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Los modos de adquirir

Sistema de transferencia y transmisión de bienes en el derecho chileno


Por una concepción antigua que viene desde la última época del derecho romano, en muchas
legislaciones, entre ellas la nuestra, para la transferencia del dominio y demás derechos
reales se exige la concurrencia de 2 elementos jurídicos:
Título: hecho a acto jurídico que sirve de antecedente para la adquisición del
derecho.
Modo de adquirir: hecho o acto jurídico que produce efectivamente la
adquisición del derecho.
Con el solo título no se adquiere el dominio de las cosas, sino que de él solamente nace un
derecho personal, el derecho a exigir que posteriormente se transfiera el dominio por el
obligado mediante el correspondiente modo de adquirir.
Este es el denominado sistema “romano”, “del título y modo” o “del efecto personal de los
contratos”.
Este sistema se apone al “consensual” o “del efecto real de los contratos”, en
cuya virtud el solo título es suficiente para producir la transferencia del derecho,
sin la necesidad de recurrir al modo.
**Ninguno de estos sistemas mantiene su pureza en toda circunstancia:
En las legislaciones de efecto real se debe recurrir a la tradición o un acto
semejante cuando el contrato se refiere a obligaciones de género o
alternativas, en que con el solo título no queda individualizada la cosa que se
transfiere.
En las legislaciones de efecto personal hay situaciones en que se llega a configurar
una suerte de efecto real del contrato, sobre todo respecto de la transferencia de bienes
incorporales.
¿Siempre es necesario un título que anteceda al modo?
Alessandri sostiene que siempre se requiere un título que anteceda al modo.
Argumentos:
- Se desprende de varias disposiciones que se conjugan entre sí, principalmente:
Art. 703 CC que dispone que la ocupación, accesión y prescripción son títulos
constitutivos de dominio.
Art. 951 CC, conforme al cual cuando se adquiere por causa de muerte si la
sucesión es intestada el título es la ley y si es testada el título es el testamento.
- Agrega que en la ocupación, accesión y prescripción el título y el modo se
confunden.
Otros (Somarriva) sostienen que la exigencia del título existe solo para la tradición y que
tratándose de los demás modos de adquirir la ley no ha exigido título.
Argumentos:
- De seguirse la tesis contraria, respecto de aquellos modos que se confunden
con el título no tiene sentido exigirlo si se trata de algo que siempre está presente.
- Cuando el art 703 CC menciona a los títulos constitutivos, los está refiriendo no
al dominio, sino a la posesión, es decir, se trata de título para poseer cuando por falta
de requisitos u otras circunstancias no funcionan como modos de adquirir.
- Tratándose de la sucesión por causa de muerte, la sucesión puede ser parte
testada y parte intestada y no se puede adquirir por más de un título.
**Esto también ha sido precisado por la jurisprudencia, señalando que la aplicación
de un modo de adquirir impide que opere otro. Tal como no se puede hacer lo hecho, no
se puede adquirir lo ya adquirido**
- La otra doctrina pasa por alto la ley como modo de adquirir, no señalando
cual sería el título en ese caso.
¿Cuáles son los modos de adquirir el dominio?
Están establecidos en la ley y por el carácter institucional de la materia de propiedad no
puede tenerse como tales sino los que el texto legal señala (art. 19 N°24 inc. 2° CPR).
Conforme al art. 588 CC son:
1.- La ocupación
2.- La accesión
3.- La tradición
4.- La sucesión por causa de muerte
5.- La prescripción adquisitiva
Y debe agregarse:
6.- La ley
Ej.: usufructo legal del marido sobre los bienes de la mujer; usufructo legal
sobre los bienes del hijo no emancipado; la jurisprudencia ha establecido que en
la expropiación la ley constituye título y modo de adquirir.
Dentro de los modos de adquirir hay algunos que tienen un ámbito mayor de aplicación que
otros.
- La tradición permite la adquisición de cualquier derecho real.
- La ocupación y la accesión solo permiten adquirir el dominio.
- La sucesión por causa de muerte solo permite adquirir derechos que sean
transmisibles.
- La prescripción permite adquirir el dominio y otros derechos reales, pero con
algunas limitaciones establecidas en el art. 2512 CC:
*El derecho de herencia y el de censo se adquieren por la prescripción
extraordinaria de 10 años.
*Solo pueden adquirirse las servidumbre continuas y aparentes por
prescripción de 5 años.
Clasificación de los modos de adquirir
1.- Originarios y derivativos
- Originario: aquel que permite adquirir la propiedad independientemente del
derecho de un antecesor. No existe el traspaso de un titular a otro.
**Ocupación, accesión y prescripción (se discute) **
- Derivativo: aquel por el cual se adquiere el dominio que es traspasado de otro
titular que, por tanto, es el antecesor.
**Tradición y sucesión por causa de muerte**
Importancia de la clasificación
Para determinar el alcance y características del derecho del adquirente.
Modo derivativo: el adquirente solo va a adquirir los derechos de su antecesor,
pues nadie puede transferir más derechos de los que tiene.
Modo originario: bastará examinar el acto o hecho que configura el modo y la
cosa sobre que recae.
2.- Según se puedan adquirir con ellos universalidades o bienes determinados
- A título singular: aquellos que permiten adquirir solo bienes específicos.
**Ocupación y accesión**
- A título universal: aquellos que permiten adquirir universalidades.
**Sucesión por causa de muerte**
**Excepcionalmente: la tradición (ej.: cuando un heredero transfiere su
derecho de herencia) y la prescripción (ej.: cuando un heredero aparente
llega a adquirir por prescripción la herencia de que está en posesión)**
3.- Según presuponga o no la muerte del titular del derecho para que el modo opere
- Por acto entre vivos: aquel que opera sin la necesidad del fallecimiento de la
persona de quien deriva el derecho.
**Ocupación, accesión, tradición y prescripción**
- Por causa de muerte: aquel que para operar resulta necesaria la muerte de la
persona de la cual se deriva el derecho.
**Sucesión por causa de muerte**
4.- Según signifique o no una contraprestación pecuniaria para el adquirente
- A título gratuito: aquel en que quien adquiere el derecho no incurre en ningún
sacrificio pecuniario, no tiene que hacer ningún desembolso para que el modo de
adquirir opere.
**Ocupación, accesión, prescripción y sucesión por causa de muerte**
- A título oneroso: aquel en que el adquirente debe desembolsar cierta parte de su
patrimonio para producir la adquisición de la cosa respectiva.
**La tradición puede ser a título gratuito o a título oneroso, según lo sea el título que le sirve
de antecedente**

La ocupación
Concepto
Modo de adquirir el dominio en virtud del cual se adquieren las cosas que no pertenecen a
nadie y cuya adquisición no esté prohibida por el derecho internacional o por las leyes
chilenas, mediante la aprehensión material de ellas, acompañada de la intención de
adquirirlas (ver art. 606 CC).
Requisitos
a.- Que se trate de cosas que carezcan de dueño
b.- Que se trate de un bien corporal mueble
c.- Aprehensión material con ánimo de apropiación
d.- Que la adquisición no esté prohibida por el derecho internacional o las leyes
chilenas
a.- Que se trate de cosas que carezcan de dueño (art. 606 CC)
Es decir, debe tratarse de res nullius y puede tratarse de:
- Cosas que nunca han tenido propietario (animales bravíos, art. 608 CC; los
productos naturales que arroja el mar, art. 624 CC)
- Cosas que han tenido dueño y han dejado de tenerlo (animal doméstico que
recupera su libertad)
- Cosas que han sido abandonadas por su dueño al primer ocupante, llamadas res
derelictae.
b.- Que se trate de un bien corporal mueble
Esto es así, porque los inmuebles que no tienen otro dueño pertenecen al Estado (art. 590
CC).
c.- Aprehensión material con ánimo de apropiación
Son dos los requisitos que deben concurrir en este aspecto:
- Uno físico: la aprehensión material.
- Otro síquico: la intención de adquirir la cosa para sí.
Ambos requisitos deben concurrir copulativamente.
**De ahí que no es posible que quienes carecen de voluntad (dementes e
impúberes) puedan adquirir por este modo**
La aprehensión puede ser:
Material, configurada por un apoderamiento físico de la cosa.
Presunta, lo que ocurrirá en los casos en que ese contacto es inminente (cazador que avanza
hacia la presa herida); en este caso sí deben concurrir suficientes elementos de hecho que
permitan establecer tan inminencia con precisión (arts. 617 y 618 CC).
Relacionando este requisito con el primero, si la aprehensión con ánimo de adquirir la cosa
para sí recae sobre una cosa que tiene dueño, no operará la ocupación como modo de
adquirir el dominio, pero podrá originar la posesión de la cosa para llegar a adquirirla por
prescripción.
**Se suele señalar que por falta del elemento de aprehensión material no es
posible la aplicación de este modo a los bienes incorporales (derechos) que
solo son abstracciones, quedando limitado a las cosas corporales**
**Esta conclusión se vería reforzada por el hecho de que los derechos no pueden
subsistir sin dueño.
En efecto, para que sea ocupable un derecho tendría que ser concebido sin
dueño; será de los que han tenido dueño y han dejado de tenerlo. Esto tendría
que ocurrir por renuncia del titular (equivalente al abandono), pero ocurre que con la
renuncia:
Si es derecho real ha quedado extinguido y con su elasticidad el dominio se
expande a su inicial potencia.
Si es derecho personal también ha quedado extinguido y el deudor liberado.
d.- Que la adquisición no esté prohibida por el derecho internacional o las leyes chilenas
(art. 606 CC)
**Esta advertencia no es exclusiva de esta materia, sino que es un supuesto de toda actuación
jurídica, pero se menciona para tener presente que en ciertos ámbitos en que la ocupación
tiene amplia aplicación (como la caza y la pesca) surgen muchas restricciones legales, las
que se encuentran enunciadas en el art. 622 CC**
- El derecho internacional actual contiene muchas reglas para las actividades de
pesca y caza, las que van en aumento por razones de conservación ambiental.
- El CC incluye normas generales sobre pesca y caza que son especificadas en la
legislación especial, la que también ha aumentado por razones ambientales y
económicas.
Clases de ocupación
- De cosas animadas (arts. 607 a 623 CC)
- Caza
- Pesca
- De cosas inanimadas (arts. 624, 628; 640 a 642)
Se incluyen el descubrimiento del tesoro (arts. 625 a 628 CC) y la captura
bélica (arts. 640 a 642 CC).
- De especies al parecer perdidas (arts. 629 a 634 CC)
- De las especies naufragas (arts. 635 a 639 CC)
Estas disposiciones legales deben complementarse con otros cuerpos legales especiales.
La accesión
Definición
Modo de adquirir por el cual el dueño de una cosa pasa a serlo de lo que ella produce o de lo
que se junta a ella (art. 643 CC).
Parte de la doctrina no acepta la inclusión de la accesión entre los modos de
adquirir:
- Por una parte no se atiende en las accesiones a la voluntad del supuesto
adquirente, voluntad que aparece como fundamental en todos los otros modos de
adquirir.
- Por otra se entiende que las accesiones constituyen generalmente una
manifestación del derecho de dominio en su facultad de goce, lo cual es acertado
en la llamada accesión de frutos.
Clases de accesión
I.- Accesión de frutos
II.- Accesión continua
II.a.- Accesión de inmueble a inmueble
- Aluvión
- Avulsión
- Mutación de álveo o cambio de cauce
- Formación de nueva isla
II.b.- Accesión de mueble a mueble
- Adjunción
- Especificación
- Mezcla
II.c.- Accesión de mueble a inmuebles
- Edificación
- Plantación o siembra
I.- Accesión de frutos
También se denomina "accesión discreta" o "accesión por producción".
En virtud de ella el dueño de una cosa lo es también de lo que ella produce.
**En este caso la construcción teórica de la accesión es innecesaria: lo que
una cosa produce forma un solo todo con ella y no hay más que una
extensión física del objeto del dominio. Entonces, puede encontrarse claro
fundamento para la adquisición en el ejercicio de la facultad de goce**

Los frutos pueden ser naturales o civiles (art. 643 CC)


Naturales: los que da la naturaleza ayudada o no de la industria humana (art.
644 CC).
**Si tenemos presente la distinción entre “frutos” y “productos”, tendríamos que
agregar los requisitos de periodicidad y conservación de la sustancia de la
cosa de que emanan**
En cuanto al estado en que pueden encontrarse el art. 645 CC distingue entre:
- Frutos pendientes: mientras que adhieren todavía a la cosa que los produce.
- Frutos percibidos: los que han sido separados de la cosa productiva.
- Frutos consumidos: los que se han consumido verdaderamente o se han enajenado

**La distinción puede adquirir importancia cuando el propietario celebra


negociaciones con terceros sobre la cosa que los produce**
Civiles: la utilidad equivalente que el dueño obtiene al conceder a un tercero el
uso y goce de una cosa.
**El CC no los define, sino que se limita a dar ejemplos de ellos en el art 647**
En cuanto al estado en que pueden encontrarse el art. 647 inc. 2° CC distingue
entre:
- Frutos pendientes: mientras se deben.
- Frutos percibidos: desde que se cobran, es decir, desde que efectivamente se
pagan.
Dominio de los frutos
Los frutos de una cosa pertenecen a su dueño (arts. 646 y 648 CC).
**Recordar que para concluir esto no es necesario recurrir al concepto de
accesión**
Pero, puede haber situaciones excepcionales en que los frutos no pertenezcan al dueño, ya
por disposición de la ley o por voluntad del propietario (art. 646 CC).
II.- Accesión continua
Es la unión permanente de dos o más cosas originalmente separadas que pasan a formar un
todo indivisible.
La unión puede ser obra de la naturaleza o del hombre.
**Materialmente, la situación es la misma, sea que los objetos unidos
pertenezcan a diferentes propietarios, o sean de un solo dueño, pero es en el
primer caso que adquiere relevancia jurídica, pues precisamente se trata de
decidir a quien ha de pertenecer el todo formado.
Cuando una cosa se une a otra, y por disposición de la ley, el dueño de ésta ha de ser el dueño
de la primera, se dice que ha operado la accesión como modo de adquirir; la primera ha
accedido a la segunda; el dueño de la segunda ha adquirido el dominio de la primera por
accesión.
**Al establecerse este modo de adquirir se ha hecho aplicación del principio de
que "lo accesorio sigue la suerte de lo principal“**
II.a.- Accesión de inmueble a inmueble (arts. 649 a 656 CC)
- Aluvión (arts. 649 a 651 CC)
- Avulsión (art. 652 CC)
- Mutación de álveo o cambio de cauce (arts. 654 y 655 CC)
- Formación de nueva isla (art. 656 CC)
II.b.- Accesión de mueble a mueble (arts. 657 a 667 CC)
- Adjunción (arts. 657 a 661 CC)
- Especificación (art. 662 CC)
- Mezcla (art. 663)
Existen reglas comunes a estas formas de accesión (arts. 664 a 667 CC)
II.c.- Accesión de mueble a inmueble (arts. 668 y 669 CC)
Es denominada también “accesión industrial”
Los preceptos hacen referencia, en esta accesión, a las modalidades de edificación y
plantación o siembra, que están sometidas a las mismas reglas.
Los problemas se plantean y el modo de adquirir opera, cuando se construye,
planta o siempre con materiales o semillas que pertenecen a personas distintas del
dueño del suelo.
Incorporados definitivamente los materiales al suelo o arraigadas las semillas,
todo sin la existencia previa de un convenio, el CC aplica el principio de que lo
accesorio sigue la suerte de lo principal, entendiendo siempre que el suelo es lo
principal, luego el dueño del predio adquiere por accesión los edificado, plantado o
sembrado.
**Para evitar un enriquecimiento injusto se establecen algunas normas para
indemnizar a quien nada adquirirá, dándose diferentes soluciones según las
distintas situaciones que pueden presentarse (arts. 668 y 669 CC)**
La tradición
Concepto
Es un modo de adquirir el dominio de las cosas y consiste en la entrega que el dueño hace
de ellas a otro, habiendo por una parte la facultad e intención de transferir el dominio, y por
otra la capacidad e intención de adquirirlo.
Lo que se dice del dominio se extiende a todos los otros derechos reales.
**No solo permite adquirir el dominio y otros derechos reales, sino también los
derechos personales ya existentes**
**Puede ser utilizada no solo como modo de adquirir el dominio, sino también
como requisito para poseer una cosa, tal como ocurre cuando el tradente no es
el verdadero dueño de la cosa tradida; en tal caso el adquirente no adquiere su
dominio, pero la tradición le sirve para poseerla y llegar a adquirirla por prescripción**
Regulación
- Arts. 670 a 699 CC.
- Disposiciones del Reglamento del Registro Conservatorio de Bienes Raíces
para la tradición de inmuebles.
- Arts. 1901 y ss. CC para la tradición de derechos personales.
- Las disposiciones del Cód. Com. relativas a la tradición de créditos
mercantiles y las relativas a compraventa mercantil.
Características
1.- Permite adquirir el dominio y otros derechos reales
2.- Es una convención
Es un acuerdo de voluntades que produce consecuencias jurídicas. Con ella no
se crean obligaciones (no es contrato), sino que se extinguen las obligaciones contraídas
en el título que le antecede. El tradente en definitiva cumple la obligación (en
definitiva paga).
3.- Es consecuencia de un título
Siempre requiere de un título que le anteceda.
4.- Es un modo de adquirir derivativo
El adquirente deriva su dominio de otro sujeto: el tradente.
Esta característica es fundamental para determinar los derechos que el adquirente
obtiene con ella: “nadie puede transferir más derechos que los que tiene”.
5.- Es un modo de adquirir que puede ser a título gratuito u onerosa
Ello dependerá de la naturaleza del título que le anteceda.
6.- Es un modo de adquirir que puede ser a título singular o a título universal
7.- Es un modo de adquirir por acto entre vivos
8.- Se refiere tanto a cosas corporales como incorporales
Si lo que se transfiere es el dominio, y éste recae sobre cosas corporales muebles o
inmuebles la cosa tradida es un bien corporal mueble o inmueble; pero si lo que
ocurre es que por la tradición se constituye un derecho real distinto del dominio, la
cosa tradida es un bien incorporal, igual cosa ocurre si la tradición recae sobre un
crédito que es un bien incorporal.
Entrega y tradición
La entrega, en términos generales, es el traspaso material de una cosa de manos de una
persona a otra.
El art. 679 CC prescribe que la tradición consiste en la entrega…
Efectivamente el elemento central que da consistencia a la tradición es la entrega del objeto
tradido, pero pueden darse situaciones de entrega material de una cosa sin que se llegue
a configurar tradición.
- Cuando la entrega se hace con intención de transferir el dominio u otro derecho
real queda configurada la tradición.
Esa intención que concurre en la tradición se manifiesta también en el título del
que la tradición es consecuencia (título translaticio de dominio).
- Cuando la entrega se hace sin intención de transferir el dominio se trata de una
simple entrega material.
Ej.: contrato de arrendamiento, contrato de préstamo de uso (títulos de mera
tenencia).
Hay que tener presente que el CC no siempre emplea los términos con la precisión antes
señalada.
- Sinónimos: art. 1824 CC.
- Entrega siendo más preciso tradición: art. 2196 CC.
- Tradición siendo más preciso entrega: art. 2174 CC.
En el art. 1443 CC es parcialmente adecuada.
- Casos en que sí se ajusta: arts. 2212, 2174 inc. 1°, 2197 (aquí se incurre en una
redundancia).
Pago y tradición
Generalmente la tradición constituye un verdadero pago, pues el tradente la efectúa porque
se obligó a ello en un título precedente.
Esto conduce a relacionar las reglas de la tradición y las reglas del pago.
Conforme al art. 1575 CC, si paga quien no es dueño de la cosa pagada, el
pago no es válido.
Conforme a las reglas de tradición, si ésta se hace por quien no es dueño la
tradición es válida, solo que no produce su normal efecto de transferir el
dominio.
Hay quienes entienden que lo correcto está en la regla de la tradición y solo hay una
impropiedad de lenguaje en el art. 1575 CC.
Pero parece claro que cuando el art 1575 CC señala que el pago no es válido, afirma
precisamente que es nulo y ello trae como consecuencia que el acreedor puede pedir la
declaración de nulidad de ese pago y continuar demandando la prestación que se le debe.
Se puede concluir que el acto por el cual el deudor entrega al acreedor una cosa ajena en pago
de la deuda:
Es válido en cuanto tradición, y el acreedor, al entrar en posesión de la cosa,
puede llegar a ganarlo por prescripción.
Es nulo en cuanto pago, pudiendo el acreedor pedir su nulidad, restituir lo
recibido y continuar demandando el pago al deudor.
Requisitos
1.- Concurrencia de dos partes capaces: tradente y adquirente
2.- Consentimiento de ambas partes
3.- Título translaticio de dominio
4.- El título debe ser válido
5.- Entrega de la cosa tradida
1.- Concurrencia de dos partes capaces: tradente y adquirente
Siendo la tradición una convención, requiere de dos partes.
Tradente: La persona que por la tradición transfiere el dominio de la cosa entregada por él o
a su nombre (art. 671 inc. 1° CC).
Debe ser plenamente capaz. El art 670 CC parece discriminar entre tradente y
adquirente en esta materia, ya que en el primero exige facultad para transferir y
en el segundo capacidad para adquirir, con lo que pudiere entenderse que no se le
exige capacidad al primero, pero no es ese el alcance que ha de darse al texto, puesto que
siendo la tradición una convención el tradente debe ser plenamente capaz y si no lo es,
la sanción del acto es la que ordinariamente se establece para los actos de los incapaces
(dependiendo de la clase de incapacidad.
Se precisa que debe tener facultad de transferir el dominio, para dejar claro que
requiere el denominado poder de disposición (legitimación) que importa
idoneidad del sujeto para celebrar el acto de que se trata.
**Si el tradente es un representante legal que entrega un bien del representado,
deberá cumplir las formalidades correspondientes, sin los cuales no tiene poder para
enajenar libremente, y si carece de dicha facultad la sanción se encontrará en los
preceptos que regulan los actos respectivos**
Debe ser dueño de la cosa que se transfiere. Si no es el dueño no transfiere el
dominio, pero si los derechos que tenía sobre la cosa y la tradición sigue siendo
valida (no hay nulidad), pero es ineficaz para transferir el dominio (ver: arts. 682 y 683
CC).
Adquirente: La persona que por la tradición adquiere el dominio de la cosa recibida por él o
a su nombre (art. 671 inc. 1° CC).
Debe ser plenamente capaz por la misma razón indicada para el tradente.
La sanción por falta de capacidad será la ordinaria para la situación.
2.- Consentimiento de ambas partes
Este consentimiento ha de implicar la intención determinada de ambas partes de transferir y
de adquirir, respectivamente, el dominio.
Vicios del consentimiento
Son los comunes, pero el CC ha señalado algunas reglas especiales relativas al error.
Para que el error vicie el consentimiento puede recaer:
1.- En la identidad de la especie que debe entregarse (art. 676 CC).
Acá el error está en la tradición misma (no en el título que le antecede), es
decir, en cumplimiento del contrato fue entregada una cosa creyéndose que era
entregada otra, o fue recibida una cosa creyéndose que era recibida otra.
Para la prueba de que hubo error, el punto de referencia es la descripción contenida
en el título.
2.- En la persona del adquirente (art. 676 CC)
Pero si se yerra solo en el nombre es válida la tradición.
3.- En el título (art. 677 CC)
Sea cuando:
- una sola de las partes supone título translaticio de dominio.
- por las dos partes se suponen títulos translaticios de dominio, pero diferentes.
**Conforme al art. 678 CC si la tradición se hace por medio de mandatarios o representantes
legales, el error de éstos invalida la tradición**
Tradición por representantes
Según es la regla general en el derecho civil (art. 1448 CC) la tradición también se puede
efectuar a través de representantes legales o voluntarios.
Esto el CC lo confirma expresamente para la tradición en los arts. 671, 672, 673,
674, 678 CC.
Tradición en las enajenaciones forzadas
En este caso el deudor propietario estará, generalmente, lejos de consentir la tradición del
objeto que le fuera embargado y subastado al subastador.
Para solucionar esto el art, 671 inc. 3° CC establece que en las ventas forzadas
que se hacen por decreto judicial a petición de un acreedor, en pública
subasta, la persona cuyo dominio se transfiere es el tradente, y el juez su
representante legal.
Así, el consentimiento lo otorga en su nombre el juez.
**Si bien esta norma establece la representación legal para la tradición, no lo
hace directamente para el título (la venta), pero el CPC lo dispone
claramente, al menos al referirse a la subasta de inmuebles (arts. 495 y 497
CPC)**
Se ha planteado que esta norma no soluciona definitivamente el problema de fondo, porque
el juez como representante legal del deudor no puede desatenderse de una manifiesta negativa
del representado.
El problema se solucionado recurriendo a:
- La teoría de la representación como modalidad del acto jurídico, la que entiende
que es la voluntad del representante la que contrata.
- El derecho de prenda general de los acreedores, conforme al cual el deudor, al
contraer una obligación, sabe que ha de responder de ella con todos sus bienes
actuales y futuros. Entonces al contraer la obligación estaría consintiendo una
eventual enajenación forzada posterior para pagar su deuda.
Sin embargo, esta explicación sirve para las obligaciones contractuales y no
para aquellas ejecuciones que resultan de otro tipo de obligaciones (Ej.:
responsabilidad extracontractual).
3.- Título translaticio de dominio
Para que valga la tradición se requiere de un título translaticio de dominio, como el de venta,
permuta, donación, etc. (art. 675 CC).
Desde el punto de vista del modo, la tradición requiere de un título translaticio precedente.
Desde el punto de vista del título translaticio de dominio, éste requiere, para cumplir lo
pactado, que le siga la tradición.

Esta relación conduce a los autores nacionales a considerar al título como la


causa de la tradición.
Pero la doctrina extranjera discute arduamente el carácter causal o abstracto de
la tradición.
La expresión título se utiliza usualmente en dos acepciones diversas.
Una estrictamente jurídica: acto jurídico que sirve de antecedente más o menos
próximo a la adquisición del dominio o la causa inmediata de un derecho.
Otra más bien material: documento que contiene o da constancia de alguno de los
actos jurídicos denominados título en la otra acepción.
El CC emplea la expresión en ambos sentidos y lo llega a hacer en un mismo precepto, como
ocurre en el art. 1901 CC.
En la tradición está tomada en la acepción estrictamente jurídica.
El conflicto con la noción de contrato real
Los contratos reales se perfeccionan por la entrega de la cosa, y en algunos de ellos, como el
mutuo, la entrega es tradición porque transfiere el dominio de lo entregado.
Atendido que antes de la entrega no hay contrato ¿cuál es el título de esa tradición?
Las dos posibles respuestas son:
1.- Se trata de una tradición que no requiere de título constituyendo una excepción
al sistema seguido por el CC.
2.- El título y el modo se confunden, nacen simultáneamente.
4.- El título debe ser válido
Se requiere además que el título sea válido respecto de la persona a quien se confiere (art.
675 inc. 2° CC).
En términos teóricos, la tradición que se efectúa sin título o con título que
resulta ser nulo puede ser calificada de nula o válida.
Concluir que es nula equivale a concebirla como un acto causado y, por lo
mismo, hace depender su suerte de la suerte que corra el título. Esto sin perjuicio
de que puede ser nula por defectos propios de su estructura.
Concluir que es válida equivale a concebirla como un acto abstracto,
independiente del título que le antecede.
En el derecho chileno el texto básico es el art. 675 y su examen literal conduce a reconocer
que se consagra la tradición como un acto causado, en cuanto si no se encuentra precedida
de un título válido, la tradición es nula.
Pero el alcance de esa nulidad no queda perfectamente definido, el art. 675 CC
no deja claro:
- Si esa nulidad la priva de todo efecto
o
- Si únicamente no transfiere el dominio, pero confiere la posesión
Se sostiene que la segunda opción parece la correcta porque:
a.- Resulta más adecuado con el sistema general implantado por el CC.
b.- El art. 704 CC tiene como título injusto de la posesión al nulo y al aparente, de
manera que existe posesión, si bien irregular, pudiendo llegar a adquirirse el dominio
por prescripción extraordinaria.
c.- El CC considera título para poseer a la ocupación, lo que equivale a admitir la
posesión sin título, porque el que entra a poseer por ocupación no da justificación de su
posesión.
Conclusión:
En Chile, la tradición es un acto causado, requiere de título justificante y su validez
depende de la validez de éste, pero, en todo caso, con independencia de él, deja al
adquirente en posesión de la cosa tradida.
5.- Entrega de la cosa tradida
Más que un requisito, la entrega es en realidad el elemento sustantivo de la tradición,
alrededor del cual han de cumplirse las demás exigencias señaladas.
Efectos
- Su efecto normal es transferir el dominio del tradente al adquirente (arts. 670, 671, 1575
CC).
Siendo un modo de adquirir derivativo:
- Esto se producirá siempre que el tradente haya sido dueño de la cosa que
transfiere.
- Si el tradente tenía el objeto sometido a gravámenes reales, el adquirente lo
adquirirá con las mismas cargas.
- Además, produce el efecto de dejar al adquirente en posesión de la cosa.
Esto es así porque en la tradición ambas partes tienen la intención de que el
adquirente quede como dueño y como con la tradición quedará generalmente a la
cosa a su disposición, entonces reunirá los elementos de la posesión exigidos en el
art. 700 CC.
**Se dice generalmente, porque mediante las tradiciones simbólicas pudiera
darse el caso de que alguien efectúe a otro la tradición de una cosa que, además de
no pertenecerle, nunca la haya tenido a su disposición. En este caso al adquirente le
faltará el elemento tenencia**
Este efecto tiene lugar cuando el tradente:
1.- Es dueño
2.- Es solo poseedor
3.- Es mero tenedor
**El art. 730 CC expresamente resuelve que el que recibe de un mero tenedor queda en
posesión, con mayor razón ocurre si recibe de un poseedor**
Conforme al art. 683 la tradición da al adquirente, en los casos y del modo que las leyes
señalan, el derecho de ganar por prescripción el dominio de que el tradente carecía,
aunque el tradente no haya tenido ese derecho.
Esta norma, al disponer que da derecho a ganar por prescripción, pudiera inducir a
pensar que la tradición sería título para poseer. Sin embargo, en materia posesoria se
menciona como título a otros modos de adquirir el dominio, pero no a la tradición, ya que la
tradición es consecuencia de un título.
**La tradición requiere de un título y la posesión también requiere de un título que es
el mismo de la tradición**
- Si el tradente carecía del dominio, pero tenía sobre la cosa otro u otros derechos transferibles
los transfiere con la tradición (el art. 682 CC habla de derechos transmisibles, debiendo
decir transferibles).
El adquirente queda como:
- Poseedor de la cosa
- Dueño y poseedor de lo derechos que el tradente tenía
- Si el tradente, que no era dueño de la cosa que entrega, posteriormente adquiere el dominio
de ella, la transferencia al adquirente se entiende que opera desde el instante en que se
hizo la tradición (art. 682 CC en concordancia con el art. 1819 CC).
**Esta norma es de conveniencia práctica, pero no muy satisfactorio en la
estricta lógica, porque se produce teóricamente una superposición de
dominios**
Época para exigir la tradición
Para determinarlo hay que recurrir al título respectivo.
Si en el título:
- Se somete la entrega a una condición suspensiva, habrá que esperar que se
cumpla la condición.
- Se somete la entrega a un plazo suspensivo, habrá que esperar a que el plazo se
cumpla.
- Nada se dice, será exigible desde que se perfeccione el título.
Conforme al art. 681 CC, se puede pedir la tradición de todo aquello que se deba, desde que
no haya plazo pendiente para su pago; salvo que intervenga decreto judicial en contrario.
Puede ocurrir que, exigible ya la tradición, se le notifique a quien deba efectuarla
una resolución judicial por la que se ordene la retención, embargo o prohibición de
celebrar actos y contratos respecto de lo debido, antes que entregue la cosa al acreedor, caso
en el cual debe abstenerse de hacer la tradición.
**Si igualmente la hace, se seguirán los efectos indicados en los arts. 1578 CC
(nulidad del pago) y 1464 CC (objeto ilícito)**
Tradición sujeta a modalidades
Más que la tradición, son los efectos de la tradición los que pueden someterse a modalidades,
según lo dispone el art. 680 CC.
Esta modificación de los efectos se establece en el título respectivo, de modo
que habrá que remitirse a él para conocer si hay o no modalidades a que queden
sometidos.
Casos:
a.- Tradición sujeta a condición suspensiva
b.- Tradición sujeta a condición resolutoria
c.- Tradición sujeta a plazo
a.- Tradición sujeta a condición suspensiva
Ej.: A dona a B un automóvil, que se lo entrega de inmediato, para que B lo haga
efectivamente suyo cuando obtenga el título de abogado.
Se trata de una tradición anticipada, de modo que si la condición suspensiva se cumple, en
ese instante y de pleno derecho se traslada el dominio.
Este pacto constituye una aplicación de la denominada cláusula de reserva de dominio:
pacto por el que el tradente mantiene el dominio de la cosa tradida hasta el cumplimiento de
la condición o un plazo.
La regla general es que esta cláusula puede ser pactada válidamente, y origina el efecto
correspondiente, en cualquier título translaticio y bajo cualquier condición o término.
Pero un caso especial resulta controvertido:
El art. 680 inc. 2° CC lo permite expresamente, con su efecto normal de mantener el
dominio en el tradente, cuando se pacta bajo la condición de que se pague el
precio. Por los términos de la disposición, se concluye que está referida a la
compraventa.
Pero el art. 1874 CC, regulando precisamente la compraventa, dispone que la
cláusula de reserva de dominio hasta la paga del precio no producirá otro efecto que
poder demandar el cumplimiento o la resolución del contrato, es decir, no le otorga ningún
efecto especial y, no obstante el pacto, el adquirente recibiría el dominio desde la entrega
misma.
Se ha sostenido que, en la pugna, debe prevalecer el art. 1874 CC por ser de carácter
especial, aplicable precisamente a la compraventa.
Sin embargo, este argumento no es de valor decisivo, por cuanto el art. 680
CC, no obstante su ubicación, está dado para la compraventa.
Se sostiene que, con todo, parece adecuado solucionar el conflicto a favor del art. 1874 CC,
por las dificultades que puede acarrear la reserva de dominio que podría establecerse
con frecuencia en las compraventas con pago a plazo, con la consiguiente confusión de
propietarios, especialmente respecto de terceros.
Además, reservándose el dominio, el vendedor podría en el intertanto gravar
con derechos reales las cosa, los que afectarían al comprador aun luego de
pagar todo el precio.
b.- Tradición sujeta a condición resolutoria
Ej.: A dona a B un automóvil y se lo entrega, estableciéndose en el acto de
donación que lo restituirá cuando obtenga el título de abogado.
Se ha planteado en esta situación la controversia de si el art. 680 CC se aplica también cuando
opera la condición resolutoria tácita del art. 1489.
La dificultad no merece ser planteada, puesto que es evidente que, si al
incumplirse una obligación de las contenidas en el título, se recurre al art. 1489 CC
y se obtiene por sentencia judicial la resolución del contrato, por aplicación de los
principios de la resolución quedará sin efecto la tradición y debe restituirse lo que se
recibió en virtud del título resuelto.
**Prescindiéndose del art. 680 CC, al resultado de la restitución se llega por los
efectos de la resolución**
c.- Tradición sujeta a plazo
Aún cuando no lo precisa el art. 680 CC, la tradición también puede someterse
a un plazo.
Plazo suspensivo (poco común), no se trata de que la obligación de efectuar la
tradición se postergue para el futuro, sino que se conviene que la tradición que ahora
se efectúa, empezará a producir sus efectos desde que llegue un cierto día.
También se trata de una tradición anticipada, por lo tano vale lo dicho para la
cláusula de reserva de dominio.
Plazo extintivo, tendrá lugar si se pacta que llegado cierto día se extinguirá el
dominio para el adquirente.
Acá, como en el caso de la condición resolutoria, puede configurarse un usufructo
o un fideicomiso.

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