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RUGOSIDAD
Aunque durante mucho tiempo la
medición de la rugosidad no fue
considerada como una rama de la
metrología, en la actualidad es un
requerimiento importante debido al
reconocimiento creciente de la
importancia y necesidad de esta
medición.
Una superficie perfecta es una
abstracción matemática, ya que
cualquier superficie real, por
perfecta que parezca, presentará
irregularidades que se originan
durante el procesos de fabricación.
Tradicionalmente, el principal
interés en la evaluación de a
rugosidad superficial incluía
parámetros asociados con
desplazamiento de palpador en la
dirección vertical (eje Z), el cual fue
típicamente representado por
alturas de pico a valle.
Ahora es necesario para los
fabricantes evaluar el acabado
superficial usando no solamente
parámetros asociados con
desplazamiento del palpador en a
dirección del eje Z, sino también en
la dirección horizontal (eje X),
dependiendo del objetivo de calidad
del producto.
De acuerdo con la norma 150 1302-
1978, las especificaciones del
acabado superficial deberán
colocarse en relación con el
símbolo básico, como se muestra a
continuación.
a valor Ra de rugosidad en µm
ó µin ó números de grado
de rugosidad Nl a N12
b método de producción, tratamiento o
recubrimiento.
c longitud de muestreo
d dirección del marcado
e cantidad que se removerá
f otros parámetros de rugosidad (entre
paréntesis)
Sin embargo, es muy común
encontrar sólo una indicación
como la siguiente:
Símbolos para la dirección del marcado
Símbolos sin Indicación Adicional
Por lo que a continuación se dan
algunas recomendaciones prácticas
de cómo proceder en estos casos.