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1. OBJETIVOS DOCENTES
2. CONCEPTO
2. AGENTES ETIOLÓGICOS
La edad del niño, la estación del año y el área geográfica en la que vive, influyen en el
tipo de agente implicado. En la Tabla 14.1 se muestran los microorganismos que
pueden producirla. En un 30% de los casos no se identifica ningún patógeno.
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La etiología más frecuente es vírica. El EbhGA se encuentra implicado en el 5-
40% de los casos, dependiendo de la edad. En un 30%, no se identifica ningún
patógeno.
3. DESCRIPCIÓN CLÍNICA
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tos y/o conjuntivitis en un 15-25%. En caso de realizar un control analítico, suele
aparecer leucocitosis y PrCR mayor de 50 mg/L. Debido a las características clínicas
de este tipo de infección viral, capaz de mimetizar un síndrome febril de probable
origen bacteriano, es muy frecuente que el manejo terapéutico no sea adecuado. El
test de detección rápida de adenovirus en exudado nasofaríngeo, no disponible en la
mayoría de centros o en Atención Primaria, puede ayudar a diferenciar este tipo de
FAA, a disminuir el número de analíticas y a evitar el uso innecesario de antibióticos.
En la Tabla 14.1 se muestran las características clínicas principales de otros
microorganismos causantes de FAA.
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frecuente en los países industrializados, en donde la incidencia anual es inferior a 1
caso por cada 100.000 habitantes, pero se mantiene como la principal causa de
enfermedad cardiaca adquirida en niños de países en desarrollo.
Los signos y síntomas por si solos no son suficientes para hacer el diagnóstico,
aunque existen hallazgos sugestivos. Las complicaciones supurativas y no
supurativas son poco frecuentes, aunque pueden aparecer en el 1-2% de los
niños no tratados con antibiótico.
4. ORIENTACIÓN DIAGNÓSTICA
Una de las escalas clínicas más empleadas es la de McIsaac, basada en los criterios
de Centor, pero ponderando la edad (Tabla 14.3). La probabilidad de un resultado
positivo en las pruebas de diagnóstico microbiológico es ≤ 3% en los pacientes que no
cumplen ninguno de los criterios clínicos, y de un 38% – 63% en aquellos que reúnen
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Para la obtención de la muestra, se deben frotar con el hisopo la pared posterior de la
faringe y ambas amígdalas (idealmente las zonas más hiperémicas, sin exudado),
evitando tocar la úvula, el paladar o contaminar la muestra con saliva, para evitar la
dilución del inóculo con flora comensal.
Las TDR se basan en la extracción ácida del antígeno carbohidrato de la pared celular
y en la posterior detección del mismo mediante anticuerpos específicos. La mayoría de
las pruebas disponibles tienen una elevada especificidad, próxima al 95% y una
sensibilidad que puede variar entre el 75% – 90%. En base a la alta especificidad, si el
test es positivo, se acepta que el paciente presenta una FAA por EbhGA, no siendo
precisa la confirmación mediante cultivo. En cambio, si existe alto índice de sospecha,
un resultado negativo sí lo requiere. No obstante, cada centro debe validar la prueba
de diagnóstico rápido que utiliza, ya que la sensibilidad puede variar en función de
diversas variables.
5. DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
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inespecificidad de los síntomas, se tiende al sobrediagnóstico de FAA bacteriana, con
la consiguiente prescripción innecesaria de antibióticos.
6. MANEJO TERAPÉUTICO
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susceptibles. El principio activo que ha demostrado la farmacocinética más favorable
por vía oral, es la fenoximetilpenicilina o penicilina V durante 10 días. La penicilina G
benzatina, administrada por vía intramuscular profunda, sólo se recomienda en caso
de vómitos, riesgo de mal cumplimiento del tratamiento prescrito por vía oral o si
existen antecedentes de FR, siendo suficiente una sola inyección.
Las cefalosporinas de primera, segunda y tercera generación por vía oral, han
demostrado curaciones clínicas y bacteriológicas similares e incluso superiores a la
penicilina, por lo que hay autores que las aconsejan como fármacos de primera
elección, en tanto que otros no encuentran justificación a dicha recomendación.
Además de su mayor precio, ha de tenerse en cuenta que el empleo de antibióticos de
amplio espectro puede favorecer el desarrollo de resistencias a otros
microorganismos, por lo que la mayoría de autores y sociedades científicas tampoco
recomiendan su uso como tratamiento de primera elección en ningún caso, salvo en
niños con antecedente de reacción alérgica retardada a penicilina. En caso de
administrarlas, se recomienda cefadroxilo, al presentar el espectro de actividad más
reducido.
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alérgica inmediata o de anafilaxia tras la administración de penicilina. En ellos cabe
emplear azitromicina o preferiblemente macrólidos con 16 átomos de carbono en el
anillo lactónico, como la josamicina y la diacetilmidecamicina. En caso de infección por
EbhGA resistente a macrólidos, una buena opción terapéutica es la clindamicina.
La mayoría de los niños presenta mejoría clínica a las 48-72 horas de la primera dosis
del antibiótico. Las causas más frecuentes de fracaso del tratamiento cuando existe
confirmación microbiológica son: la existencia de otro proceso infeccioso (o síndrome
PFAPA, especificado más adelante) en un niño portador de EbhGA, el mal
cumplimiento terapéutico o el desarrollo de una complicación supurativa local. Las
FAA debidas a Mycoplasma pneumoniae, Chlamydia pneumoniae o Arcanobacterium
haemolyticum deben tratarse con un macrólido.
Cuando está indicado, puede ser difícil conseguir la erradicación con el tratamiento
habitual. Se ha empleado para ello un gran número de antibióticos (Tabla 14.6). No
existe suficiente evidencia científica para recomendar un tratamiento de elección. De
todos ellos, algunos autores proponen clindamicina o amoxicilina-clavulánico, al haber
demostrado altas tasas de erradicación. Otra buena opción terapéutica sería la
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azitromicina, debido a su excelente concentración intracelular, siempre que no haya
sido administrada previamente.
En las FAA de repetición por EbhGA, se considera recaída cuando los síntomas
reaparecen 2 – 7 días después de la finalización del tratamiento. En estos casos cabe
volver a tratar con un nuevo ciclo del mismo antibiótico o emplear otro con mayor
estabilidad frente a las betalactamasas, producidas por bacterias distintas al EbhGA
que pueden estar presentes en la orofaringe y dificultar la acción de la penicilina.
Para finalizar, en la actualidad no existe ninguna vacuna para prevenir la FAA por
EbhGA. Su desarrollo se encuentra en fase de investigación y existe incertidumbre
sobre las implicaciones que podrían tener los anticuerpos inducidos por la vacuna en
el posterior desarrollo de complicaciones no supurativas, tal y como ocurriría tras la
infección natural no tratada con antibióticos.
7. RESUMEN
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utilidad las escalas de valoración clínica, que permiten seleccionar a quiénes se
deben practicar los estudios microbiológicos; sin su empleo, dada la
inespecificidad de los síntomas, se tiende al sobrediagnóstico de FAA
estreptocócica con la consiguiente prescripción innecesaria de antibióticos.
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8. BIBLIOGRAFÍA
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* Van Brusselen D, Vlieghe E, Schelstraete P, De Meulder F, Vandeputte C,
Garmyn K, et al. Streptococcal pharyngitis in children: to treat or not to treat?
Eur J Pediatr. 2014; 173:1275-83.
** Van Driel ML, De Sutter AI, Habraken H, Thorning S, Christiaens T. Different
antibiotic treatments for group A streptococcal pharyngitis. Cochrane Database
Syst Rev. 2016 Sep 11;9:CD004406. [Epub ahead of print]
** Wessels MR. Streptococcal Pharyngitis. N Engl J Med. 2011; 364: 648-55.
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9. TABLAS
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Tabla 14.2. Hallazgos clínicos y epidemiológicos según etiología
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Tabla 14.3. Criterios de McIsacc y actitud según resultado
Criterios Puntos
4. Ausencia de tos……………………………….. 1
5. Edad
> 15 años……………………………………. 0
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Tabla 14.5. Indicaciones de tratamiento del estado de portador de EBGHA
OPCIONES TERAPÉUTICAS:
Clindamicina durante 10 días.
20 mg/kg/día cada 8 horas. Máximo 600 mg/dosis
Azitromicina durante 3 días
20 mg/kg/día cada 24 horas. Máximo 500 mg/dosis
Amoxicilina-clavulánico durante 10 días
40 mg/kg/día cada 8 horas
Penicilina G benzatina, inyección única intramuscular profunda. Misma dosis que en Tabla 4
Más rifampicina durante 4 días.
20 mg/kg/día cada 12 horas. Máximo 600 mg/día
Penicilina V (fenoximetilpenicilina) durante 10 días. Misma dosis que en Tabla 4
Más rifampicina durante los últimos 4 días.
20 mg/kg/día cada 12 horas. Máximo 600 mg/día
Cefadroxilo durante 10 días
30 mg/kg/día cada 12 horas.
Más rifampicina los últimos 4 días
EbhGA: Estreptococo beta-hemolítico del grupo A
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