Isabella Calderón Javelly

La lesividad

¿Que es la lesividad en México y un ejemplo?

En México, el término "lesividad" se refiere al daño o perjuicio que una acción o situación
causa a un individuo o a la sociedad en general. Este concepto es especialmente relevante
en el ámbito legal y jurídico, donde se evalúa el grado de daño causado por un acto ilícito
para determinar las consecuencias legales correspondientes.

Un ejemplo de lesividad podría ser un caso de fraude financiero en el que una persona
engaña a otra para obtener beneficios económicos ilícitos. En este caso, la lesividad se
manifiesta en el daño económico causado a la víctima, así como en el impacto negativo en
la confianza en el sistema financiero y en la sociedad en general.

Cómo funciona la lesividad

En el contexto jurídico, la lesividad funciona como un criterio para determinar la validez o la
invalidez de un acto jurídico. En general, un acto será considerado lesivo si causa un daño
injusto o perjuicio a los intereses legítimos de una persona o de la sociedad en su conjunto.
La presencia de lesividad puede invalidar un acto jurídico, lo que significa que no producirá
los efectos legales que normalmente se esperarían de él.

La lesividad se evalúa en función de diversos factores, como la naturaleza y gravedad del

daño causado, la intención del autor del acto, la relación entre las partes involucradas y el
contexto en el que se llevó a cabo el acto. Los tribunales y autoridades judiciales son
responsables de determinar si un acto es lesivo y de aplicar las consecuencias legales
correspondientes, que pueden incluir la nulidad del acto, el pago de daños y perjuicios, o
incluso sanciones penales en casos graves de lesividad.

En resumen, la lesividad funciona como un principio jurídico que busca proteger los
intereses legítimos de las personas y de la sociedad en general, invalidando los actos que
causan un daño injusto o perjudicial.

Como se aplica la lesividad en México

En México, la lesividad se aplica principalmente en el ámbito del derecho administrativo y
penal, aunque también puede tener implicaciones en otras ramas del derecho. Aquí hay
algunas formas en las que se aplica la lesividad en México:

Derecho Administrativo: En este contexto, la lesividad se refiere a la revisión de los actos

administrativos para determinar si son válidos o no. Si un acto administrativo es considerado
lesivo, puede ser anulado por un tribunal administrativo. Por ejemplo, si una autoridad emite
una licencia de construcción que causa un daño injusto o perjuicio a terceros, ese acto
puede ser considerado lesivo y anulado.

Responsabilidad Patrimonial del Estado: La lesividad también se aplica en casos en los que
el Estado causa daños o perjuicios a los ciudadanos debido a sus acciones u omisiones. En
estos casos, los ciudadanos pueden solicitar una indemnización por los daños sufridos
debido a la lesividad de los actos del Estado.
Derecho Penal: En el ámbito penal, la lesividad se refiere al daño o perjuicio causado por la
comisión de un delito. Los tribunales evalúan la gravedad de la lesividad al determinar la
culpabilidad y la pena para el acusado. Por ejemplo, en un caso de fraude financiero, se
considerará la lesividad del acto para determinar la gravedad del delito y la pena
correspondiente.

En resumen, la lesividad se aplica en México principalmente en el ámbito del derecho

administrativo, la responsabilidad patrimonial del Estado y el derecho penal, para determinar
la validez de los actos administrativos, para indemnizar a los ciudadanos por daños
causados por el Estado, y para evaluar la gravedad de los delitos y las penas
correspondientes.

Características de la lesividad

En el contexto jurídico mexicano, la lesividad se caracteriza por varios aspectos que la

distinguen y definen su aplicación. Aquí hay algunas características importantes de la
lesividad en México:

Daño o perjuicio: La lesividad implica la existencia de un daño o perjuicio, ya sea a nivel

individual o colectivo. Este daño puede manifestarse en diferentes formas, como pérdida
económica, daño a la reputación, afectación de derechos fundamentales, entre otros.

Injusticia: La lesividad se relaciona con la injusticia del daño causado. No todos los daños
son considerados lesivos; debe existir una falta de equidad o justicia en el perjuicio
ocasionado.

Evaluar la legalidad: La lesividad implica una evaluación de la legalidad de los actos que
causan el daño. Se analiza si el acto que produjo el perjuicio se realizó conforme a la ley y
si respetó los derechos de terceros.

Determinación de responsabilidad: La lesividad puede llevar a la determinación de la

responsabilidad de una persona o entidad por el daño causado. Esto puede implicar
acciones legales para exigir una reparación o para imponer sanciones.

Reparación del daño: Cuando se determina que un acto es lesivo, se puede requerir que el
responsable repare el daño causado. Esta reparación puede tomar diversas formas, como
compensaciones económicas, restitución de derechos o cumplimiento de ciertas
obligaciones.

Anulación de actos: En el ámbito administrativo, la lesividad puede llevar a la anulación de

actos administrativos que sean contrarios a la ley o que causen un perjuicio injustificado.
Esto se realiza a través de procedimientos administrativos o judiciales.

Protección de intereses legítimos: La lesividad busca proteger los intereses legítimos de las
personas y de la sociedad en general, garantizando que los actos que causen daño injusto
sean corregidos y que se repare el perjuicio ocasionado.
Estas características ayudan a definir el alcance y la aplicación de la lesividad en el sistema
legal mexicano, tanto en el ámbito administrativo como en el penal y civil.