en
la fantasa de paliza. "probablemente yo estoy mirando" aqu, esos
sentimientos placenteros son los que, fuerzan con un carcter
compulsivo a la reprod. mental de ese escenario.