Está en la página 1de 51

GUÍA DE PRACTICAS -

ANATOMÍA
ESTUDIO DE LAS VÉRTEBRAS: CARACTERÍSTICAS GENERALES, REGIONALES E
INDIVIDUALES.

VISIÓN GENERAL DE LA COLUMNA VERTEBRAL

SUJETO ANATÓMICO, ESTRUCTURA DE LA QUE FORMA PARTE Y POSICIÓN.


La columna vertebral está situada en la parte posterior del trono en la línea media, extendiéndose desde
la base del cráneo hasta la punta del cóccix. En cuanto a sus funciones:

• Protege la médula y los nervios espinales;

• Soporta el peso y lo transmite a la pelvis y a los miembros inferiores;

• Proporciona un eje, parcialmente rígido y flexible, para el cuerpo, y una base sobre la cual se
sitúa y gira la cabeza.

• Desempeña un importante papel en la postura y la locomoción (el desplazamiento de un lugar


a otro).

Las vértebras y los discos intervertebrales forman en conjunto la columna vertebral

NÚMERO DE VÉRTEBRAS Y REGIONES VERTEBRALES


La columna vertebral del adulto consta de 33 o 34 vértebras, distribuidas en 5 regiones:

• Región cervical: 7 vértebras cervicales (C1-C7); las dos primeras se denominan atlas (C1) y axis
(C2). Entre el cráneo y el tórax.
• Región torácica o dorsal: 12 vértebras torácicas (D1-D12), cada una articulada con un par de
costillas.

• Región lumbar: 5 vértebras lumbares (L1-L5); vértebras grandes para el soporte del peso del
cuerpo.

• Región sacra: 5 vértebras sacras (S1-S5) fusionadas en un elemento óseo único, el sacro, para la
estabilidad en la transferencia del peso del tronco a los miembros inferiores.

• Región coxígea: 4 o 5 vértebras coccígeas (Co1-Co4/5); Co1 a menudo no se fusiona, pero Co2-
Co4 se fusionan para constituir el cóccix (un resto de la cola embrionaria).

Las vértebras aumentan de tamaño de forma gradual (dirección craneocaudal) a medida que la columna
vertebral desciende hacia el sacro, y luego dicho tamaño disminuye progresivamente hacia la punta del
cóccix. Estos cambios de tamaño están relacionados con que las vértebras soportan cuantías crecientes
del peso corporal a medida que se desciende en la columna vertebral.

CURVATURAS FISIOLÓGICAS DE LA COLUMNA VERTEBRAL


La columna vertebral del adulto presenta 4 curvaturas: cervical, torácica, lumbar y
sacra; de las cuales:

• Las cifosis torácica y sacra son cóncavas anteriormente. Son curvaturas


primarias que se desarrollan durante el período fetal (se hallan en la misma
dirección que las curvaturas principales de la columna vertebral fetal).

• Las lordosis cervical y lumbar son cóncavas posteriormente. Son curvaturas


secundarias que se desarrollan durante la lactancia y la niñez.

VÉRTEBRA TIPO: ELEMEN TOS Y POSICIÓN ANATÓMICA


Las vértebras varían en su tamaño y otras características de una región de la columna vertebral a otra, y
en menor grado dentro de cada región, aunque su estructura básica es la misma. Una vértebra típica se
compone de un cuerpo vertebral, un arco vertebral y siete procesos (apófisis):

• El cuerpo vertebral. Parte anterior, más grande y aproximadamente cilíndrica del hueso que
aporta fortaleza a la columna vertebral y soporta el peso del cuerpo. Presenta 2 caras
intervertebrales (superior e inferior), las cuales poseen una superficie rugosa que sirve para que
se apoye el disco intervertebral. Su tamaño va aumentando a medida que se desciende por la
columna.

• El arco vertebral o macizo apofisario. Un arco óseo de concavidad anterior, situado por detrás
del cuerpo vertebral. Dentro del arco encontramos los siguientes elementos:

⎯ Pedículos (derecho e izquierdo). Porciones pares, cilíndricas, cortas y robustas, que se


proyectan anteroposteriormente permitiendo la unión de las apófisis transversas al cuerpo.
Cada uno de los pedículos va a tener 2 escotaduras, una en la parte craneal y otra en la parte
caudal.
⎯ Escotaduras vertebrales. Escotaduras semicirculares características, una superior y otra
inferior, que forman un agujero intervertebral entre dos vértebras articuladas (orificio de
conjunción), de donde salen los nervios raquídeos.

⎯ Agujero intervertebral. Abertura formada por las escotaduras vertebrales que está
atravesada por las raíces de los nervios espinales y vasos asociados.

⎯ Láminas. Porciones pares del arco vertebral que conectan las apófisis transversas a la
apófisis espinosa. Se extienden desde los pedículos a la apófisis espinosa y limitan
posteriormente el orificio vertebral.

⎯ Apófisis transversas. 2 extensiones situadas a ambos lados de las láminas, en dirección


lateral y dorsal, desde la unión del pedículo y la lámina.

⎯ Agujeros transversos. Orificios que sólo existen en las apófisis transversas de las vértebras
cervicales y dejan paso a los vasos vertebrales.

⎯ Apófisis espinosa. Proyección situada en dirección dorsal y en la línea media, que se


extiende posteriormente desde la unión de las dos láminas.

⎯ Apófisis articulares (facetarias, cigapófisis). 2 carillas superiores o craneales y 2 inferiores o


caudales para su articulación con las vértebras adyacentes, situadas a ambos lados de la
unión lámina-pedículo.

⎯ Orificio, agujero o conducto vertebral. Agujero formado a partir del arco y el cuerpo
vertebrales que contiene la médula espinal y sus cubiertas meníngeas. Se encuentra
limitado anteriormente por el cuerpo, lateralmente por los pedículos y posteriormente por
las láminas. Los orificios vertebrales superpuestos constituyen el conducto vertebral
(raquídeo).

La posición anatómica de una ‘vértebra tipo’ se encuentra con el cuerpo vertebral en posición anterior y
el arco en posición posterior.
CARÁCTERÍSTICAS REGIONALES DE LAS VÉRTEBRAS

VÉRTEBRAS CERVICALES
Las vértebras cervicales (C1-C7) son las más pequeñas de las 24 vértebras móviles, puesto que soportan
menos peso, y están localizadas entre el cráneo y las vértebras torácicas.

En cuanto a sus características distintivas, su rasgo más peculiar es el foramen transverso oval en los
procesos o apófisis transversas.

PARTE CARACTERÍSTICAS
Cuerpo vertebral Pequeño y más ancho lateralmente que en sentido
anteroposterior; cara superior cóncava, con proceso
unciforme del cuerpo*; cara inferior convexa.
Foramen vertebral Grande y triangular.
Procesos transversos Forámenes transversos y tubérculos anterior y posterior; las
arterias vertebrales, así como los plexos venoso y simpático
acompañantes, pasan a través de los forámenes transversos
de todas las vértebras cervicales, a excepción de C7, que
transmite solo pequeñas venas vertebrales accesorias.
Procesos articulares Caras superiores dirigidas posterosuperiormente; caras
inferiores dirigidas anteroinferiormente; las caras
dispuestas oblicuamente son en su mayoría casi
horizontales en esta región.
Procesos espinosos Cortos (C3-C5) y bífidos (C3-C6); el proceso de C6 es largo;
el de C7 es el más largo (C7 recibe el nombre de vértebra
prominente), forma una prominencia bajo la piel de la parte
posterior del cuello, especialmente cuando se flexiona.

*Proceso unciforme (uncus) del cuerpo vertebral. Margen superolateral elevado.

Las vértebras C3-C7 son las vértebras cervicales típicas, mientras que las vértebras C1 (atlas), C2 (axis) y
C7 son atípicas.

ATLAS (C1) Y AXIS (C2)


La vértebra C1, también denominada atlas, es peculiar porque carece de cuerpo vertebral y de proceso
espinoso. Este hueso anular tiene 2 masas laterales que cumplen la función del cuerpo vertebral y
soportan el peso del cráneo (de modo similar a Atlas de la mitología griega, que sostenía el peso del
mundo sobre sus hombros). Los procesos transversos del atlas surgen de las masas laterales, por lo cual
están situados más lateralmente, lo que la convierte en la más ancha de las vértebras cervicales.

Las caras articulares superiores de las masas laterales tienen morfología


cóncava reniforme y se articulan con los cóndilos occipitales (2 grandes
protuberancias craneales), situados a ambos lados del foramen magno.

Los arcos anterior y posterior del atlas, cada uno de ellos con un tubérculo en
el centro de su cara externa, se extienden entre las masas laterales para formar
un anillo completo. El arco posterior, que corresponde a las láminas de una
vértebra típica, contiene en su cara superior el amplio surco de la arteria
vertebral. El nervio C1 también ocupa este surco.
La vértebra C2, también denominada axis, es la más robusta de las vértebras cervicales. El axis posee 2
grandes superficies planas, las caras articulares superiores, sobre las cuales gira o rota el atlas (p. ej.,
cuando una persona gira la cabeza para decir «no»). La característica distintiva de C2 es un proceso en
forma de diente (proceso odontoides), que se proyecta en dirección superior a partir del cuerpo vertebral.
Tanto el diente del axis como la médula espinal dentro de sus coberturas (meninges) están rodeados por
el atlas.

Se mantiene en su posición, adosado a la cara posterior del arco anterior del atlas, mediante el ligamento
transverso del atlas. Este ligamento se extiende entre ambas masas laterales del atlas y pasa entre el
diente del axis y la médula espinal. C2 posee un proceso espinoso grande y bífido, que puede palparse
en la profundidad del surco nucal, el surco vertebral superficial en la parte posterior del cuello.

VÉRTEBRAS TORÁCICAS
Las vértebras torácicas o dorsales (T1-T12 o D1-D12) se hallan en la parte superior del dorso y
proporcionan articulaciones a las costillas. Así, la característica principal de las vértebras torácicas es la
presencia de las fositas costales para su articulación con las costillas.
Las 4 vértebras torácicas medias (T5-T8) presentan todas las características típicas de las vértebras
torácicas.

PARTE CARACTERÍSTICAS
Cuerpo vertebral En forma de corazón; 1 o 2 fositas costales para articularse
con la cabeza de la costilla.
Foramen vertebral Circular y de menor tamaño que los de las vértebras
cervicales y lumbares (admite la parte distal de un dedo
índice de tamaño medio)
Procesos transversos Largos y potentes; carecen de forámenes transversos; se
extienden posterolateralmente; su longitud va
disminuyendo desde T1 a T12 (T1-T10 poseen fositas para
articularse con el tubérculo costal).
Procesos articulares Caras superiores dirigidas posteriormente y ligeramente en
sentido lateral; caras inferiores orientadas anteriormente y
ligeramente en sentido medial; el plano de las caras
articulares se sitúa sobre el arco, centrado en torno al
cuerpo vertebral.
Procesos espinosos Largos; pendiente posteroinferior; el vértice se extiende
hasta el nivel del cuerpo vertebral inferior.

VÉRTEBRAS LUMBARES
Las vértebras lumbares (L1-L5) se hallan en la parte inferior del dorso, entre el tórax y el sacro. Debido a
que el peso que soportan va aumentando hacia el extremo inferior de la columna vertebral, las vértebras
lumbares tienen un cuerpo muy voluminoso, causa de gran parte del grosor de la zona inferior del tronco
en el plano medio.
PARTE CARACTERÍSTICAS
Cuerpo vertebral Muy grande, reniforme en la vista superior.
Foramen vertebral Triangular, mayor que en las vértebras torácicas y menor
que en las vértebras cervicales.
Procesos transversos (costiformes) Largos y delgados; carecen de forámenes transversos;
proceso accesorio en la cara posterior de la base de cada
proceso.
Procesos articulares Caras articulares casi verticales; caras superiores dirigidas
posteromedialmente (o medialmente); caras inferiores
dirigidas anterolateralmente (o lateralmente); proceso
mamilar en la cara posterior de cada proceso articular
superior.
Procesos espinosos Cortos y robustos; gruesos, anchos y en forma de hacha.

SACRO

TIPO DE HUESO
El sacro, en forma de cuña, suele estar formado por 5 vértebras sacras (S1-S5) fusionadas en el adulto.
Se trata de un hueso impar de tipo plano, ya que su espesor es el parámetro que menos predomina con
respecto a los otros.

La forma triangular del sacro obedece a la rápida disminución de tamaño que experimentan las masas
laterales de las vértebras sacras durante el desarrollo. La mitad inferior del sacro no soporta peso, por lo
cual su masa disminuye considerablemente.

El sacro proporciona fuerza y estabilidad a la pelvis, y transmite el peso del cuerpo a la cintura pélvica, el
anillo óseo constituido por los huesos de la cadera y el sacro, al cual están unidos los miembros inferiores.
SUJETO ANATÓMICO
Está localizado en una posición medial y posterior debajo de la vértebra L5, encima del coxis y entre los
huesos coxales, con los cuales se articula. Forma el techo y la pared posterosuperior de la mitad posterior
de la pelvis. Contribuye a formar la columna vertebral y la pelvis.

POSICIÓN ANATÓMICA DEL SACRO


Colocar la cara cóncava y lisa hacia ventral y la parte más ancha (base) del hueso hacia arriba.

ESTRUCTURAS ANATÓMICAS
El conducto sacro es la continuación del conducto vertebral en el sacro. Contiene el haz de raíces de los
nervios espinales que surgen por debajo de la vértebra L1, denominado cola de caballo y desciende más
allá de la finalización de la médula espinal. En las superficies pélvica y posterior del sacro, entre sus
componentes vertebrales, se hallan típicamente cuatro pares de forámenes sacros por donde surgen los
ramos posterior y anterior de los nervios espinales. Los forámenes sacros anteriores (pélvicos) son
mayores que los posteriores (dorsales).

La base del sacro está formada por la cara superior de la vértebra S1. Sus procesos articulares superiores
se articulan con los procesos articulares inferiores de la vértebra L5. El borde anterior sobresaliente del
cuerpo vertebral de la vértebra S1 se denomina promontorio sacro. El vértice del sacro, su extremo
inferior que se va estrechando, presenta una cara oval para articularse con el cóccix.

La superficie pélvica del sacro es lisa y cóncava. En el adulto, cuatro líneas transversales en dicha
superficie indican el momento en que se produjo la fusión de las vértebras sacras. En el niño, las distintas
vértebras sacras están conectadas por cartílago hialino y separadas por discos intervertebrales.

La cara dorsal del sacro es rugosa, convexa y presenta 5 crestas longitudinales prominentes. La central, o
cresta media sacra, representa los procesos espinosos rudimentarios fusionados de las tres o cuatro
vértebras sacras superiores. S5 carece de proceso espinoso. Las crestas sacras intermedias corresponden
a los procesos articulares fusionados, y las crestas sacras laterales son las puntas de los procesos
transversos de las vértebras sacras fusionadas. El hiato del sacro se produce por la ausencia de las láminas
y procesos espinosos de S5 y, a veces, de S4. El hiato del sacro lleva al conducto del sacro. Su profundidad
es variable y depende de la mayor o menor presencia del proceso espinoso y las láminas de S4. Los cuernos
del sacro, que representan los procesos articulares inferiores de la vértebra S5, se proyectan
inferiormente a cada lado del hiato del sacro.

La parte superior de la superficie lateral del sacro tiene una forma parecida a la oreja, por lo cual recibe
el nombre de cara auricular. Corresponde a la parte sinovial de la articulación sacroilíaca, entre el sacro y
el ilion. En el sujeto vivo, la cara auricular está cubierta por cartílago hialino.
COSTILLAS

NÚMERO DE COSTILLAS, CLASIFICACIÓN Y LA SITUACIÓN ANATÓMICA QUE OCUPAN


Las costillas, 12 pares, forman parte del esqueleto torácico, junto a los cartílagos costales asociados.

Las costillas son huesos planos y curvos que constituyen la mayor parte de la caja torácica. Son
especialmente ligeras en cuanto a su peso, y muy elásticas. Se las compara con arcos (arcos costales). La
longitud de las costillas aumenta desde la primera a la séptima y disminuye desde la 7ª a la 12ª. Cada
costilla posee un interior esponjoso que contiene la médula ósea roja (tejido hematopoyético),
productora de células sanguíneas.

Hay tres tipos de costillas que pueden clasificarse como típicas o atípicas:

1. Las costillas verdaderas (vertebrocostales, 1.ª-7.ª costillas) se unen directamente al esternón


mediante sus propios cartílagos costales.

2. Las costillas falsas (vertebrocondrales, las costillas 8.ª, 9.ª y normalmente la 10.ª) tienen
cartílagos que se unen al de la costilla inmediatamente superior a ella; de este modo, su conexión
con el esternón es indirecta.

3. Las costillas flotantes (libres, costillas 11.ª, 12.ª y a veces la 10.ª) tienen cartílagos
rudimentarios que nunca conectan, ni directa ni indirectamente, con el esternón; por el
contrario, terminan en la musculatura posterior del abdomen.

Desde posterior, se encuentran tendidas desde la columna vertebral, unidas a las vértebras. Desde
anterior, se encuentran hacia el esternón al cual están unidas por medio de los cartílagos costales.

• Posición: Lateralmente, la cara convexa; abajo, el borde más cortante; atrás, la extremidad que
presenta superficies articulares. El surco costal siempre mirando a caudal.

CARACTERÍSTICAS GENERALES
Las costillas típicas (3.ª-9.ª) poseen los siguientes componentes:

⎯ Una cabeza, en el extremo posterior con forma de cuña y dos caras articulares separadas por la
cresta de la cabeza de la costilla. Una cara se articula con su vértebra numéricamente
correspondiente y la otra lo hace con la inmediatamente superior.
⎯ Un cuello que conecta la cabeza con el cuerpo al nivel del tubérculo.

⎯ El tubérculo tiene una porción articular lisa para la articulación con el proceso transverso de la
vértebra correspondiente, y una porción no articular rugosa para la inserción del ligamento
costotransverso.

⎯ Un cuerpo delgado, plano y curvo, especialmente en el ángulo de la costilla donde la costilla gira de
forma anterolateral. El ángulo también constituye el límite lateral de la inserción en las costillas de
los músculos profundos del dorso.

En la superficie interna cóncava del cuerpo hay un surco de la costilla, paralelo al borde inferior de la
costilla, que protege en parte al nervio y los vasos intercostales.

Las costillas no son rectilíneas ni horizontales. Configuran una larga convexidad, posterior, lateral y luego
anterior. Su dirección general es oblicua hacia abajo y adelante.

Articulada con el cuerpo vertebral por medio de la cabeza, la costilla se dirige oblicuamente hacia lateral
y hacia atrás. Luego, por su cuello, se une a la apófisis transversa vertebral, con la que se articula por su
tubérculo. De allí se dirige lateralmente formando el ángulo costal posterior, a partir del cual se establece
la curvatura de enrollamiento. Esta curvatura lleva a la costilla primero en sentido lateral, luego hacia
adelante y, por último, medialmente: aquí se ubica el ángulo anterior, mucho menos marcado que el
posterior.

El ángulo costovertebral, abierto hacia abajo, es tanto más agudo cuanto


más inferior es la costilla. Se trata del espacio creado por la pendiente lateral
descendente de la última costilla y el comienzo de las vértebras lumbares o
los huesos posteriores de la columna vertebral.

Si se coloca una costilla sobre un plano horizontal, no se apoya sino por su parte media y por una de sus
extremidades; ésta es la curvatura de torsión, que lleva la extremidad posterior de la costilla hacia arriba
y atrás, mientras que su extremidad anterior se dirige hacia abajo y medialmente.

Por último, se distingue una curvatura en el eje longitudinal, de manera que la cara superficial (convexa)
está orientada hacia abajo y atrás en su parte posterior, pero hacia arriba y adelante en su parte anterior.

COSTILLAS ATÍPICAS
Las costillas atípicas (1.ª, 2.ª y 10.ª-12.ª) se diferencian del resto por varias características:

⎯ La 1.ª costilla es la más ancha (es decir, su cuerpo es más ancho y casi horizontal), corta y curvada
de las siete costillas verdaderas. Tiene una única cara en su cabeza para articularse sólo con la
vértebra T1, y dos surcos, que cruzan transversalmente su cara superior, para los vasos
subclavios; los surcos están separados por una cresta y un tubérculo del músculo escaleno
anterior, que proporciona inserción a dicho músculo.

⎯ La 2.ª costilla es más delgada, menos curva y más larga que la 1.ª costilla. Tiene dos caras
articulares en su cabeza para la articulación con los cuerpos de las vértebras T1 y T2. Su
característica más atípica es un área rugosa en su cara superior, la tuberosidad del músculo
serrato anterior, en la cual tiene parcialmente su origen este músculo.
⎯ Las costillas 10.ª-12.ª, al igual que la 1.ª costilla, tienen sólo una cara articular en sus cabezas y
se articulan con una sola vértebra. Las costillas 11.ª y 12.ª son cortas y no presentan cuellos ni
tubérculos.

CARTÍLAGOS COSTALES
Los cartílagos costales prolongan las costillas anteriormente y contribuyen a la elasticidad de la pared
torácica, proporcionando una inserción flexible para sus terminaciones anteriores (extremos).

La longitud de los cartílagos es creciente en los siete primeros, y decrece gradualmente en los siguientes.
Los siete primeros cartílagos costales se insertan, de manera directa e independiente, en el esternón. El
8.º, 9.º y 10.º se articulan con los cartílagos costales justo por encima de ellos, formando el arco costal
cartilaginoso, continuo y articulado. Los cartílagos costales 11.º y 12.º forman bulbos sobre las
extremidades anteriores de las costillas correspondientes y no llegan a ponerse en contacto ni se articulan
con ningún hueso ni cartílago.

Los cartílagos costales de las costillas 1.ª-10.ª fijan claramente el extremo anterior de la costilla al
esternón, limitando su movimiento al girar su extremo posterior alrededor del eje transversal de la
costilla.
ESTERNÓN

POSICIÓN EN EL SUJETO ANATÓMICO


Colocar arriba la parte más ancha; adelante, la cara convexa donde las líneas transversales son más
marcadas. El conjunto se dirige oblicuamente de craneal a caudal y de atrás hacia adelante.

CARACTERÍSTICAS
El esternón es el hueso plano y alargado verticalmente que forma la parte central de la porción anterior
de la caja torácica. Recubre directamente y protege las vísceras mediastínicas en general y gran parte del
corazón en particular. El esternón consta de tres porciones: manubrio, cuerpo y proceso xifoides. En
adolescentes y adultos jóvenes, las tres partes están unidas mediante articulaciones cartilaginosas
(sincondrosis), que se osifican durante la edad adulta media o tardía.

MANUBRIO

El manubrio (como la empuñadura de una espada, con el cuerpo esternal formando la hoja) forma parte
del esqueleto óseo del cuello y del tórax.

La superficie superior del manubrio se expande lateralmente y presenta una escotadura palpable y
característica, la escotadura yugular (escotadura supraesternal), en la línea media. A cada lado de esta
escotadura existe una gran fosa oval para la articulación con la clavícula. Inmediatamente inferior a la
fosa, en cada superficie lateral del manubrio, existe una cara para la unión del primer cartílago costal. En
el extremo inferior del borde lateral existe una hemicarilla para articularse con la mitad superior del
extremo anterior del segundo cartílago costal.

El manubrio y el cuerpo del esternón se hallan en planos ligeramente diferentes superior e inferiormente
a su unión, la articulación manubrioesternal; por lo tanto, su unión forma una proyección, el ángulo del
esternón (de Louis).
CUERPO

El cuerpo del esternón es más largo, más estrecho y delgado que el manubrio, y está localizado a nivel
de las vértebras T5-T9. La superficie anterior del cuerpo del esternón suele estar marcada por crestas
transversales que representas líneas de fusión entre los elementos segmentarios denominados
esternebras, de las cuales se origina embriológicamente esta parte del esternón.

Los bordes laterales del cuerpo del esternón presentan caras articulares para los cartílagos costales
(incisuras costales). Superiormente, cada margen lateral presenta una hemicarilla para su articulación
con la parte inferior del segundo cartílago costal. Inferior a esta hemicarilla, existen cuatro capas para su
articulación con los cartílagos costales de las costillas III a VI.

En el extremo inferior del cuerpo, existe una hemicarilla para su articulación con la hemicarilla superior
del séptimo cartílago costal. El extremo inferior del cuerpo del esternón está unido a la apófisis xifoides.

APÓFISIS XIFOIDES

Es la parte más pequeña del esternón. Su forma es variable: puede ser amplio, plano, en punta, bífido,
curvo o perforado. Comienza siendo una estructura cartilaginosa que se osifica en el adulto. Su extremo
inferior se encuentra al nivel de la vértebra T10.

A cada lado de su margen lateral superior, existe una hemicarilla para su articulación con el extremo
inferior del séptimo cartílago costal.

El proceso xifoides es un importante punto de referencia del plano medio debido a que:

• Su unión con el cuerpo del esternón en la articulación xifoesternal señala el límite inferior de la
parte central de la cavidad torácica; esta unión es también la localización del ángulo infraesternal
(subcostal) formado por los arcos costales derecho e izquierdo.

• Es un marcador de la línea media para el límite superior del hígado, el centro tendinoso del
diafragma y el borde inferior del corazón.
ARTICULACIONES DEL TÓRA
EXOCRÁNEO I

El esqueleto óseo de la cabeza está compuesto por el cráneo y por la mandíbula.

CRÁNEO

Está constituido por 21 huesos que mayoritariamente son huesos planos. De estos, cinco son impares y
ocho son pares. Los huesos del cráneo se van a unir a través de suturas que, desde el punto de vista
anatómico, son articulaciones de tipo sinartrosis.

NORMAS O VISIONES DEL CRANEO


Diferenciamos 5 normas: una norma rostral o frontal (visión anterior), norma lateral (visión lateral),
norma occipital o dorsal (visión posterior), norma craneal o vertical (visión superior) y una norma basal
o base del cráneo (visión caudal o inferior).

Además de estas cinco normas, se diferencia alguna norma más que se obtiene al seccionar el cráneo en
dirección oblicua desde la parte anterior hacia la parte dorsal. Realizando este corte, se obtienen dos
porciones en el cráneo: una porción superior denominada calota (calvaria) y una porción inferior, donde
se observa la norma endocraneana o endocráneo.

NORMA CRANEAL

Habitualmente de forma algo oval, se ensancha posterolateralmente en las eminencias parietales. En


algunas personas también son visibles las eminencias frontales, lo que otorga al cráneo un aspecto casi
cuadrado.

Se distinguen los siguientes huesos: hueso frontal, huesos parietales y parte del occipital.

La sutura coronal separa los huesos frontal y parietales, la sutura sagital o interparietal separa los huesos
parietales, y la sutura lambdoidea separa los huesos parietal (y temporal) del hueso occipital.

El bregma o fontanela mayor es el punto craneométrico formado por la intersección de las suturas sagital
y coronal (confluencia de los huesos parietales con el frontal). Otro punto antropométrico destacable es
el lambda o fontanela menor, que se formaría en la confluencia de los huesos parietales con el occipital.
NORMA DORSAL

Está constituida por los dos huesos parietales, el hueso occipital (occipucio: protuberancia posterior
convexa de la porción escamosa del hueso occipital) y también se puede observar las apófisis mastoides
de los huesos temporales.

Entre las suturas de esta norma destaca la sutura sagital y la lamboidea. Igualmente, puede observarse,
en parte, la sutura occipitomastoidea (huesos occipital y temporal).

En cuanto a los puntos craneométricos, sobresale lambda, que indica la unión de las suturas sagital y
lambdoidea. Uno o más huesos suturales (huesos accesorios, supranumerarios o wormianos) pueden
localizarse en lambda o cerca del proceso mastoides.

Entre los accidentes anatómicos más relevantes de esta norma, destacarían los orificios o forámenes
parietales, orificios pequeños e inconstantes que están situados posteriormente en el hueso parietal,
cerca de la sutura sagital. A menudo puede haber forámenes parietales pares.

A nivel del occipital, se localiza la escama del occipital, donde se encuentra el punto antropométrico
inión o protuberancia occipital externa, la cresta occipital externa y las líneas nucales superior e inferior.
NORMA FRONTAL

Los elementos que forman la cara anterior del cráneo son los huesos frontal y cigomáticos (o malares),
las órbitas, la región nasal, los maxilares y la mandíbula.

Dentro del hueso frontal diferenciamos las siguientes porciones:

• Una porción más lisa que recibe el nombre de escama del hueso frontal.

• Una porción que se introduce en la órbita, denominada porción orbitaria del hueso frontal.

• Una porción que se articula con el hueso cigomático, apófisis cigomática del frontal.

Justamente, en el interior de la escama del frontal y por encima de la órbita, encontraríamos los senos
frontales pares.

El hueso frontal también se articula con los huesos lagrimales, etmoides y esfenoides.

En el hueso cigomático o malar, distinguimos las siguientes porciones:

• Una porción central más voluminosa, el cuerpo del hueso cigomático.

• Una porción ascendente para articularse con el hueso frontal, apófisis frontal del cigomático.

• Una porción anterior que se articula con el hueso maxilar, apófisis maxilar del hueso cigomático.

• Una porción en dirección dorsal que se articula con el hueso temporal, apófisis temporal del
hueso cigomático.
Los maxilares forman la mandíbula superior. En cuanto a las porciones que distinguimos:

• Una parte central o cuerpo de maxilar.


• La apófisis frontal del maxilar.
• La apófisis piramidal o cigomática del maxilar.
• La apófisis alveolar que corresponde al lugar donde se alojan las raíces de los dientes maxilares.

Entre las suturas más características de esta norma se encuentra la sutura metópica que aparece en
determinados individuos en la línea media del frontal debido a que el hueso frontal se origina
embrionariamente a partir de dos puntos de osificación diferentes.

Entre los puntos antropométricos que podemos destacar en esta norma, estaría la glabela, situada a la
altura del entrecejo, y el nasión, localizado en la confluencia de la sutura internasal con la frontal
(intersección de los huesos frontal y nasales).

Respecto a los orificios más destacados de esta norma sobresalen la órbita, la entrada a las fosas nasales
(adictus piriforme), la escotadura u orificio supraorbitario y orificio infraorbitario.

NORMA LATERAL

Encontramos los siguientes huesos: hueso frontal, hueso parietal, hueso occipital, hueso temporal,
hueso esfenoides y el hueso cigomático.

En el caso del hueso frontal, se observa gran parte de la escama del hueso del frontal y también la apófisis
cigomática del frontal.

En cuanto al hueso occipital, se diferencia parte de la escama del occipital.

En el hueso temporal, se distinguen varias regiones:


• La escama del hueso temporal, la parte más lisa.

• La porción mastoidea.

• Apófisis estiloides, un saliente en la parte caudal que en realidad tiene un origen embrionario
distinto al del hueso temporal pero que, en el adulto, se sitúa finalmente en este hueso.

• Apófisis cigomática del hueso temporal.

En el caso del hueso cigomático, se encuentra el cuerpo del cigoma, las apófisis ascendente, piramidal
(o cigomática) y temporal.

Entre las suturas más relevantes, destacan la sutura coronal y la sutura escamosa.

Respecto a los puntos antropométricos:

⎯ Pterión (sutura esfenoparietal), que se forma en la confluencia de cuatro huesos: frontal, parietal,
esfenoides y temporal. Constituye la unión de cinco suturas (suturas coronal, esfenofrontal,
esfenoparietal, esfenoescamosa y escamosa) que adquieren la forma característica de letra H. Se
localiza a nivel de la sién y, al ser la unión o confluencia de tantos huesos, se trata de un punto de
fragilidad del cráneo.

⎯ Asterión. En la parte más dorsal, se forma en la confluencia del hueso parietal, occipital y la apófisis
mastoides. Constituye la unión de tres suturas (suturas parietomastoidea, lambdoidea y
occipitomastoidea).
Entre los accidentes anatómicos más importantes de esta norma encontramos:

• Las líneas temporales superior e inferior, a la altura del hueso parietal.

• A nivel del hueso temporal, la mastoides y el orificio mastoideo.

• El conducto auditivo externo.

• Apófisis cigomática del temporal que se articula con la apófisis temporal del cigoma,
constituyendo el arco cigomático o asa de la calavera. En su parte final, encontramos, en el
hueso temporal, la cavidad glenoidea o cavidad articular que se articulará con el cóndilo de la
mandíbula, constituyendo la articulación temporomandibular.

NORMA BASAL (BASE DEL CRÁNEO)

Entre los huesos que conforman la normal basal se encuentran los hueso maxilar, palatino, temporal de
ambos lados, el etmoides, el esfenoides y el occipital.

Los huesos maxilar y palatino constituyen en la base del cráneo lo que se denomina paladar óseo o duro.
Los dos huesos maxilares se unen a través de la sutura intermaxilar. Los dos huesos palatinos se unen
mediante la sutura interpalatina. Los huesos maxilar y palatino se unen a través de la sutura palatina
transversa. La unión de estas tres suturas adquiere forma de cruz, por lo que se denomina sutura cruzada
o cruzoide.

A nivel del paladar, se localizan varios orificios:

• El orificio conducto incisivo, en la parte más anterior del paladar.


• Orificios palatinos mayores y menores, en la parte más posterior del paladar.

En el caso del hueso etmoides, se observa la lámina vertical del etmoides.

Respecto al hueso esfenoides, se puede identificar parte de las alas mayores del esfenoides con los
orificios redondo menor o foramen espina (inferior) y orificio oval. Además, se observan las apófisis
pterigoides, con su lámina externa (lateral) e interna (medial).

En el caso del hueso temporal, se puede apreciar como forma el asa de la calavera o arco cigomático al
unirse con el hueso cigomático y, además, la cavidad glenoidea o superficie articular para articularse con
el cóndilo mandibular y constituir la articulación temporomandibular. Igualmente, se aprecia el conducto
auditivo externo, las apófisis estiloides y mastoides. Entre ambas, se sitúa el orificio estilomastoideo.

Asimismo, se distingue el orificio carotídeo para el paso de la arteria carótida. En la confluencia del hueso
esfenoides, temporal y occipital se formaría el orificio rasgado anterior o foramen lácero, a ambos lados.

En cuanto al hueso occipital, se diferencian la porción basilar del occipital con el tubérculo faríngeo, los
cóndilos del occipital, el conducto del nervio hipogloso, los orificios retrocondíleos, el foramen magno,
la cresta occipital externa, la protuberancia occipital externa o inión, la línea nucal inferior y superior.
MANDÍBULA

La mandíbula es un hueso que está formado por dos porciones distintas. Por un lado, toda una parte
central que se denomina cuerpo de la mandíbula y, a los lados, dos proyecciones que se denominan
ramas de la mandíbula. El cuerpo y cada una de las ramas están unidas a través del ángulo de la
mandíbula, en el que se encuentra un importante punto antropométrico denominado gonion.

En el cuerpo de la mandíbula podemos distinguir una cara anterior, una cara posterior, un borde craneal
o superior y un borde inferior.

⎯ A nivel de la cara anterior, se localizan algunos relieves como la sínfisis mentoniana y,


ligeramente mas lateral, el orificio mentoniano a ambos lados.

⎯ En el borde craneal o superior, se observa el reborde o apófisis alveolar que sirve para dar
soporte o alojamiento a las raíces de los dientes mandibulares.

En el caso de la rama de la mandíbula, las principales estructuras óseas que observamos son, por un lado,
la apófisis coronoides. A continuación, la escotadura mandibular; y en la parte más dorsal y craneal, el
cóndilo mandibular que se articulará con la cavidad glenoidea del hueso temporal para formar la
articulación temporomandibular (ATM).
ANEXO I.
MIEMBRO SUPERIOR I: CLAVÍCULA, ESCÁPULA Y HÚMERO

CLAVÍCULA

La clavícula es un hueso par que se sitúa en el sujeto anatómico en la región más superior y anterior de
la caja torácica. Para situarlo anatómicamente, hay que tener en cuenta varios aspectos:

⎯ La extremidad más aplanada se sitúa en la región lateral.


⎯ La cara superior es lisa, mientras que la inferior es rugosa.
⎯ Convexidad ventral que localizamos medialmente.

La clavícula va a tener una forma de S itálica. Se trata de un hueso alargado, pero, a pesar de su apariencia,
no puede ser englobado dentro de los huesos largos, ya que carece de canal medular. Por tanto, la
clavícula es considerada un hueso plano.

Va a presentar dos extremidades:

⎯ Extremidad medial o esternal. Está destinada a articularse con la escotadura clavicular del
esternón presentando, por tanto, una carilla articular para tal fin.

⎯ Extremidad lateral o acromial. Más aplanada, está destinada a articularse con el acromion de la
escápula presentando, por tanto, una pequeña carilla articular.

Clavícula derecha

Asimismo, la clavícula presenta dos caras y dos bordes:

⎯ Cara superior. Principalmente lisa, donde no se diferencia ningún relieve de importancia.

⎯ Cara inferior. Se localizan diferentes rugosidades que, de medial a lateral van a ser:
• Impresión del ligamento costoclavicular. Sirve de inserción para el ligamento
costoclavicular que se sitúa en la región inferior y medial de la clavícula, muy próximo
a la extremidad esternal.
• Impresión del músculo subclavio. Sirve para que el músculo subclavio se apoye
directamente sobre la clavícula en este nivel.

• Impresión del ligamento coracoclavicular. Va a estar diferenciada en la línea


trapezoidea y en el tubérculo conoideo.

⎯ Borde ventral o anterior.

⎯ Borde dorsal o posterior.

ESCÁPULA U OMÓPLATO

Hueso plano que se sitúa anatómicamente en la región posterior y craneal de la caja torácica. Para
conocer la posición anatómica de la escápula hay que fijarse en varios aspectos:

⎯ La cavidad glenoidea se sitúa lateralmente.

⎯ La espina de la escápula debe situarse dorsalmente.

⎯ La apófisis coracoides debe posicionarse ventralmente.

Presenta una cara ventral, una cara dorsal, un borde medial, un borde lateral y un borde superior.
Localizamos también un ángulo superior, un ángulo inferior y un ángulo lateral.

⎯ Cara ventral: fosa subescapular. Superficie ligeramente cóncava, lisa prácticamente y ocupada
por el músculo subescapular.

⎯ Cara dorsal. Presenta en su región superior una prominencia alargada que se dirige lateralmente,
denominada espina de la escápula. Esta, en su región más lateral, se aplana constituyendo el
acromion, que se va a relacionar con la extremidad acromial de la clavicular.

A su vez, va a dividir en dos a la cara posterior:


• Cranealmente a la espina de la escápula, se encuentra la fosa supraespinosa ocupada
por el músculo supraespinoso.

• Inferiormente a la espina de la escápula, se localiza la fosa infraespinosa ocupada por


el músculo infraespinoso.

⎯ Borde lateral. En la región más craneal, formado el ángulo lateral, se diferencia una expansión
llamada cavidad glenoidea de la escápula que presenta una superficie articular para relacionarse
y formar la articulación con la cabeza del húmero, constituyendo la articulación glenohumeral.

Cranealmente a esta cavidad glenoidea, se localiza el tubérculo supraglenoideo y, caudalmente,


el tubérculo infraglenoideo.

En la región más medial de la cavidad glenoidea, se diferencia el cuello de la escápula.

⎯ Borde superior. Presenta la escotadura de la escápula que va a prolongarse hacia ventral,


constituyendo la apófisis coracoides.
HÚMERO

El húmero es un hueso de tipo largo y par. Anatómicamente, se sitúa en el miembro superior,


concretamente conformando el esqueleto del brazo.

Para situar el húmero en posición anatómica hay que fijarse en varios aspectos:

⎯ La cabeza humeral siempre se va a dirigir medialmente.

⎯ En la epífisis distal, en la región posterior, la fosa más voluminosa o prominente es la fosa


olecraniana.

En la epífisis proximal del húmero, se localiza la cabeza humeral orientada hacia medial, ligeramente
hacia dorsal y hacia craneal. Tiene como objetivo articularse con la cavidad glenoidea de la escápula,
constituyendo así la articulación glenohumeral.

Caudalmente a la cabeza humeral y en su región ventral, se encuentra el tubérculo menor del húmero o
troquín y, lateral a este, otra prominencia denominada tubérculo mayor del húmero o troquiter. Entre
ambos tubérculos se halla un surco llamado surco intertubercular o corredera bicipital, puesto que esta
ocupado por el tendón de la cabeza larga del bíceps braquial.

Separando la cabeza humeral de ambos tubérculos, se localiza el cuello anatómico del húmero. Si
englobamos la cabeza del húmero con ambos tubérculos, la separación respecto a la diáfisis humeral
constituye el cuello quirúrgico del húmero (adquiere este nombre ya que es frecuente el asentamiento
de fracturas a este nivel).

La diáfisis o cuerpo humeral, en su conjunto, tiene una impresión de que está retorcida sobre su propio
eje. Se dividirá en tres caras y tres bordes.

⎯ Cara anteromedial. Separada de la cara anterolateral por el borde anterior y de la cara posterior
por el borde medial. Lo más destacado es la presencia de un foramen nutricio, localizado en el
tercio medio ligeramente distal.

⎯ Cara anterolateral. Separada de la cara anteromedial por el borde anterior y de la cara posterior
por el borde lateral. Resulta relevante una rugosidad o impresión denominada v o tuberosidad
deltoidea, donde se insertará el músculo deltoides.
⎯ Cara posterior. Sobresale la presencia de un gran surco que recorre esta cara posterior del hueso
craneocaudalmente y mediolateralmente llamado surco del nervio radial, donde se encuentra
el nervio radial directamente aplicado sobre el hueso dejando esta impresión.

La epífisis distal del húmero, también conocida como paleta humeral, adquiere una forma prismática
triangular. En ella, se distinguen diferentes estructuras:

Dos superficies articulares, una de ellas en la región medial y otra en la región lateral. La superficie
articular en la región medial va a tener una forma de polea y se denomina tróclea humeral, destinada a
articularse con el cúbito. Cranealmente a esta tróclea humeral, se encuentra una pequeña fosa, la fosa
supratroclear o coronoidea, destinada a alojar la apófisis coronoides del cúbito.

Lateralmente a la superficie articular troclear, se distingue una superficie articular con forma esférica
denominada cóndilo humeral y, cranealmente a este cóndilo, una pequeña fosa, la fosa radial. El cóndilo
humeral va a estar destinado a articularse con la cabeza del radio.

Lateralmente a la superficie articular con forma de esfera, se encuentra un saliente, el epicóndilo lateral
y, medialmente a la superficie articular troclear, otro saliente, el epicóndilo medial. Estos epicóndilos,
cranealmente va a tener unos salientes llamados crestas supracondíleas: cresta supracondílea medial y
lateral.

En la visión dorsal de la epífisis del húmero, se aprecia una superficie articular, la superficie articular
troclear. Craneal a esta, se localiza la fosa olecraniana, destina a alojar el pico del olecranon del cúbito.
Medialmente, se encuentra el epicóndilo medial y, entre el epicóndilo medial y la superficie troclear, se
halla un surco destinado al paso del nervio cubital. Lateralmente, el epicóndilo lateral.
MIEMBRO SUPERIOR II: RADIO, CÚBITO Y MANO

HUESOS DEL ANTEBRAZO

RADIO
El radio, un hueso par y largo, es el más corto y lateral de los dos huesos del antebrazo. En posición
anatómica, el antebrazo se encuentra en supinación.

Su extremo proximal consta de una cabeza corta, un cuello y una tuberosidad que se dirige medialmente.

⎯ Proximalmente, la lisa cara superior de la cabeza del radio es cóncava para articularse con el
cóndilo del húmero durante la flexión y la extensión de la articulación del codo. La cabeza
también se articula periféricamente con la incisura radial de la ulna, y por ello se encuentra
recubierta de cartílago articular.
⎯ El cuello del radio es una constricción distal a la cabeza.

⎯ La tuberosidad del radio, de forma ovalada, es distal a la parte medial del cuello y marca el límite
entre el extremo proximal (cabeza y cuello) y el cuerpo del radio.

El cuerpo del radio, en contraste con el de la ulna, se ensancha de forma progresiva a medida que avanza
en dirección distal.

El extremo distal del radio tiene esencialmente cuatro caras si se observa en una sección transversal. Su
cara medial forma una concavidad, la incisura ulnar, en la cual se acomoda la cabeza de la ulna. Su cara
lateral adopta una forma de cresta cada vez más acusada para terminar distalmente en el proceso
estiloides del radio.

El tubérculo dorsal del radio se proyecta dorsalmente y se sitúa entre dos de los surcos poco profundos
por los que pasan los tendones de los músculos posteriores del antebrazo. El proceso estiloides del radio
es mayor y más distal que el de la ulna.

CÚBITO O ULNA
El cúbito o ulna es un hueso par y largo, que se ubica en la región medial o interna del antebrazo. En
posición anatómica, el antebrazo se encuentra en supinación.

Para identificar si el cúbito pertenece al lado derecho o izquierdo del cuerpo, hay que fijarse en la
escotadura radial, ubicada en la región superior y lateral de la epífisis proximal. Además, observando el
cúbito desde una vista anterior, en la epífisis proximal se identifica una gran depresión articular: la
escotadura troclear. En la epífisis distal, se localiza una superficie articular esferoidea o cabeza del cúbito.
En el cúbito vamos a diferenciar tres bordes: interóseo, medial y posterior que delimitan tres caras:
anterior, medial y posterior.

⎯ Epífisis proximal. Presenta una gran depresión articular, la escotadura troclear, destinada a
articularse con el húmero mediante la articulación humerocubital.

En su región superior y lateral, se identifica otra pequeña depresión denominada escotadura


radial, la cual se va a articular con la circunferencia articular de la cabeza del radio mediante la
articulación radiocubital proximal.

Igualmente, sobresale un saliente óseo en la región anterior que es la apófisis coronoides,


mientras que en la región posterior se encuentra un elemento anatómico rugosos, el olecranon,
que servirá como lugar de inserción para el músculo tríceps braquial.

⎯ Diáfisis. En su región anterior, tiene especial relevancia la tuberosidad del cúbito, por debajo de
la apófisis coronoides, y el borde interóseo, que servirá como lugar de inserción a la membrana
interósea.

⎯ Epífisis distal. En la cara anterior, sobresale la cabeza del cúbito, con su circunferencia articular,
la cual se unirá a la escotadura cubital del radio, formando la articulación radiocubital distal.

En su cara posterior, se encuentra la apófisis estiloides del cúbito.


MANO

La mano es la región anatómica que se encuentra más distal en el miembro superior. Está formada por
27 huesos, de los cuales 8 son huesos del carpo, 5 son metacarpianos y 14 son falanges. Los huesos del
carpo son huesos cortos, mientras que los metacarpianos y las falanges son huesos largos.

La mano puede estudiarse mediante una visión palmar o dorsal. La posición anatómica de la mano se
establece en la vista palmar. Para identificarla, debemos fijarnos en los huesos pisiforme, en el gancho
del ganchoso, en el tubérculo del trapecio y en los huesos sesamoideos del primer metacarpiano, ya que
estas estructuras óseas únicamente se observan en la vista palmar.

Para saber si la mano observada se trata de la derecha o de la izquierda, hay que fijarse en los huesos
relacionados con el primer dedo, ya que sabemos que este es el más externo o del lado radial.

HUESOS CARPIANOS
Los 8 huesos carpianos pueden dividirse en dos hileras:

⎯ Hilera proximal. Formada por los huesos (de lateral a medial) escafoides, semilunar, piramidal
y pisiforme. Se relaciona con radio (carilla carpiana) y cúbito mediante la articulación
radiocarpiana y el ligamento triangular del cúbito.

⎯ Hilera distal. Formada por los huesos trapecio, trapezoide, el grande y el ganchoso. Se
relacionaría con la hilera proximal mediante la articulación mediocarpiana y también mediante
las carillas articulares de la base de los metacarpianos, formando la articulación
metacarpofalángica.

HUESOS METACARPIANOS
Los 5 huesos metacarpianos se enumeran de radial a cubital del primero al quinto. Cada uno consta de
una base, un cuerpo y una cabeza.

⎯ Base. En la región inferior de la base se ubica una carilla articular para unirse a los huesos de la
hilera distal del carpo.

⎯ Cabeza. En la región superior se halla una superficie articular para unirse a la falange proximal.

En el primer dedo, destaca la existencia de los huesos sesamoideos medial y lateral. Asimismo,
sobresalen los espacios entre los metacarpianos, denominados espacios interóseos cuya finalidad es
albergar los músculos interóseos palmares y dorsales.

FALANGES
Existen 14 falanges. Del 2º al 5º dedo, se diferencian las falanges proximal, media y distal; mientras que,
en el primer dedo, únicamente se distinguen la falange proximal y distal.

La estructura de las falanges es la misma que los metacarpianos: presentan una base, un cuerpo y una
cabeza. En el caso de las falanges proximales, la base está relacionada con los metacarpianos, mediante
la articulación metacarpofalángica.
Las falanges se relacionan entre sí mediante articulaciones interfalángicas proximales y distales, así como
en la falange distal, en la región superior, destaca la tuberosidad de las falanges.
MIEMBRO INFERIOR I: COXAL (PELVIS), FÉMUR Y RÓTULA .

COXAL

El hueso coxal definitivo es el hueso grande y plano formado por la fusión de tres huesos primarios (ilion,
isquion y pubis). Junto con el sacro y el otro hueso coxal, van a formar la pelvis.

Se sitúa en el sujeto anatómico en la región más inferior del tronco.

Para saber la posición anatómica del hueso coxal, habrá que fijarse en:

• El acetábulo que debe quedar hacia lateral.

• La fosa ilíaca que mira hacia medial.

Por otro lado, presentará dos caras, cuatro bordes y cuatro ángulos.

⎯ Cara lateral. Se encuentran, de superior a inferior:

• Fosa ilíaca externa o cara glútea. Divida por las líneas glúteas:
o Línea glútea anterior. Se extiende desde las proximidades del ángulo anterior del hueso
hacia el borde posterior.

o Línea glútea posterior. Más vertical, se extiende desde el borde superior del hueso
hasta la parte posterior de la escotadura ciática.

Estas dos líneas dividen la cara glútea en tres zonas: una zona glútea posterior, media y
anteroinferior. Estas zonas glúteas van a servir para la inserción de los músculos glúteos.

Caudal a la línea glútea inferior, se localiza el surco acetabular. Al descender, se encuentra el


acetábulo, contorneado por un saliente, el borde acetabular. Además, va a estar formado en su
interior por una zona lisa con forma cuadrilátera: la fosa acetabular (zona no articular). Esta, está
circunscrita por una carilla semilunar, la zona articular.

En el acetábulo se pueden observar las uniones de los diferentes huesos: ilion, isquion y pubis.

Las escotaduras iliopúbica e ilioisquiática prácticamente no son visibles (al ser pequeñas
depresiones). En cambio, la escotadura isquiopúbica presenta un relieve mayor y constituye, en
el borde inferior del acetábulo la escotadura acetabular.

Inferiormente, se halla el foramen obturado, formado ventralmente por la rama superior u


horizontal e inferior del pubis; posteriormente, por la porción vertical o cuerpo y rama del
isquion. Entre estas dos estructuras del isquion, se forma prácticamente un ángulo recto donde
se localiza la tuberosidad isquiática.

En el foramen obturado, se puede observar un saliente, a nivel de la rama del pubis, el tubérculo
obturado anterior. Existe otro saliente, en la región inferior a la escotadura acetabular: el
tubérculo obturado posterior.

⎯ Cara medial. Va a estar divida en dos zonas por la línea arqueada o arcuata. Superiores a esta
línea arqueada, se encuentra la fosa ilíaca, ocupada por el músculo ilíaco.
Posteriormente a la fosa ilíaca, se localiza una superficie irregular divida en dos zonas:

• Superficie auricular del coxal. Superficie articular destinada a articularse con la


superficie auricular del sacro.

• Posteriormente, se encuentra la tuberosidad ilíaca, destinada a la inserción de los


ligamentos sacroilíacos.

Inferiormente a la línea arqueada, se observa el foramen obturado. Siguiendo la línea arqueada,


la región más ventral presenta un pequeño aplanamiento, denominado pecten del pubis. Si
continuamos, se aprecia la carilla articular para la sínfisis del pubis, destinada a articularse con
la carilla articular del otro coxal y formar la articulación de la sínfisis del pubis.

Encontramos la rama del pubis, conformando el foramen obturado, así como la porción vertical
o cuerpo y rama del isquion.

⎯ Borde superior. Constituido por la cresta ilíaca, la cual presenta dos labios: un labio medial o
interno y un labio externo o lateral. Finaliza en una prominencia denominada espina ilíaca
anterosuperior.

⎯ Borde anterior. Al descender, se observa una pequeña escotadura carente de nombre, así como
otra prominencia, la espina ilíaca anteroinferior. Si seguimos descendiendo, se localiza otra
escotadura sin nombre.

⎯ Borde inferior. Ningún relieve a destacar.

⎯ Borde posterior. De craneal a caudal, el borde superior y posterior se unifican o tienen


continuidad mediante una protuberancia, la espina ilíaca posterosuperior.

Al descender, se encuentra la espina ilíaca posteroinferior. Caudalmente, una gran escotadura


llamada escotadura ciática mayor o isquiática. La siguiente estructura es una eminencia,
denominada espina isquiática, seguida de otra escotadura de menor dimensión, la escotadura
ciática menor; hasta llegar a nivel de la tuberosidad isquiática.

⎯ Ángulo anterosuperior. Constituido por la espina ilíaca anterosuperior.

⎯ Ángulo anteroinferior. Constituido por el ángulo que se forma entre la rama horizontal e inferior
del pubis.

⎯ Ángulo posteroinferior. Formado por el ángulo que constituye la tuberosidad isquiática.

⎯ Ángulo posterosuperior. Constituido por la espina iliaca posterosuperior.


PELVIS

La pelvis, conformada por ambos coxales y el hueso sacro, va a poseer tres articulaciones:

⎯ Ventralmente, la sínfisis del pubis.


⎯ Dorsalmente, las dos articulaciones sacroilíacas.

Los huesos de la cintura pélvica delimitan dos regiones:

⎯ Pelvis mayor o falsa: la parte inferior del abdomen que se


encuentra entre las amplias crestas ilíacas. Constituida por las alas
del sacro y las fosas ilíacas.

⎯ Pelvis menor o verdadera: limitada por las líneas terminales, el


sacro y el cóccix, contiene las vísceras pélvicas. Tiene forma
cilíndrica, con una abertura superior e inferior.

En la pelvis, se puede distinguir:

• Un estrecho superior, delimitado por la línea arqueada


de cada uno de los coxales, el promontorio del sacro y la
región superior de la sínfisis del pubis.

• Un estrecho inferior, delimitado por el hueso coxis y las


tuberosidades isquiáticas.
DIFERENCIAS ENTRE HOMBRES Y MUJERES
La pelvis de la mujer y del hombre son diferentes en varios aspectos, muchos de los cuales tienen que ver
con el paso del feto al salir de la cavidad pélvica de la madre durante el parto.

⎯ La abertura superior en las mujeres tiene forma circular, frente a la abertura superior con forma
de corazón de los hombres. La forma más circular se debe, en parte, a que el promontorio no
está tan diferenciado y a que las alas son más anchas en las mujeres.

⎯ El ángulo formado por las dos ramas del arco púbico es mayor en las mujeres (80-85º) que en
los hombres (50-60ª).

⎯ Las espinas ciáticas no suelen hacer tanta protrusión en sentido medial hacia la cavidad pélvica
en las mujeres como lo hacen en los hombres.

FÉMUR

El fémur es un tipo de hueso largo que se localiza en el muslo (segundo segmento del miembro inferior).
Se articula, en la pelvis por craneal, con la rótula por caudal y ventral y en la tibia por caudal. Es el hueso
más largo, fuerte y voluminoso de todo el cuerpo humano.

Se divide en epífisis proximal, diáfisis y epífisis distal.

EPÍFISIS PROXIMAL
En la cara anterior:

Se aprecia la cabeza del fémur, esférica, orientada hacia medial, constituyendo la parte más craneal de
la epífisis proximal, por donde el hueso se articula con el coxal de la cadera. En ella, se encuentra la fosita
de la cabeza del fémur, una pequeña depresión central desde la que el ligamento redondo se extiende
hacia el acetábulo, fijando el fémur.

Por detrás, próxima a la cabeza del fémur, se halla el cuello, que es cilíndrico y conecta la cabeza con el
cuerpo de la diáfisis.

Cerca a él, se observa el trocánter mayor, una prominencia ósea situada en la epífisis que parte del punto
de unión entre el cuello del fémur y la diáfisis del mismo. Presenta una convexidad en la parte más externa
de la región de la cadera.
Opuesto a él, encontramos el trocánter menor, una prominencia ósea situada entre la diáfisis y el cuello.
Se encuentra unido al trocánter mayor a través de una línea denominada línea intertrocantérea, ubicada
en la superficie anterior.

En la cara posterior:

A nivel de la cabeza del fémur, se localiza una cresta que se extiende desde el trocánter mayor al trocánter
menor. Muy próximo al trocánter mayor, se localiza la fosa trocantérica o digital en la que se insertan los
músculos obturador y gémino o gemelo.

Ligeramente hacia caudal, se encuentran las líneas de trifurcación: lateral (se insertan los músculos vasto
interno y glúteo mayor), media (pectíneo y aductor menor) y medial (vasto interno).

DIÁFISIS
A lo largo de la diáfisis, en su cara posterior, se observa la línea áspera, con sus labios lateral y medio.
Discurrirán hacia caudal convirtiéndose en la línea supracondílea lateral y medial, dejando un espacio
entre medias, la cara poplítea.

EPÍFISIS DISTAL
En la parte más medial de la cara anterior, se localiza una protuberancia, el tubérculo aductor. Permite la
inserción en el tendón de las fibras verticales del aductor mayor. Más caudal, se encuentra el epicóndilo
medial.

En la posición más central de la cara anterior, se halla la fosa supratroclear, zona inmediatamente más
proximal y superior a la tróclea. En ella, se aloja la rótula cuando la pierna está en extensión. Por debajo
de ella, se ubica la tróclea femoral (carilla rotuliana), que se une a la tibia y a la rótula formando la
articulación de la rodilla.

En la zona lateral, se encuentra el epicóndilo lateral.

En su cara posterior, observamos la cara poplítea. Esta, tiene relación con el cóndilo medial y lateral,
eminencias o protuberancias redondeadas, semiesféricas, que encajan en el hueco de la tibia y la rótula
formando la articulación de la rodilla.

Entre el cóndilo lateral y medial se encuentra la fosa intercondílea, zona de inserción de los ligamentos
cruzando anterior y posterior.
RÓTULA O PATELA

La rótula es un hueso de tipo sesamoideo. No obstante, no es un hueso sesamoideo real, ya que un hueso
sesamoideo suele ser una calcificación dentro de un tendón, como ocurre en el extremo distal del primer
metacarpiano y primer metatarsiano.

Se localiza en el sujeto anatómico en la parte anterior a la rodilla e incluida en el tendón terminal del
músculo cuádriceps femoral, situado por delante de la extremidad inferior del hueso fémur. Por tanto,
se articula con la cara ventral del hueso fémur a través de su cara posterior.

Asimismo, la rótula es un hueso plano y redondeado, que suele tener forma de castaña. Presenta, en su
cara anterior o cutánea (convexa de arriba abajo):

• En la parte más caudal, un vértice que presta inserción al ligamento rotuliano.

• En la parte más craneal, una base o borde superior más aplanada que presta inserción, en su
mitad anterior, al tendón del cuádriceps. Se distingue una pequeña superficie triangular de
vértice superior.

La cara anterior está cubierta de manojos fibrosos procedentes del tendón del cuádriceps, único músculo
que se inserta en la misma. Igualmente, se encuentra separada de la piel por una bolsa serosa, la bolsa
prerrotuliana.
En la cara posterior (articular), constará de dos carillas rotulianas y presenta dos partes:

⎯ Parte inferior rugosa, próxima al paquete adiposo.


⎯ Parte superior lisa, próxima a los cóndilos del fémur.
MIEMBRO INFERIOR II: TIBIA, PERONÉ Y PIE

TIBIA

La tibia se sitúa en el sujeto anatómico en la parte medial de la pierna. Para situarlo en su posición
anatómica hay que fijarse en:

⎯ La tuberosidad anterior, que debe quedar hacia ventral.


⎯ El maléolo interno, que debe quedar hacia medial.

Se trata de un hueso largo con forma triangular que se va a relacionar por su parte proximal con el fémur
y con el peroné, así como por su parte distal con el astrágalo y el peroné. Asimismo, se dividirá en epífisis
proximal, diáfisis y epífisis distal.

EPÍFISIS PROXIMAL
En su cara anterior, se localiza la tuberosidad anterior de la tibia y el tubérculo de Gerdy.

En su cara posterior, se halla la línea oblicua o línea del sóleo y la carilla articular para el peroné.

En la cara superior se encuentran los cóndilos o platillos tibiales, con sus carillas articulares. En la zona
central, la eminencia intercondílea con los tubérculos medial y lateral. En la parte más anterior, se
localiza el área preespinal o intercondílea anterior y en la parte más posterior, el área retroespinal o
intercondílea posterior.

DIÁFISIS
Presentará tres bordes y tres caras:

⎯ Borde anterior, medial e interóseo.


⎯ Cara medial, lateral y posterior.

EPÍFISIS DISTAL
Está formada por el maléolo tibial, que quedará hacia la cara interna. En el lado contrario, se encuentra
la escotadura peronea.

En la parte más inferior, se localiza la carilla articular inferior para el astrágalo.

PERONÉ O FÍBULA

El peroné es un hueso largo. Para situarlo en el sujeto anatómico, hay que saber que se encuentra en la
región lateral de la pierna.

Para situar el hueso en posición anatómica, hay que fijarse en:

⎯ En la parte superior, el vértice del peroné quedará ligeramente hacia anterior.


⎯ En la parte más distal, la carilla articular debe quedar hacia ventral.

Por su parte más craneal, se articula con la tibia y, por su parte más caudal, se articula también con la
tibia y el astrágalo.
Se divide en epífisis proximal, diáfisis y epífisis distal.

EPÍFISIS PROXIMAL
Se encuentra la cabeza del peroné, un pequeño saliente en la parte más craneal que es el vértice del
peroné y la carilla articular para la tibia.

DIÁFISIS
Al ser hueso triangular, presentará tres bordes y tres caras:

⎯ Borde anterior, interóseo y posterior.


⎯ Cara medial, lateral y posterior.

EPÍFISIS DISTAL
Se localiza el maléolo peroneo, la carilla articular y una pequeña fosita denominada fosa peronea.

PIE

El pie es un conjunto de huesos que se sitúa en la parte más distal de la pierna. Para saber situarlo en su
posición anatómica, hay que saber que el primer dedo (llamado dedo gordo), debe quedar en la parte
media.

Este conjunto de huesos está formado por los 7 huesos del tarso, los 5 huesos del metatarso y por las 14
falanges.

HUESOS DEL TARSO


Los huesos del tarso son 7 huesos cortos: el astrágalo, el calcáneo, el cuboides (forma de cubo), las tres
cuñas (de medial a lateral: primera, segunda y tercera cuña o medial, intermedia y lateral), el escafoides
o navicular.
ASTRÁGALO

El astrágalo se compone de:

⎯ Una cabeza, donde se localiza la superficie articular para el hueso navicular o escafoides.
⎯ Un cuello.
⎯ Un cuerpo.

En su parte superior, presenta la tróclea astragalina con las carillas para articular con la tibia y el peroné.

En su parte inferior, presenta tres carillas articulares, anterior, media y posterior, para articularse con el
calcáneo.

En el borde medial, puede observarse el surco para el calcáneo y los tubérculos posterior y lateral. Entre
ambos tubérculos, pasa el surco para el flexor largo del primer dedo.

CALCÁNEO

El calcáneo presenta una carilla anterior para articular con el cuboides, así como tres carillas superiores
para articular con el astrágalo (anterior, media y posterior).

Por su parte más lateral, se localiza el surco del calcáneo y la tróclea peronea. Por su parte medial, se
encuentra la continuación del surco del flexor largo del primer dedo y una apófisis o saliente que está
junto con el calcáneo que se denomina sustentaculum tali.

Por la parte inferior, se halla la tuberosidad del calcáneo, con una apófisis medial, más grande, y una
apófisis lateral, más pequeña. Además, se observa el tubérculo del calcáneo.

CUBOIDES

Dentro de los huesos del tarso, el cuboides articula ventralmente con el cuarto y quinto metatarsiano,
dorsalmente con el calcáneo y lateralmente con el navicular o escafoides y la tercera cuña.

NAVICULAR O ESCAFOIDES

El navicular o escafoides articula por su parte dorsal con el astrágalo, por su parte ventral con la primera,
segunda y tercera cuña y por su parte lateral con el cuboides.

LAS CUÑAS

Las cuñas, a su vez, articulan con el primer, segundo y tercer metatarsiano por su parte anterior, por su
parte posterior con el navicular y la tercera cuña articula por su borde lateral con el cuboides.

METATARSIANOS
Los metatarsianos son huesos largos que tienen una base, un cuerpo y una cabeza. Cabe destacar la
apófisis estiloides del quinto metatarsiano (parte lateral) y los huesos sesamoideos de la cabeza del
primer metatarsiano (cara plantar).

FALANGES
Las falanges son huesos largos que se encuentran en la parte más distal del pie. El primer dedo solo
presenta falange proximal y distal, mientras que los demás presentan falange proximal, media y distal.
ARTICULACIONES DEL PIE
⎯ La articulación subastragalina se forma entre el astrágalo y el calcáneo.

⎯ La articulación mediotarsiana o de Chopart entre la primera línea de los huesos del tarso y la
segunda. Aquí aparecen dos articulaciones yuxtapuestas:

• La articulación de tipo enartrosis entre el astrágalo, el calcáneo y el navicular.


• La articulación de tipo encaje recíproco o silla de montar entre el cuboides y el calcáneo.

⎯ La articulación tarsometatarsiana o de Lisfranc se forma entre la primera, segunda y tercera


cuña y el cuboides con la base de los cinco metatarsianos.

⎯ Las articulaciones metatarsofalángicas entre la cabeza de los metatarsianos y las falanges


proximales.

⎯ Las articulaciones interfalángicas se forman entre una falange y otra.


PRÁCTICA 8: ENDOCRÁNEO Y BASE DEL CRÁNEO.

La cara interna de la base del cráneo presenta tres grandes depresiones situadas a diferentes niveles, que
configuran el piso en forma de cuenco de la cavidad craneal. Este espacio del neurocráneo está ocupado
por el cerebro. La fosa craneal anterior ocupa el nivel más elevado; la posterior, el más bajo

En la norma endocraneal o endocráneo podemos distinguir tres fosas:

⎯ Fosa endocraneal anterior, cuyos límites son: ventralmente, la cara posterior del hueso frontal;
dorsalmente, el borde posterior de las alas menores del esfenoides de ambos lados; y, en el
centro, el borde más anterior del surco prequiasmático o limbo esfenoidal.

⎯ Fosa endocraneal media, cuyos límites son: anteriormente, el borde posterior de las alas
menores del esfenoides de ambos lados y borde anterior del surco prequiasmático;
posteriormente, a ambos lados, la cresta del peñasco del temporal. En esta cresta está labrado
el surco del seno petroso.

En la parte media, el límite posterior lo constituye el dorso de la silla turca.

⎯ Fosa endocraneal posterior, cuyos límites son: anteriormente, la cresta del peñasco del
temporal y dorso de la silla turca; y posteriormente, la cara interna de la escama del occipital.

FOSA ENDOCRANEAL ANTERIOR

En la fosa endocraneal anterior se distinguen los siguientes huesos: parte de los huesos frontal, etmoides
y esfenoides.

Las estructuras anatómicas más importantes son:

• El hueso frontal, concretamente su porción orbitaria. Aquí, se distinguen la cresta frontal interna
y el orificio ciego.

• En el etmoides, situado en la línea media de esta fosa, destaca la apófisis crista galli, que serviría
de inserción a las meninges; la lámina cribosa, perforada de orificios para el paso de los nervios
olfatorios (I par craneal).

• En el esfenoides, sobresalen las alas menores de ambos lados y la parte más anterior del cuerpo
del esfenoides o yugo esfenoidal.
• Formando parte de esta fosa endocraneal anterior se encuentra el conducto óptico para el paso
del nervio óptico o II par craneal.

FOSA ENDOCRANEAL MEDIA

Entre los huesos que componen la fosa endocraneal media destaca: los huesos esfenoides y temporal.

Las estructuras anatómicas más importantes son:

• En el caso del hueso esfenoides, se observan las alas mayores y cuerpo del esfenoides. Entre las
alas mayores y menores del esfenoides se sitúa la fisura orbitaria superior o hendidura
esfenoidal.

En las alas mayores, pueden apreciarse tres orificios: el orificio redondo menor o foramen
espina, el orificio oval y el orificio redondo mayor.
A ambos lados del cuerpo del esfenoides se localiza el surco o seno carotídeo para el paso de la
arteria carótida. En la parte central del cuerpo, se localiza la silla turca o fosa hipofisaria,
destinada a alojar la glándula hipófisis y limitada por cuatros salientes: apófisis clinoides
anteriores y posteriores.

• En el temporal, destaca la cara cerebral del peñasco del temporal.

• En la confluencia de los huesos temporal, esfenoides y occipital se aprecia el orificio rasgado


anterior o foramen lacerum.

FOSA ENDOCRANEAL POSTERIOR

En la fosa endocraneal posterior se localizan, principalmente, los huesos occipital y parte del temporal,
concretamente la porción cerebelosa del peñasco del temporal.

Entre los accidentes importantes a destacar:

• En la cara cerebelosa del peñasco del temporal se encuentra el conducto auditivo interno, a
ambos lados.

• En el hueso occipital se encuentran el orificio o foramen magno, la cresta occipital interna, la


protuberancia occipital interna, el surco para el seno transverso, el surco para el seno sagital,
el conducto para el nervio hipogloso y el conducto condíleo.

• Entre los huesos temporal y occipital se forma un orificio que recibe el nombre de orificio
rasgado posterior, cuya parte más posterior correspondería a la fosa yugular.

• La parte más anterior del hueso occipital se fusiona con la parte más posterior del cuerpo del
esfenoides formando una estructura denominada clivus (canal basilar).
PRÁCTICA 9: MÚSCULOS DE LA MÍMICA.
MÚSCULOS DE EXPRESIÓN FACIAL EN ACCIÓN

También podría gustarte