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Eratóstenes calculó por primera vez el radio de la Tierra en el siglo III a.C. midiendo la sombra de un obelisco en Alejandría el día del solsticio de verano y determinando el ángulo de inclinación del Sol, obteniendo un valor de 6.378 km que es extraordinariamente preciso considerando los medios disponibles en la época. Gracias a sus logros científicos y reputación, fue nombrado director de la biblioteca de Alejandría, almacén de todo el saber de la época.
Eratóstenes calculó por primera vez el radio de la Tierra en el siglo III a.C. midiendo la sombra de un obelisco en Alejandría el día del solsticio de verano y determinando el ángulo de inclinación del Sol, obteniendo un valor de 6.378 km que es extraordinariamente preciso considerando los medios disponibles en la época. Gracias a sus logros científicos y reputación, fue nombrado director de la biblioteca de Alejandría, almacén de todo el saber de la época.
Eratóstenes calculó por primera vez el radio de la Tierra en el siglo III a.C. midiendo la sombra de un obelisco en Alejandría el día del solsticio de verano y determinando el ángulo de inclinación del Sol, obteniendo un valor de 6.378 km que es extraordinariamente preciso considerando los medios disponibles en la época. Gracias a sus logros científicos y reputación, fue nombrado director de la biblioteca de Alejandría, almacén de todo el saber de la época.
Sabio griego nacido en la actual Libia, quien en el siglo III a.C.
calculó por primera vez, que se sepa, el radio de la Tierra. Partiendo
de la idea de que la Tierra tiene forma esférica y que el Sol se encuentra tan alejado de ella que se puede considerar que los rayos solares llegan a la Tierra paralelos, Eratóstenes el día del solsticio de verano (21 de junio), a las doce de la mañana, midió, en Alejandría, con ayuda de una varilla colocada sobre el suelo, el ángulo de inclinación del Sol, que resultó ser 7,2°; es decir, 360º/50 Las actuales mediciones sobre el radio de la Tierra dan el valor de 6.378 km. Como se puede observar se trata de una extraordinaria exactitud, si se tienen en cuenta los escasos medios de que se disponía. Hoy día, gracias a las mediciones efectuadas por los satélites conocemos la Tierra palmo a palmo y podemos saber con precisión casi milimétrica cuál es su tamaño. Pero hace veintitrés siglos no era tan fácil.
Medir el radio de la Tierra no fue el único mérito de Eratóstenes.
Como otros sabios de su época, no se conformó con una rama del saber: Fue astrónomo, geógrafo, historiador, literato... y matemático: a él se debe la "criba de Eratóstenes", un sistema para determinar números primos. Todos esos conocimientos y su gran reputación hicieron que el rey de Egipto Le eligiera para dirigir la biblioteca de Alejandría, en la que se guardaba todo el saber De su época. Al los ochenta años , ciego y cansado, se dejo morir por inanición.