Está en la página 1de 5

LA FAMILIA: UN IMPERATIVO

PARA LAS EMPRESAS

ANA MARIA GONZALEZ GIL

COMBARRANQUILLA

GESTION APLICADA DEL TALENTO HUMANO


MODULO

MAG. REINALDO DE JESUS GÓMEZ PEREZ


PROFESOR

2024
Llama mucho la atención que la familia, siendo una realidad imprescindible para la
sociedad, la base o piedra angular de la misma, no se la atienda como es debido o
se le dé el lugar que le corresponde. Casi todos, a nivel teórico, reconocemos a la
familia como el valor más alto en comparación a otros valores, sin embargo, en la
práctica, arranca su edificación desde la improvisación, el desconocimiento y la
ignorancia.

El inicio del proyecto familiar sin preparación previa, ni próxima ni remota, acarrea
serias consecuencias posteriores en la vida, primero del esposo y luego en la vida
de los hijos. Esto ocurre así porque serán ellos, quienes reciban las consecuencias
negativas de nuestro actuar desordenado y la carencia de pautas y presupuestos
científicos y antropológicos de nuestra formación personal. Queremos decir con ello
que no hemos sido capacitados previamente, ni en el colegio, ni en la universidad
en torno a la consolidación de familias sólidas y la paternidad responsable y, en el
mejor de los casos, solo se cuenta como base con las mejores intenciones y con
estereotipos adquiridos en el seno de nuestras familias o aprendidos en las familias
de nuestro entorno inmediato y mediato.

A esta primera insuficiencia en el punto de partida del proyecto familiar se suma otro
problema: la falta de un plan de desarrollo familiar. Esta carencia los instala a los
esposos en la provisionalidad, en la falta de propósitos, en la falta de rumbo, en la
pobreza, y hasta lo instala en una profunda crisis.

la familia es una empresa y lo es por las siguientes razones: porque hay que
constituirla formalmente y, una vez constituida se convierte en una comunidad de
personas, una corporación humana, enlazada por un bien común que es el amor y
unos bienes compartidos y; porque debe tener un plan de desarrollo donde refleje
sus propósitos, sus objetivos, sus metas, sus valores, sus principios, sus planes,
programas y proyectos de desarrollo.
Cualquier empresa puede quebrar y de hecho quiebra o puede cambiar de rubro,
pero la empresa familiar es una realidad profunda y misteriosa que no debe quebrar;
si lo hace, desperdiga consecuencias nefastas de infelicidad en sus integrantes y
en los vínculos de su entorno cercano. Es más importante porque mientras en la
empresa importa más lo económico, en la familia importa más la persona y su
felicidad.

Para asegurar su permanencia en el tiempo, la empresa familiar cuenta con dos


gerentes que son los padres, los mismos que, sin usurpar funciones, han de asumir
la responsabilidad de la familia hacia su plenitud, involucrando a los hijos, según
sus edades, como auténticos colaboradores del proyecto familiar.

Entre ellos han de realzar su autoridad, han de vitalizar y revitalizar su vínculo


existencial y comunicativo; pero, sobre todo, han de ser personas que den buen
ejemplo.

La empresa familiar, a diferencia de las empresas ordinarias, ha de desarrollar


actividades no solo de consumo, sino de producción y ahorro. A diferencia de las
empresas ordinarias, que tienen como fin las ganancias económicas, la empresa
familiar tiene como fin la felicidad de sus miembros, que estos lleguen a ser mejores
personas. Es decir, la familia integra el ser, el tener y el trascender humanos,
haciendo del matrimonio y de los hijos personas felices y capaces de dar lo mejor
de sí mismos a los demás para hacer una sociedad mejor.

En las empresas personales y sociales se invierte grandes cantidades de capitales


de dinero, en la empresa familiar también se invierte porque la educación, la salud,
el vestido, la vivienda, etc., cuestan. Pero, a diferencia de aquellas, en la empresa
familiar los gerentes de la misma tienen que desgastarse la vida por el bien de sus
colaboradores que son sus hijos, tienen que invertir tiempo de calidad para cada
uno de ellos, tienen que desplegar sus talentos con creatividad, desplegar mucho
sacrificio, dedicación, paciencia, buen humor, confianza; pero sobre todo, han de
visibilizar su capacidad de amar; haciendo de la familia el ámbito donde se
despliegue el amor humano en todas sus dimensiones. A saber: amor expresar,
amor maternal, amor paternal, amor filial, amor filial maternal, amor filiar paternal,
amor fraternal, etc.

Solo si se tienen fortalecidos estos vínculos de amor familiar, se puede decir que la
familia constituye un hogar luminoso y alegre y, además, que se ha convertido en la
más importante de las empresas. El reto está planteado.

Para hablar de la familia es importante considerar los diferentes ámbitos en los


cuales se ha venido formando esa unión entre dos de los cuales se pactan unos
propósitos de vida cuyas funciones hacen referencia a lo económico, recreativo,
salud, religioso y educativo; siendo para mí personalmente lo más importante lo la
unión familiar, respeto y por supuesto la educación para poder proyectar familias de
éxito; Hay que dejar muy claro que una familia sin fundamentos amor y fe en Dios
sea cual sea sus creencias si no tiene fe no tendrá nunca unos ideales que lo ayuden
a ser fuerte en tiempos difíciles y sobre todo brindar ese amor que debe ser el
objetivo estratégico de la organización familiar, pero bueno necesariamente
debemos hablar también de la importancia que jugamos nosotros los seres
humanos ante la sociedad en la que toma de buenas decisiones que nos ayuden a
dejar huellas en nuestras familias, porque desde allí es donde se forjarán grandes
soñadores que harán brillar o no las ideas, buenas costumbres, los mejores actos y
comportamientos disciplinarios que podrá marcar la diferencia en un buen
desempeño organizacional llámese esta última la empresa propia o la empresa de
un tercero, cuyo propósito podrá convertirse inicialmente en económicos pero sin
olvidar también que lo más importante es convivir muy sanamente en ambiente
familiar y laboral. El ser humano en la sociedad y especialmente en la familia
siempre jugará un papel importante por lo que será especial y el estar
constantemente en fortalecimiento y actualización del conocimiento para llevar a
cabo sus buenos propósitos.
Desde mi punto de vista la empresa y la familia actualmente han desorientado
alguno de sus recursos vitales el ser humano que hacen que su estructura funcione
de una manera muy exigente ante la sociedad dejando de lado ese valor agregado
como son las buenos sentimientos, el respeto, la cultura, la educación y las buenas
prácticas de convivencia, ante esta deducción muy importante definir que solo
podría existir una relación entre ellas y es que las familias tienen como función
principal consumir bienes servicios y portar factores productivos mientras las
empresas se encargan de producir bienes y servicios para ello demandan factores
productivos solo quedaría por asumir que la sociedad involucra sanamente el ser
humano iniciar desde el núcleo familiar grandes empresas, es decir desde aquella
participación de padres e hijos educándose para desde su seno familiar y visionando
un buen vivir de convivencia y responsabilidad social que involucren mayores
decisiones en la competitividad sin embargo también hay que dejar claro que en el
futuro entre la empresa y la familia depende mucho desde el enfoque empresarial
es necesario emplear más tecnología, proyectar y educar a los niños a crear sus
propias empresas y apropiarse de su saber para emprender y hacer uso adecuado
de las herramientas que brinda esta nueva era en tecnología.

También podría gustarte