sangre caliente, incluidos los humanos. El período de incubación de la enfermedad es largo (seis meses), y los síntomas pueden tardar varias semanas en aparecer tras la infección, pero una vez que aparecen, la rabia es siempre fatal en los animales. El virus de la rabia es un lyssavirus, grupo de virus causante de encefalitis que comprende también varios lyssavirus del murciélago identifi cados recientemente. Los lyssavirus pertenecen a la familia Rhabdoviridae. El nombre Rhabdo viene del griego e identifi ca la forma característica de bala o de bastoncillo de los virus. Existen varias cepas del virus clásico de la rabia que por lo general están asociadas a una especie principal como reservorio ETIOPATOGENIA La rabia se transmite por inoculación que procede de un animal infectado y raramente puede darse el caso de transmisión de persona a persona por transplante de tejidos (córnea principalmente) La vía respiratoria como puerta de entrada se halla restringida a condiciones excepcionales de exposición en ambientes fuertemente contaminados como laboratorios y cavernas Dietzschold y Koprowski describieron una nueva forma de rabia humana que es difícil de diagnosticar, el vector: murciélagos plateados; la transmisión se realiza desde las capas superiores de la piel, sin que haya inoculación, se cree que esta variante posee un tropismo celular único, lo que facilita que el virus se repliegue en la dermis con más facilidad que la rabia clásica, el mecanismo no es bien entendido aún ETIOPATOGENIA Asignado a la familia Rhabdoviridae (del griego rhabdos = bastón), que incluye cinco virus, todos serológicamente relacionados con el virus de la rabia Microscopia electrónica se define su forma como bala, compuesto de un núcleo de RNA helicoidal, de tira única, con polimerasa de RNA El virión maduro tiene longitud de 180 nm por 75 nm. El interior del virón lleva la nucleocapside helicoidal, la cual está envuelta por la membrana matriz lipoproteica y sobre la cara más superficial se encuentran los peplómeros de glicoproteína. Actualmente se reconocen siete genotipos. El virus no tolera el pH debajo de 3 ni arriba de 11; es inactivado por la luz ultravioleta, la luz solar, la desecación, la exposición a formaldehido, tripsina, b propionolactona y los detergentes. ETIOPATOGENIA Después de su fijación al sitio receptor, el virus se introduce al citoplasma por un proceso celular denominado viropexis o mecanismo fagocítico. Una vez dentro del citoplasma de la célula, en el sitio de inoculación o en la neurona, localiza la polimerasa de RNA, con lo cual inicia la síntesis de formas replicativas de RNA y de esta forma la progenie de viriones maduros, que pueden ser vistos por microscopia de luz, formando parte de los Cuerpos de Negri. Al mismo tiempo se producen inhibidores del RNA celular, así como la síntesis de proteínas, que puede explicar el daño celular o el daño neuronal. Dentro de la célula, el virión induce la producción de interferón, proteínas de bajo peso molecular, que protegen en la etapa inicial a grupos celulares no infectados del virión, a través de la producción de proteínas antivirales que inhiben la auto duplicación viral. ETIOPATOGENIA El transporte centrípeto del virión a través del flujo axónico al sistema nervioso central (SNC), a una velocidad de 3 mm/hr (5 cm/día aproximadamente), algunos autores refieren velocidades de 8 a 20 mm/día. El lapso desde el inóculo hasta las manifestaciones clínicas es conocido como periodo de incubación, entre 6 días a 14 meses Las manifestaciones de la enfermedad dependen de: • Cantidad del inóculo viral. • La proximidad de la herida al SNC. Localizado en el SNC se inicia la replicación viral con selectividad en las células de Purkinje, neuronas del asta de Ammon, región hipotalámica; Estas neuronastiene estructuras eosinofílicas, conteniendo gránulos basófilos descritos por Negri , que contienen partículas virales; aca se inicia la “rabia clínica” para que posteriormente el virus tenga una diseminación centrífuga a toda la economía. HISTORIA NATURAL DE LA RABIA CLÍNICA EN EL HOMBRE
La rabia en humanos se distingue por cinco estadios:
• Periodo de incubación. entre 20 a 90 días, de acuerdo con las variables de cantidad del inóculo y distancia del sitio de inoculación y el SNC • Periodo prodrómico. Ocurre de dos a 10 días postexposición con datos inespecíficos, en esta etapa 50 a 52% experimentan dolor o parestesias en el sitio de inoculación. Otros síntomas incluyen: hipertermia, cefalalgia, náusea, vómito, agitación, irritabilidad; con duración de dos a 10 días. • Periodo neurológico: hiperactividad, alucinaciones, convulsiones, parálisis. La hiperactividad es intermitente, de 1 a 5 minutos de duración, que ocurre espontáneamente o es precipitado por estímulos visuales, auditivos y táctiles. En 30 a 50% de casos el intento de beber durante el periodo de hiperactividad es seguido por espasmos severos de laringe y faringe; estos síntomas son precipitados por ver agua (“hidrofobia ”) o por soplar aire en la cara del paciente (“aerofobia”). HISTORIA NATURAL DE LA RABIA CLÍNICA EN EL HOMBRE
Periodo de coma. Ocurre de 7 a 10 días posterior al periodo
neurológico. Una variedad de complicaciones ocurren en esta fase: respiratorias, neurológicas: aumento de la presión intracraneal, involucramiento hipotalámico produciendo diabetes insípida o SIHAD; disfunción autonómica produciendo hipertensión, hipotensión, arritmias, hipertermia e hipotermia. • Periodo de muerte. Puede ocurrir 2 o 3 días posteriores al periodo de coma pero puede retrasarse con equipo de soporte. Hay quien menciona recuperación, lo que ocurre muy raramente. La rabia clínica es universalmente fatal, pero 3 casos reportados como no fatales recibiendo profilaxis preexposición o postexposición antes del inicio de la enfermedad. OMS Es una enfermedad vírica casi siempre mortal una vez que han aparecido los síntomas clínicos. En hasta el 99% de los casos humanos, el virus de la rabia es transmitido por perros domésticos. La rabia afecta a animales domésticos y salvajes y se propaga a las personas normalmente por la saliva a través de mordeduras o arañazos. La rabia está presente en todos los continentes, excepto en la Antártida, pero más del 95% de las muertes humanas se registran en Asia y África. La rabia aparece sobre todo en comunidades rurales remotas, y los niños de 5 a 14 años son víctimas frecuentes. El costo medio de la profilaxis tras la exposición a la rabia puede suponer gastos catastróficos para las poblaciones pobres: unos US$ 40 en África y US$ 49 en Asia, donde el ingreso diario medio es de US$ 1–2 por persona. OMS -2016 Datos y cifras •Es una enfermedad prevenible mediante vacunación que afecta a más de 150 países y territorios. •En la gran mayoría de los casos fatales de rabia humana, los perros han sido la fuente de infección, contribuyendo a hasta el 99% de. •Es posible eliminar la rabia vacunando a los perros. •La rabia causa decenas de miles de muertes cada año, > en Asia y África. •El 40% de las personas mordidas por animales presuntamente rabiosos son menores de 15 años. •La limpieza inmediata de la herida con agua y jabón tras el contacto con un animal presuntamente rabioso puede salvar la vida. •Cada año más de 15 millones de personas en todo el mundo reciben la vacuna tras una mordedura; de este modo se previenen cientos de miles de muertes anuales por rabia. Transmisión Las personas se infectan por la mordedura o el arañazo profundos de un animal infectado. Los perros son los principales huéspedes y transmisores de la rabia y la causa principal de las muertes por rabia humana que ocurren en Asia y África en más del 95% de los casos. Los murciélagos son la principal fuente de infección en los casos mortales de rabia en las Américas. La rabia del murciélago se ha convertido recientemente en una amenaza para la salud pública en Australia y Europa Occidental. Los casos mortales en humanos por contacto con zorros, mapaches, mofetas, chacales, mangostas y otros huéspedes carnívoros salvajes infectados son muy raros. También puede haber transmisión al ser humano en caso de contacto directo de material infeccioso (generalmente saliva) con mucosas o heridas cutáneas recientes. La transmisión de persona a persona por mordeduras es teóricamente posible, pero nunca se ha confirmado. Aunque es raro, también puede contraerse la rabia por trasplante de órganos infectados o inhalación de aerosoles que contengan el virus. La ingestión de carne cruda o de otros tejidos de animales infectados no es fuente confirmada de infección humana. Manifestaciones clínicas El periodo de incubación de la rabia suele ser de 1 a 3 meses, pero puede oscilar entre menos de una semana y más de un año, dependiendo de factores como la localización del punto de inoculación y la carga vírica. Las primeras manifestaciones son la fiebre, que a menudo se acompaña de dolor o parestesias (sensación inusual o inexplicada de hormigueo, picor o quemazón) en el lugar de la herida. A medida que el virus se propaga por el sistema nervioso central se produce una inflamación progresiva del cerebro y la médula espinal que acaba produciendo la muerte. Manifestaciones clínicas La enfermedad puede adoptar dos formas. En la primera, la rabia furiosa, con signos de hiperactividad, excitación, hidrofobia y, a veces, aerofobia, la muerte se produce a los pocos días por paro cardiorrespiratorio. La otra forma, la rabia paralítica, representa aproximadamente un 30% de los casos humanos y tiene un curso menos dramático y generalmente más prolongado que la forma furiosa. Los músculos se van paralizando gradualmente, empezando por los más cercanos a la mordedura o arañazo. El paciente va entrando en coma lentamente, y acaba por fallecer. A menudo la forma paralítica no se diagnostica correctamente, lo cual contribuye a la subnotificación de la enfermedad. Diagnóstico No hay pruebas para Dx antes de la aparición de los síntomas clínicos, y a menos que haya signos de hidrofobia o aerofobia, el Dx clínico puede ser difícil de establecer. La rabia humana se puede confirmar en vida y posmortem mediante diferentes técnicas para detectar el virus entero, antígenos víricos, anticuerpos específicos presentes en el líquido cefalorraquídeo o ácidos nucleicos en tejidos infectados (cerebro, piel), y también en orina o saliva. Tratamiento pos exposición
La profilaxis tras la exposición supone que el tratamiento se
inicie inmediatamente con el fin de impedir que la infección entre en el sistema nervioso central, que provocaría una muerte inmediata. La PPE consiste en: •tratamiento local de la herida, iniciado tan pronto como sea posible después de la exposición; •Aplicación de una vacuna antirrábica ; •Administración de inmunoglobulina antirrábica, si está indicado. Tratamiento local de la herida Los primeros auxilios recomendados consisten en el lavado inmediato y concienzudo de la herida durante un mínimo de 15 minutos con agua y jabón, detergente, povidona yodada u otras sustancias que maten al virus de la rabia. PPE recomendada Dependiendo de la gravedad del contacto con el animal presuntamente rabioso, se recomienda la administración de profilaxis tras la exposición tal como sigue Profilaxis posexposición recomendada
Tipo de contacto con un animal Medidas profilácticas
presuntamente rabioso posexposición Tipo I - tocar o alimentar Ninguna animales, lamedura sobre piel intacta Tipo II - mordisco en piel expuesta, Vacunación y tratamiento arañazo o erosión leves, sin local de la herida, de sangrado inmediato Tipo III - mordeduras o arañazos Rápida vacunación y transdérmicos (uno o más), administración de lameduras en piel lesionada; inmunoglobulina contaminación de mucosas con antirrábica; tratamiento saliva por lamedura; contacto con local de la herida murciélagos La profilaxis posexposición es necesaria en todos los casos de exposición de tipo II o III en los que se evalúe que existe riesgo de que la persona desarrolle la enfermedad. Este riesgo es mayor si: •el mamífero agresor es de una especie que se sabe sirve de reservorio o vector de la rabia; •el animal tiene mal aspecto o su conducta es anormal; •la saliva del animal ha contaminado una herida o mucosa; •la mordedura no fue el resultado de una provocación; •el animal no está vacunado. Prevención
Eliminación de la rabia canina
La rabia es prevenible mediante vacunación. La vacunación de los perros es la estrategia más rentable para prevenir la rabia humana. La vacunación también reducirá la necesidad de profilaxis tras la exposición como parte de la atención a los pacientes mordidos por perros. Prevención
Inmunización humana preventiva
Las mismas vacunas seguras y eficaces se pueden utilizar como inmunización preventiva. Se recomienda la vacunación de los viajeros que pasen mucho tiempo al aire libre, particularmente en zonas rurales, y realicen actividades como ciclismo, acampadas o senderismo, y también de los viajeros o expatriados cuya estancia en zonas con riesgo importante de exposición a mordeduras de perros sea prolongada. También se recomienda la inmunización preventiva de las personas que tienen ocupaciones de alto riesgo, como los trabajadores de laboratorio que trabajan con virus de la rabia y otros lisavirus vivos, y las personas que realizan actividades que puedan ponerlas en contacto directo, por razones profesionales u otras, con murciélagos, animales carnívoros y otros mamíferos de zonas afectadas por la rabia. Respuesta de la OMS La rabia es una enfermedad zoonótica que requiere una estrecha coordinación entre los sectores de la salud humana y la salud animal a nivel nacional, regional y continental. En diciembre de 2015, la OMS y la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), en colaboración con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Alianza Mundial para el Control de la Rabia, lanzaron un marco mundial para lograr que en 2030 no haya ninguna muerte humana por rabia. ¿TENDRA