Prólogo

En lo más recóndito de las montañas, en medio de frondosos

bosques y senderos enmarañados, se erguía una modesta
taberna conocida por sus paredes de madera envejecida y su
techo de paja que apenas lograba resistir los embates del clima.
Era un refugio para los viajeros fatigados, los buscadores de
aventuras y las almas sedientas de relatos por contar.

En esta noche en particular, el bullicio era ensordecedor. El humo

de las fogatas se mezclaba con el aroma a cerveza y carne
asada. Los enanos reían a carcajadas, agitando sus grandes
jarras de cerveza, mientras que los humanos compartían historias
de hazañas pasadas y sueños por cumplir. En medio de la
multitud, un hombre destacaba por su reserva

Su nombre era Zet Arkatsca, un joven artífice cuyo destino

estaba marcado por la valentía y la determinación. Con una
estatura de aproximadamente 1.70 metros, Zet se distingue por
su apariencia humana, su cabello algo rizado con un mechón
blanco que adorna su frente. Su piel, de un tono moreno,
envuelve un cuerpo delgado y ágil, mientras que sus ojos, de un
verde esmeralda penetrante, reflejan su cautivante personalidad.
En este momento, viste solo unos shorts, pero siempre lleva un
anillo gris en el dedo índice de su mano derecha.

Sin embargo, Zet no dejaba que el dolor lo detuviera. Con una

sonrisa tímida en el rostro y una cerveza apenas tocando sus
labios, celebraba su iniciación en el mundo de los artífices,
aunque en su interior prefería la calma y la soledad. Sus
compañeros de taberna lo rodeaban, levantando sus propias
jarras en un brindis por su coraje y habilidad, mientras él se
encogía ligeramente ante tanta atención.

Mientras la noche avanzaba y las estrellas brillaban en lo alto, Zet

se sumergía en la alegría del momento, aunque en su interior se
sentía incómodo con tanta atención. Prefería los momentos de
paz y soledad, pero en esa taberna, entre risas y canciones,
comenzaba una nueva etapa en su vida como artífice, una que lo
forzaría a salir de su caparazón introvertido.

Zet Arkatsca tomaba algunas bebidas, observando todo a su

alrededor con una sonrisa tímida, sintiéndose abrumado por la
atención. Después de su combate con el oso, ahora sería visto
como un artífice del antiguo oficial, pero preferiría pasar
desapercibido. Sin embargo, sus pensamientos fueron
interrumpidos por un golpe en su espalda desnuda, un enano
cuyo nombre es Richi.

Richi: Oye, Zet, veo que estás aquí, ¿eh?

Zet: Se sobresalta ligeramente. Ah... sí, aquí estoy.

Richi: Te ves un poco tenso, ¿qué pasa?

Zet: Oh, no es nada... Solo... la multitud y todo eso, ya sabes.

Richi: Bueno, entiendo. Pero no puedes dejar que eso arruine tu

noche. ¡Es tu iniciación, después de todo!
Zet: Asiente con timidez. Sí, lo sé, solo que... no estoy
acostumbrado a tanta atención.

Richi: ¡Ah, entiendo! Pero deberías disfrutarlo. Además, ¿has

visto quién está aquí?

Zet mira en dirección a donde Richi señala y ve a una

humana al otro lado de la taberna.

Richi: Parece que tu "amiga" vino a celebrar. Deberías ir a

saludarla, ¿no crees?

Zet: Oh, no sabía que ella estaría aquí. ¿Qué debería hacer?
¡Aah!

Richi: Ve y dile algo, amigo. Y luego, dile que es bienvenida.

Richi le da un golpe amistoso en la espalda y se va, dejando

a Zet nervioso ante la idea de acercarse a la chica humana.
Finalmente, con paso vacilante, se dirige hacia ella.

Zet: Eh... h-hola, Lux.

Lux: ¡Zet! ¡Qué sorpresa verte! ¿Cómo estás después de esa

pelea con el oso? ¡Debe haber sido una locura!

Zet: S-sí, fue... bastante intenso. Pero aquí estoy.

Lux: riendo ¡Vaya valentía la tuya! Siempre me sorprendes, Zet.

Pero bueno, ¿qué importa eso ahora? ¡Es tu noche de
celebración! ¡Felicidades por tu iniciación!

Zet: Sonriendo tímidamente. Gracias, Lux. Significa mucho para

mí... y es agradable verte aquí.
Richi: interrumpiendo la conversación Hey, chicos, siento
interrumpir, pero parece que la fiesta necesita un poco más de
chispa. ¡Vamos, vamos!

Lux: mirando alrededor Este lugar está lleno de energía esta

noche, ¿no crees? ¡Oh! ¡Deberíamos brindar por tu éxito! ¿Qué
dices?

Zet: Asintiendo con nerviosismo. S-sí, claro... vamos a brindar.

Richi: levantando su jarra Por el valiente Zet, ¡que nunca se rinde

ante un desafío!

Zet: Levantando tímidamente su jarra, con el corazón latiendo

rápidamente. Por... por la amistad duradera y las aventuras
compartidas.

Lux: sonriendo ¡Salud!

Después del brindis, Zet se siente aliviado por haber superado el

encuentro con Lux, aunque su corazón sigue latiendo con fuerza.
La presencia de Lux siempre le afecta de esa manera, haciéndolo
sentir emociones que no sabe cómo expresar. Sin embargo, está
decidido a disfrutar de la noche y celebrar este importante
momento en su vida como artífice.

Después del brindis, la atmósfera en la taberna se vuelve aún

más animada. La música de una banda improvisada llena el aire
mientras los clientes continúan brindando y riendo. Zet, Lux y
Richi se sumergen en la diversión, aunque Zet se siente un poco
abrumado por la cantidad de gente y prefiere observar desde un
rincón tranquilo.
De repente, un grupo de gnomos entra en la taberna,
acompañados por el sonido de flautas y tambores. Son recibidos
con entusiasmo por los presentes, y pronto se unen a la
celebración. Entre ellos se encuentra Lyra, una joven gnoma de
cabello azul brillante y ojos centelleantes. Lyra, una amiga
cercana de Zet desde hace años, se acerca con una sonrisa
radiante.

Lyra: ¡Zet, qué alegría verte aquí! ¡Felicidades por tu iniciación!

Zet sonríe tímidamente y asiente con gratitud al ver a Lyra,

pero se siente un poco incómodo con la atención.

Zet: G-gracias, Lyra. Es bueno verte también.

Lyra: Claro que sí, no me perdería esto por nada del mundo.
Además, tengo algo especial para ti.

Lyra saca un pequeño paquete envuelto en tela brillante y se lo

entrega a Zet. Intrigado, Zet lo recibe con cautela y lo
desenvuelve lentamente. Para su sorpresa, encuentra dentro del
paquete un tallado de madera exquisitamente detallado,
representando un oso rugiente.

Zet: ¡Es hermoso! ¿Cómo supiste que me encantaría?

Lyra: Oh, solo una corazonada. Espero que te traiga suerte en

tus futuras aventuras.

Mientras tanto, Lux y Richi se unen a la conversación,

intercambiando chistes y compartiendo anécdotas con los
gnomos recién llegados. La música y la risa llenan la taberna,
creando un ambiente de camaradería y felicidad.

Con el pasar de las horas, la celebración alcanza su punto álgido.

Los clientes cantan y bailan al ritmo de la música, olvidando por
un momento las preocupaciones del mundo exterior. Zet, aunque
se siente un poco fuera de lugar, disfruta observando desde su
rincón tranquilo, contento de estar rodeado de amigos.

Finalmente, cuando el sol comienza a asomarse en el horizonte,

la fiesta llega a su fin. Los clientes se despiden con abrazos y
sonrisas, prometiendo encontrarse de nuevo en el futuro. Zet,
Lux, Richi y Lyra se quedan un momento más, mirando con
nostalgia la taberna que tantos recuerdos les ha dado.

Con el corazón lleno de gratitud y felicidad, Zet se despide de sus

amigos y se retira a descansar, llevando consigo el regalo de
Lyra como un recordatorio de esta noche inolvidable.

Este Mundo Maravilloso es una mierda

Zet se despierta sobresaltado por los gritos ensordecedores que
inundan su hogar. La usual calma de la mañana se ve
reemplazada por el caos y la desesperación. Mirando por la
ventana, se horroriza al presenciar el ataque devastador: cientos,
si no miles, de caballeros del reino asaltan el pueblo de los
artífices del antiguo.

Zet apenas tiene tiempo de ponerse su camisa cuando una bola

de fuego impacta con su habitación, arrojándolo fuera de ella.
Corre en busca de una salida, su corazón latiendo con pánico
mientras observa cómo sus conocidos y compañeros en el
gremio de artífices son masacrados, la muerte rodeando todo a
su alrededor.

Zet: (con horror) ¡Dios mío...!

Zet ve cómo su amigo Richi lucha valientemente contra los

invasores, pero un caballero se abalanza sobre él, dañando su
brazo en el proceso. Zet grita de dolor cuando la espada del
caballero corta su brazo, dejándolo mutilado y sangrando en el
suelo.

Zet: ¡Ah!

Con lágrimas en los ojos, Zet se arrastra hacia la figura familiar

de Lux, quien lucha valientemente contra los invasores a pesar
del caos que la rodea.

Zet: (con desesperación) ¡Lux! ¡Necesito ayuda!

Lux, al ver a Zet herido, intenta correr hacia él, pero una lluvia de
flechas cae sobre ellos. Una de las flechas alcanza a Lux,
hiriéndola de gravedad.

Zet: ¡No!

Con un esfuerzo desesperado, Zet se acerca a Lux mientras ella

lucha por mantenerse consciente. Con lágrimas en los ojos, Lux
le entrega un collar con forma de cristal azul brillante.

Lux: (con voz entrecortada) Tóma, Zet... protégete...

Zet toma el collar, sus manos temblando mientras sostiene el
último regalo de su amiga. Lux sonríe débilmente antes de cerrar
los ojos, dejando a Zet solo con su dolor y su culpa.

Zet: (Con la voz quebradiza) L-lo siento lux es mi culpa

Richi llega justo a tiempo para ver la tragedia que ha ocurrido.

Con lágrimas en los ojos, toma a Zet y lo carga mientras intenta
escapar de la masacre.

Richi: ¡Zet, tenemos que irnos ahora!

Richi oberserva con atención el cuerpo de lux el cual ahora

desangrandoze sin dar ningún indicio que se recupere y a su lado
esta zet viendo todo a su alrededor con una mirada hacia el vacio

Richi: (con voz entrecortada) Lo siento, Zet... Lo siento tanto...

Zet apenas puede responder, su corazón roto por la pérdida de

su amiga y la brutalidad del ataque. A medida que la realidad de
la situación se hunde en él, se agarra al collar que Lux le dio,
sintiendo su calor contra su pecho mientras lucha por encontrar
consuelo en medio de la tragedia.

Richi toma a Zet y corre mientras se quita su brazo mecánico y

se lo pone a Zet para detener la hemorragia.

Richi: Aguanta, amigo... Estaremos bien...

La voz de richi se detuvo abruptamente cuando una nueva

oleada de violencia arremetió contra ellos. Richi, enfocado en
calmar a Zet, no se dio cuenta de las cuchillas de viento que se
precipitaban hacia ellos. En el último momento, se arrojó sobre
Zet, recibiendo el impacto y protegiéndolo con su propio cuerpo.

El dolor ardió en cada fibra de su ser mientras la conciencia se

desvanecía, dejando a Zet atrapado en un torbellino de dolor y
desesperación. Aunque el intento de richi salvo la vida de zet no
logro mantener lo que quedaba de zet siendo que una de estas
cuchillas corto directamente la pierna derecha zet

Richi: ¡Zet, aguanta! ¡Nosotros... saldremos de esto!

Tras decir estas palabras Zet ve como los ojos de Richi se

difuminan siendo que zet apenas puede ver el daño que le
generaron a richi siendo este mucho mayor del que el sufrio en
su pierna

Zet: ¡Richi!

El dolor y la desesperación llenan el corazón de Zet mientras

observa impotente cómo su amigo sacrifica su vida por él. A
medida que el mundo a su alrededor se desvanece en la
oscuridad, Zet lucha por mantenerse consciente, su mente y su
cuerpo destrozados por la tragedia.

Zet, casi inconsciente, observa cómo su mundo se desmorona a

su alrededor. Después de un tiempo que parece eterno, despierta
en un paisaje desolador, su pierna mutilada siendo la prueba
tangible de la tragedia que ha ocurrido.

Zet: (entre sollozos) No... no puede ser...

El sonido de la masacre es abrumador mientras Zet se queda en
el suelo, abrumado por la pérdida y la desesperación, su corazón
lleno de dolor y su alma rota.Tras decir estas palabras Zet cae
inconciente producto del daño que sufrio física y emocionalmente