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Presentado Por:
Dairon Steven Hernandez Cruz
Juan Diego Vásquez Garzón
Grado: 9-3 Materia: Filosofía y Pensamiento
Critico
BIOGRAFÍA
Heráclito De Éfeso también conocido como “El
Oscuro De Éfeso” o “El Filosofo Llorón” Fue un
filosofo y escritor griego nacido el 534 A.C en
Éfeso (ciudad de la antigua Grecia).
Era considerado uno de los grandes iniciadores de
la Metafísica griega
NOTA: Algunas de sus obras las cuales
explicaremos mas delante son:
1. El fuego como elemento primordial
2. La movilidad del universo existente
3. Dualidad y Oposición
4. El principio de causalidad
EL PENSAMIENTO DE
HERÁCLITO
Heráclito era considerado un ser llorón, un
aguafiestas con un lengua difícil de entender,
confuso. Por este motivo lo llamaban el oscuro,
porque siempre se explicaba con aforismos, es
decir, de manera corta y precisa, pero
inentendible para los demás.
En la visión cósmica de Heráclito, solamente
existía el movimiento constante de las cosas,
aunque sin ninguna referencia sensible, él al igual
que muchos pensadores de la época, era
materialista, pero también creía en diversos
dioses, hecho que actualmente se considera
contradictorio.
EL FUEGO COMO ELEMENTO
PRIMORDIAL
“El orden del mundo, el orden mismo de las cosas
no lo a hecho ninguno de los dioses ni de los
hombres sino que siempre a sido, es y será un
fuego siempre vivo que se enciende con medida y
se extingue con media” De lo anterior dicho por
Heráclito podemos suponer 2 cosas:
1.El fuego es eterno y increado (No tiene causa
alguna y por tanto esta siempre vivo)
2. Las fluctuaciones y cambios del fuego siguen
una rigurosa medida (se enciende y apaga con
medida)
EXPLICACIÓN DE: EL FUEGO
COMO ELEMENTO PRIMORDIAL
Muchos autores han interpretado esta doctrina en la misma línea que
Tales, Anaximandro o Anaxímedes: Igual que Tales decía que el agua
es el Arkhe de la realidad, Heráclito estaría diciendo que fuego es el
arkhe de la realidad (Es decir el elemento primordial de que esta
compuesta y/o deriva toda la realidad material.) SIN EMBARGO esta
interpretación a sido discutida, algunos autores han querido
demostrar que Heráclito no estaba comprendiendo el fuego como un
Arkhe es decir; como aquello de lo que esta hecho todas las cosas,
como los bloques constitutivos de la realidad sino como la fuerza vital
o la energía del cosmos que unifica los múltiples cambios del devenir
incesante