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Por qué nuestros hijos PUEDEN

RESPONDER CON
AGRESIVIDAD?

Educando para niños más


pacíficos…
¿Qué se consideran pataletas?

Las rabietas o berrinches son parte normal del desarrollo.


Ocurren más entre los 12 meses y los 5 años de edad; con
un peak de presentación entre los 18 y 48 meses (3, 4, 5).

Muchos niños tienen más berrinches antes y durante el


desarrollo de lenguaje.
Antes de que los niños puedan expresarse en su totalidad
con el uso de palabras, se frustran, y la forma de expresar
esa frustración,
ya sea hambre o descontento es irrumpiendo en berrinches
para lograr lo que necesitan.
¿ Cuando no debe ignorar el
berrinche de su hijo(a)?
Hay dos ocasiones cuando usted no debe ignorar un
berrinche de su hijo:

1. Si su niño corre riesgo físico de salir corriendo a la calle o


está expuesto a algún peligro; en este caso, deténgalo y
sujételo firmemente o déjeselo saber bien claro.

2.Si su niño está dando golpes o mordiendo, deténgalo de


inmediato y asegúrese de hacerle saber que este
comportamiento no es permitido, cambiándolo físicamente
del lugar del suceso o quitándole un privilegio.
Consejos para sobrevivir un
berrinche
• Préstele suficiente atención a su niño y elógielo cuando
se esté portando bien. Ofrezca elogios concretos en el
momento cuando reacciona bien. Sin embargo, no piense que
si un niño tiene más berrinches que otro niño es porque usted
no le está poniendo suficiente atención. La personalidad la
moldean muchos comportamientos, incluyendo los berrinches.

• Durante
​Durante un berrinche, dele control al niño sobre cosas
pequeñas (ofrezca pequeñas opciones para que pueda elegir
en vez de hacerle preguntas que sólo requieran de un sí o un
no.)
• Distracción. Lleve al niño a otra habitación. Ofrézcale un juguete
más seguro. Aunque le parezca tonto, cante una canción o cuéntele
un cuento breve.

• Elija que batallas librar y adáptese cuando pueda. A veces


hay que ceder un poco para llegar a un acuerdo; lo cual está bien.
Sin embargo, es clave ser consistente todos los días para reducir la
intensidad y la frecuencia de los berrinches. Aunque la mayoría de
los niños tienen berrinches cuando tienen de 1 a 3 años, muchos
niños continúan con sus berrinches durante los años escolares. Acá
hay que diferenciarlo de que se transforme en un niño agresivo.
• Sepa cuáles son los límites de su niño. Obviamente,
algunos días son más difíciles que otros. A veces no
podemos con la lista de cosas que tenemos por hacer.

• No ignore comportamientos como el golpear, el


patear, el morder o lanzar cosas. Aplique una
política de cero tolerancia para esta conducta.

• Dese un respiro cuando lo necesita. Túrnese con el


otro padre o un amigo cuando sienta que su frustración
aumenta.
¿Qué se considera
agresividad?
• Un niño es agresivo cuando reacciona de forma sistemática con agresividad
tanto física (golpes, patadas, empujones, etc.) como verbal (insultos,
descalificaciones, etc.) para resolver pequeños conflictos con sus pares o
padres, sin que exista necesariamente una provocación previa por parte del
otro.

• Durante la edad escolar, la agresividad suele ser un indicador de que algo no


funciona bien; muchos niños sin incapaces de expresar su malestar y acaban
descargándolo mediante la agresividad.
• Así pues se puede encontrar agresividad en un niño triste, ansioso,
preocupado, etc.

• También es indicador de problemas emocionales, trastornos de aprendizaje, de


adaptación o conflictos familiares.
Continuación…
• Existen conductas normales para ciertas etapas del desarrollo y no
para otras. Ej: pataletas y llanto.

• Si estas conductas llegan a consolidarse, independientemente de la


edad que tenga el niño, es muy probable que tenga problemas en el
futuro.
CAUSAS
 Estrés
 problemas emocionales
 Problemas familiares
 baja autoestima (sensación de inferioridad)
 baja tolerancia a la frustración. Ejemplo: niño en
supermercado. El se vuelve dominante-uso de la agresividad-
no hay frustración.
 una “elevada permisividad, educación sin normas y una
mayor falta de amor en las relaciones familiares” genera la
sensación de abandono en los hijos.
CAUSAS
 Modelos de resolución de conflictos en la famita que son
agresivos, por ejemplo, autoritarismo marcado. Las conductas
agresivas se aprenden por imitación u observación de la
conducta de modelos agresivos.

 Se adquiere ese tipo de repertorio conductual determinado.


La importancia del estilo de
educación…
 Con la agresividad no se llega a ningún lado, inclusive cuando se educa
utilizando la agresión se logra que el niño deje de llevar a cabo la conducta
no porque entienda que ésta no es adecuada, sino por temor al agresor, y
paralelamente el niño aprende a utilizar las conductas agresivas para
enfrentar sus conflictos diarios.

 Los padres de niños con tendencias agresivas, no aceptan la agresividad


contra ellos - castigándola con dureza si ocurre, pero aceptan, por otra
parte, situaciones cotidianas de agresividad entre los hermanos y, desde
luego, fomentaban y gratifican el comportamiento violento de sus hijos
cuando éstos lo dirigen contra otros compañeros escolares o de juego.
Tareas para los Padres
 Hay un reforzador, que muchas veces pasa
desapercibido para los adultos, y es LA ATENCIÓN
PRESTADA AL NIÑO tras la emisión de la conducta
agresiva.

 Incluso cuando nuestra intención sea la de castigar,


podemos estar reforzando la conducta agresiva, porque
la atención es uno de los reforzadores sociales más
potentes, y la atención de los padres es el mejor
reforzador de conductas, tanto positivas como negativas.

 Por lo tanto, hay que reforzar las positivas en lugar de las


negativas.
Continuación…
 Cuando el niño se porta bien no le decimos nada porque
está haciendo "lo que debe hacer", nos deja tranquilos,
etc. y sin embargo, nos relacionamos con él muy
intensamente cuando hace algo mal.

 Acá nuestros intentos de castigo refuerzan dicha conducta


y mucho más si lo hacemos gritando o hablando
exageradamente, porque es una forma llamativa de
prestarle atención, una atención que el niño necesita.

 Usar la comunicación, según el estilo de su hijo, para que


se siente comprendido.
Conclusión
 Nunca deje que su hijo, consiga lo que quiere cuando le
grita, empuja, da portazos... Hay que esperar a dárselo
cuando lo pida de forma calmada. Hay que darle
instrucciones de cómo hacerlo, cómo le gustaría a el o
ella que se lo pidiera, y reforzarle con cariño, con una
sonrisa, con un abrazo, con un "así me hace feliz", con
muestras de alegría por su conducta, etc.

 Dependerá de nosotros como padres el crear niños


alegres y felices, y que se eviten ellos conflictos con los
demás.

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