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DIRECCIÓN GENERAL DE POLICIA

JUDICIAL

DETERMINACION DE RESIDUOS DE
DISPAROS DE ARMAS DE FUEGO

MANUAL DE PROCEDIMIENTOS DE LA SECCION

QUÍMICA LEGAL DE LA DIRECCIÓN GENERAL

DE LA

POLICIA JUDICIAL.

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DETERMINACION DE RESIDUOS DE DISPAROS DE ARMAS DE FUEGO

La prueba clásica del guantelete de parafina desarrollada para determinar si


una persona ha sido autora de uno o más disparos de arma de fuego, a través
de la detección de sustancias oxidantes (como los nitritos y nitratos presentes
en las pólvoras) mediante el reactivo de la Difenilamina Sulfúrica, es quizás la
prueba más cuestionada de la Química Forense, por su alto grado de
equívocos. Tanto es así que a nivel internacional hace ya varios años que se
halla totalmente desechada.
Como alternativa a esta técnica las diferentes bibliografías especializadas citan
la posibilidad de las determinaciones de PLOMO del proyectil, que siempre se
asienta en la mano del disparador y de BARIO y ANTIMONIO del fulminante.
Cuando se va ha a llevar a cabo un estudio de deflagración de disparos de
arma de fuego, necesitamos responder a un cuestionario.

➢ Determinar si en las manos de una persona existen restos de deflagración


de la pólvora, a fin de establecer si ha disparado un arma de fuego.

➢ Determinar la presencia de dichos residuos en las prendas de vestir de


quien ha disparado un arma de fuego.

➢ Establecer la existencia de restos de deflagración en el contorno del orificio


de entrada de un proyectil, a los fines de determinar si el arma se hallaba
apoyada sobre el cuerpo de la víctima.

➢ Establecer la “distancia de disparo” sobre prendas de vestir , como


investigación complementaria de las pruebas de carácter experimental
realizadas en un estudio previo, con el arma incriminada.

➢ Determinar si el arma ha sido disparada.

Al dispararse un proyectil se forma una mezcla de materiales parcialmente


fundidos y vaporizados, del detonador y de la bala. Este material integra el
residuo que se deposita en las manos de quien ha accionado un arma de fuego:
plomo metálico, nitrato de bario, óxido de plomo, aluminato de bario,
antimonio metálico, sulfuro de plomo, cloruro de potasio, estaño metálico,
silicatos de calcio y de bario, oxisulfato de plomo, trióxido de antimonio y meta-
antimoniato de bario. Además la deflagración de la pólvora produce reacciones
que originan sustancias gaseosas o sólidas, que constituyen el sarro que se
forma en el cañón del arma, con una importante proporción de iones nitrato
(no degradado) y nitritos (derivado de reducción inmediata).
Al producirse el disparo la bala se proyecta a través del ánima del arma a la vez
que los productos originados en la explosión de la pólvora (gases y partículas
no quemadas) son despedidos a velocidad hacia delante y hacia atrás
mezclados con los compuestos resultantes de la descomposición del cebo o
detonante, al ser percutado. Este fenómeno permite el análisis químico de
objetos que se hallan en el curso de los componentes fijos de la pólvora y del
detonador, al ser proyectados hacia el frente y hacia atrás.
Hacia el frente, permite determinar la distancia en que fuera disparada un
arma y, hacia atrás, determinar si una persona ha hecho uso de la misma.
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En general los residuos o productos originados por la deflagración de la pólvora
están constituidos por fracciones no quemadas y componentes inorgánicos,
según el tipo de pólvora y del detonador.
El detonador, sensible a la percusión e iniciador del proceso explosivo, contiene
combinaciones de antimonio, bario y plomo.

Elementos constantes del cono posterior de la deflagración:

a) Procedentes de la deflagración de la carga de pólvora del cartucho: nitratos


de potasio, nitritos de Potasio y Sodio y derivados nitrados.
b) Procedentes del fulminante del cartucho: Elementos de bario, antimonio.
c) Procedentes del proyectil o bala: Elementos de plomo del proyectil sin
camisa, elementos de cobre o acero, en proyectiles encamisados con esos
materiales.

Elementos constantes del cono anterior:

a) Proyectil o bala: componente del cartucho que sale disparado a gran


velocidad, impulsado por la fuerza de los gases originados por la
deflagración. Los movimientos de traslación y rotación en el espacio. Así
como sus efectos, dependen de las características del arma, carga y clase de
pólvora, calibre y forma del proyectil.
b) Humo y gases: provienen de la deflagración, específicamente de los granos
de pólvora que logran su combustión completa.
c) Fogonazo o llama: se puede manifestar hasta de 30 cm de longitud
aproximadamente.
d) Procedentes de la deflagración de la pólvora: nitrato de potasio, nitritos de
sodio y potasio y derivados nitrados.
e) Provenientes del fulminante: bario y antimonio.
f) Provenientes del proyectil: plomo, cobre y acero, cuando el proyectil está
encamisado con ese material.

La parte superior de la mano, en especial la correspondiente a los dedos pulgar


e índice, así como el sector comprendido entre ambos dedos, aparecen mas
densamente cubiertos por los residuos proyectados por el disparo.

La cantidad depositada depende del tipo de arma, detonador, pólvora, número


de disparos, tiempo transcurrido entre el disparo y la obtención de la
muestra.
El residuo sobre la mano de quien ha disparado un arma de fuego consiste en
pequeñas esferas de forma irregular, que no se adhieren a la epidermis y se
desplazan con facilidad con lo que pueden perderse, por lo que la obtención de
una muestra después de varias horas puede conducir a resultados erróneos.
Además los distintos actos que se ejecutan después del disparo (manos en
bolsillos, uso de pañuelo, lavado etc.) inciden en forma negativa, como así
también circunstancias inusuales como viento y lluvia al momento del disparo.
Una respuesta positiva en manos, indica que el disparo ha sido reciente,
mientras que el hallazgo de residuos de deflagración en mangas de camisa o
saco, señala que se ha accionado un arma, pero no se puede hacer
conclusiones sobre el tiempo del disparo.

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En nuestro Laboratorio se a llevado a cabo el desarrollo sistematizado de las
técnicas descriptas, intentando hacer lo más sencilla posible la recolección de
las muestras, que generalmente lo realiza en el interior provincial, personal
policial no especializado y chequeando toda posibilidad de interferencia a fin de
dar a la prueba el valor de certeza deseado. Se han modificado algunos de los
pasos descriptos en las técnicas originales publicadas por otros autores,
aumentando considerablemente la sensibilidad de la prueba , disminuyendo la
probabilidad de falsos positivos y simplificando al máximo la tarea operativa.
La toma de muestras se realiza con cinta adhesiva transparente base celofán
de 2,5 cm aproximadamente de ancho y que se adhiere a papel de filtro,
utilizando una sola cinta por cada mano, a los fines de concentrar al máximo el
material depositados en las manos.
Los eventuales residuos se aíslan presionando con una única cinta los sectores
de cada mano, supuestamente afectados por la proyección de elementos del
disparo, es decir en las mismas zonas que involucra el guantelete de parafina,
no afectando las palmas de las manos ni las yemas de los dedos, para evitar
falsos positivos ante eventuales contactos con terceras personas con el arma
luego de producido el disparo.
Dichas cintas se sumergen en ácido clorhídrico durante 1 minuto, se escurren
o secan en papel de filtro y se vuelven a sumergir en una solución buffer de
bitartrato durante otro minuto, a posteriori se vuelve a secar o escurrir y se lo
deposita sobre plaqueta de vidrio la cual previamente se le había colocado en
forma lineal Rodizonato de sodio, de allí se lo lleva al microscopio óptico y se
determina la presencia de PLOMO ( precipitados de color violeta –fucsia o rojo-
fucsia) provenientes del proyectil y fulminante y BARIO (precipitados pardos-
rojizos) del fulminante.
Nuevamente esa misma cinta es retirada del soporte de vidrio y nuevamente
introducida en ácido clorhídrico durante 1 minuto, se escurre y se introduce en
buffer durante otro minuto , se escurre y se deposita sobre su soporte de vidrio
al cual previamente le habíamos colocado una o dos gotas del reactivo
fosfomolíbdico en forma lineal y de allí se observa nuevamente al microscopio.
La aparición de máculas puntuales de color azul que rodean a un núcleo
oscura revela la presencia de ANTIMONIO, proveniente del fulminante.

Operaciones de sensibilidad y especificidad de los resultados

➢ Se trabajo por un lado con material proveniente de fulminantes


detonados, sin carga de pólvora y sin proyectil y los ensayos evidenciaron
únicamente la presencia de BARIO Y ANTIMONIO.
➢ Se ejecutaron disparos con cartuchos provistos con proyectiles de goma
, obteniéndose reacción positiva para BARIO y ANTIMONIO.
➢ Se ejecutaron disparos con cartuchos provistos con proyectiles de
plomo , obteniéndose reacción positiva para PLOMO, BARIO y
ANTIMONIO al chequear los residuos depositados en las manos de los
ejecutores.
➢ Se realizaron pruebas con disparos con pistolas, revólveres y escopetas
de diferentes calibres, obteniéndose resultados positivos en todos los
casos para los tres metales. La toma de muestras fue en todos los casos
transcurridos un breve plazo de tiempo.

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➢ Se chequeó la acción de los reactivos frente a otros metales: zinc,
aluminio, magnesio, sodio, potasio, estaño, cobre, cobalto, arsénico,
plata, obteniéndose únicamente resultados de reacción positiva del
rodizonato frente al zinc, resultando todos los otros negativos. El zinc
reacciona con precipitado del mismo color que para plomo, pero su
interferencia se soluciona si solo se informan resultados positivos
cuando se hallan los tres metales.
➢ Se chequeó la probable interferencia en fumadores, con resultados
negativos .
➢ Se chequearon manos que han tomado contacto con nafta con plomo,
con resultados negativos .
➢ Se chequearon manos que tuvieron contacto con lavandina, con
resultados negativos .
➢ Se chequearon manos lavadas con jabón blanco y de tocador, con
resultados negativos .
➢ Se chequeó tierra, con resultados negativos .
➢ Se chequearon manos de diferentes personas que no efectuaron disparos
de arma de fuego, con resultados negativos .

La técnica original propone la toma de las muestras, pasando por las manos
diferentes trocitos de tela embebidas en solución de ácido clorhídrico diluido y
practicar la reacción sobre la tela y observar a simple vista, el cambio de
coloración.
La modificación que aquí se propone , facilita la tarea de la toma de muestras,
cuando es realizada en el interior provincial, no requiriendo preparación
especial del personal y por otro lado la reacción positiva al microscopio
aumenta la sensibilidad de 40-100 veces , permitiendo ver micro partículas que
no se verían a simple vista.

Todos los métodos, aún los mas avanzados: Espectrofotometría de Absorción


Atómica, Activación Neutrónica, Difracción de Rayos X, Microscopía
Electrónica de Barrido (SEM) asociada a Dispersión de Energía de Rayos X
(EDX), se basan en el análisis de partículas que contienen elementos del
detonador, ya que las pólvoras no poseen componentes específicos o
exclusivos.
Estas metodologías requieren instrumental muy costoso y no están a nuestro
alcance en la actualidad. es por ello que se ha implementado una técnica
microquímica colorimétrica basada en trabajos de Harrison y Gilroy, que utiliza
Rodizonato de sodio para el análisis de partículas de Plomo y Bario y Acido
Fosfomolíbdico para el análisis de partículas de Antimonio.
Esta técnica es de reconocida sensibilidad:
Límite de detección de bario: 0,25 microgramos (0,00000025 gramos).
Límite de detección de plomo: 0,1 microgramos (0,0000001 gramos).
Límite de detección de antimonio: 0,05 microgramos (0,00000005 gramos).

INTERPRETACION DE RESULTADOS EN MANOS.

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➢ El ensayo se considera positivo cuando se detectan los tres metales:
plomo, bario y antimonio. Ello es indicativo de la ejecución de uno o más
disparos de arma de fuego, resultando difícil atribuir su presencia a
factores ambientales u ocupacionales.

➢ La detección de dos de los metales: plomo y bario o plomo y antimonio,


hace presumir, aunque con menor grado de certeza, que se han
efectuado uno o más disparos de arma de fuego.

➢ La detección de uno solo de los metales debe ser interpretada con sumo
cuidado.

Deberá descartarse su origen ocupacional.


Los resultados falsos positivos y falsos negativos son muy bajos y es escasa la
probabilidad de contaminación externa.

La no detección de los residuos no descarta la ejecución de uno o mas


disparos, por cuanto:
a) Puede haberse disparado el arma usando guantes.
b) El arma utilizada puede proyectar escasa cantidad de residuos hacia el
operador, o su posición al momento del disparo no deja residuos sobre la
mano.
c) Higiene personal.
d) Eliminación intencional de residuos por lavado, roce con la ropa, etc.
e) Ciertas condiciones climáticas, tales como fuerte viento o lluvia al momento
de efectuar el disparo.
f) Toma previa de huellas dactilares.

Los resultados falsos positivos y falsos negativos son bajos y es escasa la


probabilidad de contaminación externa.

Sensibilidad de esta metodología:


Límite de detección de Bario: 0,25 microgramos (0,00000025 g).
Límite de detección de Plomo: 0,1 ug.
Límite de detección del Antimonio: 0,05 ug.

INTERPRETACION DE LOS RESULTADOS EN PRENDAS:

➢ El ensayo se considera positivo, cuando se detectan los tres metales:


Plomo, Bario y Antimonio, tanto en zonas periorificiales, como en
puños.

➢ La detección de dos de los metales: plomo y bario o plomo y antimonio,


hace presumir, aunque con menor grado de certeza, la presencia de
residuos de disparos de arma de fuego.

➢ La no detección de los residuos, no descarta que en un primer momento


hayan existido Plomo, Bario y Antimonio en las prendas, pudiendo
deberse tal situación a las siguientes razones:
a. Eliminación intencional de residuos por lavado, roce con la misma ropa,
movimientos violentos, etc.
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b. Entre las variables dependientes tenemos el tipo de arma, sus
condiciones mecánicas, el calibre y los componente del cartucho; todos
estos factores inciden en los patrones de dispersión y en la fuga de gases,
que pueden ser mayores o menores.
c. Entre las variables independientes, aparecen la forma de empuñar el
arma, la dirección y velocidad del viento y la existencia de otros factores
climáticos, accesorios u objetos existentes entre las prendas de vestir y el
arma, los cañones recortados o cartuchos recargados, el estado de
conservación de la pólvora, los componentes de la tela ( por ejemplo el
poliéster, el nylon, etc. ofrecen una superficie poco adherente).

Los resultados falsos positivos son bajos y es escasa la probabilidad de


contaminación externa, provenientes de factores ambientales u ocupacionales.
Se debe recordar que las partículas de Pb, Ba y Sb son factibles de ser
removidas de las distintas prendas de vestir debido a que las mismas solo se
depositan sobre la superficie, no adhiriéndose firmemente a ellas.

MATERIALES

➢ Cinta Adhesiva transparente base celofán, climatizada ( marca Scoth de


2,5 cm de ancho, a los fines de acotar el campo visual en el microscopio).
➢ Microscopio óptico común.
➢ Balanza analítica.
➢ Pinzas de material plástico.
➢ Placas de vidrio ( el ideal es el utilizado para el levantamiento de rastros
de 10 cm x 5 cm aprox.)
➢ Recipientes plásticos o cubetas (tres, una para el ClH al 5%, otra para el
buffer y otra para el ClH 6 N) adecuados para la sumergimiento de las
cintas.
➢ Peachímetro.
➢ Acido clorhídrico al 5% p/v en solución acuosa ( se forma una alícuota
de 13,9 ml de ClH al 36% y enrasar a 1000 ml).
➢ Acido clorhídrico 6 N (440 ml llevar a 1000 ml).

Rodizonato de sodio en solución acuosa al 0,2 % de preparación reciente, no


más de dos horas, (proteger de la luz) El color final de la solución es pardo
naranja.
Solución buffer pH 3 de bitartrato de sodio, ácido tartárico y 100 ml agua
destilada. Conservar en heladera, de lo contrario se contamina con hongos que
alteran el pH.
Solución acuosa de ácido fosfomolíbdico al 5%.

PROCESAMIENTO DE LAS CINTAS PARA DETECTAR PLOMO Y BARIO

1. Sumergir una de las cintas (se procesa una a la vez) en la solución de


clorhídrico diluido en el recipientes plásticos adecuados para el
sumergimiento de las cintas, durante un minuto, retirar con pinza,
separarla del papel de filtro y escurrirla por agitación.
2. Sumergir en el buffer durante 1 minuto.
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3. Colocar reactivo de Rodizonato con pipeta o frasco gotero sobre la placa
de vidrio, efectuando un depósito lineal a lo largo de la placa de vidrio (
cantidad suficiente para impregnar la totalidad de la cinta cuando se
deposite sobre el vidrio sin que desborde, a los fines de no dificultar la
observación microscópica). Retirar la cinta del buffer, escurrir y aplicar
sobre el vidrio que contiene el reactivo con la parte engomada hacia
abajo, facilitando la impregnación de la superficie por suave presionado
con una varilla de vidrio.
4. Observar al microscopio con objetivo de 10x.

La aparición de precipitados de color violeta –fucsia o rojo fucsia, revela la


presencia de PLOMO proveniente del proyectil.
La aparición de precipitados color pardo rojizo o naranja revela la presencia de
BARIO, procedente del fulminante.

PROCESAMIENTO DE LA CINTA PARA DETECTAR ANTIMONIO

1. Retirar de la plaqueta de vidrio la cinta sobre la que se practico la


reacción anterior y en otra cubeta o recipiente plástico, sumergir con
solución de ClH 6 N durante 1 minuto.
2. Depositar sobre la placa de vidrio una o dos gotas del reactivo
fosfomolíbdico en forma de línea y aplicar la cinta sobre el mismo con el
lado engomado hacia el vidrio. Y observar al microscopio con objetivo de
4x y 10x.

La aparición de máculas puntuales de color azul, que rodean a un núcleo


oscuro revela la presencia de ANTIMONIO, en principio proveniente del
fulminante aunque existen proyectiles que también lo presentan en su
composición junto al plomo. En muchas ocasiones se observa
desprendimiento de burbujas en la periferia de la partícula que esta
generando la mácula azul.
La cantidad de reactivo fosfomolíbdico debe ser suficiente para impregnar la
totalidad de la superficie de la cinta con una fina película pero sin excesos,
puesto que las máculas azules pierden rápidamente el color por disolución
en el medio de la reacción.

AREA ANALÍTICA DE LA SECCION QUÍMICA LEGAL DE LA DIRECCIÓN


GENERAL DE LA POLICIA JUDICIAL DE CORDOBA.

Orlando Alberto de la Rua


Químico Industrial - Ingeniero Químico
Especialista en Higiene y Seguridad Laboral

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