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1.

Describe los síntomas más habituales en un


fallo mecánico del motor.
Cuando un coche tiene algún problema, su manera de avisar al conductor será
mostrando diversos síntomas: ruidos raros, vibraciones, perdidas de potencia, olores
extraños y, por supuesto, la activación de los testigos luminosos del salpicadero. A
continuación veremos qué puede suceder en cada caso y cuáles son los síntomas que
un coche puede mostrar cuando algo no va bien y que deberían ponernos en alerta.

- Testigos luminosos del coche


Aunque no están unificados, las marcas suelen utilizar más o menos los mismos símbolos para
cada fallo que ilumine uno u otro testigo. A lo que más importancia deberemos dar es al color
del símbolo que se ilumina: si es amarillo, deberemos preocuparnos, y si es rojo, deberemos ir
de inmediato a un taller o parar el coche.

Los testigos que son blancos, verdes o azules no indican ningún tipo de avería, sino que
muestran información general del vehículo. De todas formas, es importante tener controlados
estos símbolos.

- Ruidos extraños
Al circular, los coches emiten inevitablemente ruidos, sobre todo si son de motor
térmico. Pero el conductor sabrá perfectamente a lo que nos referimos cuando
hablamos de sonidos extraños (chirridos, traqueteos...), no relacionados para nada con
la circulación y puesta en marcha del motor.
Identificar en qué momento de la conducción se produce el ruido también será
importante para intentar encontrar el posible origen de la avería. Por ejemplo, si el
ruido se emite al cambiar de marcha, puede ser que los engranajes tengan demasiada
holgura o que los cojinetes estén desgastados; mientras que si el ruido sólo se escucha
cuando se frena y deja de oírse cuando se suelta el pedal del freno, puede deberse a
un desgaste de las pastillas de freno.
- Humo de colores
Los colores del humo que salga por nuestro escape (en los coches de combustión,
obvio), también tienen su significado. Cuando el humo es muy espeso y blanco, puede
deberse a problemas en el sistema de inyección de los diésel, al mal estado de algún
precalentador o un atasco en el tubo de escape del aceite.
Si el humo es azul o gris, puede deberse a varias averías como desgaste de los retenes
de las guías de válvulas o del turbo, o al mal estado de la junta de culata; mientras que,
si pasa al negro, puede deberse a una mala combustión del gasóleo. Sea como sea, el
humo de colores no es buena señal.

- El coche produce olores extraños


El coche puede llegar a emitir olores raros durante la conducción si sufre algún fallo.
Nuestra nariz deberá fijarse en identificar los olores más químicos o característicos,
como olores dulces, a goma quemada, aceite quemado....
Todos estos olores no son normales y no deberían producirse si el coche funciona
correctamente. Pueden ser señal de infinidad de fallos: problemas en la caja de
cambios o en el convertidor, quema del refrigerante o fugas... Si detectamos olores
poco habituales, habrá que pasar por el taller.

- Cómo se comporta el coche al conducir


Las sensaciones que tengamos al conducir también serán indicativas de fallos o averías.
Si notamos que nuestro coche no se comparta como siempre, deberemos seguir
nuestro instinto y tratar de identificar qué es lo que ha cambiado.
Por ejemplo, si el vehículo da tirones, es posible que la válvula EGR esté en mal estado;
si pierde potencia, podría haber un problema con el turbo o co nel filtro del aire; y, si le
cuesta arrancar, deberíamos pensar en el motor de arranque o en incluso en las bujías.
2. Enumera al menos 2 averías del sistema de
refrigeración y la posible causa de las mismas.
El motor se calienta excesivamente
Hay que revisar cuanto antes el estado del sistema de refrigeración y del resto de
circuitos que componen un coche. Las causas de un sobrecalentamiento pueden ir
desde la falta de líquido refrigerante hasta una avería en uno de los ventiladores o un
desgaste de algunos de los tapones de los depósitos y elementos que componen el
motor.
El sobrecalentamiento también puede deberse a que el radiador tiene suciedad
(polvo…) y está obstruido, la bomba de refrigeración no funcione de manera correcta o
haya alguna fuga.

El motor no se calienta lo suficiente


Si el problema es que el motor no toma la temperatura suficiente para funcionar de
manera óptima, el problema podría estar en el termostato, que tenga alguna fuga o
mal funcionamiento, el ventilador, que podría haber quedado pillado funcionando sin
parar, o incluso una temperatura exterior muy baja.
Lo más importante es detectar el problema a tiempo y acudir a un taller para que un
profesional revise el estado de todos los elementos del motor de nuestro coche.
3. ¿Cuáles son las posibles causas de una baja
presión de aceite del circuito de lubricación?
Indica las posibles causas, así como su
solución.
Bajo nivel del aceite:
La solución es tan sencilla como añadir más aceite. No obstante, hay que averiguar la
razón por la que el nivel ha descendido. El aceite puede evaporarse, quemarse o sufrir
fugas. En ese caso, es imprescindible localizarlas para evitar más pérdidas. Además, tu
coche consume más nivel de aceite de motor cuando más viejo se hace, por lo que
deberás tener esto en cuenta cuando hagas las revisiones.

La bomba no funciona correctamente:


La bomba de aceite de motor es crucial en el sistema de lubricación. Es como el
corazón del sistema, bombea el aceite para que llegue a todas las zonas que lo
necesitan. Si hay daños en la bomba de aceite del motor, está mal instalada o esta está
desgastada por el uso, la presión también se verá reducida y esto puede causar daños
en las distintas piezas.

Motor desgastado:
Como ya hemos mencionado anteriormente, un motor viejo consume más aceite de
motor que uno recién salido de la fábrica. La fricción y el calor dañan las piezas a lo
largo del tiempo y por este motivo, necesita más lubricación. Si el motor es muy viejo,
es probable que necesites cambiar el aceite o rellenarlo con más frecuencia, aunque
hagas los mismos trayectos de siempre. Dependiendo de su estado, puede que
necesites reemplazarlo.
Cambios en la viscosidad:
La viscosidad del aceite es importante porque garantiza un nivel de resistencia del
aceite idóneo para el funcionamiento del motor. Una viscosidad más alta significa una
mayor resistencia al aceite bombeado, produciendo una escasez de lubricación y, en
consecuencia, baja presión del aceite de motor. En cambio, una viscosidad más baja
reduce demasiado la resistencia al bombeo, por lo que el sensor lo registra como
menor presión.

4. Indica al menos 2 tareas de mantenimiento


de los antiguos sistemas de encendido por
platinos.

Los platinos, nombre que se da usualmente al ruptor, son un elemento del sistema de
encendido ya en desuso, pues su función ha sido asumida por dispositivos electrónicos.
Para llevar a cabo el reglaje de este componente suele ser necesario extraer el
ventilador y retirar la cubierta de goma que habitualmente protege los platinos. Una
junta del mismo material se encarga de garantizar la estanqueidad, por lo que se debe
cambiar si está en mal estado.

El ajuste de la distancia y del punto de encendido


El desgaste generado por un cierto tiempo de uso es la causa de que la distancia entre
los platinos se vaya reduciendo. Eso se traduce en un menor tiempo de apertura y un
retraso del encendido, lo que conlleva una disminución del rendimiento. La excesiva
aproximación de los contactos también puede ocasionar chisporroteo y una reducción
de la tensión en las bujías. Además, hay que tener en cuenta otro factor: el llamado
ángulo de cierre o dwell, que debe mantenerse en ciertos valores para que el
dispositivo de encendido tenga un funcionamiento adecuado.
El proceso de ajuste de la distancia que separa los platinos (por lo general, establecido
en torno a los 0,45 milímetros) ha de incluir, de acuerdo con lo que se ha indicado, el
del avance de encendido.
Por otra parte, los elementos móviles que tienen su desgaste mecánico (como la leva
del ruptor) y por otra parte desgastes por los contactos eléctricos (los contactos del
ruptor, electrodos de la bujía, contactos del distribuidor).

5. ¿Si un vehículo de gasolina por carburador


no mantiene el ralentí, a qué es debido?
Un motor puede fallar a un ralentí muy bajo y por tanto no puede soportar el régimen
mínimo, por lo que el fallo es muy molesto.
Si el estancamiento está relacionado con la falta de combustible, Significa que es un
problema de la bomba de gasolina y no del carburador, también puede pasar que sea
un problema Problema de filtro de combustible sucio u obstruido.
Para solucionar este problema necesitamos ajustar un poco el carburador porque la
mezcla es muy pobre. Si nos pasa algo así podremos estar tranquilos porque no
tendremos que sustituir ninguna pieza.
Sólo es necesario cambiar o revisar el carburador si está gravemente dañado. También
es importante ventilar el aire de las tuberías para evitar que se produzcan
obstrucciones con el tiempo.
También Se recomienda cambiar los filtros. de vez en cuando ya que esto ayuda a filtrar
la gasolina sucia que sale del tanque.

6. ¿Si un vehículo vibra el volante a partir de


80 Km/h, a qué es debido?
Entre lo más común están estas cinco causas que pueden provocar esas vibraciones
Neumáticos: siempre hay que llevarlos bien y pueden provocar accidentes si no los
mantenemos adecuadamente. Suelen ser el origen de que vibre el coche a cierta
velocidad. Puede ocurrir cuando lleven un desgaste desigual o que tengan algún
defecto derivado del paso del tiempo. Y es que, por ejemplo, muchas ruedas suelen
tener deformaciones cuando el vehículo está un tiempo sin utilizarse. Para que esto no
ocurra, lo más recomendable es comprobar con cierta regularidad la presión de los 4
neumáticos de tu coche, además de que te revisen la profundidad de los mismos y si
llevan ya demasiados años con nosotros. A lo mejor es el momento de pensar que ha
llegado el momento de que nos los sustituyan en InterTaller.

La dirección: tiene que estar equilibrada a la perfección, porque si no es así, los


neumáticos rodarán de una forma antinatural y eso desembocará en la vibración del
volante. Y es que una dirección desalineada conlleva un mayor desgaste de las ruedas,
un peor comportamiento dinámico del coche, un aumento del consumo y las ya
comentadas vibraciones.

Suspensión: sin duda se puede deber a que los amortiguadores están en un mal
estado. Cabe la posibilidad de que, en un principio, pensemos que la vibración es cosa
de los neumáticos pero el problema puede ir más allá y estar relacionado con la
suspensión del coche, que puede hacer que éstos fallen. Ante este infortunio, lo idóneo
será cambiar los cuatro amortiguadores del automóvil.

Frenos: junto con las ruedas, los frenos son los principales motivos por los que vibra
el coche a cierta velocidad. Esto tiene que ver porque los discos de freno de la parte
delantera de nuestro vehículo están deformados y no completamente planos, como
debería de ser.

Motor: si han revisado todo lo demás y el problema persiste, toca mirar el propulsor.
Porque el motor puede ser el culpable, ya sea por un problema de bujías o una falta de
aire. Lo ideal es que si esto sucede, lleves el coche a tu InterTaller especializado para
que te haga una revisión del coche y analice qué es lo que sucede y la ubicación del
problema.

7. Nuestro vehículo desgasta de forma NO


uniforme los neumáticos, buscar al menos 4
tipos de desgaste anómalo de neumáticos y
sus posibles causas.
-Desgaste en facetas
Se trata de un desgaste irregular que se caracteriza por la diferencia de nivel de
desgaste entre los diferentes tacos de goma. Puedes sospechar que tus neumáticos
sufren este tipo de desgaste si hacen cada vez más ruido cuando circulas.
En general, este tipo de desgaste se produce simultáneamente en los dos neumáticos
delanteros y a veces en los traseros. Puede deberse a un equilibrado inadecuado de las
ruedas, al mal estado de los amortiguadores o al diseño específico del chasis del
vehículo. Si detectas este tipo de desgaste en tus neumáticos, acude inmediatamente a
un especialista en neumáticos.

-Desgaste asimétrico en dientes de sierra


Es un desgaste más pronunciado en un lado del neumático: cuanto más al exterior del
neumático, menos goma hay.
En general, este problema de desgaste se observa simultáneamente en los dos
neumáticos de un mismo eje. Se debe a un frotamiento anormal sobre la carretera a
causa de un fallo de la alineación y puede acentuarse con una conducción deportiva.

-Desgaste en el centro del neumático


Cuando el desgaste de tus neumáticos es más importante en el centro que en los lados,
se debe habitualmente a un problema de presión. Probablemente has circulado con
unos neumáticos demasiado inflados durante un periodo prolongado.

-Desgaste en los hombros del neumático


Al contrario que en el caso anterior, cuando el neumático está más desgastado en los
bordes que en el centro, eso indica a menudo que hay un problema de inflado
insuficiente. Sin duda has circulado demasiado tiempo con unos neumáticos poco
inflados.
8. Indica qué pruebas podemos hacer a una
batería de un vehículo de 12 V para
comprobar su correcto estado.
El modo de hacerlo puede resurmirse en seis pasos y, para completarlos,
necesitaremos dos herramientas principales: un polímetro o multímetro para medir el
voltaje de la batería y de ese modo comprobar su estado, y guantes de goma para
mantenernos a salvo de posibles quemaduras o descargas eléctricas.
Si queremos realizar una medición fiable, debemos circular previamente con el coche
durante unos 45 minutos para dejarlo reposar posteriormente durante un periodo
similar.
Medimos el voltaje de la batería con el vehículo parado, apagado y sin la llave en el
contacto. El voltaje debe estar comprendido entre 12,5 y 12,9 voltios con el polímetro
en corriente continua conectado a los bornes de la batería.
Encendemos el coche y lo dejamos en punto muerto. A continuación volvemos a
conectar el polímetro en corriente continua y apuntamos el valor que nos indica.
Ahora realizamos la misma operación, pero en corriente alterna.
Comprobamos los resultados de la medición para ver si cumplen las condiciones
necesarias. Si se dan los siguientes valores, debemos cambiar la batería:
Con el vehículo apagado y en corriente continua: menor de 12,2 voltios o 0,2 amperios.
Con el vehículo al ralentí y corriente continua: más de 14,7 voltios o 0,25 amperios.
Con el vehículo al ralentí y corriente alterna: mayor de 0,2 voltios o 0,04 amperios.
Con el vehículo al ralentí en corriente continua: si obtenemos un valor inferior a 13,7
voltios o 0,22 amperios, la batería estará descargada y será necesario cargarla para que
funcione. Si el resultado es superior a 15 voltios o 0,24 amperios, entonces es muy
posible que el alternador esté fallando.
Con el vehículo al ralentí en corriente alterna: en este caso la medición nos indicará de
manera clara que el alternador falla si obtenemos un valor superior a 0,3 voltios o
0,004 amperios.
9. Al revisar el coche vemos que la luz de
cruce delantera lado conductor no funciona,
¿Qué comprobaciones podemos hacer pasa
subsanar el problema?
-Comprobación de bombillas
Si las luces de posición no funcionan, si las luces de cruce no funcionan o si las luces
largas no funcionan, hay que llevar a cabo una serie de comprobaciones. Dependiendo
de cada vehículo, será más sencillo empezar por echar un vistazo a las propias
bombillas o comprobar los fusibles.
En muchos casos tenemos bombillas únicas que funcionan tanto para largas como para
cortas.
En algunos coches sucede frecuentemente que funcione una luz, y que otra
simplemente no funcione (por ejemplo, en la luz larga y luz corta) por lo que la falla
generalmente está ligada a las bombillas. Generalmente se emplean bombillas de
doble filamento, y es por ello que debemos verificar cuidadosamente que uno de ellos
pueda estar en corto mientras que el otro no (uno de los fallos más frecuentes).

-Comprobación de fusibles.
La comprobación de los fusibles es sencilla. Buscamos en el manual del vehículo cuál es
el fusible para cada elemento y su ubicación. Lo extraemos y comprobamos su estado,
tanto de las conexiones del propio fusible como el aspecto del portafusibles.
Si el fusible reemplazado se quema en poco tiempo, es posible que la avería de los
faros sea algún cortocircuito en el sistema, para lo cual debemos analizar
minuciosamente el estado de los cables, la conexión hacia los faros y el switch del
circuito. Un síntoma frecuente es que las luces parpadeen.
En el caso de tener que aislar los cables, lo recomendable siempre es trabajar con
herramientas aisladas y protegidas, o bien, desconectar la batería. De esta forma, no
solo estaremos previniendo daños a nuestra salud, sino que también protegeremos la
integridad de los componentes eléctricos del coche. En el siguiente vídeo te contamos
como cambiar la batería, pero te valdrá para saber cómo desconectarla con seguridad y
sin perder las memorias del coche.
Si los fusibles no presentan signos de corrosión, roturas o desgastes, entonces
debemos comprobar que la conexión al portafusibles sea adecuada y no esté floja. Si el
fusible no conecta firmemente, puede ocasionar un cortocircuito que dañe no solo los
faros sino otros componentes eléctricos. En caso de sustituirlo siempre hay que colocar
un fusible nuevo idéntico (mismo tamaño y amperios).
Esto, obviamente, es aplicable cuando dejan de funcionar solamente uno o varios
faros, mientras que el resto tiene una normal utilización, y generalmente no es
aplicable cuando no funciona ninguno. Si hemos realizado las anteriores operaciones
(sustitución de bombilla y cambio de fusible) y seguimos sin tener iluminación, el
siguiente paso es realizar una comprobación visual de las conexiones. Hay que fijarse
en el estado que presentan las conexiones de la bombilla y los cables más accesibles
que llegan hasta el faro. Puede haber algún cable cortado o que los conectores se
hayan oxidado, entre otras cosas.

10. Al intentar arrancar el vehículo no hace


nada, ¿Qué posibles averías podemos
encontrarnos ante este síntoma?
-El coche no arranca por culpa de la batería
Suele ser la causa más frecuente. Aquí puede suceder que el motor gira porque hay
algo de energía en la batería todavía, pero no las suficiente como para que sea capaz
de encender el motor o bien que esté totalmente agotada y al girar la llave no suceda
nada.
Si el motor gira más despacio de lo normal o si vemos que la luz de cortesía es más
tenue de lo normal, casi seguro que es que la batería está con muy poca carga y no es
capaz de poner el coche en marcha. La solución es conectar una batería nueva, usar
unas pinzas o un arrancador.

-El coche no arranca por culpa de un fusible


La instalación eléctrica de los coches es muy compleja y está protegida por muchos
fusibles. Puede ser que alguno de los fusibles esté fundido y por eso el coche no
encienda. Debemos sacar el manual de instrucciones del coche, buscar en el índice
alfabético en qué página está el capítulo de los fusibles y comprobar si en la lista de
fusibles hay alguno que haga referencia a la electrónica del motor, al sistema de
alarma, inhibidor de encendido… e ir directamente a por ellos.
Por desgracia, muchas veces hay fusibles que protegen varios circuitos y, aunque en el
manual de instrucciones nos dice que un fusible es el de la luz de cortesía, puede que
también sea el que alimenta otro elemento que es el que nos impide poner el motor
en marcha. Comprobar los fusibles lo podemos hacer nosotros mismos, nos lleva
menos de diez minutos y pueden ser la causa.

-El coche no arranca por culpa del motor de arranque


Para hacer girar el motor del coche y que encienda, los coches tienen lo que se llama
«motor de arranque». Es un motor eléctrico con un piñón desplazable que se acopla al
motor del coche y lo hace girar hasta que enciende. Aquí pueden fallar 2 cosas: el
motor eléctrico o el piñón desplazable, conocido como «bendix» o «solenoide».
Un fallo corriente es que los rodamientos sobre los que gira el motor eléctrico se
desgastan y el rotor se queda pegado al estátor y no gira. Lo que notamos es que
escuchamos un ruido como un «clá» y que baja la intensidad de la luz de cortesía
porque hay mucho consumo eléctrico, pero el motor no gira.
La solución es que alguien dé golpes con algo sólido en el motor de arranque mientras
giramos la llave para que la vibración del golpe separe el rotor y el estátor y gire. Esto
es muy complicado y hay coches en los que el motor de arranque no está nada
accesible. A veces se soluciona si metemos una marcha, soltamos el embrague y
movemos un poco hacia delante o hacia atrás el coche. Al girar un poco el volante
motor, el piñón del motor de arranque engrana en una postura en la que favorece que
el rotor y el estátor no se queden pegados.

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