Está en la página 1de 23

CAPITULO VIII.

DERECHO CONSTITUCIONAL.
1. Concepto de Constitución.

La Constitución es la Norma Suprema que estructura,


organiza, legitima y limita al Estado. El objeto de la
Constitución es definir las bases primarias de la
organización y funcionamiento de los Poderes Legislativo,
Ejecutivo y Judicial, así como el reconocimiento de los
derechos fundamentales de la persona (Derecho
Humanos) y los procedimientos para darles efectividad.
 

2. Clases y partes que integran la Constitución.

■Constitución escrita.- Es un documento solemne que reconoce los derechos


fundamentales del individuo (derechos humanos); las funciones de los
Poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial; la forma de Estado y forma de
gobierno; y el procedimiento para ser reformada. El origen de las
constituciones escritas se da en Norteamérica.
■Constitución real.- Según Fernando Lasalle es la que expresa los factores
reales de poder. Es la Constitución que tiene efectividad, que se cumple. Los
factores de poder son las fuerzas sociales que determinan el contenido de la
Constitución.
No siempre hay coincidencia entre la Constitución real y la Constitución escrita
o formal.
■ Constitución rígida.- Se caracteriza porque sólo a través del Poder
Constituyente se puede modificar la Constitución.

■ Constitución flexible.- Es la que puede ser reformada por el Poder
Legislativo ordinario (Congreso de la Unión).
Partes en que se divide la Constitución:

a. Parte dogmática. Se refiere a los derechos humanos y sus garantías. El Capítulo I del
Título Primero de la Constitución cambió su denominación a partir de la reforma de junio
de 2011, y ahora se denomina De los Derechos Humanos y sus Garantías, y
comprende los primeros 29 artículos.

b. Parte orgánica. Se refiere a las normas que regulan la organización y funcionamiento


de los Poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial. Está comprendida en los artículos del
49 al 107. En la parte orgánica se establecen las atribuciones del Congreso de la Unión,
del Poder Ejecutivo Federal y del Poder Judicial de la Federación.

c. Superestructura constitucional. “La cual cubre por igual a los derechos del individuo, a
los Poderes de la Federación y a los Poderes de los Estados”, es decir, son todos
aquellos preceptos que “se dirigen formalmente y por igual a todos los individuos y a
todas las autoridades del País”.
La superestructura constitucional la integran los siguientes
principios:

• La soberanía popular (artículo 39).


• La forma de gobierno y de Estado, Republica, Representativa,
Democrática, Laica y Federal (artículo 40).
• El ejercicio de la soberanía (artículo 41).
• La supremacía constitucional (artículo 133).
• La rigidez constitucional (artículo 135).
• La inviolabilidad constitucional (Artículo 136).
3. El Estado. Concepto y Elementos.

Concepto: El Estado es una sociedad política organizada, con potestad soberana, asentada
en un territorio, que tiene como finalidad el bien común y regida por un orden jurídico, que lo
legitima y limita.

Los elementos del Estado son:

•Población.
•Territorio.
•Poder.
•Orden jurídico.
•Soberanía.
•Bien común
4. Obligación de contribuir para los gastos públicos.

La fracción IV del artículo 31 constitucional establece la obligación de


los mexicanos de contribuir para los gastos públicos, de la
Federación, de los estados, del Distrito Federal y del municipio en
que residan, de la manera proporcional y equitativa que dispongan
las leyes.

El citado precepto consagra los siguientes principios:


• Principio de legalidad tributaria.
Las contribuciones se rigen por el principio de legalidad tributaria, es decir, que sólo
a través de una ley formalmente expedida por el órgano legislativo, se podrán fijar en
forma expresa los sujetos obligados, el objeto, la base, la tasa y época de pago. Así
lo ha reconocido la Suprema Corte de Justicia de la Nación en la siguiente
jurisprudencia del Pleno que aparece publicada en el Semanario Judicial de la
Federación 1917 – 2000. Tomo I, Materia Constitucional, Páginas 289 y 290,
correspondiente a la Séptima Época, que en seguida se transcribe:
“IMPUESTOS, ELEMENTOS ESENCIALES DE LOS. DEBEN ESTAR CONSIGNADOS
EXPRESAMENTE EN LA LEY. Al disponer el artículo 31 constitucional, en su fracción IV,
que son obligaciones de los mexicanos `contribuir para los gastos públicos así de la
Federación como del Estado y Municipio en que residan, de la manera proporcional y
equitativa que dispongan las leyes, no sólo establece que para la validez constitucional de
un tributo es necesario que, primero, esté establecido por ley; segundo, sea proporcional y
equitativo y, tercero, sea destinado
Al pago de los gastos públicos, sino que también exige que los elementos esenciales del
mismo, como pueden ser el sujeto, objeto, base, tasa, y época de pago, estén consignados
de manera expresa en la ley, para que así no quede margen para la arbitrariedad de las
autoridades exactoras ni para el cobro de impuestos imprevisibles o a título particular, sino
que a la autoridad no quede otra cosa que aplicar las disposiciones generales de observancia
obligatoria dictadas con anterioridad al caso concreto de cada causante y el sujeto pasivo de
la relación tributaria pueda en todo momento conocer la forma cierta de contribuir para los
gastos públicos de la Federación, del Estado o Municipio en que resida”.

El principio de legalidad tributaria se puede sintetizar en el siguiente aforismo: no hay tributo


sin ley.

• Principio de proporcionalidad y equidad.


La proporcionalidad significa que los sujetos pasivos deben contribuir a los gastos públicos en
función de su capacidad económica, de manera que las personas que obtengan ingresos elevados
tributen en forma superior a los que tengan menores ingresos, lo que se cumple a través de tarifas
progresivas. En cambio, el principio de equidad radica en que la ley debe tratar igual a quienes se
encuentren en la misma situación jurídica, es decir, que los contribuyentes de un mismo impuesto
deben ser tratados en forma igual por la norma jurídica que lo establece.
5. ÓRGANOS FACULTADOS PARA EXPEDIR, PROMULGAR Y
EJECUTAR LAS LEYES FISCALES FEDERALES.

El Poder Legislativo Federal, el cual se deposita en el Congreso de la Unión, dividido en dos


cámaras, una de Diputados y otra de Senadores, es el que aprueba dichas leyes.

El Congreso de la Unión expide diversos tipos de leyes y son: leyes generales; leyes federales,
leyes reglamentarias, leyes orgánicas, leyes ordinarias.

El artículo 89 fracción I, confiere al Poder Ejecutivo Federal tres facultades y son: promulgar y
ejecutar las leyes del Congreso, y reglamentar dichas leyes

El Poder Ejecutivo es unipersonal, es decir, reside en una sola persona que se denomina
“Presidente de los Estados Unidos Mexicanos”. (Art. 80 de la Constitución).
Como consecuencia de lo anterior, el Presidente de la República tiene la facultad y
la obligación de promulgar y ejecutar las leyes fiscales federales. Es la Secretaría
de Hacienda y Crédito Público, a través del Servicio de Administración Tributaria
(SAT), la que lleva a cabo la recaudación fiscal en el ámbito federal, (cobro de
impuestos), con funciones de vigilancia y fiscalización sobre los contribuyentes, a fin
de que éstos cumplan con sus obligaciones tributarias. A través del procedimiento
económico coactivo, el Fisco federal puede hacer efectivos los créditos fiscales y
llegar incluso al embargo y remate de bienes en contra de los propios
contribuyentes.
CAPÍTULO IX.- LOS DERECHOS
HUMANOS Y SUS GARANTÍAS.
Mediante reforma (publicada el 10 de junio de 2011), se aprobaron cambios trascendentales en
materia de derechos humanos, principalmente a los artículos 1°, 3°, 11, 15, 18, 29, 33, 89, 97, 102
Apartado B, 105 inciso g).

Derechos de igualdad.

La Constitución Federal, en su Artículo 1º., establece lo siguiente:


• En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas gozarán de los derechos humanos
reconocidos en esta Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano
sea parte, así como de las garantías para su protección, cuyo ejercicio no podrá restringirse ni
suspenderse, salvo en los casos y bajo las condiciones que esta Constitución establece.
• Las normas relativas a los derechos humanos se interpretarán de conformidad con esta
Constitución y con los tratados internacionales de la materia, favoreciendo en todo tiempo a las
personas la protección más amplia. (principio pro persona).
• Todas las autoridades, en el ámbito de sus competencias, tienen la obligación de promover,
respetar, proteger y garantizar los derechos humanos de conformidad con los principios de
universalidad, interdependencia, indivisibilidad y progresividad. En consecuencia, el Estado deberá
prevenir, investigar, sancionar y reparar las violaciones a los derechos humanos, en los términos que
establezca la ley.
• Está prohibida la esclavitud en los Estados Unidos Mexicanos. Los esclavos del extranjero que
entren al territorio nacional alcanzarán, por este solo hecho, su libertad y la protección de las leyes.
• Queda prohibida toda discriminación motivada por origen étnico o nacional, el género, la edad, las
discapacidades, la condición social, las condiciones de salud, la religión, las opiniones, las
preferencias sexuales, el estado civil o cualquier otra que atente contra la dignidad humana y tenga
por objeto anular o menoscabar los derechos y libertades de las personas.
• Igualdad de género. “El hombre y la mujer son iguales ante la ley”. (Art. 4°).
• No se concederán títulos de nobleza, ni prerrogativas, ni honores hereditarios (Art. 12).
• Nadie podrá ser juzgado por leyes privativas ni por tribunales especiales. (Art. 13).
Derechos de libertad.

Se ha definido a la libertad como la potestad que tienen las personas para desarrollarse en todos
los ámbitos, es decir, para escoger fines y medios con el objeto de lograr su desarrollo y felicidad.

• Libertad de educación (Art. 3°). Conforme a este precepto, todo individuo tiene derecho a recibir
educación.

Con motivo de la reforma educativa publicada en el Diario Oficial de la Federación el 26 de


febrero de 2013, se implantó un nuevo sistema educativo, que propugna por una educación de
calidad. Para ello, el ingreso al servicio docente y la promoción a cargos con funciones de
dirección o de supervisión en la educación básica y media superior que imparta el Estado, se
llevarán a cabo mediante concursos de oposición, que garanticen la idoneidad de los
conocimientos y capacidades que correspondan. La Ley Reglamentaria fijará los criterios, los
términos y condiciones de la evaluación obligatoria para el ingreso, la promoción, el
reconocimiento y la permanencia en el servicio profesional, con pleno respeto a los derechos
constitucionales de los trabajadores de la educación. Serán nulos todos los ingresos y
promociones que no sean otorgados conforme a la ley. (Artículo 3°, fracción III).
Con motivo de dicha reforma se creó el Sistema Nacional de Evaluación Educativa, para garantizar que
la prestación de los servicios educativos sean de calidad. La coordinación de dicho sistema estará a cargo
del Instituto Nacional para la Evaluación Educativa (INNE), que será un organismo público autónomo,
con personalidad jurídica y patrimonio propio, quien evaluará la calidad, el desempeño y resultados del
Sistema Educativo Nacional, en la educación pre escolar, primaria, secundaria y media superior.

• Libertad de procreación. Toda persona tiene derecho a decidir de manera libre, responsable e
informada, sobre el número y el espaciamiento de sus hijos (Art. 4°, párrafo segundo).

• Libertad de trabajo. A ninguna persona podrá impedirse que se dedique a la profesión, industria,
comercio, o trabajo que le acomode, siendo lícitos. (Art. 5°, párrafo primero).

• Libertad de expresión. El artículo 6° reconoce como derecho humano la libre manifestación de las
ideas, la que no será objeto de ninguna inquisición judicial o administrativa, sino en el caso de que ataque
la moral, la vida privada, los derechos de terceros, provoque algún delito o perturbe el orden público; el
derecho de réplica será ejercido en los términos dispuestos por la ley. El derecho a la información será
garantizado por el Estado.
Toda persona tiene derecho al libre acceso a la información plural y oportuna, así como a buscar,
recibir y difundir información e ideas de toda índole por cualquier medio de expresión.
El Estado garantizará el derecho de acceso a las tecnologías de la información o comunicación, así
como a los servicios de radio difusión y telecomunicaciones, incluido el de banda ancha e internet.
Para tales efectos, el Estado establecerá condiciones de competencia efectiva en la prestación de
dichos servicios.

Apartado A).- Para el ejercicio del derecho de acceso a la información, la Federación y las
entidades federativas, en el ámbito de sus respectivas competencias, se regirán por los siguientes
principios:

a) Toda la información en posesión de cualquier autoridad, de los Poderes Ejecutivo, Legislativo y


Judicial, órganos autónomos, partidos políticos, fideicomisos, y de cualquier persona física o moral,
o sindicato que reciba y ejerza recursos públicos, o realice actos de autoridad en el ámbito federal,
estatal y municipal, es pública, y solo podrá ser reservada temporalmente por razones de interés
público y seguridad nacional, en los términos que fijen las leyes.
b) La información que se refiere a la vida privada y datos personales, será protegida en
los términos y con las excepciones que fijen las leyes.
c) Toda persona, sin necesidad de acreditar interés alguno o justificar su utilización,
tendrá acceso gratuito a la información pública, a sus datos personales o a la rectificación
de estos.
d) La Federación contará con un organismo autónomo, especializado, imparcial,
colegiado, con personalidad jurídica y patrimonio propio, con plena autonomía técnica, de
gestión… responsable de garantizar el cumplimiento del derecho a la información pública
y a la protección de datos personales en posesión de los sujetos obligados, en los
términos aue establezca la ley. (dicho organismo es el INAI: Instituto Nacional de
Transparencia y Acceso a la Información).

Dicho organismo se regirá por los principios de certeza, legalidad, independencia,


imparcialidad, eficacia, objetividad, profesionalismo, transparencia y máxima publicidad.
• Libertad de expresión. El artículo 7° constitucional reconoce este derecho en los siguientes
términos: “es inviolable la libertad de difundir opiniones, información e ideas, a través de cualquier
medio. No se puede restringir este derecho por vías o medios indirectos, como controles oficiales
o particulares, de papel para periódicos, de frecuencias radioeléctricas… o por cualquier otro
medio… encaminados a impedir la transmisión o circulación de ideas u opiniones”.
• Derecho de petición. Los funcionarios y empleados públicos respetarán el ejercicio del
derecho de petición, siempre que se formule por escrito, de manera pacífica y respetuosa. Debe
recaer un acuerdo escrito y darlo a conocer al peticionario en breve término (Artículo 8°).
• Libertad de asociación y reunión. El Art. 9° constitucional establece que: “no se podrá coartar
el derecho de asociarse o reunirse pacíficamente con cualquier objeto lícito; pero solamente los
ciudadanos de la República podrán hacerlo para tomar parte en los asuntos políticos del país.
Ninguna reunión armada tiene derecho de deliberar. No se considerará ilegal y no podrá ser
disuelta una asamblea o reunión que tenga por objeto hacer una petición o presentar una
protesta por algún acto, a una autoridad, si no se profieren injurias contra ésta, ni se hiciere uso
de violencias o amenazas para intimidarla u obligarla a resolver en el sentido que se desee”.
•Derecho de posesión de armas en el domicilio. Para su seguridad y legítima defensa.

Artículo 10. Los habitantes de los Estados Unidos Mexicanos tienen derecho a poseer armas en su domicilio,
para su seguridad y legítima defensa, con excepción de las prohibidas por la Ley Federal y de las reservadas para
el uso exclusivo del Ejército, Armada, Fuerza Aérea y Guardia Nacional. La ley federal determinará los casos,
condiciones, requisitos y lugares en que se podrá autorizar a los habitantes la portación de armas.

• Libertad de tránsito.
Artículo 11. Toda persona tiene derecho para entrar en la República, salir de ella, viajar por su territorio y mudar
de residencia, sin necesidad de carta de seguridad, pasaporte, salvoconducto u otros requisitos semejantes. El
ejercicio de este derecho estará subordinado a las facultades de la autoridad judicial, en los casos de
responsabilidad criminal o civil, y a las de la autoridad administrativa, por lo que toca a las limitaciones que
impongan las leyes sobre emigración, inmigración y salubridad general de la República, o sobre extranjeros
perniciosos residentes en el país. Toda persona tiene derecho a buscar y recibir asilo. El reconocimiento de la
condición de refugiado y el otorgamiento de asilo político, se realizarán de conformidad con los tratados
internacionales. La ley regulará sus procedencias y excepciones.
• Libertad religiosa.

Artículo 24. Toda persona tiene derecho a la libertad de convicciones éticas, de conciencia y de religión, y a tener o
adoptar, en su caso, la que sea de su agrado. Esta libertad incluye el derecho de participar, individual o
colectivamente, tanto en público como en privado, en las ceremonias, devociones o actos del culto respectivo,
siempre que no constituyan un delito o falta penados por la ley. Nadie podrá utilizar los actos públicos de expresión
de esta libertad con fines políticos, de proselitismo o de propaganda política. El Congreso no puede dictar leyes
que establezcan o prohíban religión alguna. Los actos religiosos de culto público se celebrarán ordinariamente en
los templos. Los que extraordinariamente se celebren fuera de éstos se sujetarán a la ley reglamentaria.

• Libertad de empresa, o libertad económica.

Artículo 28. En los Estados Unidos Mexicanos quedan prohibidos los monopolios, las prácticas monopólicas, los
estancos y las exenciones de impuestos en los términos y condiciones que fijan las leyes. El mismo tratamiento se
dará a las prohibiciones a título de protección a la industria.
En consecuencia, la ley castigará severamente, y las autoridades perseguirán con eficacia, toda concentración o
acaparamiento en una o pocas manos de artículos de consumo necesario y que tenga por objeto obtener el alza
de los precios.
La ley protegerá a los consumidores y propiciará su organización para el mejor cuidado
de sus intereses.
El Poder Ejecutivo contará con los órganos reguladores coordinados en materia energética,
denominados Comisión Nacional de Hidrocarburos y Comisión Reguladora de Energía, en los términos
que determine la ley.
El Estado, sujetándose a las leyes, podrá en casos de interés general, concesionar la prestación de
servicios públicos o la explotación, uso y aprovechamiento de bienes de dominio de la Federación.
Se podrán otorgar subsidios a actividades prioritarias, cuando sean generales, de carácter temporal y no
afecten sustancialmente las finanzas de la Nación. El Estado vigilará su aplicación y evaluará los
resultados de ésta.
El Estado contará con una Comisión Federal de Competencia Económica, que será un órgano
autónomo, con personalidad jurídica y patrimonio propio, que tendrá por objeto garantizar la libre
competencia y concurrencia, así como prevenir, investigar y combatir los monopolios, las prácticas
monopólicas, las concentraciones y demás restricciones al funcionamiento eficiente de los mercados, en
los términos que establecen esta Constitución y las leyes.
El Instituto Federal de Telecomunicaciones es un órgano autónomo, con personalidad jurídica y
patrimonio propio, que tiene por objeto el desarrollo eficiente de la radiodifusión y las
telecomunicaciones, conforme a lo dispuesto en esta Constitución y en los términos que fijen las leyes.
Para tal efecto, tendrá a su cargo la regulación, promoción y supervisión del uso, aprovechamiento y
explotación del espectro radioeléctrico, las redes y la prestación de los servicios de radiodifusión y
telecomunicaciones, así como del acceso a infraestructura activa, pasiva y otros insumos esenciales,
garantizando lo establecido en los artículos 6º. Y 7º. De esta Constitución.

También podría gustarte