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Fragmento Hume (La norma del gusto, 1957):

“Parece entonces que, en medio de toda la variedad y capricho del gusto,hay


ciertos principios generales de aprobación o reprobación, cuya influencia puede
rastrear un ojo cuidadoso en todas las operaciones de la mente. Algunas formas o
cualidades particulares, desde la estructura original de la fábrica interna, están
calculadas para complacer, y otras para displacer; y si ellas no logran su efecto en
algún caso particular, es por causa de algún aparente defecto o imperfección en el
órgano (...)Solamente pueden tenerse por tales a aquellos críticos que posean un
juicio sólido, unido a un sentimiento delicado, mejorado por la práctica,
perfeccionado por la comparación y libre de todo prejuicio; y el veredicto unánime de
tales jueces dondequiera que se les encuentre, es la verdadera norma del gusto y
de la belleza”

Fragmento Platón (Banquete):

“Conviene que el que quiera proceder con acierto en este camino, comience desde
que es joven por despertar a los cuerpos bellos y en primer lugar a un solo cuerpo y
siembre así bellas máximas. Luego debe comprender enseguida que la belleza que
hay en un cuerpo cualquiera es hermana de la que hay en otro, y que si ha de ir en
persecución de la belleza en su idea misma, será mucha necedad no considerar
como una sola y una misma belleza, la que existe entre los cuerpos. Cuando se
haya penetrado de este pensamiento, se constituirá en amante de todos los cuerpos
bellos y cederá en la vehemencia de su amor a uno solo, despreciando y teniendo
en poco este amor exclusivo.
Después de esto deberá refutar la belleza del alma, más estimable que la del
cuerpo, de modo que si encuentra un alma convenientemente dispuesta, aunque su
cuerpo no sea de gran hermosura, será el devoto constante de ella y dará
nacimiento a pensamientos que enseñarán y fortificarán el carácter, a fin de que,
precisado a contemplar la belleza en las acciones y en las leyes, conozca que toda
belleza es congénere consigo misma, para que estime como muy poca cosa la
belleza del cuerpo.
De la contemplación de las acciones, se elevará a la de las ciencias, a fin de que
vea también la belleza de las ciencias y dirigiendo su mirada a una más amplia
belleza no se esclavice, limitándose a la belleza de una sola como el amante servil
que ama a la belleza de una joven o de un hombre, o de una sola acción, ni se haga
un vil y mezquino amante, sino que volviéndose a contemplar el inmenso piélago de
belleza, produzca renovados, bellos y magníficos pensamientos y discursos, en una
abundante y rica filosofía, hasta que su espíritu, robusteciéndose y creciendo en
ella, llegue a contemplar una sola ciencia, que es la ciencia de la belleza.

Preguntas (responde con los textos y con lo que hemos visto en clase):

1.- Compara la definición de belleza en ambos autores


2.- ¿Platón cree que la belleza es objetiva o subjetiva?
3. ¿Dónde está la belleza según Hume, en el objeto o en el sujeto?
4.- ¿Crees que hay normas del gusto?
5.- ¿Con quién estás más de acuerdo de los dos?

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