Reducir la desigualdad en los países y entre ellos
Si bien se ha logrado grandes avances en la reducción de la pobreza, siguen existiendo desigualdades y
disparidades en el acceso a los servicios sanitarios, educativos y a otros bienes productivos dentro de los propios países. Por tal razón se ha recomendado la aplicación de políticas universales que presten atención a las necesidades desfavorecidas y marginadas. Se busca mantener el crecimiento del 40% más pobre en las tasas de crecimiento per cápita de los ingresos y egresos de los mismos. Así mismo, buscan potenciar y promover la inclusión social económica y política de personas, independientemente de su sexo, discapacidad, raza, etnia, origen, religión o situación económica u otra condición, para poder así generar la igualdad de oportunidades y la eliminación de leyes, políticas y prácticas discriminatorias y promoviendo legislaciones adecuadas en ese aspecto. Siguiendo en este ámbito, se requiere adoptar políticas fiscales, salariales y de protección social para lograr una mayor igualdad. Los ingresos anuales percibidos en el país de destino, demuestran que la facilitación de la migración segura, regular y responsable necesita de la aplicación de políticas migratorias bien gestionadas, los cuales ya han sido comprobados en países que ya han empleado este objetivo. Con respecto al tema está planeado reducir a menos del 3% los costos de transacción de migrantes y eliminar corredores de remesas con un costo superior al 5%. En la proporción de líneas arancelarias de los países menos adelantados en el desarrollo es necesario aplicar el principio del trato especial y diferenciado para los países en desarrollo de conformidad con los acuerdos de la Organización Mundial del Comercio. Mejorar la vigilancia de las instituciones y fortalecer la aplicación de estos reglamentos, es uno de los requerimientos que se ven urgentemente necesarios para el cumplimiento de todos los objetivos presentados. Estos deben ser asegurados por la intervención de los países en desarrollo para aumentar la eficacia, fiabilidad, rendición de cuentas y legitimidad de esas instituciones. De tal manera fomentar la asistencia oficial para corrientes financieras internacionales para países menos adelantados.