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DE LA SUSCESION HEREDITARIA
TITULO I
CAPÍTULO I
SUCESIÓN HEREDITARIA.
Jurisprudencia:
Exposición de motivos del Código Civil el libro III de es te Código adquiere el nombre
de sucesión hereditaria, que es el nombre exacto que corresponde a la adquisición de bienes por
muerte del causante. Además, agrega que "nuestro sistema hereditario es romanista y sus
principios fundamentales son los siguientes:
d) Se admite compatibilidad de las dos formas de sucesión: la herencia puede ser en parte
testada y en parte intestada."
Puig Peña, integra la sucesión hereditaria que se puede definir como la subrogación que,
a consecuencia de la muerte de una persona, se produce en otra de los derechos y acciones
transmisibles de las que aquélla era titular. A esta sucesión mortis causa es la que se llama por
excelencia en la doctrina civil sucesión. (Puig Peña, Federico, 1974)
TRANSMISIÓN DE LA HERENCIA.
JURISPRUDENCIA:
DOCTRINA:
JURISPRUDENCIA:
DOCTRINA
“incapacidad de una persona para suceder por testamento por haber cometido
malos tratos contra el causante de la herencia o por haber coaccionado en el otorgamiento del
testamento” -Diccionario Panhispánico del Español Jurídico
DOCTRINA
CAPÍTULO III
REPRESENTACIÓN HEREDITARIA
JURISPRUDENCIA
Con respecto a este sub motivo, el recurrente expuso: Si a violación de Ley, nos avocamos, el
auto con carácter Definitivo, dictado por el Honorable Tribunal Colegiado de Segunda Instancia,
viola el artículo NOVECIENTOS VEINTINUEVE del CÓDIGO CIVIL, porque alude por
Derecho de Representación Hereditaria: ES EL QUE TIENEN LOS DESCENDIENTES DE
UNA PERSONA PARA HEREDAR EN LUGAR DE ELLA, SI HUBIERE MUERTO ANTES
QUE SU CAUSANTE, y si bien, en el caso correspondiente, posiblemente corresponda ser así,
al gestionar las señoras MARÍA PIEDAD y L.J. ambas de apellidos ALVARADO ALVAREZ,
heredar por Derecho de Representación Hereditaria, de su señora madre M.D.C.A.M., y al no
estar integrada la Identificación de Persona, a modo de estar incluida PIEDAD MEDINA, no
pueden estar declaradas herederas de ésta persona, dentro de los siete autores de la Herencia,
debiéndose entonces mi Acción Personal, carente de CADUCIDAD y PRESCRIPCIÓN
alguna. Asimismo, son violados los artículos MIL SETENTA y MIL SETENTA Y CUATRO,
del CÓDIGO CIVIL, porque la Ley considera, en cuanto al primer artículo citado: “PARA
REGLAR LA SUCESIÓN INTESTADA, LA LEY SÓLO CONSIDERA LOS VÍNCULOS DE
PARENTESCO…”, y siendo así, no está definido el Parentesco, entre la señora M.P. y L.J.
ambas de apellidos A.A., con su señora madre y abuela biológica, por lo que, hay ausencia de
CADUCIDAD y PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN PERSONAL ESTABLECIDA EN MI
DEMANDA, de la cual ya hice alusión. Ahora bien, en cuanto al segundo artículo indicando:
“EL PARIENTE MÁS PRÓXIMO EN GRADO EXCLUYE AL MÁS REMOTO, SALVO EL
DERECHO DE REPRESENTACIÓN DE LOS CASOS EN QUE DEBA TENER LUGAR”,
definitivamente con el auto recurrido, se da (sic) violación al artículo citado (mil setenta y cuatro
del Código Civil), al declarar de la causante Y.M.A., conocida legalmente también como
ISAVEL MEDINA ALVAREZ e I.M.A., herederas a las señoras M.P. y L.J. AMBAS DE
APELLIDOS A.A., quienes no son ni hijas biológicos (sic) ni nietas biológicas, de donde
deviene de poder yo demandarlas, por no encontrar CADUCIDAD y PRESCRIPCIÓN
ALGUNA, porque al hacer la primera gestión, se pretendió heredar por Derecho de
Representación Hereditaria, el señor C.H.G.M., hijo de M.L.M.D.G., y éstos extremos están
definitivamente demostrados, al contestar en calidad de articulantes, las citadas señoras, según
audiencia desarrollada en el Tribunal Colegiado de Segunda Instancia, en fecha DIECISIETE DE
FEBRERO DEL AÑO DOS MIL ONCE, SIENDO LAS DIEZ HORAS…».
DOCTRINA
Artículo 929. Casos en que hay representación: Es el que tienen los descendientes de
una persona para heredar en lugar de ella, si hubiere muerto antes que su causante.
TITULO II
CAPÍTULO I
SUCESIÓN TESTAMENTARIA
JURISPRUDENCIA:
DOCTRINA
Artículo 943. Donación por Causa de Muerte: La donación por causa de muerte es de
utilidad cuando se desea disponer de un solo bien a favor de determinada persona y no de toda la
herencia, ya que para ello está el testamento. Los efectos de esta donación son para después de la
muerte del donante.
La donación por causa de muerte se rige por las mismas disposiciones de los testamentos
sobre legados, los mismos se encuentran regulados en el Código Civil en los artículos 1,002 al
1,025.
Por tal razón deben cumplirse todas las formalidades que se exigen para el testamento con la
diferencia que solo se está disponiendo de uno o más bienes determinados y no de toda la
herencia.
Esta disposición se puede hacer de una sola cosa o de una cantidad a favor de una persona
individual o jurídica.
CAPITULO II
El testamento por escritura pública es el acto unilateral por el cual una persona otorga
ante el notario la disposición de sus bienes total o parcialmente para después de su muerte.
Ordena su propia sucesión dentro de los límites de la ley y resulta ejecutable y vinculante
sobre si cumple las formalidades especiales que la ley señala.
Jurisprudencia
toda vez que dicha persona demostró con los documentos valorados tanto en primera
instancia, como por la Sala, su incapacidad de visión y audición, y si su intención hubiera sido
heredar o donar sus bienes inmuebles a sus hijas, era necesario que compareciera un testigo
adicional por no poder darle lectura al documento por sí mismo y otro más, debido a que el señor
SohomSohom no sabe firmar, lo cual también es contradictorio en los documentos denunciados
de nulidad, ya que en estos se hace constar que deja su firma como señal de autorización y lo que
se observa es una huella digital; además que era necesaria la intervención de un intérprete, pues
manifestó también, que no habla el idioma español y los mismos se encuentran redactados en
este idioma.
Aunado a lo anterior, esta Cámara del análisis del fallo impugnado, aprecia que la Sala
acorde con los hechos que se tuvieron por acreditados, compartió el criterio sustentado por la
juez a quo, en el sentido que los pretendidos negocios jurídicos, eran nulos por carecer de
requisitos esenciales para su existencia, consideración que al ser confrontada con el artículo 1301
del Código Civil, es coincidente con el contenido: «no concurrencia de los requisitos esenciales
para su existencia», es decir que dentro del proceso se aportaron medios de prueba por parte del
actor, y no de las demandadas, quienes únicamente aportaron como prueba el memorial de
contestación de la demanda en sentido negativo; sin embargo la Sala tuvo por acreditado con
base en los elementos de prueba aportados por el demandante, que el pretendido negocio jurídico
contenido en los tres documentos que contienen “contrato de herencia entre vivos derechos
posesorios de bien inmueble (lote de terreno) a título gratuito”, otorgados por el señor Antonio
SohomSohom, son nulos de pleno derecho, toda vez que carecían de requisitos esenciales para su
existencia, como lo es capacidad física, pues quedó acreditado que tenía problemas de visión y
audición, y el consentimiento no debe adolecer de vicios.
Así las cosas, al haber resuelto la Sala aplicando el presupuesto señalado a los hechos
sujetos a su conocimiento, no se configura el vicio denunciado, y el submotivo deviene
improcedente, pues esta norma era la idónea para resolver la controversia y más bien lo que se
aprecia, es que la recurrente lo que pretende es que se modifiquen los hechos que se tuvieron por
acreditados, lo cual no es propio de denunciar por medio de este submotivo.
Por todo lo anterior, esta Cámara concluye que los submotivos invocados devienen
improcedentes, en consecuencia, el recurso de casación debe desestimarse.
En el caso de los sordos, no será suficiente la lectura por el Notario del texto, sino que
además deberá ser leida personalmente por el otorgante o por dos personas designadas
expresamente por el mismo, en el caso de que no sepa o no pueda leerlo. Dichas personas,
tendrán que firmar que han leído el texto y confirmar que esa es la voluntad del testador.
CAPÍTULO III
Jurisprudencia
Revocación
a) El remedio debe interponerse por la parte en plazo que es distinto según uno u otro
cuerpo legal, aunque es a contar siempre desde la última notificación:
1) Según el art. 598 del CPCYM dentro de las veinticuatro horas siguientes.
2) según el art. 146 de la LOJ (por remisión al anterior) dentro de
los dos días siguientes.
b) La tramitación también es distinta en uno y otro cuerpo legal, puesto que:
1) Según el art. 599 del CPCYM el juez o tribunal resolverá la revocatoria, sin más
trámite, es decir, sin audiencia de la parte contraría. Si el juez o tribunal puede revocar los
decretos de oficio, se entendió en el Código que, pedida la revocación, por una parte, no era
preciso dar audiencia a la otra parte.
2) Según el art. 146 de la LOJ la revocatoria debe tramitarse como la reposición, esto es,
dando audiencia por dos días a la parte Contraria Tenemos, pues, dos normas claramente
contradictorias, y la contradicción estimamos que debe resolverse a favor de la
norma dictada después en el tiempo [art. 8, b) de la L0.11, es decir, a favor de la Ley del
Organismo Judicial. A pesar de que la LOJ es una norma general, no creemos que
pueda defenderse que no ha modificado al CPCYM en este punto, sobre todo si se tiene en
cuenta que en aquella se tutela mejor el derecho de defensa de las partes.
c) El plazo para dictar el auto resolviendo la revocatoria también es distinto en
los dos cuerpos legales:
1) Según el art. 599 del CPCYM debe dictarse el auto en el plazo de veinticuatro horas.
2) Según el art. 146 de la LOJ (por remisión al anterior) con contestación de
la parte contraria, o sin ella, el juez o tribunal dictará auto en el plazo de tres días.
La contradicción entre los dos cuerpos legales, debe resolverse a favor de la LOJ, por las
mismas razones antes dichas. Procedimiento (Código Procesal Civil y Mercantil) Los Decretos
que se dicten para la tramitación del proceso, son revocables de oficio por el juez que
las dictó, la parte que se considere afectada también pueden pedir la revocatoria de los decretos
dentro de las 24 horas siguientes a la última notificación. El juez o tribunal ante quien se
interponga el recurso de revocatoria, deberá resolverlo sin más trámite dentro de las 24 horas
siguientes Procedimiento (Ley del Organismo Judicial)
Los decretos son revocables por el tribunal que los dictó y tanto la
solicitud como su tramitación se sujetarán a las siguientes disposiciones: La Solicitud se
presentará dentro de los 2 días siguientes a la última notificación, de dicha solicitud se dará
audiencia por dos días a la otra parte y con su contestación o sin ella, el tribunal resolverá dentro
de los tres días siguientes.
Si el proceso fuere verbal, el procedimiento se hará en comparecencia y
el Tribunal resolverá dentro de las 24 horas.
Nulidad
Jurisprudencia
Necesariamente la nulidad del testamento debe ser declarada por un juez de lo familiar,
de manera que la persona interesada en la nulidad del testamento debe entablar una demanda
para tal propósito. Lo anterior porque si bien el contenido del testamento es inválido, los
herederos, legatarios o acreedores del testador pueden no estar de acuerdo, y la controversia debe
dirimirse por la autoridad judicial.
La nulidad también puede ser declarada de oficio por el juez que conozca de un proceso
relacionado con la partición de la herencia que se base en un testamento.
CAPITULO IV
Jurisprudencia
Leyes analizadas: 491 del Código Civil; 621 del Código Procesal Civil y Mercantil.
RESUMEN DE
LA SENTENCIA RECURRIDA
La Sala Primera
EL RECURSO DE CASACIÓN
Para concluir con este apartado, me permito indicar que se ha demostrado que esa
Honorable Sala incurrió en el error de hacer una interpretación errónea de los
artículos 918 y 1086 (sic) del Código Civil, sobre los cuales fundamentó la sentencia impugnada
debido a que, como se demostró, no es lo mismo vender derechos hereditarios que vender un
bien. Estos dos artículos expresamente facultan a las personas para el primero de los casos, es
decir, vender derechos hereditarios, pero otra cosa muy diferente es vender bienes relictos antes
de agotarse las etapas del proceso sucesorio... Lo que en realidad sucedió en el presente caso, fue
que esa H.S. incurrió en un error de interpretación de los artículos 918 y 1086 (sic) del Código
Civil, incurriendo además ese órgano jurisdiccional también, en violación de los artículos 450 al
515 del Código Procesal Civil y M., como ya ha sido demostrado, al emitir una sentencia que
viola el procedimiento sucesorio...”.
LEYES APLICABLES
CAPITULO V
LEGADOS
Jurisprudencia
27/08/2012
340-2011
LEYES ANALIZADAS
La Sala declaró sin lugar las excepciones perentorias interpuestas, y con lugar la demanda
presentada; como consecuencia, revocó parcialmente la resolución administrativa impugnada.
Para el efecto, consideró: «Cabe señalar que las cédulas hipotecarias, por su naturaleza de títulos
de crédito, sus intereses por mandato legal se encuentran exentos del Impuesto Sobre la Renta,
tal como lo preceptúa el artículo 32 de la Ley del Instituto de Fomento de Hipotecas Aseguradas.
Asimismo, el artículo 100 del Código Tributario determina si los intereses de la entidad
demandante son intereses de carácter de exentos, además la entidad tributaria considera que los
intereses objeto del ajuste antes referido, provienen de otros documentos, identificando como tal
el Certificado de Custodia de las cédulas hipotecarias. Al respecto, este Tribunal afirma, que el
certificado de custodia no es un título de crédito sin embargo dicho certificado incorpora el
derecho a exigir la entrega de los documentos que se encuentren en calidad de resguardo del
depositario, en el presente caso Banco de los Trabajadores, Sociedad Anónima (sic), (extremo
que consta en autos), afirmando además que dicho certificado representa un contrato de depósito,
en el que figuran: D.: Quién (sic) es la propietaria de la cosa, Depositario: Es el responsable de la
guarda de la cosa, entendido como cosa los títulos de crédito, las propias cédulas hipotecarias, las
cuales por imperio legal se encuentran exentas del Impuesto Sobre la Renta. Este Tribunal,
estima que el ajuste formulado por la Superintendencia de Administración Tributaria, carece de
fundamentación y argumentación jurídica, en virtud que los títulos antes señalados gozan de
exención y el certificado de custodia es un contrato de depósito y no título de crédito,
apreciándose aquí la diferencia entre la fuerza legal y características especiales que reviste el
Código de Comercio, sobre los Títulos de Crédito, circunstancia que es totalmente diferente al
certificado de custodia, que si bien es cierto tienen una obligación incorporada, pero también lo
es que la naturaleza de ambos son totalmente diferentes. En otro orden, se estima que dicho
ajuste, no debió haberse formulado porque los títulos de crédito gozan de exención, como tantas
veces se ha citado, ya que a juicio de este Tribunal se debió respetar lo relacionado a la
existencia de exenciones, vulnerándose así el artículo 243 de la Constitución Política de la
República de Guatemala. Consecuentemente, el ajuste formulado por el monto de veintidós mil
novecientos tres quetzales con setenta y cuatro centavos (Q.22,903.74), debe desvanecerse por
las razones señaladas...».
LEYES APLICABLES
CAPITULO VI
Jurisprudencia
La renuncia o repudiación, se define como una declaración de voluntad unilateral, formal y expresa,
en virtud de la cual, la persona llamada a la herencia, manifiesta su deseo de no ser heredero. Se realizará
ante notario o el juez, a fin de que, conste frente a terceros su existencia y produzca efectos. Puede ser
abdicativa o pura y simple, acreciendo en la proporción establecida por la ley o el testamento, según
estemos ante una sucesión intestada o testada, a los demás herederos, y en su defecto al estado. O traslativa,
a favor de una persona determinada incrementando exclusivamente la adjudicación del designado.
Tanto la aceptación como la renuncia o repudiación de la herencia, son una declaración de voluntad
unilateral. No son actos personalísimos, formando parte de la esfera de la representación legal en el
supuesto de los padres y tutores respecto a los hijos sujetos a patria potestad, y el tutelado. Es irrevocable,
solo se puede aceptar o renunciar una vez. De eficacia retroactiva a la fecha del fallecimiento del causante.
Incompatibles entre sí, o se acepta o se renuncia, no siendo posible hacerlo a término o en parte.
El heredero que acepta o renuncia ha de tener capacidad de obrar plena, y no hallarse incurso en
causa de indignidad para suceder de las previstas en el artículo 757 del Código Civil, las vulgarmente
denominadas de desheredación.
CAPITULO VII
ALBACEAS
Jurisprudencia
Al hacerse el estudio del caso, y realizar una revisión de las leyes aplicables al caso
concreto pero principalmente los escasos agravios que presenta la apelante, esta Sala, llega a la
conclusión que la sentencia apelada se encuentra ajustada a derecho; por las siguientes razones:
UNO. Nuestra ley adjetiva civil regula que toda persona que deba rendir cuentas, lo deberá hacer
cuando es requerida o en su caso en la primera audiencia antes de ser contestada la demanda, tal
como sucede en la primera resolución en el inciso IX La Juzgadora hace saber a la demandada
que deberá rendir cuentas provisionalmente y en caso de no hacerlo se tendrán por ciertas las
afirmaciones del actor y determinar el pagó de los daños y perjuicios. Esta situación la
demandada de conformidad con las actuaciones procesales se determina que en la audiencia
fijada no rindió cuentas provisionalmente, por lo que en la sentencia la juzgadora hizo acopio a
dicho apercibimiento. DOS. Dentro del proceso se ofrecieron una serie de medios de prueba
que fueron debidamente valorados por la Juzgadora al momento de dictar sentencia y dentro de
ellos se encuentran algunos medios de prueba que ofreció la demandada, por lo que no le asiste
la razón a la demandada en cuanto a lo que expone en sus agravios que no tomo en cuenta sus
medios de prueba, pues inclusive valoro la declaración de parte que presento el actor, es decir
que la conclusión a la cual llego la juzgadora fue tomando en consideración tanto los medios de
prueba valorados como la ley adjetiva y sustantiva civil. TRES. En virtud de que los agravios
invocados por la parte apelante resultan ser imprecisos, y escasos, esta Sala se encuentra en la
imposibilidad de analizar mas la sentencia venida en grado por lo que resulta procedente
confirmarse la misma y así debe resolverse.
La rendición de cuentas es una oportunidad para que la sociedad evidencie los resultados
de la entidad de acuerdo con el cumplimiento de la misión o propósito fundamental, además, de
la entrega efectiva de bienes y servicios orientados a satisfacer las necesidades o problemas
sociales de sus grupos de valor. Así mismo, permite visibilizar las acciones que se desarrollan
para el cumplimiento de los derechos de los ciudadanos y su contribución a la construcción de la
paz.
Albaceas
El Albaceazgo.
La palabra albacea viene del árabe “al waci” que significa ejecutor. Y así lo consideran
varios países cuando se encuentra nombrado en el testamento llamándolo ejecutor testamentario.
La revocación del cargo es una causa pro las que el albacea puede terminar con su
encargo, además pro renuncia o por excusarse.
Es el acto por el cual los herederos cuando les parezca conveniente quitan al albacea de
su cargo, y no requieren de causa justificada o razón para hacerlo, simplemente lo quitan porque
así lo deciden. Dicha revocación puede hacerse por los herederos en cualquier tiempo, pero en el
mismo acto debe nombrarse el substituto.
Dicha revocación puede ser justificada, (en este caso se estará hablando de remoción) o
injustificada. Pueden llevarla a cabo los herederos en ambos casos; pero si es injustificada. El
albacea tendrá derecho a recibir lo que le haya dejado el testador como remuneración pro el
desempeño de su cargo, aunque si el albacea fue nombrado por el de cojus y le hizo un cargo
especial, al revocarlo del cargo de albacea no perderá la obligación de cumplir el encargo
especial, considerándole como ejecutor especial.
La revocación del cargo de albacea testamentaria es un acto jurídico ya que se genera por
la manifestación de la voluntad que, en este caso, de la mayoría de los herederos, y dicha
manifestación produce consecuencias de derecho, que en este caso en específico seria la
terminación de las funciones de albacea a la persona objeto de dicha revocación, designándole el
cargo a otra con todos los derechos y obligaciones que el mismo cargo le confiere.
Ahora bien, la incapacidad significa la falta de aptitud para cumplir su cargo con
diligencia, no debiendo probarse la incapacidad física ni la jurídica; la mala conducta podría
configurarse en caso de ocultamiento de bienes, de obstaculizar la marcha del juicio sucesoria, si
no defendieran correctamente los intereses de la herencia, etcétera.
Para diferenciarlas, recapitulando podemos diferenciar entre estas dos figuras como: la
revocación del cargo de albacea es el acto jurídico que nace de la manifestación de voluntad de la
mayoría de los herederos, la cual produce como consecuencia de derecho la terminación de las
funciones del albacea y designándole a su vez, el cargo a otra con todos los derechos y
obligaciones que el mismo cargo le confiere. Por lo tanto, no se requiere una causa justificada
para que se lleve a cabo dicho acto jurídico, solo es necesario la manifestación de la voluntad de
la mayoría de los herederos que apruebe dicho acto.
Y, por otro lado, la remoción es el procedimiento que se lleva a cabo por medio del cual
el albacea es separado de su cargo por haber incumplido con sus obligaciones, esto es, por causa
justificada, que se promueva de forma incidental, por aparte legitima y haya una declaración
expresa por parte de juez, una sentencia que así lo establezca.
CAUSAS DE REVOCACION
Recapitulando las líneas anteriores, la figura del albacea tiene la obligación de acatar lo
plasmado en el testamento y hacerlo efectivo. Claro, puesto que al albacea le corresponde no
solamente ocupar por subrogación el lugar del difunto, sino también la facultad de hacer todas
las operaciones sucesorias, ejecutar e interpretar el testamento.
Y es claro, que dado que el testador, quiere que los bienes se realicen evidentemente que
quiere también que el albacea, pueda interpretar y hasta integrar las clausulas del testamento, en
tanto que va a realizar, cumpliendo y acatando la voluntad final del testador, que evidentemente
quiso que el albacea, rellenara discrecionalmente lo preciso para conseguir la concreción y
realidad material y efectiva de esas disposiciones.
El testador, desconoce aquellas circunstancias que tras su muerte pueden surgir, y espera
que atienda su finalidad el albacea haga lo mejor según su criterio, interpretando la voluntad
testamentaria. E decir, el testador quiere que, si es menester, el albacea integre la voluntad de
aquel.
Dejemos pues, suficiente claro que el testador es quien decide una atribución u otra, pero
esto no significa que los herederos no puedan revocar al albacea nombrado en el testamento y
sustituirlo por quien, según ellos, pueda desempeñar mejor el cargo, cuando por estas
circunstancias ajenas al testador la capacidad interpretativa o decisiones de realice no sean las
mas idóneas para los herederos.
Es claro que no siempre tiene que ser así, ya que podrá haber casos en que esas
decisiones hechas por el albacea testamentario, Ser las correctas para los herederos, pero no
siendo así la revocación es la opción mas viable, puesto que el testador nunca imagino esas
circunstancias, ya que lo verdaderamente importante es realizar su voluntad.
Si bien es cierto que nombrar al albacea, es una de las voluntades del testador, la esencia
misma del testamento es la repartición del caudal hereditario y si por así convenir a sus intereses
les parece que el albacea testamentario nombrado no es el mas apto para eso, se lleve a cabo la
revocación y sustitución por parte de los herederos que son en definitiva a quien el albacea va a
representar.
La figura del albacea en nuestro derecho sucesorio es de vital importancia, porque en ella
recae todo el peso de la liquidación de un patrimonio y, sobre todo, la ejecución y fiel
cumplimiento de la voluntad del causante; expresa en el caso de la sucesión testamentaria y
presunta en el de la intestada.
El derecho romano más bien ignoro el albaceazgo como figura jurídica de tipo general,
por cuya razón es inútil comprobar su existencia de instituto plenamente desenvuelto en el
Corpus iuris civilis. Fueron influencias de los pueblos germánicos, fomentadas por el derecho
canónico, ellas que introdujeron el albaceazgo propiamente dicho, esto es, como instrumento de
ejecución de la voluntad testamentaria.
En la sucesión que tiene como base el sistema del derecho romano, el heredero reemplaza
al autor de la sucesión en la posición jurídica del antecesor; 2, el sucesor adquiere un patrimonio
en bloque y de modo mediato, como consecuencia de la potestad o título con el que entra; 3. al
heredero pasan todos los derechos que tenía el autor. Como se ve, en este sistema resulta
innecesaria la persona del albacea, porque la función que éste desempeña, corresponde ejecutarla
al heredero como tal y por ser tal.
RESPECTO AL NOMBRAMIENTO:
Lo hace el testador, los herederos o el juez, según sea el caso. 1681 <el testador puede
nombrar uno o más albaceas>, 1682. <cuando el testador no hubiere designado albacea o el
nombrado no desempeñare el cargo, los herederos elegirán albacea por mayoría de votos. Por los
herederos menores votaran sus legítimos representantes>, 1684 <si no hubiere mayoría, el
albacea será nombrado por el juez. De entre los propuestos>
Como precedente, el antiguo derecho español, como dice Castán (77), establecería una
larga serie de incapacidades para ser albacea, en las que estaban comprendidas las de los siervos,
religiosos, mujeres, menores, locos, herejes, moros, judíos, sordomudos por naturaleza, alevosos,
traidores y condenados a muerte o extrañamiento.
Se menciona que no podrá ser albacea el que no tenga capacidad para obligarse.
TITULO III
DE LA SUCESIÓN INTESTADA
CAPITULO I
Disposiciones Generales
JURISPRUDENCIA
DOCTRINA
Para CastánTobeñas “Puede ser definida la sucesión intestada, en nuestro Derecho, como
la sucesión hereditaria que se defiere por ministerio de la ley, cuando faltan, en todo o en parte,
los herederos testamentarios”1 Muy similar es la definición contenida en la Enciclopedia
Universal Ilustrada Europeo Americana2 con la única diferencia que indica que se da a falta de
testamento y no de herederos testamentarios, se enfoca en el instrumento más que en las
personas.
Así Federico Puig Peña indica que “Puede definirse la sucesión intestada como aquella
establecida por la ley, para regular la ordenación y distribución de los bienes dejados por una
persona, cuando muere sin testamento o con testamento ineficaz o insuficiente para poder
llevarse a cabo aquella distribución.”
CAPITULO II
ORDEN DE SUCESION INTESTADA
JURISPUDENCIA
Gaceta de la Corte Suprema de Justicia: 473-2006 16/04/2007 Mortual de Nicolás
Guch Patricio.
Recurso de casación interpuesto por Roberto Guch Ramírez, como representante de la
mortual de Nicolás Guch Patricio, contra la sentencia de fecha veinticuatro de octubre de dos mil
seis, dictada por la Sala Regional Mixta de la Corte de Apelaciones de Antigua Guatemala,
Departamento de Sacatepequez.
LEYES ANALIZADAS: Artículos: 621 inciso 1º., 622 inciso 4º. y 625 del Código
Procesal Civil y Mercantil.
MOTIVOS Y SUBMOTIVOS ALEGADOS POR EL RECURRENTE
Roberto Guch Macario, en la calidad con que actúa, interpuso recurso de casación por
motivo de forma y fondo.
Por motivo de forma invocó como subcaso de procedencia el siguiente:
Por no haberse recibido a prueba el proceso o sus incidencias en cualquiera de las
instancias, cuando proceda con arreglo a la ley, o se hubiere denegado cualquiera diligencia de
prueba admisible, si todo ello hubiere influido en la decisión. Contenido en el numeral 4°. Del
Artículo 622 del Código Procesal Civil y Mercantil.
Por motivo de fondo invocó como subcaso de procedencia el siguiente:
Aplicación Indebida de la ley contenido en el inciso primero del artículo 621 del Código
Procesal Civil y Mercantil.
ALEGACIONES
Con ocasión del día y hora señalados para la vista del presente recurso, las partes
procesales presentaron sus respectivos alegatos, con las argumentaciones que estimaron
pertinentes.
CONSIDERANDO I
MOTIVOS DE FORMA:
POR NO HABERSE RECIBIDO A PRUEBA EL PROCESO O SUS
INCIDENCIAS EN CUALQUIERA DE LAS INSTANCIAS, CUANDO PROCEDA CON
ARREGLO A LA LEY, O SE HUBIERE DENEGADO CUALQUIERA DILIGENCIA DE
PRUEBA ADMISIBLE, SI TODO ELLO HUBIERE INFLUIDO EN LA DECISIÓN.
Con relación a este submotivo el recurrente expuso: “APLICACIÓN DEL NUMERAL 4
DEL ARTÍCULO 622 DEL CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL: de acuerdo a lo
establecido en el código (sic) procesal (sic) civil (sic) y mercantil, (sic) en el numeral 4o. del
artículo 622, procede la casación por quebrantamiento sustancial del procedimiento por no
haberse recibido a prueba el proceso o sus incidencias en cualquiera de las instancias, cuando
proceda con arreglo a la ley, o se hubiere denegado cualquiera diligencia de prueba admisible, si
todo ello hubiere influido en la decisión. En el memorial de demanda ofrecí como medio de
prueba el reconocimiento judicial y en memorial de fecha uno de julio de dos mil tres propuse el
reconocimiento judicial sobre el proceso sucesorio extrajudicial intestado de la causante
Enriqueta GuchTzirin, Promovido ente el notario Jorge Rafael Urrea Lorenzini, por la
demandada Alicia Guch Ramírez, en cual como lo indiqué, se encuentra depositado en el
Archivo General de Protocolos registrado con en número nueve mil ciento veintiséis. El juzgador
de primera instancia, el juez de primera instancia civil y económico coactivo del departamento
de Chimaltenango, en resolución de fecha tres de julio de dos mil tres, resolvió que ‘en cuanto a
lo demás solicitado por el presentado, no ha lugar, en virtud de que el medio de prueba que
solicita, puede ser aportado al proceso, a través de los propios medios que el Código Procesal
Civil y Mercantil establece, específicamente la prueba documental. En memorial de fecha ocho
de julio de dos mil tres, protesté la no admisión del citado medio de prueba y el mismo juzgador,
en resolución de fecha diez de julio de dos mil tres la tuvo como protestada. Es obvio que el juez
de primera instancia no tuvo los alcances para poder entender el por que de la solicitud de
reconocimiento judicial en lugar de la solicitud de prueba documental, en principio, una vez
depositado el expediente no se puede sacar del registro de procesos sucesorios del archivo de
protocolos, únicamente se puede obtener certificación del mismo lo cual no es mas que
fotocopias del expediente original. Como lo estipula el artículo 174 del Código Procesal Civil y
Mercantil, el juez y las partes podrán hacerse acompañar por peritos de su confianza, los que en
el acto del reconocimiento podrán exponer sus puntos de vista verbalmente, sí fueren requeridos
por el juez por tanto, la parte actora a la cual representó necesitaba, de que tanto el juez como un
perito pudieran tener acceso al expediente original, ya que si se trata de una nulidad de un
proceso sucesorio por documentos falsificados es obvio que esta falsificación solo podrá
establecerse mediante un examen de los documentos redargüidos de nulidad no de sus
fotocopias, y el juez, por mas que esté empíricamente preparado, no puede dar fe de la falsedad
material del documento, por ello, la ley ha previsto que se asista de peritos quienes le harán saber
su punto de vista y este valorará el dictamen u opinión pericial de conformidad con los tipos de
valoración que el mismo código procesal civil y mercantil establece. El juzgador de primera
instancia privó a la parte actora del derecho de asistirse de peritos en la diligencia de
reconocimiento judicial del expediente relacionado y por lo tanto de poder establecer la
existencia de una falsedad material en los mismos, hecho que sin lugar a dudas hubiera cambiado
la decisión de los juzgadores de primera y segunda instancia y les hubiera obligado a dictar una
sentencia favorable a la parte actora. El hecho de que en primera instancia en auto para mejor
fallar se halla traído a la vista la certificación del expediente objeto de estas actuaciones
no podía probar, desde ningún punto de vista, la falsedad porque en primer término el juez no
está capacitado para detectar la falsedad material y segundo porque esta se prueba únicamente,
con el examen del documento original y no de las copias. Es por esto, que se infringió el
procedimiento al negársele al demandante la oportunidad de probar la falsedad que conllevaría
ineludiblemente la unidad del proceso sucesorio en cuestión y por consiguiente, y que se declare
con lugar la demanda planteada. “.
DOCTRINA
"El 'orden de sucesión intestada' es una jerarquía legal que establece quiénes son los
herederos de una persona que fallece sin haber dejado un testamento válido. Esta secuencia
determina quiénes tienen derecho a recibir los bienes y activos del fallecido en ausencia de
instrucciones testamentarias. El orden de sucesión intestada suele comenzar con el cónyuge
sobreviviente, seguido de los descendientes directos, los padres, los hermanos y hermanas, y
otros parientes en un orden específico según las leyes locales."
CAPITULO III
Jurisprudencia
LEYES APLICABLES
Artículos citados y 265 de la Constitución Política de la República de Guatemala; 1º, 3º,
4º, 7º, 8º, 10, 12 inciso c), 19, 20, 42, 44, 46, 81 y 186 de la Ley de Amparo, Exhibición Personal
y de Constitucionalidad; 77, 141, 142 y 143 de la Ley del Organismo Judicial; Auto Acordado 2-
95 de la Corte de Constitucionalidad; Acuerdos 44-92 y 9-95 de la Corte Suprema de Justicia.
Doctrina de obligación de albacea de hacer la partición
La partición de la herencia es el reparto de los bienes del fallecido entre los herederos en
proporción a la cuota que a cada uno de ellos corresponde. La partición deberá hacerse una vez
que se ha acreditado con el testamento o con la declaración de herederos quiénes son las
personas con derecho a la herencia y una vez que dichas personas han aceptado la herencia.
"Esta distribución reviste carácter jurídico, sin que resulte preciso que se proceda a una
división material de los bienes, porque la división material puede conllevar, en algunos casos, un
importante menoscabo del valor y utilidad de los bienes. Ello expuesto, y retomando las
consideraciones efectuadas anteriormente, hemos de reparar en lo siguiente: antes de llevarse a
cabo el acto particional los miembros de la comunidad hereditaria son titulares de una cuota
sobre la totalidad; tras la partición, serán titulares de una serie de bienes y derechos concretos
De acuerdo con el Artículo 1085 del Código Civil guatemalteco, luego de estar aprobado
el inventario y la cuenta de administración, el albacea debe hacer inmediatamente la partición de
la herencia, pudiéndose suspender la misma en virtud de convenio expreso de los interesados y
por un término que no pase de tres años, en donde la proindivisión de bienes se regirá por las
reglas de la comunidad de bienes, si los interesados no hubieren acordado las normas de
administrarla y regirla.
CAPITULO IV
EFECTOS DE LA PARTICIÓN
Jurisprudencia:
Articulo 1108
-II-
Argumenta el postulante, que tanto el Juzgado de primer grado como la Sala recurrida, al
resolver en la forma en que lo hicieron, “se fueron al margen de la legalidad”; puesto que,
debieron darle valor a la partición extrajudicial que en acta número ochenta y seis (86), folios
ochenta y cinco (85), ochenta y seis (86) y ochenta y siete (87) del libro de reconocimientos de
documentos de fecha treinta de junio de mil novecientos setenta y siete, que para el efecto se
llevó en la Comunidad de Indígenas del municipio y departamento de Jutiapa, en virtud de que la
misma fue realizada de común acuerdo entre ambos herederos en una entidad protegida
tradicionalmente por el Estado al haberlas reconocido constitucionalmente para respetarlas y
promover sus formas de vida, costumbres y formas de organización social. Asimismo indicó el
postulante, que: “(...) de ambos fallos fue lesionado el reconocimiento de la identidad de los
pueblos indígenas, vedándoles un derecho para la construcción de la unidad nacional basada en
el respeto y ejercicio de derechos no solo políticos sino también culturales, económicos y
espirituales y la superación de la discriminación histórica, especialmente el acuerdo sobre
identidad y derechos de los pueblos indígenas, suscrito en México, Distrito Federal, el treinta de
marzo de mil novecientos noventa y cinco, así como los artículos 1102 y 1108 del Código Civil;
2, 9, 10, 16 y 17 de la Ley del Organismo Judicial que establece: la COSTUMBRE regirá en
defecto de una ley aplicable, que los tribunales observarán siempre el principio de jerarquía
normativa y de supremacía de la Constitución Política de la República, sobre cualquier ley o
tribunal, que es inviolable la defensa de la persona y de sus derechos, y, que los derecho deben
ejercitarse conforme a las exigencias de la buena fe”.
-III-
IV) Se ordena que una vez firme el presente fallo el Notario Partidor proceda a
protocolizar el proyecto de partición presentado, sin hacerle ninguna modificación (...)”; f) El
demandado Paulino Contreras Flores, interpuso recurso de apelación contra la totalidad de la
sentencia de primer grado; en tanto que el demandante Miguel Contreras Flores, apeló
únicamente la exoneración a la parte vencida del pago de las costas procesales. Al conocer en
alzada la Sala Regional Mixta de la Corte de Apelaciones de Jalapa, confirmó en su totalidad la
sentencia de primer grado, bajo el argumento que: “(...) si bien es cierto que se hizo una partición
extrajudicial, también lo es que en dicha partición no se cumplió con la disposición de última
voluntad del señor Tomás Contreras Hernández, expresada en el testamento abierto que otorgó a
favor de sus dos hijos herederos, consistente en que el inmueble en litis debía repartirse en un
cincuenta por ciento para cada uno, pues para que la partición practicada por los herederos sea
legal y efectiva, es preciso que todos presten su consentimiento de manera absoluta, lo que no
ocurre en el presente caso, pues existe la inconformidad de uno de los herederos, por no haberse
repartido el inmueble en cuestión tal y como lo dispuso el testador”. También agregó la autoridad
reclamada que: “(...) la sentencia impugnada debe mantenerse por cuanto si bien es cierto el
terreno objeto de la litis cuya medida superficial es de treinta manzanas, se dividió en forma
extrajudicial correspondiéndole a cada heredero quince manzanas, también lo es que de
conformidad con el informe elaborado por el experto medidor Ingeniero Francisco Rafael Ramos
Sandoval, efectivamente la finca en cuestión en documentos, mide treinta manzanas, pero tiene
excesos que ascienden a diecisiete punto cuatrocientos treinta y siete manzanas (17,437) es decir
que la extensión superficial de toda la finca es de CUARENTA Y SIETE PUNTO
CUATROCIENTOS TREINTA Y SIETE MANZANAS y al haberse repartido únicamente
treinta manzanas, no se cumplió con la expresión de última voluntad del testador, quien dispuso
que la finca relacionada se repartiera en un cincuenta por ciento para cada uno de los hijos
Miguel y Paulino Contreras Flores, de donde deriva que el actor probó los hechos expuestos en
su memorial inicial de demanda”.
-IV-
Efectuado el obligado estudio de la acción de amparo y sus antecedentes, esta Cámara
estima que el primer acto reclamado –fallo de primer grado-, debe ser declarado sin lugar, dada
la falta de viabilidad provocada, debido a que éste quedó subsumido en la sentencia que dictó la
autoridad impugnada –Sala Regional Mixta de la Corte de Apelaciones de Jalapa-, de tal manera
que por seguridad y certeza jurídica, a juicio por vía del amparo debió haber sido sometida
únicamente la resolución que se dictó por apelación en segunda instancia, en vista de que es el
acto que reviste la característica de definitividad en cuanto a la determinación de la autoridad
responsable.
En cuanto al segundo acto reclamado, esta Cámara al hacer el estudio y examen de los
antecedentes del presente amparo, estima que: I) El postulante señala como vulnerados los
artículos 1102 y 1108 del Código Civil, el primero se refiere a la partición extrajudicial, que
estipula que, cuando los herederos son mayores de edad y no haya ausentes o incapaces, podrán
partir los bienes como mejor les parezca, sin intervención judicial; por otro lado, el segundo de
los artículos citados contiene los efectos de la partición, al indicar que la misma legalmente
hecha, confiere a los coherederos la propiedad exclusiva de los bienes que les hayan sido
adjudicados; II) Esta Cámara estima que, no obstante que el postulante no señaló concretamente
que norma constitucional le fue vulnerada, ya que su acción se fundamentó en inobservancia de
normas de carácter ordinario (Código Civil, Código Procesal Civil y Mercantil y Ley del
Organismo Judicial), este tribunal constitucional en aplicación del artículo 42 de la Ley de
Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad (que establece que al pronunciar
sentencia, el tribunal de amparo examinará los hechos, analizará las pruebas y actuaciones y todo
aquello que formal, real y objetivamente resulte pertinente, examinará todos y cada uno de los
fundamentos de derecho aplicables, hayan sido o no alegados por las partes), concluye que le
asiste razón jurídica al postulante, al pretender que sobre la base de los artículos citados se
otorgue el amparo planteado y que como consecuencia se deje sin efecto la sentencia dictada por
la autoridad recurrida; en primer lugar, porque la autoridad impugnada al emitir la resolución de
fecha once de agosto de dos mil cuatro (segundo acto reclamado), no tomó en cuenta que el
documento de partición extrajudicial, que obra a folios treinta y nueve y cuarenta de la pieza de
primera instancia, fue firmado por los señores Paulino y Miguel Contreras Flores, ya que la
autoridad reclamada no le confirió valor probatorio al referido documento al indicar: “(...) para
que la partición practicada por los herederos sea legal y efectiva, es preciso que todos
presten su consentimiento de manera absoluta, lo que no ocurre en el presente caso, pues
existe la inconformidad de uno de los herederos, por no haberse repartido el inmueble en
cuestión tal y como lo dispuso el testador” (las negrillas han sido agregadas), sin tomar en cuenta
que sí hubo consentimiento de parte de los herederos al haber firmado dicho documento, y
porque dicho medio de prueba en ningún momento fue redargüido de nulidad o falsedad, ya sea
conforme el artículo 186 del Código Procesal Civil y Mercantil (al señalar que los documentos
privados que estén debidamente firmados por las partes, se tienen por auténticos salvo prueba en
contrario); o bien como lo estipula el artículo 1118 del Código Civil (al regular que las
particiones hechas extrajudicialmente sólo pueden ser rescindidas en los casos en que lo pueden
ser los contratos en general); III) De todo lo expuesto se extrae que, consta en los antecedentes
del presente amparo, que los señores Miguel y Paulino Contreras Flores suscribieron documento
en el cual realizaron la partición extrajudicial del bien inmueble heredado, contenido en acta
número ochenta y seis que aparece a folios ochenta y cinco, ochenta y seis y ochenta y siete del
libro de reconocimiento de documentos de la Oficina de la Comunidad de Indígenas de Jutiapa;
documento que con base en los artículos 1102 y 1108 del Código Civil surte efectos legales, al
haberse suscrito a través del Director de turno de la oficina de la Comunidad de Indígenas de
Jutiapa, señor Vicente Cardona C., el cual al no ser valorado conforme a las reglas de la sana
critica por parte de la autoridad reclamada, como era su obligación de conformidad con los
artículos 126 y 127 del Código Procesal Civil y Mercantil, vulneró al amparista el derecho
constitucional del debido proceso contenido en el artículo 12 de la Magna Lex, en virtud de
que: “(...) la garantía del debido proceso no sólo se cumple cuando en un proceso se desarrollan
los requisitos procedimentales que prevé la ley y se le da oportunidad de defensa a ambas partes
de esa relación procesal, sino que también implica que toda cuestión litigiosa debe dirimirse
conforme disposiciones normativas aplicables al caso concreto con estricto apego a lo que
dispone el artículo 204 de la Constitución y que se viola el debido proceso si a pesar de haberse
observado meticulosamente el procedimiento en la sentencia se infringen principios que le son
propios a esta garantía constitucional (...)” (Gaceta número 61, expediente No. 712-01, sentencia
de fecha diecinueve de septiembre de dos mil uno de la Corte de Constitucionalidad), pues el
hecho de que el inmueble en litigio contara con una superficie superior a lo que aparece en lo
legado, el juicio oral de división de la cosa común no es la vía idónea para discutir lo relativo al
exceso invocado, porque como se establece en el acta de mérito, la repartición de lo heredado lo
hicieron las partes de común acuerdo y como lo dispuso el legatario, ya que en dicho documento
consta que se dispuso sobre el ciento por ciento de lo testado. Por ello, esta Cámara es del
criterio que la autoridad reclamada al haber confirmado la sentencia emitida en primer grado, y
declarar sin lugar el recurso de apelación interpuesto por el postulante, violó el derecho
constitucional invocado por el amparista, y por lo mismo el amparo planteado debe otorgarse, sin
condenar en costas a la autoridad recurrida por estimarse que actuó con evidente buena fe.
LEYES APLICABLES:
Doctrina
El Artículo 1108, dispone que la partición legalmente hecha, confiere a los
coherederos la propiedad exclusiva de los bienes que les hayan sido adjudicados, pero todos
están obligados recíprocamente a indemnizarse en caso de evicción de los bienes repartidos;
sin embargo, la obligación de saneamiento cesará cuando al hacerse la partición entre
herederos mayores, se pactó expresamente y cuando la evicción proceda de causa posterior a
la partición o fuese ocasionada por culpa del que la sufre, el cual será indemnizado por los
coherederos, en proporción a sus cuotas hereditarias, pero si luego de hecha la partición
aparecieren algunos bienes omitidos en ella, se hará una división suplementaria, en la cual se
observarán las disposiciones establecidas para la partición hereditaria.
CAPITULO V
Jurisprudencia
Gaceta de la Corte Suprema de Justicia: 350-2006 29/01/2007 Esther Adilia Eugenia
Colina Martínez viuda de Roesch y Residenciales Santander, Sociedad Anónima.
Rescisión de particiones extrajudiciales
Recurso de casación interpuesto por Esther Adilia Eugenia Colina Martínez de Roesch y
la entidad Residenciales Santander, Sociedad Anónima a través de Olga Adilia Roesch Colina de
Orellana en contra de la sentencia de fecha uno de agosto de dos mil seis, dictada por la Sala
Tercera de la Corte de Apelaciones del Ramo Civil y Mercantil.
LEYES ANALIZADAS
DE LA SENTENCIA RECURRIDA
La Sala, de acuerdo a lo considerado y leyes citadas, al resolver declaró: “I) SIN LUGAR
el recurso de apelación planteado y en consecuencia CONFIRMA la sentencia venida en grado.”
Para llegar a la anterior conclusión, la Sala consideró: “III. Al valorar los medios de
prueba aportados al proceso de conformidad con las reglas de la sana crítica, haciendo uso
principalmente de la lógica y la experiencia, se arriba a la certeza jurídica que la sentencia
apelada se encuadra a derecho y a la realidad procesal; ya que quedó establecido que la
mandataria sin estar legalmente facultada, sin el consentimiento debido renunció a los derechos
de copropiedad sobre las fincas que constituyen los apartamentos Santander, adquiriendo para sí
los derechos de propiedad de los mismos lo que está prohibido por el artículo 1710 del Código
Civil; dándose la nulidad del negocio jurídico que nos ocupa por la ausencia de uno de los
requisitos esenciales par su existencia, pues se estableció la falta del elemento esencial como lo
es el consentimiento, por lo que el contrato de adquisición es nulo conforme el artículo 1710 del
Código Civil. Así mismo quedó establecido que el apoderado se excedió en los límites del
mandato; pues este no contenía facultades para otorgar contrato de cancelación de proindivisión
como lo hizo a través de la escritura pública número ciento cincuenta y nueve que obra en autos;
y como consecuencia de lo anterior deviene nulo también el negocio jurídico celebrado en
escritura pública número cuarenta y seis, autorizada en esta ciudad el veintisiete de julio de mil
novecientos noventa y dos por el Notario Ricardo Villanueva Carrera. En cuanto a las
Excepciones perentorias de: a) IMPROCEDENCIA DE LA PRESENTE DEMANDA DE
NULIDAD ABSOLUTA DE NEGOCIOS JURÍDICOS, COMO CONSECUENCIA DE QUE
EL PLAZO EN QUE DEBIO PLANTEARSE LA PRESENTE ACCIÓN PRESCRIBIÓ AL
TENOR DE LO QUE ESTABLECE EL ARTÍCULO 1727 DEL CODIGO CIVIL y b)
IMPROCEDENCIA DE LA PRESENTE DEMANDA ORDINARIA DE NULIDAD
ABSOLUTA DE NEGOCIOS JURÍDICOS COMO CONSECUENCIA DE QUE LOS VICIOS
QUE SEÑALA LA ACTORA QUE CONTIENEN LOS MISMOS, DARIAN LUGAR A SU
ANULABILIDAD Y NO A LA NULIDAD ABSOLUTA COMO ELLA
EQUIVOCADAMENTE SEÑALA; deben ser declaradas sin lugar pues las mismas, no tienen
ningún sustento legal: Por lo anterior, esta sala estima que la sentencia venida en grado, deber ser
confirmada declarándose sin lugar el recurso hecho valer.”
ANÁLISIS
Del análisis del recurso de casación presentado por las recurrentes se establece de un
análisis adolece de los errores siguientes: a) se señalan como infringidos los artículos 127 último
párrafo, 129, 177 último párrafo, 178, 186, primero y segundo párrafo del Código Procesal Civil
y Mercantil, cuando los mismos se refieren a estimativa probatoria, los que podrían ser
infringidos si se hubiera invocado, por la naturaleza y rigor técnico del recurso, error de derecho
en la apreciación de la prueba; b) El casacionista expuso: Que el tribunal prescindió de toda
valoración probatoria recaída en el testimonio de la Escritura Pública número ciento cuatro en
esta ciudad por el Notario William René Méndez, con fecha veintiocho de septiembre de
mil novecientos ochenta y nueve y el testimonio de la Escritura Pública número ciento cincuenta
y nueve de fecha dieciséis de mayo de mil novecientos noventa y uno, autorizada por el Notario
Guillermo Antonio Porras Ovalle, de su análisis se establece que este argumento es propio del
error de derecho en la apreciación de la prueba, pero como se ha marcado con anterioridad, por
la naturaleza del recurso de casación en la forma planteada, resulta antitécnico para citarlo en el
submotivo de error de hecho en la apreciación de la prueba; c) por otra parte el artículo 1710 del
Código Civil preceptúa que: “ Sin la autorización previa y escrita del mandante, no puede el
mandatario usar ni adquirir para sí ni para sus parientes legales las sumas o bienes que de
él haya recibido o por su cuenta; bajo pena de nulidad y pago de daños y perjuicios que se
sobrevengan al mandante”.
LEYES APLICABLES
Artículos citados y 66, 67, 69, 71, 75, 79, 620, 621 inciso 2º., y 635 del Código Procesal
Civil y Mercantil; 79 inciso a), 141, 142 y 143 de la Ley del Organismo Judicial.
Partición anulable
Jurisprudencia
Gaceta de la Corte Suprema de Justicia: 135-2003 16/12/2003 Blas Oliverio Paraíso
Cabrera
Recurso de casación interpuesto por Blas Oliverio Paraíso Cabrera, contra la sentencia de fecha
veintidós de abril de dos mil tres, dictada por la Sala Sexta de la Corte de Apelacione.
Leyes analizadas:
CONSIDERANDO I
Por incongruencia del fallo con las acciones que fueron objeto del proceso:
Los actores en su demanda en el apartado de los hechos letra F piden nulidad absoluta
por vicios del consentimiento por padecer de ceguera lo cual en el proceso nunca probaron tal
extremo, es decir existe total incongruencia entre el fallo y la pretensión presentada en la
demanda y que inició el veintiuno de julio del dos mil. EN CONCLUSION en cuanto al fallo
emitido por dicha Sala es totalmente INCONGRUENTE CON LA ACCION REQUERIDA POR
LOS SEÑORES LUIS AGUSTIN CABRERA Y CABRERA, MARÍA LUZ CABRERA Y
CABRERA Y ANITA DE JESUS CABRERA Y CABRERA VIOLANDO LO ESTABLECIDO
EN EL ARTÍCULO 26 DEL CODIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL, LO CUAL
CONSTITUYE QUEBRANTAMIENTO SUBSTANCIAL DEL PROCEDIMIENTO Y QUE
HABILITA EL RECURSO DE CASACION DE FORMA.”.
ANÁLISIS
Con relación al submotivo de incongruencia del fallo con las acciones del proceso, es
conveniente señalar que el principio de congruencia que regula el artículo 26 del Código
Procesal Civil y Mercantil, exige de los juzgadores la observancia de los límites sobre los cuales
deben emitir sus fallos, parámetros que son establecidos con las pretensiones de las partes, con el
objeto de que no se resuelva ni más, ni menos de lo pedido, o algo distinto a lo solicitado. Dada
esta circunstancia, esta Cámara ha establecido como criterio jurisprudencial, que para establecer
si existe incongruencia, ésta debe deducirse de la parte resolutiva de la sentencia, pues es allí
donde se determina lo que el juez otorga, y no en la parte considerativa, pues en ella únicamente
se exponen las razones por las cuales se accede o no a las pretensiones.
CONSIDERANDO II
Con relación a este submotivo, el recurrente expuso: “a)se considera error de derecho que
demuestra de modo evidente la equivocación de la Honorable Sala Sentenciadora, quien en la
apreciación de prueba documental como lo es la escritura pública número doscientos treinta y
uno, autorizada por el Notario Rigoberto Urzua Sagastume, el día tres de julio de mil
novecientos ochenta y nueve, y con la cual la misma Sala Sentenciadora demuestra que en el
instrumento público es autentico que no tiene ningún vicio que sea objeto de Nulidad (sic) pues
tanto el tribunal de Primera Instancia como el de segunda Instancia le concede valor probatorio y
entonces TIENE PLENA VALIDEZ DICHO INSTRUMENTO publico (sic), Además (sic) en él
JAMAS se consignó que los comparecientes padecían de ceguera y por lo tanto no tenía que
comparecer un testigo que diera lectura al instrumento, y por la fe Pública que tiene el Notario
depositada por mandato legal y en virtud de que se cumplieron con todos los requisitos exigidos
en el código de Notariado para que el instrumento Público sea valido y principalmente por lo
regulado en el artículo 186 del Código Procesal Civil y Mercantil es un documento que hace fe y
es plena prueba por lo que al valorar dicho instrumento en la forma en que lo hizo la Honorable
Sala Sentenciadora, dándole un valor contrario a lo que la ley confiere, cometió ERROR DE
DERECHO como quedo demostrado. b) La honorable Sala sentenciadora a pesar de lo
establecido en el artículo 186 del código procesal civil (sic) y Mercantil que regula que ‘los
documentos autorizados por Notario o por funcionario público en el ejercicio de su cargo
producen fe y hacen plena prueba, salvo el derecho de las partes de redarguirlos de Nulidad o
falsedad’ le otorga pleno valor probatorio a dicho instrumento pero contrario al que debe por
mandato legal, porque con ello se demuestra que era un negocio jurídico distinto al que las partes
fueron convocados, y no obstante están dejando con esta apreciación de la prueba con validez
dicho instrumento público, lo que significa que el negocio jurídico celebrado en dicho
instrumento es valido, además la Sala Sentenciadora olvida totalmente que la parte actora en
ningún momento impugnó dicha situación pues según la demanda se alegó la INCAPACIDAD
RELATIVA en cuanto a que los actores eran NO VIDENTES y no podían celebrar dicho
negocio jurídico indicando además los actores en la demanda que este contenía vicios en su
consentimiento. c) No obstante que la Sala sentenciadora aprecia con valor probatorio dicho
instrumento en forma intencional cambia a favor de quien le otorga pleno valor pues se le
concede a la parte actora indicando que fuimos nosotros quienes ofrecimos dicha prueba, cuando
en la realidad fueron ambas partes quienes ofrecieron dicha prueba y que por negligencia de la
parte actora no diligenciaron dicha prueba de su parte, si no únicamente de nuestra parte. Si la
Sala hubiere cumplido con su obligación legal de analizar la prueba rendida como lo hizo el Juez
de Primer grado en el proceso, hubiese llegado a la conclusión que dicho instrumento publico
(sic) al no ser redarguido de nulidad o falsedad por los actores sigue conteniendo vigente el
negocio realizado y el negocio realizado es la compra venta de derechos, los cuales fácil resulta
deducir que sigue con plena validez dicho instrumento y al amparo de lo establecido en el
artículo 186 del Código Procesal Civil y Mercantil y el darle un valor probatorio distinto
constituye una violación a la Fe Pública establecida en el código de Notariado en el artículo 1º. y
que es depositada al Notario por mandato legal.”
Como puede apreciarse, la Sala resolvió exactamente lo que fue solicitado por los
demandantes en su primera solicitud, es decir, existe total congruencia entre las acciones que
fueron objeto del proceso y las pretensiones otorgadas en la sentencia impugnada. Lo que se
advierte en este caso es que el recurrente no está de acuerdo con los argumentos sustentados por
el Tribunal de Segunda Instancia en la parte considerativa del fallo, lo cual es inapropiado para
sustentar este submotivo, por lo que el mismo no puede prosperar.
LEYES APLICABLES
PARTICIÓN NULA
Jurisprudencia:
Análisis
La aplicación indebida de la ley es un vicio que comete el juzgador al
momento de seleccionar las normas aplicables a los hechos controvertidos, fundamentando su
decisión en una norma que resulta inadecuada a los hechos que se presentan.
En el presente caso, la entidad recurrente argumenta que la Sala sentenciadora incurrió en
aplicación indebida del artículo 1285 del Código Civil, puesto que la sentencia impugnada se
fundamenta en él y después de afirmar que ninguna de las dos partes aportó medios de prueba
suficientes, más adelante declara: « no existen los presupuestos necesarios que indiquen la
existencia de nulidad absoluta del negocio jurídico, lo cual enmarca el caso en lo regulado por el
artículo 1285 del Código Civil. Agrega que la Sala no explica por qué motivo considera que
ocurre la simulación, lo cual confirma, a su criterio, la aplicación indebida de dicha norma.
Esta Cámara, al analizar el argumento de la recurrente y el fallo impugnado, concluye
que la Sala sentenciadora no incurrió en el vicio denunciado, pues no obstante, la Sala utilizó el
artículo denunciado como infringido, al efectuar sus consideraciones determinó con base en el
artículo 1301 del Código Civil que no se daban los presupuestos para decidir la procedencia de la
nulidad absoluta pretendida. Aunado a lo anterior, consideró que con los medios de prueba
aportados por las partes « no se dan los presupuestos para decidir la procedencia de la pretensión
del actor en lo que respecta a la nulidad absoluta del negocio jurídico contenido en la escritura
pública número treinta y cinco y que como resultado del anterior análisis no procede ordenar al
Registrador de la Propiedad, realizar ninguna cancelación registral de las pretendidas.
Estos argumentos claramente evidencian que la Sala sentenciadora, aunque citó el
artículo 1285 del Código Civil, esto no es determinante, ya que para fundamentar su decisión
también citó el artículo 1301 del citado cuerpo legal, que si era pertinente al presente caso, y en
los medios de prueba que fueron diligenciados dentro del proceso, no así en la norma que el
recurrente denuncia como aplicada indebidamente.
Lo anterior se confirma con el mismo hecho de que la Sala no explica por qué motivo
considera que ocurre la simulación, puesto que no era materia sobre la cual debía pronunciarse
dentro del presente proceso. En ese sentido, se concluye que la aplicación indebida del artículo
1285 del Código Civil en la sentencia impugnada no es determinante, pues no constituyó el
fundamento principal para la resolución de la controversia, situación que invalida el
planteamiento del recurrente, razón por la cual debe desestimarse el submotivo invocado.
CONSIDERANDO IV
El artículo 633 del Código Procesal Civil y Mercantil establece que si el tribunal
desestima el recurso de casación o considera que la resolución recurrida está arreglada a derecho,
deberá hacer la declaración correspondiente condenando al que interpuso el recurso al pago de
las costas y a una multa no menor de cincuenta quetzales ni mayor de quinientos, según la
importancia del asunto. En el presente caso, habiendo sido expuestas las razones por las que se
desestima el recurso de casación, procede condenar a la entidad interponente al pago de las
costas causadas y la multa respectiva.
LEYES APLICABLES
Los artículos citados y los siguientes: 12 y 203 de la Constitución Política de la
República de Guatemala; 619, 620, 621, 630 y 635 del Código Procesal Civil y Mercantil; 79
inciso a), 141, 143, 147 y 149 de la Ley del Organismo Judicial.
PARTICIPACION SUPLEMENTARIA
Jurisprudencia:
Violación de ley
No puede prosperar el recurso de casación por motivo de fondo si se invoca
como sub motivo la violación de ley y se impugna con argumentos dirigidos a la admisibilidad y
valoración de un medio de prueba apreciado debidamente en la sentencia impugnada; por lo que
hay defecto de técnica en su planteamiento.
LEYES ANALIZADAS
Artículos 186, y 621 numeral 1º. y 2º. del Código Procesal Civil y Mercantil.
BIBLIOGRAFÍA
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