HEMORRAGIAS

Lic. T.M. Jesús Muguerza ortiz

 Definición
 Son pérdidas de
sangre debidas a la
rotura de la pared de
los vasos sanguíneos.

 Cualquier salida de
sangre de sus cauces
habituales (los vasos
sanguíneos).
 Clasificación
 Existen dos tipos de clasificaciones, una
atendiendo al tipo de vaso que se ha roto,
siendo ésta Arterial, Venosa o Capilar y
otra atendiendo al destino final de la
sangre, o dicho de otra forma: ¿a dónde
va a parar la sangre que se pierde?.
Atendiendo a este último criterio, las
hemorragias pueden ser: Externas,
Internas y Exteriorizadas.
 A. Atendiendo al vaso que se ha roto
 Hemorragia Capilar o
Superficial. Compromete
solo vasos sanguíneos
superficiales que irrigan la
piel. Generalmente es
escasa y se puede
controlar fácilmente. La
sangre sale a modo de
pequeños puntitos
sangrantes.
 Es la llamada “hemorragia
en sabana”.
 Hemorragia Arterial:
Es el menos frecuente,
pero el más serio. La
sangre que se libera de
una arteria es de color
rojo brillante y suele salir
con mucha fuerza, a
menudo en saltos rítmicos
que coinciden con las
contracciones del corazón.
 Salida es abundante, a
borbotones y en forma
intermitente.
Hemorragia Venosa:
Cuando el sangrado procede
de venas lesionadas. Sangre
de color rojo oscuro. Salida
de la sangre de forma
continua alrededor de la
herida. El sangrado venoso
se corta, en principio,
aplicando presión local.
 B. Atendiendo al destino final de la sangre.

 Hemorragia
Externa: la sangre
sale al exterior del
organismo.
Son aquellas en las
que la sangre sale al
exterior a través de
una herida.
 Hemorragia Interna.
Son aquellas que se
producen en el interior
del organismo, sin salir
al exterior, por lo tanto
no se ve, pero sí que
se puede detectar
porque el paciente
presenta signos y
síntomas de shock (al
igual que el resto de
hemorragias).
 Hemorragias Exteriorizadas: siendo internas,
salen al exterior por orificios naturales.

Epistaxis: Por la nariz

Hemoptisis, hematemesis: Por la boca
Otorragia: por el oído
 Hemorragia - pronostico
 Cuanto mayor es el volumen de sangre que
se ha perdido, mayor es el riesgo. La
gravedad de una hemorragia depende no
sólo de la cantidad de sangre perdida sino del
tiempo que se tarda en perderla.
 En un adulto, una pérdida de sangre de:
Medio litro: es tolerado.
Litro y medio: puede producir shock
hipovolémico y muerte.
Más de tres litros: produce la muerte
rápidamente por colapso.