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FACILITADOR:
RAFAEL ESPINOZA LÓPEZ
raeslo2016@outlook.com
División de la Biblia
Torá/Ley (=Pentateuco)
Libros Históricos
Profetas (= Proféticos)
Escritos" (=Sapienciales)
Sentido amplio de la palabra
“Sabiduría" en el AT:
Tiene muchas connotaciones y sentidos, desde la
habilidad y la destreza del artesano en la
ejecución de las obras manuales, hasta la
capacidad y la madurez de orden intelectual,
el arte y el acierto de desenvolverse con éxito en
todos los ámbitos de la vida: en la esfera privada
y en la pública, en la familia y en la sociedad, en
los asuntos temporales y en los espirituales, en lo
profano y en lo religioso
Libros Sapienciales
Aparecen los Libros Sapienciales como un
género novedoso luego de los grandes libros
históricos Se trata de una nueva forma de
elaborar las enseñanzas con una estética
muy desarrollada y un estilo particular es
por ello que la mejor manera de definirlos
Seria diciendo que se trata de poemas
didácticos o de enseñanzas poéticas.
La literatura sapiencial
La literatura sapiencial surge en Israel después de
la desaparición de los profetas! esto es! tras el
exilio en Babilonia. Es correcto! por tanto! definir
al género sapiencial como una clase de literatura
típicamente postexílica. Son el fruto de nuevas
necesidades que los cambios políticos y las
circunstancias religiosas crearon en los escritores
judíos y puede dividírselos según sus contenidos
en libros didácticos o poéticos.
El género sapiencial
El género sapiencial fue introducido en Israel por el
rey Salomón! pero se ha demostrado que ya exista
desde mucho tiempo antes en todo el oriente antiguo!
sobre todo a partir de la época sumeria con
proverbios fábulas o poemas sobre el sufrimiento del
tipo del Libro de Job y! especialmente en el antiguo
Egipto! donde floreció como género literario durante
el imperio medio de Egipto con los
Sebayt "literalmente! enseñanzas o instrucciones y
llegó a ser canónica durante el imperio nuevo.
Sapienciales del Antiguo
Testamento
Proverbios
Job,
Eclesiastés o Qohélet,
Eclesiástico o Jesús Ben Sira
y Sabiduría de Salomón.
Según Cazelles,
se trata del «arte de tener éxito en la vida humana,
tanto privada como colectiva. Se basa en el humanismo
y en la reflexión sobre (y observación de) el curso de
las cosas y de la conciencia y de la conducta del
hombre»
Para Crenshaw, la sabiduría es
Pro 26, 4
No respondas al necio según su
necedad, no sea que tú también
te vuelvas como él.
Pro 26, 5
Responde al necio según su
necedad, no vaya a creerse que
es un sabio.
Canonicidad
Unas de la controversias para que no
fuera aceptado como libro inspirado:
Aparentes contradicciones
Puntos de vista diferentes
Temas aislados
Tienen su propia enseñanza
El autor del Libro, con excepción de
los apéndices, es, según los títulos (1,
1; 10, 1; 25, 1), el rey Salomón, quien
en sabiduría no tuvo igual,
atribuyéndole la Sagrada Escritura
"3.000 sentencias y 1.005 canciones".
Los apéndices podrían ser de Agur y
Lemuel.
Los exégetas creen que la última
redacción del libro se hizo en tiempos
de Esdras.
El Libro de los Proverbios no es
un código de obligaciones, sino
un tratado de felicidad. Dios no
habla para ser obedecido como
déspota, sino para que le creamos
cuando nos entrega, por boca del
más sabio de los hombres, los
más altos secretos de la Sabiduría
(en hebreo jokmah).
Se trata de una sabiduría eminentemente
práctica, que desciende a veces a los detalles,
enseñándonos aún, por ejemplo:
a evitar las fianzas imprudente (cf. 6, 1 y
nota; 17, 18);
a desconfiar de las fortunas improvisadas (13,
11; 20, 21); del crédito (22, 7) y de los hombres
que adulan o prometen grandes cosas (20, 19);
a no frecuentar demasiado la casa del amigo,
porque es propio de la naturaleza humana que
él se harte de nosotros y nos cobre odio (25,
17).
La sabiduría de la Sagrada Escritura es
inspirada por Dios, lo cual implica su
inmenso valor. Porque no es ya sólo dar
fórmulas verdaderas en sí mismas, que
pueden hacer del hombre el autor de su
propia felicidad, a la manera insensible;
sino que es como decir:
Yo tu Dios, que soy también tu amantísimo
Padre, me obligo a hacerte feliz,
comprometiendo en ello toda mi
omnipotencia.
De ahí el carácter y el valor
eminentemente religiosos de este
Libro, aun cuando no habla de la
vida futura sino de la presente, ni
trata de sanciones o premios eternos
sino temporales. Los Proverbios son
para la vida práctica.
La nota clave de este libro está en
esta frase: “El temor de Dios es el
principio de la sabiduría”
PROVERBIOS: Distribución