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Vivir intensamente

Silvana de Vargas 13 al 16 de agosto

Orando la Palabra - Día 1

Salmos 43

1
¡Hazme justicia, oh Dios! 4
Llegaré entonces al altar de Dios,
Defiende mi causa frente a esta nació n del Dios de mi alegría y mi deleite,
impía; y allí, oh Dios, mi Dios,
líbrame de gente mentirosa y perversa. te alabaré al son del arpa.
2
Tú eres mi Dios y mi fortaleza: 5
¿Por qué voy a inquietarme?
¿Por qué me has rechazado? ¿Por qué me voy a angustiar?
¿Por qué debo andar de luto En Dios pondré mi esperanza,
y oprimido por el enemigo? y todavía lo alabaré.
3
Envía tu luz y tu verdad; ¡É l es mi Salvador y mi Dios!
que ellas me guíen a tu monte santo,
que me lleven al lugar donde tú habitas.

Lectura:
Lea el Salmo 43. Resalte las sú plicas a Dios. En un color diferente, resalte las preguntas.

Meditación:
Observe la forma en que el salmista se mueve entre la desesperació n y la esperanza: entre los
ruegos, las preguntas y unas declaraciones de esperanza. Reflexione sobre có mo estas palabras
corresponden con su vida, nombrando sus propias sú plicas, preguntas y quejas. Anó telas.

Oración:
Formule sus propias sú plicas, preguntas y quejas en un salmo de lamento personal. Intercale las
palabras de esperanza – tanto sus propias, como las del Salmo 43. Repita su salmo a Dios como
una oració n.

Respuesta:
Enfoque en el final del verso 5. Repita las palabras hasta que se graban dentro de usted.
Descanse en silencio por un tiempo, reflexionando en las promesas de Dios mencionados en este
Salmo (vs. 2a, 3, 4, 5b).

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Orando la Palabra - Día 2

Salmo 54

1
¡Ven con tu gran poder, oh Dios, y 5
Que los planes malvados de mis enemigos se
rescá tame! tornen en su contra;
Defiéndeme con tu poder. haz lo que prometiste y acaba con ellos.
2
Escucha mi oració n, oh Dios; 6
Sacrificaré una ofrenda voluntaria a ti;
presta atenció n a mi ruego. alabaré tu nombre,
3
Pues me atacan desconocidos; porque es bueno, oh Señ or.
gente violenta trata de matarme. 7
Pues me libraste de mis dificultades
No les importa Dios en lo má s mínimo. y me ayudaste a triunfar sobre mis
4
Pero Dios es mi ayudador; enemigos.
¡el Señ or me mantiene con vida!

Lectura: Lea el Salmo 54.


 Al leerlo por segunda vez, compare el versículo 1 con el 7; el versículo 2 con el 6; versículo
3 con el 5. Es ú til resaltar los pares con el mismo color.
 ¿Qué se nota acerca de cada par de versículos? Escriba sus pensamientos.
 Ubicada en el centro del Salmo, ¿cuá l es la declaració n en el versículo 4?
Lea el Salmo, una vez má s, tomando nota de las palabras y frases que le hablan.

Meditación: Repita varias veces las palabras y frases que se le destacaron.


Utilizando las siguientes preguntas como guía, reflexione sobre lo que significan para usted en una
situació n actual,:
 ¿De quién o qué se necesita hoy la defensa de Dios?
 ¿De qué forma se siente atacado/a?
 ¿De que manera es Dios su ayuda idó nea, quien le da apoyo?
 ¿Cuá les son las promesas de las escrituras que se pueden aplicar a esa situació n hoy día?
 ¿Qué elogio puede ofrecerle a Dios?

Oración: Las palabras de este salmo ya son una oració n. Dígalas ahora en una oració n de su
corazó n y mente.

Respuesta: Jesú s nos insiste a amar a nuestros enemigos y orar por los que nos
persiguen. Reflexione sobre las personas que le causan dificultades.
Ore por la gracia de Dios manifestada en nuestro trato con personas y situaciones difíciles.

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Orando la Palabra - Día 3

Salmo 57 6
Mis enemigos me tendieron una trampa;
1
¡Ten misericordia de mí, oh Dios, ten estoy cansado de tanta angustia.
misericordia! Cavaron un pozo profundo en mi camino,
En ti busco protecció n. pero ellos mismos cayeron en la trampa.
Me esconderé bajo la sombra de tus alas 7
Mi corazó n está confiado en ti, oh Dios;
hasta que haya pasado el peligro. mi corazó n tiene confianza.
2
Clamo al Dios Altísimo, ¡Con razó n puedo cantar tus alabanzas!
a Dios, quien cumplirá su propó sito para 8
¡Despiértate, corazó n mío!
mí. ¡Despiértense, lira y arpa!
3
É l mandará ayuda del cielo para rescatarme, Con mi canto despertaré al amanecer.
y avergonzará a los que me persiguen. 9
Te daré gracias, Señ or, en medio de toda la
Mi Dios enviará su amor inagotable y su gente;
fidelidad. cantaré tus alabanzas entre las naciones.
4
Me rodean leones feroces 10
Pues tu amor inagotable es tan alto como
que con avidez devoran a sus presas los cielos;
humanas; tu fidelidad alcanza las nubes.
sus dientes penetran como lanzas y flechas, 11
Exaltado seas, oh Dios, por encima de los
y sus lenguas cortan como espadas. cielos má s altos;
5
¡Exaltado seas, oh Dios, por encima de los que tu gloria brille sobre toda la tierra.
cielos má s altos!
Que tu gloria brille sobre toda la tierra.

Lectura: Lea el Salmo 57.


 Lea otra vez, tomando nota de las palabras y frases que hablan del lamento y la angustia.
 Lea una tercera vez, tomando nota de las palabras y frases que hablan de la alabanza y la
acció n de gracias.
Meditación:
 ¿Dó nde usted se encuentra en esta composició n de emociones?
 ¿Có mo se puede encontrar la alabanza y la acció n de gracias en medio de la prueba y el
sufrimiento?
Oración:
 Repita las palabras del Salmo como una oració n.
 Pídale a Dios que le de un corazó n de agradecimiento, incluso en tiempos difíciles.
Respuesta:
 Quédese quieta/o en la presencia de Dios.

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Orando la Palabra - Día 4

Salmo 142

1
Clamo al Señ or; 5
Entonces oro a ti, oh Señ or,
ruego la misericordia del Señ or. y digo: «Tú eres mi lugar de refugio.
2
Expongo mis quejas delante de él En verdad, eres todo lo que quiero en la
y le cuento todos mis problemas. vida.
3
Cuando me siento agobiado, 6
Oye mi clamor,
solo tú sabes qué camino debo tomar. porque estoy muy decaído.
Vaya adonde vaya, Rescá tame de mis perseguidores,
mis enemigos me han tendido trampas. porque son demasiado fuertes para mí.
4
Busco a alguien que venga a ayudarme, 7
Sá came de la prisió n
¡pero a nadie se le ocurre hacerlo! para que pueda agradecerte.
Nadie me ayudará ; Los justos se amontonará n a mi alrededor,
a nadie le importa un bledo lo que me pasa. porque tú eres bueno conmigo».

Lectura: Leer Salmo 142.


 Al leerlo una segunda vez, destaque las palabras del salmista que describen a Dios y las
frases que describen a las personas que rodean al salmista.
 ¿Qué notas? ¿Cuá les palabras o frases le hablan personalmente? Anótelas.

Meditación: Céntrese en las palabras que anotó . Permita que se convierten en suyas.

Oración: Lea el salmo como oració n a Dios, personalizá ndolo a su contexto.

Respuesta: Repita las palabras del versículo 3 y 5: «Cuando me siento agobiado, só lo tú sabes
qué camino debo tomar. . . .Tú eres mi lugar de refugio. En verdad, eres todo lo que quiero en la
vida.»
Considere:
 ¿De qué se necesita refugio?
 ¿Có mo Dios está proporcionando ese refugio para usted u otros?
 ¿Qué quiere en la vida? Haga una lista.
 Reflexione sobre lo que significaría para usted si las palabras, «Eres todo lo que quiero en
la vida.» fueron ciertas todo el tiempo. Escriba sus reflexiones.
 De gracias a Dios por su fidelidad y su misericordia.

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