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Infección de

Transmisión
Sexual. (ITS)
Las ITS son infecciones que se transmiten de una persona a otra a través del contacto sexual. El contacto suele
ser vaginal, oral o anal. Pero a veces pueden transmitirse a través de otro contacto físico íntimo. Se transmiten
por contacto de piel a piel y son afecciones de distintas etiologías transmitidas sexualmente, aunque también
pueden adquirirse por otras vías de origen no sexual.

En 1986 la O.M.S clasifica los gérmenes patógenos de transmisión sexual en cinco grandes grupos: agentes
bacterianos, hongos, agentes virales, protozoos y ectoparásitos.
¿CUÁLES SON LOS
MÁS COMUNES?
CLAMIDIA
La infección por clamidia es una ITS común que
puede infectar tanto a los hombres como a las
mujeres. Puede causar daños graves y permanentes
(también conocida como clamidiasis) es una
infección bacteriana común que se cura fácilmente
con antibióticos. Es una de las enfermedades de
transmisión sexual más común. La mayoría de las
personas que la tienen no tienen síntomas, por eso es
bueno que sepas qué es la clamidia, cómo detectarla,
tratarla y prevenirla.
En México, su prevalencia no se conoce por completo, debido a
que no todos los estados de la República Mexicana llevan a cabo
este estudio. En Ciudad de México se informa una prevalencia de
infección genital de 1,5 al 28,9% en diferentes poblaciones
femeninas, mientras que, por serología, la prevalencia es mucho
mayor, llegando hasta 38,3% en mujeres infértiles con oclusión
tubárica, 35,4% en pacientes infértiles sin oclusión tubárica y
22,6% en mujeres embarazadas. En algunos estados como Jalisco,
Morelos, Oaxaca, Sonora, Tabasco y Yucatán, donde se ha
realizado esporádicamente este diagnóstico, se informa de una
prevalencia genital entre 1,5 y 14,5%. En cuanto a las
trabajadoras sexuales se ha informado una prevalencia de 14,4 a
16,6% en los Estados de Chiapas y Durango.
De las muestras analizadas, 1.758 fueron de mujeres infértiles y 594 fueron mujeres embarazadas (incluidas
las adolescentes). La prevalencia de infección por C.
trachomatis en ambos grupos fue de 3,53 y 6,73%, respectivamente (Tabla 1). Las adolescentes
embarazadas fueron las de mayor riesgo de adquirir la infección por C. trachomatis (RR = 2,9 [ IC del 95%
1,53-5,48]) en comparación con las adultas embarazadas.
La prevalencia de infección por edad se muestra en la Tabla 2. El grupo de mujeres de 15 a 19 años de edad
presentó una prevalencia de 10,9% y fue estadísticamente significativo (RR = 3,23; [IC del 95% 1,79-5,84];
p ≤ 0,001) en comparación con otros grupos de edad. Las adultas jóvenes de 20 a 24 mostraron una
prevalencia de 5,6% (RR = 1,65 [IC del 95%: 0,82-3,34]).

El grupo con mayor número de participantes fue mujeres entre 30 y 34 años de edad; la prevalencia de
infección por C. trachomatis en este grupo fue de 3,2%, mientras que en mujeres de entre 35 y 39 años la
prevalencia fue de 3,4% y en mujeres con edades de 25 a 29 años fue de 3,6%, El grupo con menor
prevalencia fue el de las mujeres sobre 39 años (2,5%).
Factores de
riesgo
La bacteria de la clamidia trachomatis se transmite más
frecuentemente por relaciones sexuales vaginales, orales y
anales. También es posible que una mujer embarazada le
transmita clamidia a su hijo durante el parto, provocándole
neumonía o una infección ocular grave al recién nacido.

Los factores que aumentan el riesgo de contraer Chlamydia


trachomatis incluyen:

 Ser sexualmente activo antes de los 25 años


 Tener múltiples parejas sexuales
 No usar preservativo regularmente
 Tener antecedentes de infecciones de transmisión sexual
Signos y
Síntomas.
La mayoría de las personas que tienen la infección por clamidia no presentan síntomas. Si usted presenta
síntomas, es posible que no aparezcan por varias semanas después de que haya tenido relaciones sexuales con
una persona infectada. Incluso cuando no causa síntomas, la infección por clamidia puede dañar su aparato
reproductor.

Las mujeres con síntomas podrían notar los siguientes:


• secreción vaginal anormal;
• sensación de ardor al orinar.

Los síntomas en los hombres pueden ser los siguientes:


• secreción del pene;
• sensación de ardor al orinar;
• dolor e inflamación de uno o ambos testículos (aunque esto es menos común).
Los hombres y las mujeres también pueden infectarse por clamidia en
el recto, ya sea mediante las relaciones sexuales anales receptivas o la
propagación desde otra parte infectada (como la vagina). Aunque por lo
general estas infecciones no causan síntomas, pueden provocar:
• dolor en el recto;
• secreciones;
• sangrado.

Debe hacerse revisar por un médico si nota cualquiera de estos


síntomas o si su pareja tiene una ITS o síntomas de una, como dolor
inusual, secreción con olor, ardor al orinar o sangrado entre periodos.
Si tú o tu pareja sexual tienen alguno de estos síntomas de clamidia,
consulta con el centro de salud de más cercano a ti. Es muy importante
que te hagas examinar si estás en embarazo.

Recuerda que la mayoría de las personas con clamidia no tienen ningún


tipo de síntoma. Por este motivo, la única manera de saber con
seguridad si tienes infección por clamidia es hacerte un examen de las
ITS.
Diagnostico
La única manera de saber si tienes clamidia es haciéndote una prueba.
Las personas con una vida sexual activa deben hacerse exámenes
regularmente. Por lo general, estas pruebas son rápidas, no duelen, y
a veces, son gratuitas. El examen de clamidia es tan fácil como orinar
en un recipiente. A veces, incluye tomar muestras de células de la
uretra, la vagina, el cuello uterino o el ano frotando cuidadosamente
los genitales con un hisopo. Las muestras son analizadas para
comprobar si tienen clamidia. Es posible que durante el examen, tu
doctorx también te revise para saber si tienes otras señales de
clamidia, como fluido en el cuello uterino.

La idea de hacerse una prueba puede asustar un poco, pero trata de


tomarlo con calma. Las pruebas de ETS son parte del cuidado de la
salud sexual, que debes hacer como persona responsable. Lo bueno
es que la clamidia se cura por completo con medicamentos: entre más
rápido sepas que la tienes, más pronto podrás salir de ella.
Complicacion
es
Clamidia trachomatis puede estar asociada con:

 Enfermedad inflamatoria pélvica (EIP). La enfermedad inflamatoria


pélvica es una infección del útero y las trompas de Falopio que
provoca dolor en la pelvis y fiebre. Las infecciones graves pueden
requerir la hospitalización para poder administrar antibióticos
intravenosos. La enfermedad inflamatoria pélvica puede dañar las
trompas de Falopio, los ovarios y el útero, incluido el cuello del útero.

 Infección cerca de los testículos (epididimitis). La infección por


clamidia puede inflamar el tubo en espiral ubicado al lado de cada
testículo (epididimitis). La infección puede provocar fiebre, dolor de
escroto e hinchazón.

 Infección de la glándula prostática. En raras ocasiones, la bacteria


clamidia puede diseminarse a la glándula prostática. La prostatitis
puede provocar dolor durante o después de las relaciones sexuales,
fiebre, escalofríos, micción dolorosa y dolor en la espalda lumbar.
Prevenció
n
La clamidia se transmite normalmente a través del
contacto sexual. De modo que la mejor manera de
prevenirla es hacerse pruebas cada cierto tiempo y usar
condones cuando tengas sexo.

La clamidia se contagia a través de los fluidos sexuales


como el semen (esperma), el líquido preeyaculatorio y
los fluidos vaginales. De modo que la mejor manera de
evitar la clamidia y otras enfermedades de transmisión
sexual -ITS- (que anteriormente se conocían como
enfermedades venéreas), es no tener sexo vaginal, anal
u oral. Sin embargo, esto no funciona para la mayoría
de las personas, y por eso los condones y barreras
bucales de látex son tan importantes para prevenirla.
Realmente sirven para bajar los chances de contagio de
una ITS cuando tienes relaciones.

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