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ESTUDIOS EN LESIONES POR DISPAROS POR PROYECTIL

DE ARMA DE FUEGO Y OTRAS LESIONES

1.- En que consiste la prueba de la absorción atómica, prueba de Walker, Prueba de


Harrison y la Prueba de Parafina.

“La determinación de residuos del disparo, consiste en el análisis de los compuestos


químicos que podemos encontrar en los elementos que integran el disparo, procedentes
del proyectil, como de la pólvora y el fulminante.

Todos estos residuos podrán ser localizados en las prendas de vestir, heridas, trayectos y
manos de la víctima la víctima, por lucha y/o defensa en rangos de corta distancia, o por
el empleo de armas de fuego”.

DESARROLLO

Las heridas causadas por las armas de fuego son una de los estudios más normales y
necesarios que se llevan a cabo en la medicina forense, es necesario analizar la mayoría
de las pruebas que se utilizan para determinar el tipo de daño que las mismas han
causado al individuo.

PRUEBA DE LA ABSORCIÓN ATÓMICA

PRUEBA DE ANÁLISIS DE ACTIVACIÓN NEUTRÓNICA Y ESPECTROSCOPIA DE


ABSORCIÓN ATÓMICA.

El análisis de activación neutrónica, es una de las más sensibles, los residuos obtenidos
se activan en un reactor nuclear, cuyo objetivo es identificar la presencia de: antimonio,
bario y plomo.

La espectroscopía de absorción atómica (ASS) busca la detección de: bario, cobre y


antimonio.

PRUEBA DE WALKER

PRUEBA DE HARRISON

¿EN QUÉ CONSISTE LA PRUEBA HARRISON?


La prueba de Harrison adquirió bastante popularidad, por su procedimiento, básicamente
consiste en recolectar los residuos dejados por las balas con un aplicador de algodón
impregnado de ácido clorhídrico 0.1 moral, el cual permite detectar la presencia de
antimonio, bario y plomo, mismos que se detectan a través de reactivos.

PRUEBA DE PARAFINA

¿EN QUÉ CONSISTE LA PRUEBA DE LA PARAFINA?

Esta prueba tiene por objetivo detectar la presencia de nitratos y nitritos en la mano de la
persona que disparó un arma de fuego, estos materiales son los que se producen
normalmente a partir de la combustión causada por un disparo con un arma de fuego.

El objetivo consiste en realizar un “guante” de parafina de la mano de quien disparó el


arma de fuego, una vez hecho esto, los nitritos y nitratos quedan adheridos en la parafina
y al aplicársele una solución de difenilamina, desarrolla un color rojo, dando como
positivo.

El principal problema de la prueba de parafina es que precisamente los nitratos y nitritos


se encuentran también en las manos de un fumador por la combustión generada por el
tabaco, en fertilizantes, productos farmacéuticos, en plantas leguminosas y otras muchas
sustancias, por lo que a partir del Primer Seminario Interpol de Aspectos Científicos del
Trabajo Policiaco celebrado en el año de 1964 donde participaron más de 21 paises, se
concluyó que esta prueba debía desecharse.

CUÁLES SON LOS PROBLEMAS QUE ENFRENTA UN MÉDICO LEGISTA AL


ANALIZAR UNA HERIDA CAUSADA POR UN ARMA DE FUEGO?

Las heridas causadas por el uso de armas de fuego son un gran problema al que se
enfrenta el médico legista, pues en muchas ocasiones debe consultar ciertos patrones
con otros expertos como en balística, es por ello, que los médico legistas deben de
limitarse a su campo de estudio a fin de que pueda servir de enlace entre el perito en
balística y el juzgador.
Sin embargo, el principal problema para un médico legista consiste en DILUCIDAR CUÁL
ES EL ORIFICIO DE ENTRADA Y CUÁL EL DE SALIDA. Sin embargo, es importante
mencionar que el orificio de entrada depende de a) el tipo de proyectil, b) la distancia a
que se hizo el disparo, c) de la parte del cuerpo lesionado y d) de la trayectoria.

A continuación te anexo un cuadro detallado de las características de los orificios de


entrada y salida de una bala:

DISTANCIA

MEDIA

ORIFICIO DE ENTRADA ORIFICIO DE SALIDA

Forma Redonda u oval Irregular

Anillo de contusión Presente Ausente

Desgarros Hacia adentro Hacia afuera

Tatuaje ++++ Ausente

Golpe de mina ++ Ausente

Tejidos

Rojo cereza ++ Ausente

Tejidos y pelos quemados ++ No

Granos de pólvora en piel ++++ No

Colágena homogeneizada ++++ —


PRUEBAS DE DETECCIÓN DE GRANOS DE PÓLVORA.

Para llevar a cabo esta prueba con éxito, es necesario que la ropa perforada por el o los
proyectiles de arma de fuego, el arma y de ser posible las balas encontradas, se envíen a
laboratorios.

El arma de fuego se estudia cuidadosamente, se toman las medidas de la misma y se


hacen pruebas con ella a diferentes distancias sobre objetivos para observar los daños y
tatuajes de pólvora a diferentes distancias tratando de encontrar similitudes con los de la
escena.

Cuando no puede rescatarse el arma asesina, la ropa de la víctima debe quitarse del
cuerpo, sin usar tijeras ni instrumentos cortantes, para evitar que los residuos de pólvora
sean desprendidos de su sitio original.

Si alguna prenda contiene sangre húmeda, debe secarse al aire antes de empaquetarla,
con ello se evita la putrefacción, enmohecimiento o las adherencias que pueden utilizarse
como pruebas fehacientes.

EXÁMEN MICROSCÓPICO.

Esta prueba únicamente consiste en examinar en el microscopio la tela del orificio de


entrada, en búsqueda de fibras plásticas, quemadas y pólvora total o parcialmente
quemadas.

ANÁLISIS DE LAS HUELLAS GENERADAS POR IMPACTOS DE BALAS.


El tamaño y densidad de las imágenes resultantes de los residuos de pólvora
impregnados en las ropas son los principales factores utilizados para determinar la
distancia entre la víctima y el arma al momento del disparo.

Al crecer la distancia, aumenta la imagen determinada por las diminutas incrustaciones de


la pólvora, y su densidad disminuye hasta un punto en que no se deposita ningún residuo
de pólvora, el cual se pierde al dispararse en el aire.

En los laboratorios se hacen disparos con el arma que intervino en la muerte para
determinar la distancia del disparo.

En caso de no encontrar residuos, cabrá deducir que la distancia a la que se disparó a la


víctima era mayor de 65 centímetros de distancia.

PRUEBA QUÍMICA PARA BUSCAR RESIDUOS.

Se utiliza un químico denominado ácido sulfanil-alfa naftil-amino-acético para detectar


como en algunas pruebas arriba señaladas, la presencia de nitritos, mismos que
reaccionan con el químico convirtiéndose en un compuesto colorante, sin embargo, dicha
prueba no permite detectar la existencia de nitratos de la pólvora quemada.

Para utilizar la prueba se utiliza papel fotográfico tratado con una sustancia denominada
hipoclorito a fin de eliminar los haluros de plata, de modo que queda la capa de gelatina,
que se tratará con ácido sulfanílico al 0.5% en agua destilada. Luego se dejará secar, se
aplicará la solución de ácido sulfanil-alfa naftil-amino-acético al 0.5% en alcohol metílico y
se seca nuevamente.

El orificio de entrada de la prenda se cubrirá con el papel, después se prensa con una
plancha caliente usando una tela empapada en ácido acético al 25% en agua destilada, y
dará como resultado que el ácido sulfanílico se diazotiza con ácido nitroso, formado de los
nitritos y el ácido acético.

Al igual que la prueba de la parafina, esta prueba también resulta insegura, pues permite
detectar la presencia de agentes oxidantes como el tabaco, insecticidas, cosméticos,
tierra y otros.
Por lo que esta prueba fue dejada de utilizar por el FBI para dar lugar al uso del análisis
de la activación neutrónica.

FUENTE BIBLIOGRÁFICA.

(Francisco Javier Tello Flores. Medicina Forense. Editorial Oxford. México. Año 1999.
Página 33 a 41)

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