LA IDEA DE FAMILIA EN EL CODIGO CIVIL

PERUANO LA EVOLUCION QUE A TOMADO EL CONCEPTO

LA IDEA DE FAMILIA EN EL CÓDIGO DE FAMILIA A LO LARGO DEL TIEMPO ES MUY
CIVIL PRESENTA VARIAS IDEAS EN LAS INTERESANTE, ANTES NO SE TENIA PENSADO EN
CUALES SE PRESENTAN PROBLEMAS SIQUIERA MENCIONAR A UNA FAMILIA
PARA DELIMITAR EL CONCEPTO HOMOPARENTAL PERO AHORA EN LA
ACTUALIDAD ES UNA REALIDAD EN OTROS
PAISES

LA IDEA DE FAMILIA

COMO BIEN SE SABE, LAS FAMILIAS SON EL EL AUTOR ESTA ASOMBRADO EN

NUCLEO DE LA SOCIEDAD COMO UNA COMO LA IDEA DE FAMILIA A
CELULA EN UN ORGANISMO POR LO QUE ES CAMBIADO EN LA SOCIEDAD
EL PILAR DE LA SOCIEDAD QUE PERUANA Y DE COMO EL CODIGO
CONOCEMOS HOY CIVIL A RESPONDIDO A LOS CAMBIOS
Una de las preocupaciones fundamentales del Derecho es la delimitación de la familia. Las
formas de constitución serán distintas como diferentes los regímenes de bienes y sucesión. Las
normas que regulan la vida familiar han sido pensadas desde una perspectiva occidental y
moderna, ignorando en el mejor de los casos o prescribiendo los usos y las costumbres de los
pueblos. En el Perú, donde Estado y Nación no llegan a comprenderse, la expresión “familia”
adquiere una diversidad semántica portentosa, no sólo en los códigos, sino especialmente fuera
de estos. La plurisignificación del término deriva de patrones culturales oponibles temporal y
espacialmente.
Cuando la norma positiva no reproduce las prácticas de ciertos grupos sociales, el Estado jurista,
legislador, juez y gendarme, perpetra, quizás sin saberlo, violencia institucionalizada en agravio
de aquellos. La familia es más grande cuando el Código es antiguo; abreviada si es moderno: el
Código Civil de 1852 consagraba la vocación hereditaria de los parientes colaterales
consanguíneos del sexto grado inclusive el Código de Procedimientos Oviles de 1912 reconoce
el parentesco espiritual y supone que son familiares entre sí, los compadres, ahijados y padrinos.
Para la cosmovisión andina, la familia no se entiende sin el parentesco espiritual, no sólo el
derivado de un sacramento religioso. Prevalecen principios de intercambio y reciprocidad de
bienes, servicios y sentimientos que van más allá del cuarto grado de consanguinidad y segundo
de afinidad