LUISA FHERNANDA LIRA ESCARCEGA

AFASIA: La afasia es una enfermedad que impide que te comuniques. Puede afectar tu capacidad de hablar,
escribir y comprender el lenguaje tanto verbal como escrito. La afasia suele presentarse de forma repentina
después de un accidente cerebrovascular o una lesión en la cabeza. Pero también puede aparecer
progresivamente a causa de un tumor cerebral de desarrollo lento o una enfermedad que causa daño progresivo
y permanente.

DISFASIA: Es un trastorno del lenguaje que puede aparecer cuando hay alteraciones en la expresión y
comprensión del lenguaje. Además, se manifiesta en forma de problemas para encontrar palabras y construir
frases, o de una dificultad para comprender el lenguaje.

DISLALIA: Es un trastorno del habla de los fonemas. Por ello, se manifiesta con una incapacidad de
articular ciertos fonemas o grupos de fonemas. Esto, es debido a malformaciones en los órganos que intervienen
en el habla y el lenguaje.

DISGLOSIA: Cualquier alteración del Aparato articulador (labios, lengua, paladar duro o blando, dientes,
carrillos etc.) impedirá al niño la correcta pronunciación de fonemas. Entre la patología más frecuentemente
causante de una disglosia es:
– LABIO LEPORINO Y FISURA PALATINA
El labio leporino y la fisura palatina son deformaciones congénitas que aparecen en la fase de gestación y
ocurren cuando el tejido del paladar y el labio superior no se unen.
El labio Leporino es un defecto de nacimiento que se manifiesta por una apertura uni o bilateral en el labio
superior entre la boca y la nariz. Causa un problema estético y hacen más difícil el habla y la alimentación.
La fisura palatina es también un defecto de nacimiento que consiste en una apertura en el cielo de la boca. Hay
comunicación directa entre boca y nariz.

DISFEMIAS: Es un trastorno de la comunicación que se caracteriza por interrupciones involuntarias del

habla. Además, también se le conoce como tartamudez, espasmofemia o disfluencia en el habla. Por otro lado,
es importante señalar que no un trastorno del lenguaje, sino de la comunicación.
Además, los efectos psicológicos de la disfemia pueden ser severos afectando el estado de ánimo de la persona
de forma continua. Por ello, puede llegar a ser causa de un importante aislamiento social.