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Investigación sobre la inteligencia artificial

Realizada por: Ludmila Piloni, Sofia Torres y Pía Bonino.

La inteligencia artificial es un tema muy complejo y con muchas caras, por


lo que intentamos recaudar toda la información posible y la que vimos
más certera.

Para comenzar, ¿qué es la inteligencia artificial? El termino inteligencia


artificial abarca una gran variedad de tecnologías con un objetivo en
común: pensar como un ser humano. El objeto más complejo del universo,
la red más compleja y el sistema más poderoso es el cerebro humano.
Igualarlo es el objetivo ultimo de la Inteligencia Artificial. Esto lo intenta
mediante el uso de las matemáticas y la lógica, simulando el razonamiento
que siguen las personas para aprender a partir de información nueva y
tomar decisiones.

La Inteligencia Artificial hace uso del aprendizaje automático, y


actualmente se los puede considerar hasta sinónimos, ya que el
aprendizaje automático se considera un subconjunto de la Inteligencia
Artificial.

Un sistema informático con inteligencia artificia hace predicciones o


realiza acciones basándose en los patrones de los datos que ya tiene a su
alcance, y aprende de sus errores para ser mas preciso. Seria como para
nosotros, los humanos, la práctica. Entrenan un equipo para imitar el
razonamiento humano haciendo uso de red neuronales; este es un
método de la inteligencia artificial que enseña a procesar datos de una
manera similar a la forma en la que lo hace el cerebro humano.

Existen varios tipos de aprendizaje automático. Un aprendizaje de una


inteligencia artificial puede ser, por ejemplo, aprendizaje supervisado.
¿Cómo funciona el aprendizaje supervisado? Básicamente, se les envían
un montón de datos que se les llama “etiquetados”, y a medida que
procesan esos datos, van aprendiendo. A este proceso se le llama
“entrenamiento”.
Un ejemplo sería si yo le envió a un algoritmo millones de fotos, entre
ellas la mitad son de gatos, y la otra mitad son de perros. Al algoritmo le
señalo en que imagen aparecen gatos, y en cuales salen perros, de esta
forma le estoy etiquetando la información y lo estoy entrenando. Ahora,
cuando le llegue una imagen nueva, con lo que aprendió, ya sabe si en esa
foto sale un perro o un gato. Este tipo de aprendizaje se usa muchísimo.

Incluso le ayudamos a estos algoritmos a etiquetar datos sin ni siquiera


saberlo. Por ejemplo, antes de entrar a una pagina web nos aparecen esos
captcha para verificar si somos un robot o no, estos nos piden que
marquemos fotos donde aparezcan semáforos, autos, señales o peatones,
pues de esta forma estamos etiquetando datos que luego se usara para
entrenar un algoritmo que podría ser un automóvil autónomo.
Los problemas que resuelven los algoritmos con esta inteligencia artificial
son varios, como reconocimiento facial, de voz, de huellas digitales, etc.

Otro tipo de aprendizaje automático son los no supervisados. Estos


algoritmos no entrenan con datos etiquetados como el anterior. Este tipo
de aprendizaje se utiliza para agrupar datos. Lo que hacen es definir una
distancia entre datos; por ejemplo, entre mi historial de Spotify y el de una
amiga, comparan gustos y ofrecen canciones parecidas. Se utilizan
bastante en aplicaciones científicas.

Luego esta el aprendizaje semi supervisado. Este es cuando se tiene pocos


datos etiquetados. Se conoce un resultado final, pero el algoritmo debe
determinar como organizar los datos para obtener el resultado deseado.

Y, por último, un tipo de aprendizaje bastante utilizado es el aprendizaje


por refuerzo, que actúa por prueba y error, aprende “haciendo”. Se usa,
por ejemplo, para aprender a jugar. Hay un concepto de recompensa que
te indica cuando lo hiciste bien, es decir, en este caso, ganar la partida. El
algoritmo se queda con los movimientos de la partida, las decisiones
tomadas, o las estrategias usadas, y si el resultado es que se gano la
partida, usara esos movimientos con más probabilidad en la próxima
partida, mientras que, si perdió la partida, los usara con menos
probabilidad.

La inteligencia artificial tiene varias formas de clasificarse, como por


ejemplo por su nivel inteligencia. En primer lugar, esta la inteligencia
artificial estrecha, que es el nivel más alto del desarrollo de inteligencia
artificial al que ha llegado la humanidad hasta ahora. También se la suele
denominar “inteligencia artificial débil”. Tiene un rango limitado de
capacidades y se enfoca en realizar una tarea con mejor precisión que un
ser humano.

Luego, en segundo nivel se encuentra la inteligencia artificial general,


también denominada “inteligencia artificial fuerte” o “inteligencia artificial
de nivel humano”, que es la que se suele ver en las películas y aun se
encuentra en proceso de investigación. Hace referencia a la capacidad de
un sistema informático en superar al ser humano en cualquier tarea
intelectual. Al llegar a este nivel se espera que las maquinas sean tan
capaces como los humanos.

Por último, se encuentra la super inteligencia artificial. Es al nivel que se


espera llegar. Llegado este punto, las maquinas no solo podrán imitar
nuestros procesos de análisis y reflexión, sino que serán más capaces.

Si hablamos de inteligencia artificial automáticamente pensamos en


robots, o inteligencias super complejas que creemos fuera del alcance de
la cotidianeidad, cuando la realidad es que estamos constantemente en
contacto con la IA y esta en todas partes. Desde el asistente de Google en
los celulares, la recomendación de amigos en Instagram, en nuestros
autos, en nuestras casas e incluso en el control del tráfico aéreo.
Hay personas que creen que la inteligencia artificial nos destruirá y otras
que creen que mejorara el mundo, incluso que reemplazara profesiones.
Pero hay cosas actualmente que la inteligencia humana tiene, y que esta
lejos del alcance de la inteligencia artificial, pero que actualmente están
trabajando en ello. Una de ellas es la autoconciencia, que está bastante
lejos de la inteligencia artificial.

Aun así, los beneficios de la inteligencia artificial son varios, como, por
ejemplo, permite la automatización, reducir los errores humanos, eliminar
las tareas repetitivas con el fin de liberar al capital humano para que
trabaje en los problemas de mayor impacto, mayor rapidez y precisión,
disponibilidad infinita ya que no tiene la necesidad de descansar y acelerar
las investigaciones y desarrollos.

Actualmente, empresas de todo el mundo ya emplean el uso de


inteligencia artificial de manera variada. Algunos de los usos de la IA
actualmente son los siguientes:
Automóviles sin conductor.
Estos sistemas coordinan varios procesos para simular el razonamiento de
los conductores humanos. Usan el reconocimiento de imágenes para
identificar signos, señales, el flujo del tráfico y los obstáculos.
Motores de recomendaciones
Uno de los usos más comunes de la inteligencia artificial. Recomienda
productos en función de datos históricos. Por ejemplo, en Netflix, que te
recomienda que ver a continuación. Usa una inteligencia artificial para
analizar lo que se ha visto anteriormente, filtra todas las opciones y
muestra la que posiblemente será la más entretenida en función a lo que
reprodujiste anteriormente.
Filtros para el correo no deseado
Cuando llega un nuevo correo, la inteligencia artificial lo analiza en busca
de datos que indiquen que es correo no deseado. Si el correo cumple
suficientes criterios se marca como no deseado. A medida que se corrige
(correos marcados como no deseados por error, o marcando correos que
el filtro no detecto) el sistema aprende y se ajusta a ellos.
De esta forma, la inteligencia artificial esta en nuestra cotidianeidad sin
que siquiera lo notemos, porque ya estamos bastante acostumbrados a
ella. Constantemente se encuentra en desarrollo, y busca la manera de
superarse para llegar a pensar como lo hace un ser humano.
Le queda un largo camino, y los expertos predicen que, si es posible
lograrlo, recién ser verá en el año 2050.

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