Nosotros, alumnos del Seminario de Tacámbaro, después de haberlo
reflexionado ante Dios y consultado con nuestros formadores, hemos decidido dar un paso más en nuestra formación haciéndonos imponer la sotana como signo de que queremos revestirnos del hombre nuevo en Cristo Resucitado, y de entrega más comprometedora en un esfuerzo mayor por irnos formando en las etapas de esta institución, hacia el Orden Sacerdotal. Sin ignorar los compromisos que conlleva esta decisión, pedimos la ayuda de Dios Nuestro Señor y nos confiamos al cuidado del San José, patrono de nuestro Seminario y de la Santísima Virgen María de Guadalupe, nuestra madre.
ASÍ LO QUEREMOS, ASÍ LO DESEAMOS Y ASÍ NOS
COMPROMETEMOS A LLEVAR CON DIGNIDAD ESTA VESTIDURA