Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Tessa & Weston
Tessa & Weston
2
TRADUCIDO POR
VIVIRleyenDO01@gmAIl.COm
hTTPs://PjgRAnDOn.blOgsPOT.COm/?m=1
3
PARA lA COmUnIDAD Del
WeDnesDAy De WRITeRslIFe
COn TODO mI AmOR
4
COnTenIDO
SINOPSIS
TESSA
WESTON
TESSA
POEMA: LAS ESTRELLAS
WESTON
TESSA
POEMA: CHICO GUERRERO
WESTON
TESSA
POEMA: TE AMO
WESTON
TESSA
WESTON
TESSA
WESTON
TESSA
POEMA: MI CORAZÓN
WESTON
TESSA
5
WESTON
TESSA
WESTON
TESSA
WESTON
TESSA
WESTON
POEMA: WOW
TESSA
6
sInOPsIs
8
TessA
11 De DICIembRe
TESSA: ¡¡¡NIEVE!!!
9
Mientras espero su respuesta, me pongo una sudadera y
calzo unos calcetines peludos. Por fin empieza a parecer
invierno. Como en Navidad.
Mi teléfono vibra con un nuevo mensaje.
Sonrío cuando su nombre aparece en la pantalla.
Me echo a reír.
Levanto la barbilla.
“¿Cómo lo sabes?”
“Porque sí”.
11
“Siempre me mandas mensajes en cuanto te despiertas”.
“¿Ah, sí?”
"¡Tú empezaste!"
"¡Weston!"
Sonríe al verlo.
15
"Debería haberlo sabido. Tessa no se levanta tan rápido por
nadie más. Tessa, ¿qué demonios haces en la nieve sin
zapatos? Venid dentro, los dos. Acabo de hacer gofres".
17
"No. Y todos los chicos están en casa, lo que significa que
mamá se está volviendo loca... así que les dije que los
llevaría en trineo para quitárselos de encima un rato.
¿Quieres venir?"
"¿Trineo? ¿Yo?"
19
WesTOn
11 De DICIembRe
“¡Date prisa!”
21
“Noah”, dice Tessa con esa voz suya tan dulce y parecida a
la de una madre.
“¿Un perro?”
Gruño.
“Ah.” Se ríe.
23
“¿Por qué habéis tardado tanto?”, se burla.
“¿Cómo?”
24
“Bueno, Aidan llegó primero a la cima de la colina… pero
todos sabemos que el verdadero ganador es el que llega
primero abajo”.
“¡Vamos!”
“Hey-“
25
"No si todavía eres demasiado bebé para subir la colina tú
solo".
Se queja.
"Bieeen."
26
"Vale, Tessa, ¿lista para enseñarles cómo se hace?".
"Vale, ¿preparado?"
"¿Henry?"
"¡Vamos!"
27
"Espera", murmuro, empujando mi trineo y el de Tessa unos
metros hacia arriba.
"Salvaje..."
"¡No!"
"Tú empezaste".
29
"¡Tú lo empezaste cuando nos estrellaste contra el banco de
nieve!".
"Bueno, no quería...".
31
Asiente frotándose los brazos.
"¡Sí! Es romántico".
"¿Cómo?"
"¿Por qué?"
"Hasta ahora”.
"¿Hasta ahora?"
34
Eso la hace reír aún más y se pone de puntillas para
plantarme un beso rápido en los labios.
Volvemos abajo, donde mamá está preparando chocolate
caliente para los chicos, que ahora están jugando a la
videoconsola en el estudio. Noah me tira del brazo y me
suplica que juegue con ellos, pero mamá dice:
Sonríe y me mira.
35
"Como las Polaroids que me hiciste cuando era ciega".
"Romántica, ¿verdad?"
"Muy romántica".
"Oh, vaya."
37
"Estuve en el hospital. Y en rehabilitación. No me apetecía
mucho hacerme fotos".
38
"Sí. Mamá no quería que me sintiera excluido, así que trajo
a los chicos y abrimos los regalos juntos. Papá incluso trajo
un arbolito falso y mamá nos hizo cantar villancicos
alrededor de él. Incluso vinieron algunas enfermeras y se
unieron a nosotros".
"Siento mucho que hayas tenido que pasar por todo eso".
"¿En serio?"
"¡Sí!"
40
Me río suavemente y le aprieto la mano.
41
TessA
11 De DICIembRe
“¡Oh! ¡Tessa!”
“Llegas pronto”.
“¿Sí?”
43
Con gran desgana, me pongo un jersey blanco de cuello alto
y me recojo el pelo en un moño antes de bajar las escaleras.
“Bueno…”
“¿Mamá?”
“¡Hola, mamá!”
46
“Bien. El tráfico habitual de los sábados, pero no fue tan
malo cuando entré en la autopista”.
No tengo ni idea de lo que hace aquí. Sí, nos visita todos los
años en Navidad, pero no viene hasta el día de Navidad.
¿Por qué está aquí dos semanas antes de tiempo? ¿Por
qué la abuela actúa como si fuera normal?
Al cabo de un momento, mamá se da cuenta de mi mirada
perpleja y le dice a la abuela:
Se me revuelve el estómago.
¿Maleta?
47
Mamá agita despectivamente una mano en el aire.
Está desempleada.
Se queda dos semanas.
Dios mío.
50
Siento como si mi mundo fuera una bola de nieve y alguien
la estuviera sacudiendo. Pero no dejo traslucir mis
verdaderos sentimientos, sólo por el bien de la abuela.
No quiero que piense que estoy molesta o disgustada por
esta "sorpresa" suya. Así que, en lugar de eso, fuerzo una
sonrisa cansada y digo:
"Vaya..."
Sacude la cabeza.
52
"Tessa fue una auténtica soldado por superarlo todo".
"Bueno".
"¿Weston?"
"¿Quién es?”
53
Me revuelvo un mechón de pelo y me sonrojo.
"Eh... es mi novio".
"¿Novio?”
Da un manotazo en la mesa.
Mamá se ríe, lo que hace que todos se rían, lo que hace que
me sonroje aún más.
54
Me guiña un ojo y, por primera vez esta noche, no me
cuesta tanto sonreír. Weston es la única conversación que
me alegra tener con cualquiera.
Cuando termina la cena, la abuela dice que puede limpiar la
cocina.
"Como en HGTV".
56
"Bueno, al final, cuando recuperé la vista, nos vimos cara a
cara. Y lo vi por primera vez".
"¿Verdad?"
57
"Me alegro mucho por ti", dice mamá, frotándome el hombro.
"Es verdad”.
Siento que debería decir algo más, pero no tengo valor para
mentirle y decirle que quiero pasar tiempo con ella. La
verdad es que no. Me parece bien que me visite todos los
años el día de Navidad. Sobrevivo a la incomodidad porque
es sólo un día, una cena, una reunión. ¿Pero dos semanas
de tiempo madre-hija? ¿Cuando nunca hemos tenido tiempo
madre-hija en el pasado? Antes nada le impedía visitarnos
más a menudo.
¿Por qué no lo hizo?
¿Hizo falta que yo casi muriera en un accidente de coche
para asustarla? Al parecer, eso la hizo sentirse lo
suficientemente culpable como para conducir hasta aquí y
arruinar mis planes de Navidad. O tal vez sólo fue
conveniente, ya que actualmente está desempleada.
¿Qué le hace pensar que puede aparecer y empezar a
estrechar lazos conmigo ahora?
¿Qué le hace pensar que voy a querer?
59
Todo esto me da vueltas en la cabeza. Estoy demasiado
cansada para seguir pensando en ello, demasiado cansada
para fingir una sonrisa más. Lo único que quiero es irme a la
cama y llamar a Weston. Pero cuando me ducho y me
pongo el pijama, Weston ya me ha enviado su mensaje de
buenas noches.
61
lAs esTRellAs
me DIjeROn
qUe esTán CelOsAs De TI
DeseARÍAn PODeR bRIllAR
lA mITAD De bRIllAnTe
62
WesTOn
12 De DICIembRe
WESTON: ?
63
TESSA: Te lo contaré más tarde
Frunzo el ceño.
"¡Está helando!"
"¡Adiós!"
"No, yo..."
"¿Tu madre?"
Ella asiente.
"¿La de Pittsburgh?"
67
Sonrío, a punto de hacer una broma sobre eso... pero
entonces me doy cuenta de lo genuinamente molesta que
parece.
"Sí, pero..."
69
Rubia, bajita, de pie, de espaldas a mí. La abuela de Tessa
me ve inmediatamente y sonríe.
"Hola, Weston".
"Este es Weston".
"¡Mierda!", suelta.
"¡Mamá!"
Quiero decir algo para romper el hielo y que Tessa sepa que
no me siento ofendido, pero me quedo en blanco.
Su madre me mira de la misma manera que uno miraría una
foto photoshopeada en Internet, tratando de decidir si es
real o no.
71
Al cabo de un segundo, sale de su aturdimiento y se ríe
incómoda.
"Es más fácil de lo que parece. Estas son sólo para correr".
"Vaya..."
72
Mueve la cabeza con incredulidad.
"Fue horrible."
"¡Sí me molesta!"
75
Su mirada se dispara hacia la mía por un segundo; hay mil
palabras en sus ojos. Pero no dice ninguna. En lugar de
eso, entierra la cara entre las manos.
"No tendría por qué. ¿Es una parte tan importante de lo que
eres? No creía que importara tanto".
Sacudo la cabeza.
76
"No importa”.
77
"No es culpa tuya, es de mi madre. Sabes que nunca me
molestan tus visitas espontáneas".
"Debería irme".
79
TessA
12 De DICIembRe
80
Miraba a Weston como si fuera un monstruo de la
naturaleza y le hacía las preguntas más impertinentes.
Quería gritarle, pero estaba demasiado ocupada
muriéndome de vergüenza.
Weston me aseguró que no le importaba, que estaba
acostumbrado, pero me di cuenta de que le molestaba.
Parecía tan cabizbajo cuando se fue. Tan tranquilo y
apagado, tan distinto a mi Weston. Y sé que todo es culpa
mía.
Incluso después de que se haya ido y me haya quedado
sola en el porche, sus palabras arden en mi mente.
"¿Qué?”
"Tessa".
"¿Advertencia?"
83
Subo las escaleras y entro en mi habitación dando un
portazo y cerrando con llave.
Me tiro en la cama y toda esa rabia y confusión estallan de
repente en forma de lágrimas. Entierro la cara en las
almohadas y lloro, con el corazón roto por Weston.
No sólo estoy enfadada con mi madre, o con toda la gente
como ella. Estoy enfadada conmigo misma por ser tan
desconsiderada.
84
Tengo los ojos doloridos y cansados de llorar, pero no he
tenido motivación para levantarme. Hasta que la abuela
sacude el pomo de mi puerta.
86
"Todo el mundo merece una segunda oportunidad, Tessa.
No digo que tengas que pasar todo el tiempo con ella. Pero
intenta llevarte bien. Intenta que ella te compense".
"Gracias”.
89
ChICO gUeRReRO,
nUnCA enTenDeRé
CÓmO ATRAVesAsTe el InFIeRnO
y sAlIsTe COn CICATRICes
PeRO sIn qUemADURAs
90
WesTOn
12 De DICIembRe
92
Es tan molesto tener un mejor amigo que puede ver a través
de ti.
Me detengo un segundo para recuperar el aliento, apoyo los
antebrazos en el saco y lo miro.
"Sí..."
"No."
"Conocí a su madre".
93
"Pero creía que no vivía por aquí".
"Qué incómodo".
"Sí".
94
"Bueno, para un tío al que no le molestó... tú sí que pareces
molesto".
Suspiro.
"Probablemente se olvidó".
Un amputado.
Bajo la voz, empezando de otra manera.
Rudy me ve resbalar.
"¿Lo estoy?"
96
"No le viste la cara, Rudy. Parecía que quería derretirse por
el suelo. Sé que se sentía mal por mí, pero...".
97
"No. No lo sé. Es que..."
98
Logro esbozar una sonrisa cansada.
"Sí, me acuerdo".
Me río.
99
esa noche, mientras me preparaba para acostarme, Tessa
me llama por vídeo. Descuelgo el teléfono y su cara aparece
en la pantalla: está en la cama, lleva mi sudadera con
capucha y tiene cara de dormida y mona.
Frunzo el ceño.
101
Tessa piensa en eso por un momento, un conflicto silencioso
en sus ojos.
"Lo sé, pero ya has pasado por mucho. Sólo para tener que
soportar la insolencia de extraños. Me da mucha rabia".
Me encojo de hombros.
"¿Qué?”
Sacude la cabeza.
"¿Estás seguro?"
Ella se burla.
"Eres testarudo".
104
"Imposible."
"Irresponsable".
"Sabelotodo".
"Bocazas".
Me echo a reír.
105
"Pareces cansada. Deberías irte a dormir".
"Sí", murmura.
"Vale..."
"Yo no ronco".
Sonrío.
"¿Cómo lo sabes?”
108
TessA
14 De DICIembRe
"No".
109
"Vale, entonces seguro que vienes con nosotros. A menos
que tengas planes con tu madre".
Lo hay.
Apenas.
La madre de Weston tiene un todoterreno, así que él y yo
nos sentamos en la parte de atrás; los tres chicos más
jóvenes están sentados delante de nosotros, mirando de vez
en cuando por encima del hombro como si quisieran
pillarnos haciendo algo escandaloso. Pero sólo nos
cogemos de la mano y nos sonreímos disimuladamente.
Viejos clásicos navideños suenan suavemente en la radio
mientras conducimos por el paisaje invernal.
Weston traza un "te amo" en la niebla de la ventanilla. Le
beso la mejilla.
Por fin llegamos a la granja de árboles.
Es un rincón tranquilo y escondido del campo, con una sola
casa a la vista: una cabaña de madera cubierta de nieve,
con una luz dorada que brilla en las ventanas y un hilo de
humo que sale de una chimenea de piedra.
110
La escena parece un cuadro de Thomas Kinkade.
El Sr. Ludovico aparca el coche y todos salimos en tropel.
Aidan y Noah salen corriendo hacia el bosque, lo que hace
que su madre les grite que vuelvan y se pongan los guantes.
Weston echa una mano a Noah y le pone un par de guantes
de nieve.
111
"No lo creo”.
"Vale..."
"Eh."
"Sí, lo sé..."
Sonríe y dice:
"No".
Me guiña un ojo.
"Si te sirve de algo-", dice con voz suave y ronca, "-creo que
serás una buena madre. En el futuro".
116
"Muy bien, deja que le toque a tu hermano", y le ofrece la
sierra a Weston.
"¿Quieres intentarlo?"
"Sí, claro”.
117
"Claro que sé".
118
"No estás herido, ¿verdad?".
Suspira.
"Sólo mi orgullo".
119
Aidan abre un contenedor de luces y empieza a sacarlas al
azar.
"Nunca puedo, pero esta vez soy más alto, así que puedo
hacerlo. ¿Ves?"
120
"Gracias, es muy amable. Primero, tenemos que ver si
funcionan. Cruzad los dedos..."
121
"No me digas que eres una de esas personas que tienen un
árbol de Navidad monocromático con todos los adornos a
juego..."
122
TESSA: Hemos vuelto a su casa, ahora solo estoy
pasando el rato y ayudándoles a decorar.
Justo a tiempo.
Sonrío.
"Gracias”.
124
ABUELA: Está bien.
"Si no es molestia".
126
"Mi madre y mi abuela tienen mucho de qué hablar. No me
echarán de menos".
"Exacto".
128
Una chispa de desafío se enciende en sus ojos, como si
acabara de acusarle de no tener sentido de la aventura.
"Bueno", dice.
129
Le da responsabilidades y no teme pedirle cuentas, incluso
delante de mí. Pero, pase lo que pase, veo que Weston la
respeta. La quiere. Estuvo a su lado cuando pasó por el
momento más traumático de su vida, animándole y
apoyándole, tanto en sentido literal como figurado.
Me doy cuenta de que su relación se ha fortalecido gracias
al dolor que ambos han tenido que soportar.
Y aunque nadie querría pasar por ese infierno, envidio el
amor que han forjado en el fuego.
Por mucho que "me ponga al día" con mi madre, nunca
conseguiremos un vínculo así.
130
¿CÓmO PODRÍA POneR mI AmOR POR TI en PAlAbRAs
CUAnDO APenAs PUeDO COnTeneRlO en mI
CORAzÓn?
15 De DICIembRe
132
"No le gustan mucho los Hot Wheels".
"Un perro".
133
"¿Qué tal una pistola de verdad?" Aidan ofrece ayuda.
134
llevo todo el día pensando en ello en el colegio.
El regalo de Navidad de Tessa, es decir, no pedirle que se
case conmigo. Aunque no es mala idea. Para el futuro
futuro. En fin. Mi mayor problema es que realmente no tengo
ni idea de lo que les gusta a las chicas.
Creo que Tessa se burlaba de mí porque "no entiendo a las
chicas", pero tenía razón. No entiendo a las chicas.
Para nada.
Nunca he tenido una cita antes, así que todo esto es extraño
y nuevo para mí.
Navegar por una relación romántica es como aprender a
andar de nuevo con unas piernas ortopédicas. Es difícil
cogerle el truco, encontrar el equilibrio.
Tessa ha sido bastante fácil hasta ahora, pero sólo porque
actúo como yo mismo a su alrededor.
Soy la misma persona para todos: mis hermanos, mis
padres, mis amigos. Pero ahora empiezo a preguntarme si
eso es bueno o malo.
¿La trato demasiado como a uno de mis hermanos?
¿La regaño demasiado?
¿La molesto?
¿La hago feliz?
¿Qué podría hacer para hacerla más feliz?
135
No lo sé.
Y si le hago alguna de estas preguntas, se limitará a decir
que estoy genial, que todo está genial, porque ella es así. Y
volveré al principio.
Necesito ayuda profesional.
"Clara".
"¿Sí, Wes?"
"Dispara."
"¿Qué? No".
Me río.
Me burlo.
137
Clara me fulmina con la mirada.
"¿Investigación?"
"Gracias, Clara”.
"Claro..."
139
"Es sobre Julian. Sigues saliendo con él, ¿verdad?".
"Ajá..."
140
Me mata cada vez. Además, es mucho más alto que yo, lo
que me encanta, y tiene los brazos más bonitos..."
141
"Y... ¿tienes a alguien en mente ahora mismo?".
"Puede que..."
"No."
142
"Claro. Suena más a que estás haciendo una lista de
confesiones embarazosas para colgarlas en la web de la
escuela".
"¿Qué?”
"¿Es Davis?"
"Ahora piérdete".
"¿Qué?”
145
Mierda. Eso ha sonado mal.
"Quiero decir..."
"Oh."
"¿Estás enamorada?"
"Sí."
"No tienes que decirme quién es. Sólo tengo curiosidad por
saber qué te gusta de él".
146
"Bueno, es muy amable, divertido y extrovertido. Y siempre
está sonriendo, como si nada le deprimiera. Eso me gusta.
Además, también es... muy guapo".
147
Rudy está en mitad de la lectura y una sonrisa de
enamorado se dibuja en su rostro.
Pongo los ojos en blanco e intento coger el cuaderno, pero
él lo cierra de golpe.
"No he terminado".
148
"Lo que quiero saber es qué tiene que ver todo esto con
Tessa".
Suspiro.
149
"No me ayuda. Pero no lo hice por eso. Intentaba... entender
un poco mejor a las chicas".
"¿Y lo haces?"
Se ríe.
"Y no quiero decir que tenga que ser caro. Sólo quería
decir..."
"¿Pero qué?"
"No lo sé."
Se encoge de hombros.
Tessa sonríe.
"¿Diez docenas?"
Casi me atraganto.
154
"¿Por qué te haces esto? ¿No podemos comprarlas en la
tienda?".
Sonrío.
Tessa sonríe.
156
TessA
16 De DICIembRe
"Hola, preciosa".
Weston sonríe.
158
"Soy todo tuyo".
159
"¿Qué está pasando aquí?", pregunta, con su voz áspera
interrumpiendo a Bing Crosby y, en consecuencia, cualquier
fragmento de romanticismo.
"¡Hola, Weston!"
"¡Yo os ayudaré!".
Se me revuelve el estómago.
"¿Qué?”
"Mientras no moleste...".
161
Esbozo una sonrisa de fastidio.
"Bien".
162
"Oh, ella era tan tranquila como puede ser", dice mamá,
riendo, como si realmente recordara mi infancia.
Weston sonríe.
"Cállate."
163
Weston se vuelve hacia mamá y le dice:
"Qué gracioso".
"Pequeños detalles".
"Oh, vale..."
"¿Así?"
"¡Weston!"
167
Me deja sobre la encimera con un gruñido exagerado.
"Sí", dice.
"Bueno, yo también".
171
"Siento lo de antes", le digo en voz baja, extendiendo la
mano sobre su pecho.
"Sí. Esa".
"Lo dudo."
173
"Al menos, no tanto. Siempre ha sido egoísta e
irresponsable. Y sí, ahora está aquí, pero ¿y después de
Navidad? Se hartará de ser madre, volverá a Pittsburgh y
todo volverá a ser como antes. Entonces, ¿qué sentido tiene
todo este tiempo de unión madre-hija? ¿Sabes?"
174
WesTOn
16 De DICIembRe
"Mm-hmm."
"Y no se va a ir".
"¿Estás ocupado?"
178
"La verdad es que no".
"¿Qué pasa?”
"A solas".
"¿Henry?"
Mamá asiente.
179
"Estamos pensando en regalarle un cachorro por Navidad".
"¿Hablas en serio?"
Mamá se ríe.
TESSA: QUE
182
WESTON: Eres la mejor
183
TessA
18 De DICIembRe
Suspiro.
"Está bien..."
Pero no me la pongo.
En ese momento entra mamá en la habitación, con
vaqueros y una chaqueta de lana granate. Parece un poco
más arreglada que de costumbre.
Se me encoge el corazón al darme cuenta de lo que
significa.
Mamá parpadea.
Mamá se ríe.
"Hola, Weston."
"¿Qué?”
Parece sorprendido.
No para mí.
Siento una oleada de irritación en el pecho, pero la reprimo
y me obligo a sonreír sin alegría.
190
Ya fue bastante incómodo tener a mamá con nosotros el
domingo pasado en la iglesia, pero la fiesta será aún peor.
Me harán más preguntas y tendré que fingir que somos una
gran familia feliz, cuando es todo lo contrario.
Sinceramente, Weston, ¿no podías no meterte en mis
asuntos por una vez?
191
WesTOn
18 De DICIembRe
"¿Tienes frío?”
"Te amo”.
"¿Qué?"
Gruñe.
"No, gracias".
195
Dios, qué frío hace. Pero no voy a pedir que me devuelva la
chaqueta, que es lo menos romántico que puede hacer un
hombre. En lugar de eso, me quedo inmóvil, mirando a
Tessa. Está mirando el belén, pero me doy cuenta de que
está pensando en lo que acabo de decir.
Finalmente, se vuelve hacia mí, con la voz afilada.
"¿Por qué?"
"Soy feliz."
"No lo pareces".
"Para mí es fácil".
197
"Sí, lo es. Porque tienes una madre que os quiere a ti y a tus
hermanos más que a nada en este mundo. Probablemente
se cortaría su propio brazo por ti".
"Bonita analogía".
198
"¿Cómo voy a perdonarla si ni siquiera me ha pedido
perdón?".
199
Un rayo de dolor me atraviesa de repente.
Hostia puta.
Me arden las piernas, como si acabara de atravesar un
incendio. Es salvaje, familiar, enloquecedor.
Hago una mueca, cierro los ojos y me trago un gemido de
dolor.
200
Me caliento las manos frotándomelas y empiezo a
masajearme los muñones, donde las prótesis se juntan con
las piernas. Cierro los ojos y respiro hondo, intentando
concentrarme en la sensación de calor, no en el dolor que
mi cuerpo me hace sentir.
La voz de Tessa se repite en mi cabeza, persiguiéndome
incluso en el silencio de esta iglesia vacía.
Maldita sea.
Debería haber sabido que se lo tomaría a mal.
¿Por qué tuve que ir y abrir mi bocota? Ahora está enfadada
conmigo.
Buen trabajo, Weston.
Esto es exactamente lo que temía: que el tema de mamá se
interpusiera entre nosotros, porque Tessa es tan testaruda
como yo. No puedo guardarme mis opiniones. Y ella puede
guardar rencor como nadie. Pero yo estoy de su lado,
¿cómo puedo hacérselo ver?
De repente, la puerta se abre detrás de mí, dejando entrar
un estallido de ruido procedente del vestíbulo...
Y la madre de Tessa.
201
"Ahí estás", dice, sonriendo vacilante al entrar.
"¿Dolor fantasma?"
Parece despistada.
"¿Qué es eso?”
202
"Bueno, básicamente es mi cerebro haciendo un control de
seguridad", le explico.
"Es horrible".
"Oh."
"Por supuesto”.
205
Heather espera con genuino interés, como si yo estuviera a
punto de descargar para ella alguna compleja sabiduría. En
realidad, sólo tengo una palabra.
"Quédate".
Heather parpadea.
Sacudo la cabeza.
206
"No, mira, ahí es donde te equivocas. Tessa no quiere que
te vayas. Sé que lo parece, pero... a estas alturas ya la
conozco bastante bien. No le gusta bajar la guardia. No es
porque no te quiera, te quiere. Sólo tiene miedo de perderte.
Perder tu amor".
"¿Por qué?"
"Adivínalo".
"No puede creer que Tessa rompa contigo por tus piernas.
Suena tan ridículo, sólo decirlo en voz alta".
"No lo sé."
208
"No parece que os impida hacer muchas cosas. Y en cuanto
a la vida amorosa, podéis seguir divirtiéndoos como otras
parejas".
Sonrío.
209
"A veces siento que soy demasiado. Y no lo suficiente. Todo
al mismo tiempo".
"¿Qué cosa?”
"No."
210
"No, seguro que no lo fue. Pero me encantó cada minuto. La
amé desde el momento en que la conocí".
"¿Cuando te gritó?"
211
Esta vez es Tessa, que luce a la moda con mi chaqueta
Carhartt demasiado grande, las mejillas sonrosadas por el
frío y los ojos brillantes cuando se clavan en los míos.
Heather se levanta.
212
Esbozo una sonrisa irónica.
213
"Lo siento", le susurro en el pelo.
"Yo también”.
Sonrío.
"Vale".
214
TessA
19 De DICIembRe
216
Golpea a su hermano pequeño en la oreja, lo que hace que
Noah estalle en una carcajada.
Me río.
217
Empieza a imitar el sonido de una ametralladora, con los
dedos apuntando amenazadoramente a sus hermanos.
Frunzo el ceño.
Me río.
"Buena observación".
220
la señora Ludovico llama a la puerta pintada de rojo,
adornada con una corona de aspecto caro.
En realidad, toda la casa parece cara: una moderna casa
gris de estilo Hampton con un camino empedrado que
conduce al porche delantero. La puerta roja se abre y
aparece una mujer bajita de pelo negro rizado con una
sonrisa.
"Ya veo”.
221
Los dos nos reímos torpemente, sonrojados; Weston me
rodea con el brazo.
"No hace falta decir que está deseando que lleguen a sus
nuevos hogares".
222
"¿Puedo abrazarlos?”
223
Suelto una risita cuando el cachorro que tiene en el regazo
empieza a lamerle la cara. Lo levanta para mirar debajo.
"También es un niño".
"Parece un Thor".
"¿Thor?"
Weston se ríe.
"No. No se me ocurrió".
225
agradecimientos hacia mi abuela por su disposición a cuidar
del cachorro hasta Navidad.
"No es nada".
228
“Hmm, al menos eso no implicaría estar fuera..."
"¿Sigues despierta?".
"Gracias”.
229
Me encojo de hombros, ignorando la punzada de
culpabilidad que siento en el estómago.
Gracias a Dios.
230
"Papá solía llevarme allí cuando era pequeña. Es bonito en
la nieve".
"¿Qué es esto?”
Mamá sonríe.
232
Mi cara se ruboriza con una mezcla de vergüenza y rabia
mientras le arranco el cuaderno de las manos.
"Ni siquiera sabe que escribo poemas sobre él. Creo que me
moriría si los leyera".
233
Mamá se lo piensa un momento.
234
WESTON: ¿Es Tessa o alguien le ha robado el teléfono?
236
sI el DesTInO nO nOs hUbIeRA UnIDO
lO hARÍA yO mIsmA
237
WesTOn
20 De DICIembRe
238
La miro fijamente, atónito.
239
"Ya he estado antes en el bosque", suelta Tessa, toda a la
defensiva.
Ladea la cabeza.
240
Y yo estallo en carcajadas.
Cuando llegamos a Millbrook, el aparcamiento está bastante
vacío y los senderos aún menos ocupados.
Hoy no hace demasiado frío, pero sí el suficiente para que
caiga una nevada.
Tessa la llama "nieve de Hollywood" porque se parece a la
nieve falsa que se ve en las películas.
El bosque ya está cubierto de unos cuantos centímetros de
nieve en polvo, lo que hace que todo parezca congelado en
el tiempo, literalmente. Hay mucho silencio; el único sonido
que se oye es el crujido de nuestras botas en la nieve.
Ella suspira.
242
Caminamos más por el sendero, a través del bosque
nevado, en dirección al mirador marcado en el mapa del
aparcamiento. Pero tras unos diez minutos de marcha,
empiezo a preguntarme por qué no hemos visto a nadie en
este sendero. Y por qué el sendero parece ser cada vez
más estrecho.
Tessa se detiene, resoplando, girando en un lento círculo
mientras estudia el bosque que nos rodea.
"¿Estamos perdidos?"
"Muchas gracias”.
Ella gruñe.
"Oh, cállate".
Se ríe.
"¿Oír qué?"
247
"Parece que no vamos a tener esa acampada romántica
después de todo".
248
Cuando volvemos al aparcamiento, ya ha anochecido.
Los dedos de Tessa parecen carámbanos, así que pasamos
unos minutos sentados en el coche, yo respirando en sus
manos y ella riéndose de cómo pensaba que tendríamos
que pasar la noche en el bosque.
Cuando volvemos a la carretera, asumo que me dirijo a su
casa, pero a mitad de camino me dice:
"Porque...”
249
Espero, levantando una ceja.
250
"Me muero de hambre. ¿Y tú?"
251
"Me gusta quedarme en casa, hacer galletas, ver películas y
abrazarte".
Me encojo de hombros.
Se ríe a carcajadas.
252
"Eres la chica más alocada que he conocido. ¿Por qué
crees que me enamoré de ti?".
"No, no me conocen".
253
más tarde, esa misma noche, intento terminar la montaña
de deberes que se ha ido acumulando en mi mesa durante
los últimos días, pero no consigo concentrarme. Sólo puedo
pensar en Tessa. Todas las cosas que hemos hecho juntos.
Todas las cosas que quiero que hagamos juntos. Todas las
veces que la he hecho sonreír o reír. Cómo desearía que
estuviera aquí ahora mismo para poder oír su risa.
Hoy estaba tan guapa, acariciando a los caballos,
besándome en el bosque. Me ha encantado cómo se le han
iluminado los ojos la primera vez que ha subido al coche y
me ha contado lo del partido de hockey; estaba emocionada
por sorprenderme.
Ahora me hace pensar: Debería sorprenderla con algo
mañana. Algo que le guste más. Sobre todo porque aún no
sé qué demonios le voy a regalar por Navidad.
Lo menos que puedo hacer es que la cita de mañana sea
algo especial para ella.
254
La llevaré a cenar antes del partido, pero ¿con qué más
puedo sorprenderla? A ella no le gustan mucho las
sorpresas, así que tengo que asegurarme de que sea una
apuesta segura por la que no tenga que preocuparme. Pero
no tan segura que sea aburrida. Lo último que quiero ser es
aburrido.
Encuentro mi teléfono enterrado en una tumba de deberes y
le envío un mensaje a Tessa.
TESSA ¿Tía?
WESTON: adivina
WESTON: SÍ
257
TessA
21 De DICIembRe
"Buenos días”.
258
"Esperaba pillarte antes de que empieces el día".
"¿Ah, sí?"
260
"No puedo desarreglarlo. Weston tenía tantas ganas de ir
conmigo... Dijo que era muy difícil conseguir las entradas.
No me gustaría decepcionarlo".
261
"Weston me recoge a las cuatro".
262
"Si eso es lo que quieres".
"Así es".
"Yo no."
"Me gusta tener a la chica más guapa del mundo del brazo.
Hace que todo el mundo desee ser yo. Y eso es algo que no
suele pasar".
"He hecho una lista de reproducción para ti. Sobre ti, quiero
decir".
"¿Qué?”
"¿Una sorpresa?"
"¿Oh?"
Le empujo.
"¿Qué es eso? “
"¿Quieres?”
270
Lo que realmente quiero saber es cómo puede guardar toda
esta comida y seguir teniendo abdominales destrozados. No
es justo.
Me tumbo en el asiento y vuelvo a mirar la hora: sólo
quedan veinte minutos de partido, gracias a Dios.
Weston parece estar disfrutando, y yo soy feliz mientras él lo
sea, pero soy aún más feliz cuando gana el equipo local y
se acaba el partido.
Prácticamente arrastro a Weston fuera, "para adelantarme a
la multitud", le digo, pero él se ríe porque sabe leerme la
mente mejor que eso.
El cielo nocturno está despejado y resplandece de estrellas
cuando atravesamos el aparcamiento.
Su sonrisa le traiciona.
"Ajá".
272
"Este sitio es adorable", le digo a Weston, que observa mi
reacción como si fuera lo mejor de su noche.
"¿Cómo lo encontraste?”
Sonríe.
274
"Te estaba agrediendo. Digamos que menos mal que no
eras mi novia en ese momento. Si no, le habría hecho
desear no haber nacido".
"¿Ah, sí?"
"¿En serio?"
276
En todas las formas en que hacen tu vida más brillante... y
mucho más hermosa".
"Mmmm".
"Mm-hmm."
"¿Ah, sí?", murmura, sus ojos van y vienen entre los míos.
"Vaya", susurra.
278
"Debería llevarte a las librerías más a menudo".
"¿Qué?”
Me acerca más.
"No".
Gruñe.
Sonrío.
"¿Por qué?"
"De acuerdo."
El desafío ha comenzado.
Nos separamos, deambulando por diferentes secciones de
la librería. Voy directamente a los libros de no ficción,
porque Weston no va a leer una novela.
280
Tras unos minutos ojeando los libros, mi mirada se posa en
una estantería etiquetada como "Felicidad". Si alguna vez
ha habido un género para Weston, es éste.
Paso la yema del dedo por los títulos y reconozco algunos.
Uno especialmente fino me llama la atención. Lo saco y
recuerdo al instante la portada.
Perfecto.
Escondo el libro a mis espaldas y vuelvo sobre mis pasos
hasta la entrada de la tienda, donde antes había visto la
caja. Weston ya está allí, pagando mi libro.
Vaya, es rápido.
Observo desde la distancia cómo coge un bolígrafo de la
cajera y escribe algo en la hoja interior del libro.
Es una gran idea.
Me escondo detrás de una estantería y saco un bolígrafo del
bolso, abro el libro en mis manos y escribo una inscripción
en el interior.
A mi dulce Weston...
281
WesTOn
21 De DICIembRe
"¿Ah, no?"
282
Me aclaro la garganta nerviosamente, asintiendo.
Sonrío.
285
"¿Y a tus abuelos?".
Sacudo la cabeza.
287
oscura, arrojando una sombra fría sobre lo que sentía hace
unos momentos. ¿Me estaba utilizando como excusa?
Es entonces cuando Tessa vuelve a entrar en la habitación,
arrullando al cachorro que lleva en brazos.
Thor empieza a retorcerse excitado cuando me ve, y Tessa
se ríe, pero yo no puedo pensar con claridad. Sigo
pensando en lo que ha dicho su madre. Y en la sensación
de pavor que se me hunde en el estómago.
Rasco distraídamente a Thor detrás de las orejas,
preguntándome si debería irme a casa y no preguntarle a
Tessa. Dejar las cosas como están. Pero si hago eso, sé
que estaré despierto toda la noche intentando entenderlo.
Preguntándome si todo era humo y espejos.
Mentiras.
No.
Necesito saber la verdad.
"¿Afuera?”
288
"Puedo irme", ofrece Heather.
289
"Tu madre me acaba de decir que tú dijiste que fui yo quien
consiguió las entradas... Y que fue idea mía ir al partido. ¿Es
eso cierto?"
"Weston..."
"Porque sí. Sabía que si le decía que había sido idea mía,
pensaría que estaba... intentando evitarla a propósito-"
"¿Y se equivocaría?".
291
"Lo has entendido todo mal".
"¿En serio?"
Me pongo rígido.
"¿Pero?"
"Pruébame".
292
Casi me río.
“¿Agotador?”
"¿Cómo dices?"
Tessa se burla.
"¿Y qué?"
"¿En serio?".
296
Eso corta.
Veo el dolor reflejarse en sus ojos e inmediatamente quiero
retirar mis palabras, pero no puedo. He encendido una
cerilla y la he tirado a un charco de gasolina, ¿y ahora?
Ella explota.
"¿Qué?”
298
"Tessa..."
"No."
299
TessA
21 De DICIembRe
304
Evité responderle. Porque la respuesta es ninguna.
Una buena relación requiere que dos personas pongan de
su parte. Y yo no he estado haciendo mi parte. Eso es lo
que veo ahora, cuando la niebla de mi ira y amargura
empieza a despejarse, revelando la horrible verdad. He sido
la egoísta, la irresponsable. Demasiado preocupada por mis
propios sentimientos para tener en cuenta los de mi madre.
Demasiado obsesionada con el pasado para darle una
oportunidad al futuro. Demasiado testaruda para ver mis
propios defectos. Weston tenía razón, todo lo que decía era
cierto. Pero me dolía demasiado el orgullo como para
admitirlo. En lugar de eso, arremetí contra él con rabia.
Había algo terriblemente definitivo en nuestra pelea. Como
si nos estuviéramos abandonando el uno al otro.
Renunciando.
Rompiendo.
Tengo el corazón demasiado oprimido para dormir, así que
aparto las sábanas y salgo de la cama, bajando de puntillas
para ver cómo está el cachorro. Podría hacerle compañía a
Thor. Ha estado lloriqueando por la noche, supongo que
echa de menos a su madre.
305
"No pasa nada, cielo", murmuro cuando lo encuentro
lloriqueando en el suelo del lavadero con la nariz pegada a
la puerta.
307
WesTOn
22 De DICIembRe
"¿ Weston?"
La voz de mamá, amortiguada, a través de la puerta de mi
habitación.
Dos golpes suaves.
"¿Estás despierto?"
Ahora sí.
308
Al colegio.
Gimo y cierro los ojos un minuto más.
Me duele la cabeza y tengo resaca, aunque no he probado
el alcohol en mi vida, así que no sé lo que es una resaca.
Pero estoy bastante seguro de que Tessa rompió conmigo
anoche. Y hermano, eso es peor que cualquier resaca que
puedas imaginar.
No tengo energía para ir a la escuela.
Ni siquiera tengo energía para ponerme las piernas.
Lo único que quiero es volver a dormir, olvidar lo de anoche,
olvidar todas las cosas que no debería haber dicho, olvidar
la forma en que Tessa me gritó con lágrimas de rabia en los
ojos.
¿Sabes lo que odio de ti, Weston?
Toc, toc a mi puerta otra vez.
309
Mamá intenta hacerme comer algo, pero le digo que no
tengo hambre.
No digo ni una palabra en todo el trayecto hasta el colegio.
Papá conduce, y dejo que Henry se siente delante porque el
asiento del copiloto aún huele al perfume de Tessa, y ahora
mismo no puedo soportarlo.
Me encojo de hombros.
"Sí."
"Wes".
"¿Sobre qué?"
312
"Si realmente odia todas esas cosas de mí... entonces me
odia”.
"¿Cómo lo sabes?"
Gruño.
"Sí”.
Me río secamente.
"Si eso es lo que siente por mí, prefiero saberlo ahora que
pasar otro día creyendo en algo que no es real".
315
"Si yo fuera tú, le daría algo de tiempo. Suele ser lo único
que hace falta. Te apuesto veinte pavos a que te llama esta
noche llorando por lo mucho que lo siente".
319
TessA
22 De DICIembRe
"Pobrecito".
323
Trago saliva, se me hace un nudo en la garganta y las
lágrimas empiezan a escocerme los ojos.
324
"No pasa nada, cariño", me dice, con la voz temblorosa por
las lágrimas.
Me ahogo en un susurro.
325
Resoplo, secándome las lágrimas.
327
Durante unos minutos nos quedamos abrazadas, sin
palabras, llorando. Siento que me he quitado un peso de
encima, y entonces me doy cuenta de lo agotador y pesado
que es guardar rencor.
Mamá asiente.
328
"Eso es lo que dijo Weston".
"No lo creo."
Sacudo la cabeza.
330
Se me escapa una risa triste.
"Pobre Wes..."
331
"Me encantaría. Lo de ir de compras, quiero decir. En
realidad, quería comprarme algo especial para ponerme en
Nochebuena. Si sus padres siguen queriendo invitarnos".
"Estoy de acuerdo”.
"Sí..."
"¿Cuál? Enséñamelo".
334
Mamá se ríe.
"¡Mamá!"
Mamá gruñe.
336
Pero aun así, estoy muy agradecida y le doy las gracias
cuando salimos de la tienda.
"¿En serio?"
Mamá sonríe.
Me da un vuelco el corazón.
"¿Los de Weston?".
Mamá asiente.
338
"Creo que le haría bien ver cómo te sientes de verdad... Lo
mucho que te preocupas por él".
"¿Por la pelea?"
"Sí, y...”
"Exacto."
339
Espero que los poemas tengan ese efecto y le muestren lo
que realmente siento por él.
Pero primero, necesito disculparme.
Tengo que reparar la brecha entre nosotros.
Necesito besarlo.
Y no estoy segura de poder esperar hasta que salga de la
escuela.
340
WesTOn
23 De DICIembRe
343
"¿Vas a ir al baile de invierno?", pregunta, y me doy cuenta
de que lo pregunta por una razón especial.
"¿Tienes novia?".
"Hola”.
344
Me enderezo y meto algunas carpetas en la mochila.
345
Rudy no responde a eso. Se limita a mirarme como si
estuviera metido en alguna broma que desconozco.
Frunzo el ceño con desconfianza.
"¿Qué pregunta?"
Rudy suspira.
Gruño.
"Ninguna”.
No puede ser.
347
Miro más detenidamente la lista y reconozco de inmediato a
algunas de las chicas con las que hablé la semana pasada.
Violet Robinson, McKenzie Newman, Shiori Ono, Candace
Hayes...
"¿Hayes?".
Casi me atraganto.
Rudy se ríe.
"¿Qué punto?"
350
"Por supuesto. Pero ella no quiere hablar conmigo.
Probablemente no quiera verme nunca más".
Me quedo helado.
"¿Qué?"
"Date la vuelta".
351
Mi corazón empieza a latir más rápido y espero por Dios que
no sea la ruptura.
352
"Soy arrogante. Y no pienso antes de abrir la boca. Y no me
importa a quién ofendo, lo que probablemente me convierte
en una maleducado..."
"Yo lo superé con mamá", dice Tessa, con los ojos brillantes.
"La perdoné. Y ella me perdonó a mí, por haber sido tan fría
y amargada estas últimas semanas. Hemos decidido
empezar de nuevo".
Sonrío.
354
"¿Nosotros también podemos empezar de nuevo?"
"Estoy acostumbrada".
“Yo tampoco”
Sacude la cabeza.
"¿Esto lo compensará?"
356
sujetándola por la cintura mientras el resto del mundo se
desvanece.
Sigo siendo suyo.
Sigue siendo mía.
Y nunca la dejaré marchar.
Gimoteo.
360
"¿Qué tal esto?” le pregunto a mamá cuando vuelvo a la
cocina.
363
TessA
24 De DICIembRe
364
Mamá y yo vemos It’s a Wonderful Life y comemos galletas
de azúcar mientras me pinto las uñas de color carmesí a
juego con mi vestido. Cuando aún nos quedan tres horas,
empiezo con mi peinado. Con la ayuda de mamá y un
montón de fotos de Pinterest, consigo hacerme un elegante
moño trenzado, con unas ramitas de aliento de bebé entre
los pliegues de mis rizos rubios.
Mamá tira de dos mechones sueltos para ponerlos sobre mi
cara.
“¡Estás preciosa!”
365
La abuela jadea cuando bajo las escaleras, sonriente y
sonrojada.
"Te quiero".
366
está nevando cuando llegamos a casa de los Ludovico:
una nieve elegante y perfecta de Hollywood que parece caer
sólo por estética.
Su casa parece tan adorable y acogedora, incluso desde
fuera: luces centelleantes en los aleros del porche y velas
encendidas en las ventanas. Todo parece una postal
navideña de Currier e Ives.
Sigo a mi madre y a mis abuelos escaleras arriba hasta el
interior. El Sr. Ludovico nos da la bienvenida, pero su voz
queda ahogada por la cacofonía de “Feliz Navidad” de los
hermanos pequeños de Weston, que parecen tan monos
disfrazados.
Mi corazón se acelera y miro a mi alrededor, buscando a
Weston. Es entonces cuando nuestras miradas se cruzan. Y
de repente no existe nadie más.
Es, sin duda, el chico más guapo que he visto nunca.
367
Lleva una camisa blanca abotonada y un chaleco negro; las
mangas están dobladas hasta la mitad para dejar al
descubierto sus antebrazos bronceados; lleva el pelo tan
despeinado que casi me pide que le meta las manos.
Sus pantalones negros y su chaleco le dan el aspecto de un
colegial de época, y estoy oficialmente obsesionada con
este estilo en Weston.
Durante un largo rato, nos miramos fijamente, demasiado
separados para hablar. Nuestras familias se dispersan por el
salón, pero Weston y yo nos quedamos en el vestíbulo,
inmóviles.
Por fin despierto de mi aturdimiento y me acerco a él.
“Estás… impresionante”.
"¡Tessa!".
"¿A solas?"
Suspiro.
"No te lo voy a decir. Es sólo algo que es... sólo para tus
ojos".
371
"Tengo la imaginación desbordada".
"¿En serio?"
Weston asiente.
"Sólo besándonos".
"Exacto-"
"¡Weston!"
373
Le doy una bofetada en el brazo, pero los dos sonreímos.
Él asiente.
"Claro".
Se ríe.
Toda la casa se hincha de deliciosos olores, risas familiares
y todo el calor festivo de una celebración navideña con las
personas que más quieres en todo el mundo.
Un pintoresco fuego crepita y chisporrotea en el hogar; el
árbol que hemos decorado brilla a su lado; de fondo suena
una suave música navideña de piano.
La madre de Weston presta atención a los detalles, y eso es
algo que admiro.
Me cuelo en la cocina y le pregunto si puedo ayudar en algo,
pero me empuja de vuelta al salón para que me mezcle y
"me divierta".
Hay entremeses de lujo y champán (sidra espumosa) para
niños; bebemos este último en bonitas copas de cristal.
Weston parece ahora un pijo de la Universidad de Oxford,
apoyado contra la pared, mientras agita pretenciosamente
375
su falso champán en la copa. Estoy al otro lado de la
habitación, hablando con su padre, y cuando por fin vuelvo
la vista hacia Weston, me encuentro con que ya me está
mirando, con una sonrisita divertida en la cara.
Levanta la mano y se toca la oreja. Le dirijo una mirada
cortante, como diciendo: "¡Aún no! Suspira, decepcionado, y
se bebe el resto de su bebida como si fuera un trago de
alcohol.
Me río, casi ahogándome con la mía.
Durante un rato, disfruto haciéndome la difícil: deambulando
por la cocina, hablando y riendo y dejando que Weston me
siga a todas partes, intentando recuperar mi atención.
No sé por qué, pero me resulta muy satisfactorio provocarlo.
Después tendrá toda mi atención, así que ahora disfruto
privándole de ella.
Hay algo tan maravillosamente reconfortante en ver a
nuestras dos familias conocerse mejor: todo es un caos
jubiloso de voces y risas y niños pequeños persiguiéndose
alrededor de la mesa del comedor. No puedo evitar sentir
que ya somos una gran familia. Espero que siga siendo así
para siempre.
Por supuesto, ninguna reunión navideña con la familia de mi
novio estaría completa sin que alguien nos obligara a
besarnos bajo el muérdago.
376
Hay un pequeño ramo de muérdago colgado en la puerta
bajo la que me encuentro, y la señora Ludovico es la
primera en darse cuenta de la ironía.
Él sonríe.
378
Durante el resto de la noche, Weston intenta convencerme
de que me escape con él, en todos los momentos
equivocados. Su segundo intento llega justo después de
cenar, literalmente en cuanto termino de comer.
Está sentado a mi lado, así que me coge la mano para
llamar mi atención y, cuando levanto la vista, se está
tocando indiscretamente la oreja y me mira suplicante.
Le doy una patada por debajo de la mesa. Pero él sólo
sonríe y se acerca más a mi oreja.
379
Empieza a tentarme con su adorable cara de cachorrito, así
que juego a las sillas musicales e intercambio el asiento con
mamá. Pone mala cara cuando me ve sentarme al otro lado
de la mesa. Le respondo con una sonrisita salvaje.
El tercer intento llega después de que se hayan comido la
tarta, se hayan bebido el café y los más pequeños se hayan
marchado.
Weston sigue sentado frente a mí, con cara de aburrimiento
y desesperación. Se toca las dos orejas (como si eso fuera
a influir en mí) y arquea las cejas.
¿Ahora?
Reprimo una sonrisa y niego lentamente con la cabeza.
No.
Para alguien cuyo segundo nombre es "Sigilo", no entiende
muy bien el concepto de discreción.
Si nos levantáramos y nos fuéramos ahora mismo, todo el
mundo se preguntaría adónde vamos. Así que espero
pacientemente el momento perfecto. Y, efectivamente, llega:
cuando los adultos deciden migrar al salón y disfrutar del
resto del café y la conversación junto a la chimenea.
En medio del bullicio y la recogida de platos vacíos,
aprovecho la oportunidad.
380
"La cena estaba deliciosa, señora Ludovico", le digo,
acercándome discretamente para pasarme la yema del dedo
por la oreja.
"Gracias, cariño".
381
WesTOn
24 De DICIembRe
Por fin.
Empezaba a preguntarme si Tessa nos dejaría escabullirnos
alguna vez, o si se estaba divirtiendo demasiado
torturándome. Menos mal que es tan guapa que puede
salirse con la suya.
Para ser sincero, sería feliz mirándola en un silencio
estupefacto durante el resto de la noche. Pero soy aún más
feliz cuando escapamos juntos, susurrando como espías en
el pasillo por un momento.
"Está en mi bolso".
382
Asiento con la cabeza.
"¿Qué haces?"
384
Se lanza detrás de mí y coge el álbum.
"¡Shh!".
Henry se ríe.
Henry sonríe.
385
Le señalo con un dedo amenazador y le digo:
"Eres un imbécil...".
"Hola”.
"¿Perder qué?"
386
"Tu regalo para mí."
Parece un libro.
Niego con la cabeza.
"No, tú primero."
"No, tú primero”.
"¿De verdad?"
"Sí, es el de la librería".
Tessa se ríe.
388
Deja caer el libro sobre su regazo y se tapa la boca, con los
ojos llenos de lágrimas.
Sonrío, asintiendo.
La primera foto es la que siempre veo en la pantalla de
bloqueo de Tessa: un selfie nuestro de hace unos meses.
"Gracias”.
"Oh. Vale."
"¿Un cuaderno?".
391
Si el destino no nos hubiera unido lo haría yo misma
Iría hasta el fin del mundo a buscarte para robarte el
corazón (ladrona que soy)
Y darte mi corazón a cambio y tú dirías: "eso no es mío"
Y yo diría: "¿por qué no lo abres y lo ves?"
Entonces mirarías dentro (para demostrarme que me
equivoco) pero no podrías
Porque todo lo que encontrarías en mi corazón eres tú.
392
Este libro de poemas es como la bola de demolición que lo
rompe todo y me demuestra que estaba equivocado.
Ella me ama.
Así.
Antes de darme cuenta, todas esas emociones enterradas
vuelven a mí como un tsunami y, de repente, tengo un nudo
en la garganta y lágrimas en los ojos que me nublan la vista.
Mierda.
No puedo ponerme a llorar delante de ella... Pero es
demasiado tarde.
Tessa lo ve y susurra:
"¿Weston?"
"Gracias".
393
Parece muy sorprendida por mi reacción, y me doy cuenta
de que no esperaba en absoluto que me pusiera a llorar
como una nenaza, pero no puedo tragarme más.
Tessa me dedica una sonrisa triste y me coge la cara entre
las manos.
394
pasan por mi pecho y hacen estallar fuegos artificiales en mi
interior.
Me vuelvo loco.
Mi corazón se vuelve loco cuando Tessa me agarra por un
puñado de la camisa y tira de mí para acercarme.
Siento su cálido aliento en mi piel, su vestido se derrama
sobre mi regazo mientras ella se acerca. Le paso los dedos
por el pelo; lo siento como seda y huele a rosas, y no me
canso de él. No puedo saciarme de ella.
¿Está bien así?
No quiero dejar de besarla para preguntar.
No quiero dejar de besarla, nunca.
Sin aliento, nos separamos. Me río un poco, sintiéndome
como un aficionado. Pero Tessa también jadea; sigue
agarrada a un puñado de mi camisa, con las mejillas
sonrojadas y algunos mechones de pelo cayéndole a la
cara.
395
"Sí... sí, probablemente tengas razón".
"Deberíamos volver".
Yo me río.
Y ella se ríe.
Y volvemos.
397
Y luego la madre de Tessa dice:
"Estará flipando".
399
En cuanto Tessa se va, subo a mi habitación. Me tumbo en
la cama, con una gran sonrisa idiota en la cara, mientras leo
el libro de poesía que me regaló.
Es casi como seguir teniéndola conmigo.
Puedo oír las palabras en su voz; las páginas incluso huelen
a ella.
Dejo el cuaderno abierto sobre mi cara y respiro.
400
OjAlá PUDIeRAs VeR lO qUe PAReCes PARA mÍ
COmO COlORes qUe nUnCA sUPe qUe exIsTÍAn
COmO el PRImeR sIgnO De lA PRImAVeRA DesPUés
De Un lARgO y FRÍO InVIeRnO
COmO el AmAneCeR TRAs UnA nOChe
InTeRmInAble
nO sÓlO el ResqUICIO De esPeRAnzA
sInO lA lUz mIsmA
401
TessA
25 De DICIembRe
"De acuerdo".
Ella sonríe.
"No fue tan atrevido... Weston sabe que tengo límites y los
respeta".
Mamá asiente.
406
"Bien. Eres mucho más lista de lo que yo era a tu edad".
"No sé lo lista que soy. Pero ahora veo las cosas con más
claridad".
Me río, acurrucándolo.
"¿Cuál?"
"Weston”.
409
"¡Sal aquí y lucha como un hombre!", grita, y de repente se
da cuenta de que estoy en lo alto de las escaleras.
"Si crees que voy a caer en eso, hermano, ¡te espera otra
cosa!".
"Buen tiro".
410
Se sobresalta y gira para mirarme”.
411
Me río, plantando felizmente mis labios en los suyos
mientras Aidan recarga sus armas, riendo maníacamente
detrás de las cajas de Amazon.
Weston me devuelve el beso, metiéndome las manos en el
pelo un momento, y luego se queda sin fuerzas, haciéndose
el muerto. Pongo los ojos en blanco, me acerco a su oído y
le susurro:
413
Al principio, lo único que puede hacer es mirar fijamente al
cachorro, con la boca abierta por la sorpresa.
Todos nos echamos a reír y su madre le dice:
"¡Dios mío!"
"¿En serio?"
"Sí”.
"Salgamos al porche".
415
"Mira, la nieve de Hollywood", dice Weston, llevándome al
columpio del porche.
"Justo a tiempo".
"¿Para qué?”
Él sonríe y dice:
416
Y empieza a tocar la canción otra vez, esta vez cantando la
letra.
Tiene una voz preciosa, suave y rica.
Me enamoro más de él cada vez que lo oigo.
En la siguiente estrofa, me uno a él, armonizando con su
voz. Y no hay nada más que la música entre nosotros, la
nieve arremolinándose suavemente a nuestro alrededor y el
mágico resplandor del amor en mi corazón.
417
AgRADeCImIenTOs
ABBIE
419
sObRe el AUTOR
421
TRADUCIDO POR
VIVIRleyenDO01@gmAIl.COm
hTTPs://PjgRAnDOn.blOgsPOT.COm/?m=1
422
423