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APROVECHAMIENTO FORESTAL
Ing. Javier Mas Porras
En México la madera de encino ha venido siendo utilizada desde épocas ancestrales, principalmente
como material combustible, aunque existen indicios de su frecuente utilización como vigas y pilotes
en las fascinantes construcciones de la Arquitectura Azteca. Sin embargo en nuestro país los encinos
han venido siendo discriminados en la producción de madera aserrada, debido a la forma defectuosa
. del fuste que con frecuencia presentan los árboles de encino, en comparación con la de las especies
de coníferas. No obstante que algunas especies de encino en México presentan buena conformación,
como es el caso del encino roble (Quercus peduncularis) el encino de asta (Q. candicans), el encino
rosillo (Q. scytophylla), el encino albellano (Q. reticulata) y el encino laurelillo (Quercus crassipes),
especies que crecen en el estado de Michoacán.
También han influido las reducidas existencias maderables que generalmente existen en los bosques de
encino, así como el mayor peso y dureza que presenta la madera de encino en las labores de
aprovechamiento, lo cual ocasiona mayores gastos en la extracción, asierre, secado y el transporte de la
madera.
En lo que se refiere al estado de Michoacán, desde el año 1980 se comenzó a incrementar de manera
importante el aprovechamiento de la madera de encino, principalmente para abastecer a la fabrica de
celulosa y papel de CEPAMISA, con base en un estudio analítico que se había hecho sobre la madera de
varias especies de encino y sus propiedades para elaborar celulosa y papel, mezclándola con la pulpa de
la madera de pino (Mas P., 1977).
De esta manera en Michoacán se han llegado a aprovechar más de 240,000 m3 de encino en forma
autorizada, cuando solía ser menor a los 30,000 m3 en los años 70´s. También la empresa paraestatal
PROFORMICH cuando estuvo funcionando llegó a aprovechar un importante volumen de madera de
encino para la fabricación de: duela, labrin, parquet y muebles domésticos y de oficina.
Es precisamente con la transferencia de las nuevas tecnologías que se aplican desde hace tiempo,
tanto en el manejo y aprovechamiento forestal, como en el procesamiento industrial, en países
desarrollados como Francia, Inglaterra, Alemania y E.U.A. y Canadá entre otros, como se podría llegar
a abrir posibilidades de generar en México una mayor productividad y eficiencia en la actividad silvícola
e industrial de los bosques no solamente de pino, sino también de encino.
Con lo anterior, además de lograrse un manejo forestal más efectivo, productivo y sustentable, se
generaría un mayor valor agregado en los productos forestales de la madera de encino, con lo cual
también se reducirían las costosas importaciones de productos derivados de la madera y la resina, que
nos están ocasionando una cuantiosa fuga de divisas y un aumento del desempleo en el campo.
OBJETIVO
También habrá que ir disminuyendo los desmontes de encinares para cambio de uso del suelo y el uso
excesivo de la madera de encino únicamente como leña para combustible. Para lograr esto habrá que
promover su aprovechamiento elaborando otros productos más refinados y de mayor valor agregado
que los que se producen actualmente.
1.- EL RECURSO DE LOS ENCINOS
En México existen 161 especies del género Quercus (Arizaga S. et al, 2009), aunque Maximino
Martinez en su libro Los Encinos de México (1981) describe 178 especies y Fernando Zavala en su
obra Identificación de Encinos de México (2003), menciona que antes del 2003 se habían
identificado solamente 111 especies.
Las diversas especies de encino crecen en condiciones muy variadas de: clima, altitud, exposición
y suelo y se encuentran frecuentemente asociadas y dominadas por especies de coníferas como
pino (Pinus spp.) y con menor frecuencia oyamel (Abies spp). Aunque el climax de la vegetación de
encinos se alcanza en regiones templadas formando los llamados bosques de transición entre el
bosque de coníferas y las selvas.
Las existencias volumétricas de encino en México solían ser de casi 240 millones m3, mientras que en el
estado de Michoacán se reportaron 39,536,184 m3 en la Memoria General del Inventario Forestal del
Estado (1997), En el siguiente cuadro se pueden ver los volúmenes de los diferentes grupos de especies
por región y los volúmenes totales en la entidad. De este cuadro puede derivarse que las existencias
volumétricas de encino representan el 26.8 % de las totales del estado.
En el estado de Michoacán, que es uno de los estados con mayor volumen anual
autorizado de encino, los aprovechamientos en los últimos 10 años, según los
datos que se lograron obtener son como se muestra en el siguiente cuadro:
Para lograr una buena caracterización de los bosques donde existen las especies de encino, se requiere
no solamente de estudios botánicos, ecológicos, dasométricos y de utilización de las especies; sino
también es necesario conocer sus hábitos de desarrollo y su incremento, con el fin de poder regular el
manejo silvícola de los bosques de encino en forma ordenada, sustentable y económica. La
determinación del incremento en los encinos no es cosa fácil ya que aún cuando muchas especies de
encino forman anillos de crecimiento, como son las especies: encino chicharrón (Quercus crassifolia),
encino de asta Q. candicans y encino rosillo (Q. scythopylla), estos anillos solamente se pueden
identificar en el laboratorio agregando un colorante y observando las muestras con el microscopio.
En México son muy pocos los estudios sobre crecimiento e incremento de los encinos, a pesar de la
gran cantidad de especies que tenemos en nuestro país. Uno de los primeros estudios de investigación
fue realizado con base en los datos del sitio Permanente de Experimentación Forestal (SPES) “La Nieve”
que estaba ubicado en un bosque de pino-encino en la Sierra de Coalcomán, Mich. y que fue el segundo
sitio de este tipo que se estableció en bosques de coníferas de nuestro país. Con base en las
mediciones periódicas realizadas en este sitio en árboles de encino, se logró determinar el incremento
en cuatro especies de encino y sus resultados fueron publicados en el año 1985 (Mas P. J.).
Los datos sobre el incremento de los encinos estudiados se presentan en el siguiente cuadro:
En México existen algunas especies de encinos arbustivos, con un gran porcentaje de ramaje, como es
el Quercus sebifera que no pasa de 5-6 m de altura total; pero también hay especies de encinos muy
corpulentos y de fustes más o menos rectos y cilíndricos, como es frecuente en las especies de: encino
roble (Q. peduncularis), encino rosillo (Quercus scytophylla) y encino de asta (Q. candicans). Algunos
árboles de estas especies llegan a alcanzar DAP´s de más de 1.00 m y alturas totales de 35 m., con
fustes limpios hasta de 20 m.; pero con mayor frecuencia sus DAP´s en la madurez varían de 30-60 cm
y alcanzan alturas de 15-30 m. y a veces hasta 35 m., como es el caso del encino roble (Q.
peduncularis)
La copa del árbol en los encinos tiende a ramificarse a cierta altura del tallo, variando según la especie
y sin mostrar un líder principal del tallo, como sucede comúnmente en las especies de coníferas, por lo
cual el ramaje en los encinos tiende a formar una parte importante en el volumen total del árbol. En las
especies mencionadas anteriormente, es frecuente encontrar copas de 8-14 m de diámetro y de 12-18
m de altura. El porcentaje de volumen del fuste limpio, en relación al volumen total del árbol en las
especies mencionadas, puede variar de un 40 % como es en el caso del encino chicharrón (Q.
crassifolia) que es muy ramudo y hasta un 68 % en el caso del encino roble (Q. peduncularis) y encino
de asta (Q. candicans); pero con frecuencia solo representa el 55 %, mientras que en las especies de
pino con frecuencia rebasa el 70 %.
CUADRO No 5.-DIAMETROS ALTURAS Y VOLUMENES DE ARBOLES TIPO DE ENCINO
CUADRO No 6.- CALCULOS DE PESOS ESPECIFICOS COMERCIALES A PARTIR DE VARIAS
CARGAS DE LEÑA EN RAJA DE ENCINO
CUADRO No 7.- CARACTERISTICAS FÍSICAS Y MECÁNICAS DE LA MADERA DE ALGUNAS
ESPECIES DE ENCINOS MICHOACANOS
4.- PROPUESTA DE MANEJO FORESTAL PARA LOS BOSQUES CON ENCINO
El manejo forestal en nuestro país esta requiriendo inovaciones fundamentales para promover una mayor
diversificación en el aprovechamiento de las diversas especies arbóreas, entre las cuales se encuentran
los encinos, para lograr un aumento importante en el volumen del aprovechamiento silvícola; así como
también en el valor agregado a los productos derivados de la madera.
Sin embargo en lo referente al manejo forestal, el Método Mexicano de Ordenación de Bosques Irregulares
denominado MMOBI es el que se ha venido aplicando en México con la mayor frecuencia, desde hace ya
más de 50 años. En el estado de Michoacán este método silvícola se sigue aplicando en el 92 %
superficie bajo manejo, a pesar de que en el año 1985 se publicó una guía técnica sobre el Sistema de
Cortas Sucesivas de Protección (SICOSUP, J. Mas P.) y en el año 1990 se publicó otra guía técnica
sobre el Sistema Silvícola de Selección (SISISE, J. Mas P.). Aunque estos dos últimos métodos se han
comenzado a aplicar en la entidad, la superficie de su aplicación se realiza solamente en el 2 % del área
bajo manejo forestal. Otro método es el Sistema Silvícola de Cortas a Matarrasa (SISCOMA, J. Mas P.)
que esta todavía pendiente de publicarse, aunque hace 4 años se comenzó a difundir en algunos DVDs y
ya se esta aplicando en algunos predios de la entidad.
Es precisamente con la aplicación de los métodos del SICOSUP y el SISCOMA con los que se podría
intensificar el aprovechamiento del arbolado de encino y al mismo tiempo se iría promoviendo la formación
de bosques regulares, cuya estructura favorece el mejor desarrollo de las especies intolerantes a la
sombra, como son los pinos y los encinos. También estos métodos favorecen la renovación de bosques de
pino y pino-encino sobre explotados, así como el establecimiento y desarrollo de la regeneración natural y
además facilitan las reforestaciones complementarias que deberían hacerse de preferencia con
germoplasma genéticamente mejorado.
Para elaborar los programas de manejo de bosques de pino-encino cerrados con los métodos
silvícolas SISISE y SICOSUP y realizar su debida aplicación, además de recabar la información que
establecen las normas del inventario forestal predial y las guías técnicas de los sistemas silvícolas
respectivos, también será necesario llevar a cabo previamente una identificación de las especies de
encino que conforman el bosque a manejar, con el objeto de que al realizar los marqueos, éstos se hagan
de preferencia en los individuos de las especies menos productivas y se promueva la permanencia más
prolongada de los individuos de las especies que por su mayor crecimiento, mejor conformación y uso
más variado y productivo, deban estar consideradas como las mejores especies, como son: el encino
roble (Quercus peduncularis), el encino rosillo (Quercus scytophylla), el encino de asta (Q. candicans) y
el encino chicharrón (Q. crassifolia).
Los encinos son un importante recurso forestal en nuestro país, cuyas existencias volumétricas
totales ascienden a cerca de 220 millones de m3 en 12 estados de la República. Tan solo en los
bosques con encino en el Estado de Michoacán se han cuantificado 39.5 millones de m3, en los
resultados del inventario de 1994, por lo cual con el manejo forestal ordenado y sustentable de los
bosques de encino y el uso más diversificado de su madera, se podría contribuir al desarrollo
económico y social en un nivel mucho más importante que el que se tiene actualmente. Para
promover esto será necesario realizar las siguientes acciones:
Incluir en el Inventario forestal de los bosques de encino, la evaluación de las existencias por
especie y establecer sitios de Inventario Forestal Continuo (IFC), que permitan dar seguimiento a las
mediciones individuales de los árboles de cada especie, con el fin de ir conociendo su desarrollo y
crecimiento.
COFOM, 1997. Memoria General del Inventario Forestal del Estado de Michoacán. Morelia Mich.
Martínez M., 1981. Los Encinos de México. Anales del Instituto de Biología México. 2ª Edición. Serie
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Mas P.J., 1975. Estudio sobre la Producción de Leña de Encino para la Fabricación de Celulosa en los
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Mas P.J., 1977. Los Encinos como Fuente Potencial de Madera para Celulosa y Papel en México. Rev.
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Mas P.J., 1983. El Sitio Experimental La Nieve 14 Años después de su Tratamiento Silvícola. Bol. Téc.
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Mas P.J., 1985. Incremento de los Encinos. Seminario Nacional sobre Utilización de Encinos. Pub.
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Mas P.J., 1985. El Sistema de Cortas Sucesivas de Protección (SICOSUP) y su aplicación en Bosques
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Mas P.J. y Pahua G.A., 1990. El Sitio de Experimentación Silvícola “La Nieve” a 27 Años de su
Establecimiento. CIFAP-MICH, INIFAP, SARH. Morelia, Mich. 68 p.
Mas P.J., 1990. El Sistema Silvícola de Selección (SISISE) para Bosques de Coníferas de la Región
Central de México. Pub. Especial No 1, CIFAP-MICH, INIFAP, SARH. Morelia, Mich. 61 p.
Mas P. J., 2009. El Sistema Silvícola de Cortas a Matarrasa una Buena Alternativa para Renovar
Bosques Improductivos. COFOM, Morelia Mich. (Pendiente de publicación).
Zavala Ch.F., 2003. Identificación de Encinos de México. Segunda Edición. División de Ciencias
Forestales, Universidad Autónoma de Chapingo. Texcoco, Méx.