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ORÍGENES DE LA

FILOSOFÍA
Mg. WALTHER MOLINA SEDANO
Filosofía Griega
• Una tradición que se remonta a los filósofos de Alejandría (siglo I
antes de J.C.) afirma que la filosofía griega procede de Oriente.
Los principales filósofos griegos habrían tomado de doctrinas
hebraicas, egipcias, babilónicas e indias, no sólo sus
descubrimientos científicos sino también sus concepciones
filosóficas más personales.
• Más verosímil parece a primera vista la procedencia oriental de
la ciencia griega. Según Herodoto, la geometría habría nacido en
Egipto a causa de la necesidad de medir la tierra y distribuirla
entre sus propietarios después de las periódicas inundaciones
del Nilo. Según otras tradiciones, la astronomía habría surgido
entre los babilonios y la aritmética también en Egipto.
• La filosofía griega es, por el contrario, investigación
racional. Su fundamento consiste en que el hombre no
posee la sabiduría, sino que debe buscarla: no es sofía
sino filosofía, amor a la sabiduría, indagación directa
para rastrear la verdad más allá de las costumbres, de las
tradiciones y de las apariencias.
• Según los griegos, cualquier hombre puede filosofar
porque el hombre es "animal racional" y su
racionabilidad significa la posibilidad de buscar la verdad
de forma autónoma.
• Pitágoras habría sido el primero en usar la palabra filosofía en su significado
específico. Comparaba la vida a las grandes fiestas de Olimpia adonde
algunos acuden por negocios, otros para participar en las competiciones,
otros para divertirse, y en fin algunos sólo para ver lo que ocurre; estos
últimos son los filósofos.
• La palabra filosofía implica dos significados. El primero y más general es el
de la investigación autónoma o racional, cualquiera que sea su campo de
desarrollo; en este sentido todas las ciencias forman parte de la filosofía. El
segundo significado, más específico, expresa una investigación particular
que en cierto modo es fundamental para las demás, aunque no las contiene
en sí. Los dos significados se hallan unidos en el dicho de Heráclito (fr. 35
Diels): "Es necesario que los hombres filósofos sean buenos indagadores
(istoras) de muchas cosas."
• Nada viene de la nada, tampoco la Filosofía. Fue
elaborada a partir de los mitos, aunque después se
opondría firmemente a ellos. Por siglos, no sin razón, se
ha considerado que la Filosofía es una forma de
pensamiento incompatible con los mitos. O se piensa
como filósofo o se cree en mitos, es imposible hacer las
dos cosas al mismo tiempo. La Filosofía es ante todo
pensamiento, y es innegable que las primeras formas
del pensamiento fueron los mitos.
La Ciencia y la Filosofía
• Se puede considerar que la Filosofía y la ciencia nacieron juntas, que fueron
dos vertientes de un mismo impulso por usar la razón que hace dos mil
quinientos años se apoderó de las mentes de un grupo de hombres
brillantes. Esa Filosofía primigenia, a la que tanto debemos, ha cambiado
mucho a lo largo de los siglos. Cada vez se ha hecho más sutil y sofisticada.
Pero no ha cambiado tanto como la ciencia.
• La ciencia se fue separando gradualmente de la Filosofía a lo largo de los
siglos. Al igual que ésta, fue postergada frente a la religión durante la Edad
Media. Tuvo un rebrote espectacular durante el Renacimiento, que se
prolongó durante los siglos XVI y XVII. Pero ascendió a ser la forma más
prestigiosa del conocimiento a partir de los siglos XVIII y XIX. También es
claro que en la actualidad una cosa es ser científico, y otra es ser filósofo.
• La principal diferencia es quizás la forma de conocer: tras todo
ese tiempo, la ciencia ha construido su propio método, el
método científico. Los científicos de distintas disciplinas han
transitado una y otra vez por las etapas de este método:
observación, formulación de hipótesis, experimentación y
conclusión, y cada vez que concluyen el recorrido generan más
conocimiento científico. De manera que la cantidad de
conocimiento acumulado es ya impresionante… y cada vez más
difícil de manejar y comprender.
• Encontraste, la Filosofía aun cuando también aspira a elaborar
teorías que sean lógicamente coherentes, no somete sus
conclusiones a la prueba de la experimentación. Es esta su
principal diferencia con la ciencia, según la opinión de uno de los
principales filósofos del siglo XX, Karl Popper. Para Popper, la
ciencia tiene que formular sus hipótesis y predicciones de modo
que puedan ser comparadas (contrastadas, es la palabra usada
por los científicos) con la realidad, y de ese modo sea posible
determinar si son verdaderas o no.
• “El próximo lunes a las 8:54 p.m, habrá un eclipse solar” es un
enunciado que cumple con esta característica. Llegado el
momento señalado en el mismo, se sabrá si es verdadero o falso.
Notemos que lo importante es la forma del enunciado: puede ser
falso, puede no haber eclipse, pero el enunciado contribuye al
conocimiento, al indicar al astrónomo que hubo algún error en el
cálculo con que lo produjo, que puede ser corregido. Pero
gracias a la forma en que fue formulado es posible compararlo
con lo que ocurre en la realidad, y usarlo como herramienta para
la ciencia.
• La Filosofía puede hacer afirmaciones impecables desde
el punto de vista lógico, pero no tiene la necesidad ni la
posibilidad de someterlas a experimentación. Por
ejemplo, la famosa afirmación “Pienso, luego (por lo
tanto) existo”, uno de los más famosos enunciados
filosóficos de todos los tiempos, es lógicamente sólida.
Pero no es un enunciado científico, precisamente porque
no puede expresarse de modo que sea comparado con
una realidad determinada, y a partir de esa comparación
definir si es verdadero o falso.
• En cuanto a las afirmaciones de la religión, decir, por ejemplo, que en algún
momento habrá un juicio final en que los pecadores serán condenados y los
justos salvados, nos enfrenta con un enunciado ajeno a la lógica de la
ciencia, absurdo desde la perspectiva de ésta, dado que no puede
concluirse nada acerca de su verdad como hecho. Lo que no impide, como
veíamos, que mucha gente lo tenga por cierto. Lo que sí es imposible es
considerarlo como un enunciado científico. Por su forma es un artículo de
fe: es impreciso, y lo más importante, no puede ser deducido a partir de
ninguna ley de la naturaleza conocida.
• Además de diferir de la Filosofía y la religión por el método, la ciencia se
distingue por su objeto de estudio y su lenguaje.
• En cuanto a su objeto, simplificando un poco, podemos decir que la ciencia
se ocupa de todo lo que podemos percibir a través de nuestros sentidos.
Todo lo que percibimos es materia que cambia y se mueve en el tiempo y el
espacio, y además presenta una característica importantísima que es la que
en la mayoría de los casos le permite a la ciencia estudiarlo: se puede
medir. En efecto, el método de la ciencia se sirve intensivamente de las
matemáticas en todas sus etapas. En la mayoría de los casos, para los
científicos de la naturaleza observar significa medir. Las hipótesis de la
ciencia, a su vez, suelen expresarse también en términos de cantidades.
Nos dicen qué tanto varía una cantidad dependiendo cuánto varíe otra con
la que de alguna manera está en relación. Y la experimentación
invariablemente se diseña y presenta sus conclusiones mediante símbolos
matemáticos.
• Lasconsideraciones anteriores nos permiten establecer
otra de las características que distinguen a la ciencia de
la Filosofía: se expresa en un lenguaje compuesto
principalmente de números y conceptos altamente
especializados. En la actualidad no es posible participar
en la ciencia sin un dominio importante de las
matemáticas.
• Además, aun cuando la ciencia se ha acreditado, sin lugar a
dudas, como la mejor forma de conocer la realidad material, la
que percibimos con los sentidos, su perspectiva básica y su
método no le permiten ser de mucha utilidad en dimensiones
que conciernen exclusivamente al hombre, como el querer y el
deber. Al parecer, del mismo modo, la Filosofía no se siente
cómoda frente a preguntas propias de la perspectiva religiosa,
hay preguntas muy importantes para las que la ciencia
sencillamente no puede tener respuesta. Por ejemplo: ¿Qué es
el bien? ¿Cómo debemos convivir? ¿Qué es la belleza? ¿Qué es el
conocimiento?
• Esimportante que aprendamos a valorar los distintos
acercamientos a la realidad y la verdad, y reconocer en
qué circunstancias es conveniente recurrir a cada una.
Las perspectivas filosófica, científica y religiosa no son
mutuamente excluyentes. Apegarse fanáticamente a
una, y considerar a las otras dos como falsas, terminaría
por empobrecer nuestras mentes, impidiéndonos la
apreciación, el aprovechamiento y el disfrute de buena
parte de nuestro potencial humano, y de nuestra
herencia cultural.
GRACIAS

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