Universidad de Chile

Facultad de Filososofa y Humanidades

Posttulo Filosofa y Educacin
Curso: Pensamiento Latinoamericano.
Profesor: Carlos Ossandn.
Estudiante: Mario Concha

Cmo ilumina el rgimen cultural, que se pretende instaurar, el enunciado

Todas las verdades se tocan proferido por Bello en su discurso de 1843?

El rgimen cultural que pretende instaurar y al que se refiere Bello en su

discurso de 1843, podra ser definido brevemente a partir de la nocin de Repblica de
las Letras. Esta repblica es una repblica que, poniendo en su centro a la (propia)
patria y a travs de ella a la humanidad toda, progresa espiritual y materialmente gracias
al avance de las ciencias, la Ilustracin, los artes, la libertad, la moral e incluso la
religin. Avance que, a su vez, se sustentara en instituciones concretas, como la propia
Universidad de Chile, que serviran de vehculo comunicante de los devenires de dichas
dimensiones del progreso humano y, tambin, como los puntos donde se condensara su
perfeccionamiento y ulterior y constante progreso.
Considerando el contexto epocal, la resistencia que diversos sectores
conservadores de la sociedad tenan respecto a las transformaciones materiales y
espirituales derivadas del progreso de las luces y las ciencias en general, Bello establece
su famosa idea de que todas las verdades se tocan. Con esta idea, Bello busca hacer
comprensible la continuidad que subyace a los diversos mbitos del progreso humano
del que l se hace parte. Extendiendo un arco que va desde la Religin hasta las ciencias
naturales y el progreso econmico, Bello invita a pensar un continuo en el cual el
progreso y perfectibilidad de la humanidad sea una cuestin que pueda ser abordada en
trminos absolutos, es decir, sin referencia a entidades externas al placer, libertad y
felicidad propiamente humanas que, retroalimentndose en la colectividad histrica que
es la patria, produzca el perfeccionamiento total de esta en vas del perfeccionamiento
de la humanidad entera. Todas las verdades se tocan porque la verdad y las verdades que
la hacen seran, propiamente, la cosa pblica, la res pblica letrada en la cual la

humanidad, sin misterios ni entidades que la excedan a ella misma, podra reencontrarse
a s misma en la tarea de su mejoramiento colectivo.