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HISTORIA DEL SISTEMA FINANCIERO ADVENTISTA

Plan de Benevolecia
Sistematica
“Sister Betsy”
TESTIMONIOS PARA LOS MINISTROS PAG. 24
“Desde el comienzo nuestra obra
fue agresiva. Éramos pocos, y
nuestros hermanos pertenecían
mayormente a la clase más
pobre. Nuestras creencias eran
casi desconocidas para el mundo.
No teníamos casas de culto, sino
unas pocas publicaciones, y muy
limitadas facilidades para llevar
adelante nuestra obra. Las
ovejas estaban esparcidas en los
caminos y en los vallados, en
ciudades, en pueblos y en
bosques. Los mandamientos de
Dios y la fe de Jesús era
nuestro mensaje.”
¿ Que asuntos
empujaron a los
Adventistas del
Séptimo Día a
establecer un
sistema financiero?
RAZONES PARA ORGANIZAR EL SISTEMA ADMINISTRATIVO
Periodo 1844-1859
01 02
Ministerio pastoral Pago a personal
acreditado ministerial
Sin Credenciales Sin Sustento

03 04
Control y asignación Fidelidad y
de los Ingresos. Dadivosidad
Sin Tesorería Sin bases Biblicas
«A medida que nuestros miembros
fueron aumentando, resultó evidente que
sin una forma de organización habría
gran confusión y la obra no se realizaría
con éxito. La organización era
indispensable para proporcionar sostén al
ministerio, para dirigir la obra en nuevos
territorios, para proteger tanto a la iglesia
como a los ministros de los miembros
indignos, para retener las propiedades de
la iglesia, para la publicación de la
verdad por medio de la prensa y para
¿Qué Hacemos?
Buscad en las escrituras
y allí encontraran la
solución apropiada¨
1 Corintios 16:2
1858 Un grupo de hermanos de Battle
Creek forma una comisión de estudio,
bajo el Liderazgo de John N. Andrews

Joseph Frisbie Jaimes White John Andrews


Plan de Benevolencia Sistematica
No le llevó mucho tiempo a la
denominación descubrir las debilidades de
la Benevolencia Sistemática. La “Hermana
Betsy” era inadecuada y engorrosa, y
carecía de una base bíblica firme.

Gradualmente durante las décadas de


1860 y 1870, la denominación desarrolló
una mejor comprensión del verdadero
diezmo.
En 1876, cuando Dudley M. Canright publicó una serie de artículos
en la Review en los que enfatizaba que Malaquías 3: 8-11 establecía
“el plan bíblico para sustentar el ministerio”. “Dios requiere -
argumentaba - que se dé un diezmo, o un décimo, de todas las
entradas de su pueblo para sostener a sus siervos y sus labores”
(RH, 17 de febrero de 1876).

Canright compartió sus argumentos en el


congreso de la Asociación General en el
mes de noviembre, desde ese momento
en adelante, los adventistas del séptimo
día practicaron el diezmo bíblico.
“La devoción abnegada y un
espíritu de sacrificio han
sido siempre y seguirán
siendo el primer requisito de
un servicio aceptable”
Profetas y Reyes pág. 44

Continuara…

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