Tan pronto como el pueblo de Dios sea sellado en su
frente—no se trata de un sello o marca que se pueda
ver, sino un afianzamiento en la verdad, tanto intelec tual como espiritualmente, de modo que los sellados son inconmovibles—, tan pronto como sea sellado y preparado para el zarandeo, éste vendrá. Ciertament e ya ha comenzado.—Comentario Bíblico Adventista 4:1183 (1902). • El sello del Dios viviente sólo será colocado sobre los que son sem ejantes a Cristo en carácter.—Comentario Bíblico Adventista 7:981 (1895). EUD92 225.1 Los que reciban el sello del Dios vivo y sean protegidos en el tiemp o de angustia, deben reflejar plenamente la imagen de Jesús.—Pri meros Escritos, 71 (1851). EUD92 225.2 • El sello de Dios no será nunca puesto en la frente de un hombre o una mujer que sean impuros. Nunca será puesto sobre la frent e de seres humanos ambiciosos y amadores del mundo. Nunca s erá puesto sobre la frente de hombres y mujeres de corazón fals o o engañoso. Todos los que reciban el sello deberán estar sin ma ncha delante de Dios y ser candidatos para el cielo.—Joyas de los Testimonios 2:71 (1882). EUD92 225.3 El amor se expresa en la obediencia, y el amor perfecto echa fuera el temor. Los que aman a Dios, tienen el sello de Dios en la frente, y obr an las obras de Dios.—Hijos e Hijas de Dios, 53 (1894). EUD92 225.4 Vi que ella [la Sra. Hastings] estaba sellada, que se levantaría y se pon dría en pie sobre la tierra, y estaría con los ciento cuarenta y cuatro m il. Vi que no necesitábamos afligirnos por ella; descansaría durante el tiempo de angustia.—Mensajes Selectos 2:301 (1850). EUD92 226.3 • Viven en nuestra tierra quienes han pasado de los noventa años de edad. En su debilidad se ve el resultado natural de la vejez; pero cre en en Dios, y Dios los ama. El sello de Dios está sobre ellos, y estará n en el número de quienes ha dicho el Señor: “Bienaventurados... lo s muertos que mueren en el Señor”.—Comentario Bíblico Adventist a 7:993 (1899). EUD92 227.1 • Estamos luchando con todas las facultades que Dios nos dio para alcanzar la medida de la estatura de ho mbres y mujeres en Cristo? ¿Estamos procurando s u plenitud, conquistando una altura cada vez mayor , en procura de la perfección de su carácter? Cuand o los siervos de Dios alcancen este punto, serán sell ados en sus frentes. El ángel registrador declarará: “Consumado es”. Serán completos en él los que le p ertenezcan por creación y por redención.—Mensaje s Selectos 3:488 (1899).