Las culturas: organizar, soñar, recordar, definir, luchar.
De Jorge González
ORGANIZAR La cultura es un modo de organizar el movimiento constante de
la vida cotidiana. La cultura nos permite organizar y estructurar nuestra experiencia. SOÑAR Pero la cultura no es sólo una forma de domesticar nuestra situación presente. También es sueño y fantasía. Es también la cultura la que nos permite soñar con otras formas de organización, a partir de ella proyectamos, imaginamos, acunamos esperanzas. RECORDAR La cultura es memoria, es recordar, nos vincula con nuestra historia, nuestras raíces, a las luchas colectivas del pasado. El pasado que se recuerda y que se olvida es activado en el presente en función de las expectativas futuras. DEFINIR La cultura nos permite definir nuestra situación dentro de la vida social y colectiva porque es la herramienta privilegiada para darle un sentido a la realidad. LUCHAR Tal como venimos diciendo y observando, la cultura es un espacio de lucha. Para que existan cambios y transformaciones, o para preservar lo que valoramos del pasado y del presente, libramos pequeñas y grandes batallas para… Definir los sentidos de la realidad Recordar y activar memorias propias y colectivas Concretar los sueños y esperanzas que tenemos Organizar las formas de nuestra vida en común, de nuestra vida social.
González señala también…
La cultura es una dimensión omnipresente de las relaciones sociales. Esto implica:
Que la cultura pertenece a toda la sociedad.
Que la cultura tiene una “entidad” propia, que se vincula muy estrechamente con la estructura económica pero no depende exclusivamente de ella. La cultura tiene cierta autonomía relativa. La cultura abarca los procesos de construcción e interpretación social del sentido. Todas las prácticas y relaciones de la sociedad las interpretamos en algún sentido, se nos aparecen como signos que decodificamos. La cultura es el universo de todos los “signos” o discursos socialmente construidos. La cultura organiza y representa un “nosotros” que está ligado a la razón y nuestras pasiones.
La lucha por el poder cultural busca elaborar y sostener visiones de la realidad:
cómo organizar la vida, qué podemos soñar, qué recordar y qué olvidar, cómo definir lo que llamamos realidad.