El costo es mas elevado que el de
un baño compostero de cámara
simple.
Su principal ventaja es la de
simplificar las tareas de
mantenimiento: no se tienen que
manipular las heces frescas y el
vaciado de cámaras se realiza,
aproximadamente, entre 6 meses y
un año.
Son el modelo de baño seco más difundido y
construido.
Son baños con 2 cámaras de
almacenamiento ubicadas debajo del piso
del baño.
Las cámaras se llenan alternadamente y se
vacían, como mínimo, cada seis meses o más
dependiendo del tipo de clima donde se
construyan.
En los climas templados y húmedos la
deshidratación de las heces es lenta, existen
riesgos de desprendimiento de lixiviados y una
lenta neutralización de los patógenos por el frío
y la humedad. Esto reduce una de sus
principales ventajas que es el vaciado cómodo
de la cámara cada 6 meses, con heces secas,
sin olor y con patógenos parcialmente
neutralizados.
Eventualmente se requeriría de un compostaje
exterior para asegurar la inocuidad del compost
final.