Aunque la polinización puede producirse a través de muchos agentes,
como el viento, el agua, algunas aves (como los colibríes), los insectos son, con mucho, los polinizadores más destacados y, dentro de esta clase, los órdenes Hymenoptera, Lepidoptera, Diptera y Coleoptera figuran entre los de mayor importancia Las plantas ofrecen a los polinizadores que las visitan una gran variedad de recompensas: néctar, polen, tejidos florales, aceite nutricio, olor y resina. La polinización por un insecto es un requisito fundamental para el 90% de las plantas con flores (angiospermas). La evolución de los cuatro principales órdenes de insectos polinizadores precedió a la de las angiospermas y existe un grado variable de correspondencia entre las tasas de diversificación de ambos grupos, lo cual sugiere que no existe una relación simple entre la diversificación de las plantas con flores y la de sus polinizadores. Las interacciones polinizador-planta desempeñan un papel importante en la ecología de las comunidades y en el funcionamiento de los ecosistemas. La dependencia humana en los artrópodos polinizadores de plantas cultivadas (árboles frutales, hortalizas…) ha conducido a una estimulación de que los servicios prestados por los polinizadores sumen millones de euros anuales en todo el mundo. Es decir, que no solo los polinizadores ejercen funciones biológicas, sino también económicas ayudando a estimular la producción de plantas. productores: Las abejas: aunque al imaginar a las abejas pensemos en un pequeño insecto con rayas amarillas y negras, existen aproximadamente 22.000 especies diferentes, algunas solitarias, pero la mayoría viven en colonias de miles de individuos con la que todas cumplen una función. Estas últimas son las encargadas de la producción de miel, que es un alimento que elaboran a partir del néctar de las flores, que lo almacenan en su primer estomago digiriéndolo y convirtiéndolo en lo que llamamos miel. Además de para obtener miel, las abejas son manipuladas para obtener muchos productos para el uso humano: cera, propóleos, polen, jalea real, y veneno. Productores de seda: la seda es una fibra natural formada por proteínas. Aunque es producida por varios grupos de insectos, en la actualidad solo la producida por las larvas de Bombyx mori se emplea en la industria textil. El Bombyx mori es una especie de insecto lepidóptero de la familia Bombycidae originaria del norte de Asia. Se aprovecha el capullo que protege a su crisálida, constituido por un largo filamento de seda producido por la oruga al retraerse por la metamorfosis. Productores de sustancias farmacéuticas e insectos con implicaciones medicas: los insectos poseen un arsenal de compuestos biológicos activos tales como moléculas anti carcinogénicas, proteínas anticoagulantes, enzimas detoxificadoras, proteínas bioluminiscentes, péptidos antimicrobiales, Toxinas, etc. Además de estas sustancias producidas, le veneno extraído en muchos insectos tienen una gran importancia farmacológica, usados contra alergias y enfermedades autoinmunes. Un ejemplo de venenos usados en terapias, es el veneno de las abejas. Este veneno contiene melitina, un péptido que ayuda a tratar la inflamación causada por la artritis reumatoide y esclerosis múltiple. La melitina bloquea la expresión de los genes inflamatorios, reduciendo también el dolor. Este péptido es administrado por la picadura directa de la abeja o por inyección intravenosa. Su uso es muy común en Japón. La alatonina, es un roducto cristalino obtenido a partir de las purinas que se encuentra en las larvas de algunas moscas y las secreciones del caracol Hélix Aspersa Müller. Se emplea para favorecer la cicatrización de úlceras y heridas y en preparados cosmético. La cantárida o mosca de España (Lytta vesicatoria) es un insecto coleóptero de la familia Meloidae usado en medicina hasta principios del siglo XX. También se denominaba “cantárida” al producto resultante de la desecación del insecto y a la llaga que producía en la piel de los enfermos tratados con ella. El extracto de cantárida se presentaba en polvo (obtenido mediante desecación y triturado), tintura o aceite y emplasto. En medicina se usaba principalmente por su poder vesicante para el tratamiento de ulceraciones de la piel, aplicando emplastos que supuestamente ayudaban a eliminar sus líquidos perniciosos. También se ha tratado con ella la alopecia y, por vía oral, se ha prescrito como diurético y contra la incontinencia urinaria. Parásitos e infecciosos: Son muchos los artrópodos que directa o indirectamente nos producen enfermedades o nos parasitan. La picadura de piojos, pulgas, ácaros y garrapatas son causantes de las principales infecciones. Un ejemplo es el tifus, que es un conjunto de enfermedades infecciosas que provienen de las heces de los piojos que dejan en nuestra piel. Cuando nos pican los piojos nos rascamos las picaduras, extendiendo las heces y con ello las bacterias que hay en ellas, como Rickettsia, causante de la enfermedad. Otro caso causante de muchas muertes en el mundo es el del mosquito Anófeles, que se contagia con el parasito de la malaria cuando extrae sangre de personas enfermas y lo transporta hasta otro torrente sanguíneo de una persona sana, transmitiendo así la enfermedad. Existen muchos más casos de artrópodos parásitos que producen enfermedades, como la sarna en la piel, tábanos y pulgas que se alimentan de sangre, y la mosca tse-tsé, que produce la enfermedad del sueño. Además de los insectos que parasitan o son infecciosos para el hombre, existen multitud de insectos infecciosos o parásitos de plantas. Algunos insectos pueden causar daños a los árboles y arbustos mediante la defoliación o la extracción de su savia, los insectos pueden retardar el crecimiento de las plantas. Al perforar el tronco y las ramas, interfieren con el flujo de savia y debilitan la estructura del árbol. Los insectos también pueden propagar algunas enfermedades vegetales. En muchos casos, sin embargo, los problemas de insectos son secundarios a otros causados por un desorden de estrés o por patógenos. Los insectos pueden clasificarse en tres categorías de acuerdo con su forma de alimentarse de las plantas: masticadores (se comen los tejidos de las plantas. Ejemplos: los escarabajos, los gusanos de seda, las larvas de polillas de insectos), chupadores (insertan un tipo de trompa o pico (probóscide) en los tejidos de las hojas, brotes, ramas, flores o frutos y chupan los jugos de la planta. Ejemplos: los áfidos (pulgones), los chinches, los tisanópteros y las saltarillas.) y barrenadores (Todas las plagas* en esta categoría pasan tiempo alimentándose en algún lugar debajo de la planta)