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Breve reseña e historia de la Danza Occidental.

El siguiente documento es un conjunto de escritos,


reflexiones,entrevistas,links e información complementaria que considero
importante compartirla con ustedes para ahondar y profundizar en el
terreno de la danza como hecho artístico, particularmente de la danza
contemporánea que hoy por hoy es un modo de hacer arte diferente a lo
que consideramos hace varios siglos atrás. Como hablamos varias veces
en clase, la libertad creadora y la individualidad de cada uno y de cada una
ahora es importante y es lo más destacable en esta era.

La danza es el lenguaje oculto del alma, que se muestra al mover el cuerpo, es un viaje que
busca transmitir un mensaje lleno de sentimientos, ideas y muchas veces historias a través de
un movimiento.

Teniendo sus inicios en Estados Unidos a finales del siglo XIX y principios del siglo XX, la
“Danza Contemporánea” es un estilo de baile que expresa las técnicas del ballet clásico pero
dando mayor libertad al bailarín para expresar todo lo que siente a través de su cuerpo
mediante movimientos.

Si por algo ha sido siempre bien identificado este tipo de arte es porque dentro de sus
características destacan la soltura de sus rutinas, que es cien por ciento interpretativa y
necesita de lugares amplios, esta danza puede hablar de un concepto, relacionar el aspecto
terrenal con la pasión y lo humano intentando transmitir algo hermoso lleno de innovación y
creatividad.

Pero la danza contemporánea no siempre fue así, como en todo siempre hay un inicio y una
historia, toda esta libertad en la danza comienza a inicios del 1900 cuando el “Ballet Clásico”
solía ser una danza dominante, un tipo de danza con técnicas estrictas que no podían ser
modificadas. La sed de cambio hizo que la danza tomará un propósito y que los bailarines
decidieran buscar ciertas alternativas para ir cambiando la perspectiva y las estrictas formas
que tenía la práctica de esta danza.

Como forma de libre expresión los bailarines comenzaron a aparecer danzando descalzos y
realizando saltos menos rígidos que los tradicionales en el escenario. Debido a este tipo de
variaciones con el tiempo el “Ballet Clásico” se fue adaptando a los cambios en las diferentes
técnicas que hacían brillar esta danza, comenzaron a incluir diferentes técnicas corporales,
cómo: el flamenco, movimientos de danzas tribales e incluso de yoga.

Con el gusto por el baile las bailarinas Isadora Duncan, Ruth Saint Denis y Mary Wigman,
buscaron dar un sentido más comunicacional al Ballet, querían convertir este arte en una
filosofía de libre expresión, dando paso a la “Danza Moderna” que años más tarde se
convertiría en la danza contemporánea.

Para 1930 bailarines como Martha Graham, Doris Humphrey y Charles Weidman, innovaron en
la danza contemporánea de forma interna recurriendo a acciones naturales como el respirar o
el caminar. Después en la llegada de la década de los 40 comenzaron a fusionarse técnicas
provenientes de la danza social, el ballet y la danza contemporánea por bailarines como Alwin
Nikolais, Merce Cunningham, entre otros, los cuales dieron inicio a la llamada danza
contemporánea que se conoce en la actualidad donde los bailarines muestran los detalles, las
nuevas formas y características que se han venido implementando sin olvidar las primeras
características que convirtieron a esta danza en algo único, innovador y diferente.

Como en todo lo que el humano hace, las artes también siempre están en constante cambio, la
danza se mantiene en la búsqueda de nuevas formas de ser representada de acuerdo al
contexto que se viva día con día, permitiéndote ser tú mismo y transmitir algún sentir al público.

Particularmente en el curso de danza contemporánea que imparto en este programa, hago uso
y referencia de dos disciplinas artísticas de la danza de diferentes épocas, referentes y muy
importantes en su modo de sistematizar un modo de moverse y de entender al cuerpo en
movimiento atravesado de un modo artístico, que son la técnica Müller y la técnica flying low.
Sobre la técnica amigos les comparto una entrevista Jennifer miuler quién es la creadora de
esta técnica.

https://www.pagina12.com.ar/diario/espectaculos/6-45186-2004-12-24.html

ESPECTÁCULOS › LA CONSAGRADA COREOGRAFA JENNIFER MULLER

“Bailar es una experiencia, y no debería ser un juicio”


La coreógrafa norteamericana pasó por Buenos Aires para dictar seminarios intensivos sobre
su propia técnica.

Por Analia Melgar

Los bailarines suelen definirse a través de la técnica en la cual están formados. Especialmente
en el diversificado ámbito de la danza contemporánea, hay nombres que funcionan como
lumbreras, maestros como gurúes: Martha Graham, Merce Cunningham, Philip Beamish,
Rudolf Laban, Frederick Alexander y Jennifer Muller, entre tantos otros. La neoyorquina
Jennifer Muller, creadora de uno de los modos de bailar más modernos en la actualidad, pasó
por Buenos Aires. Estuvo aquí una semana dictando sus workshops. Decenas de bailarines
ávidos concurrieron a sus clases prácticas y teóricas en la sede de la calle Loria del Instituto
Universitario del Arte. Bailarines de larga carrera (integrantes de la compañía de Ana María
Stekelman y del Ballet del Teatro San Martín) compartieron la experiencia junto a otros más
jóvenes, alumnos de Marijó Alvarez y Mónica Fracchia, profesoras del IUNA. Convocada por
Alvarez, Muller aceptó venir en razón de los buenos amigos y excelentes recuerdos que
conserva aquí, de sus visitas en 1979 (como preparadora del Ballet del TGSM), en 1981 y 1999.
Sus pasajes por esta ciudad dejaron huellas en cierto estilo de danza que tuvo ocasión de
profundizarse en este diciembre.
Jennifer Muller, coqueta, no declara su edad, pero andará por los cincuenta. Formó parte de
las compañías de Pearl Lang y José Limón y se desempeñó como directora artística asociada
en la compañía de Louis Falco. Muy pronto, en 1974, creó la suya propia llamada The Works –
actualmente integrada por once intérpretes– con la que, este año, cumple su aniversario
número treinta y suma más de ochenta obras realizadas. Hasta 1988 también ella
deslumbraba sobre el escenario. Hoy continúa su labor docente y artística en estudio de
Manhattan, en la 24th. Street. Ella misma presenta su carrera y describe su particular método
que ayuda a danzar más plenamente a bailarines de todo el mundo.
–¿Cuándo comenzó a bailar?
–Cuando tenía tres años, fui a una escuela creativa para niños y allí ya tuve la idea de que, si
vas a bailar, tienes que crear. A los ocho yo ya coreografiaba. Esto fue siempre una voz
interior. No fue una escalera que ascendí por escalones: toda mi vida he sido coreógrafa.
–¿Cómo creó su propia compañía?
–Cuando trabajaba en la compañía de Louis Falco, llegó un momento en que necesité
establecer mi propia atmósfera. Sabía qué trabajo quería hacer, cómo debían moverse los
bailarines, cómo debían interactuar. Muy pocas veces tomé audiciones. Como siempre viajé
mucho, la mayoría de los integrantes de la compañía se acercó a mí. Actualmente, en Nueva
York tenemos estudiantes que siempre están esperando ingresar a la compañía. Personas de
todo el mundo pasan por el estudio. Se escucha hablar unas siete lenguas al mismo tiempo. La
propia compañía es internacional, lo que refleja mi espíritu y mi creencia en una humanidad
transcultural, en los derechos y en el respeto por cada persona individual.
–¿De dónde provienen los fondos para The Works?
–Es un trabajo tremendo atraer gente interesada en la compañía, que crea en ella y nos
sostenga, una tarea impiadosa que me toma mucho tiempo, lamentablemente. El dinero
proviene de algunas fundaciones, pero la mayor parte es aportada por personas individuales,
un modo habitual, en Estados Unidos, de obtener fondos para ciencia, salud, arte, etc.
–¿Qué es la Técnica Muller?
–Yo la llamo Muller Approach porque es algo que todavía estoy descubriendo. Es un modo
muy diferente de aproximarse a la danza, muy orgánico, diferente de otras técnicas. Es un
entrenamiento para convertirse en un bailarín vibrante sobre el escenario, a través de
movimientos fijados, sin improvisación. Establece una polaridad entre una relajación
profunda y una enorme energía que circula por el cuerpo. Así el cuerpo deja de ser estático,
constreñido o rígido. Se consigue mucho control y una gran libertad al mismo tiempo.
Reemplazamos el esfuerzo y el cansancio muscular por máxima energía. El esfuerzo estropea
las posibilidades y hace sentir incómodo al público. La cuestión es que la mente tome ese
camino más fácil, más grato, más fascinante, de bailar con placer.
–¿Es un entrenamiento mental?
–Consiste en lograr la visualización de los movimientos, en dirigir la mente y la imaginación,
en una atmósfera de cuidado y afecto. Es un trabajo circular para el espíritu y el cuerpo.
Cuando bailas, la mente dirige el cuerpo. Cómo visualizas la forma de tu espalda o tus piernas
tiene una influencia terrible sobre los resultados. Hay que elegir entre bailar como una
experiencia o como un enjuiciamiento. Si uno se juzga –“soy bueno en esto, esto lo hice mal”– y
hace comentarios sobre uno mismo, no puede experimentar, sentir, inspirarse. Experiencia,
sensaciones e imaginación desplazan al juzgamiento.
–¿Cómo creó esta técnica?
–Mi vida dio un vuelco cuando a los dieciocho años fui de gira con el Ballet Limón al Lejano
Oriente. Volví fascinada y comencé a investigar en esa filosofía. Estudié Chi-Kung y Tai-Chi.
Encontré libros muy antiguos que todavía hoy son mi compañía. Comencé a investigar el
modo de encontrar más beneficios para el cuerpo. Más tarde me di cuenta de que las artes
marciales y las prácticas de meditación son muy similares a mi técnica.
–¿Podría acercar una definición de lo que para usted es la danza?
–Para mí, la danza es nuestro primer lenguaje, previo a las palabras. Es un retorno al hombre
de las cavernas, que danzaba, hacía percusión y cantaba alrededor del fuego para expresarse
y compartir experiencias. Es también una escultura en movimiento pero, sobre todo, es una
forma de comunicación humana básica.

los siguientes links corresponden a la página oficial de the work qué es la página de la técnica
miuler y algunos videos complementarios sobre esta técnica en el escenario.
● https://youtu.be/jWxfznkQxu4
● https://www.jmtw.org

Haciendo referencia al flying low Les comparto una entrevista también del creador de la
técnica.

Flying Low
Extracto de entrevista realizada por estudiantes de SNDO (school for new dance development
amsterdam) a David Zambrano (Venezuela- Holanda) creador de la técnica Flying Low.

“Flying low es como volar cerca del suelo, teniendo tu centro volando hacia la tierra. Tuve que
encontrar la manera de ir arriba y abajo, sin tener que arrastrarme en mis rodillas.”
“Esta es la primera vez que hablo de mi trabajo. Ahora voy a hablar sobre Flying Low que es el
título que doy a algunas de las clases que he formulado a partir de mi trabajo de
improvisación. Flying Low es como volar cerca del suelo, teniendo tu centro volando hacia la
tierra. Cuando empecé a hacerlo tenía que encontrar la manera de ir arriba y abajo, sin tener
que arrastrarme en mis rodillas.

Cuando decidí ser bailarín, estudiaba ciencias de la computación en Venezuela (durante


cuatro años) y luego decidí cambiar de “Grandes Ligas”. Me fui a los Estados Unidos a
estudiar danza en la Universidad de Southern Illinois en Carbondale 1981-1984. Fui de lleno
en la materia, en la acción. En otras palabras, en la acción física. Lo hice demasiado, no sabía
sobre el calentamiento o los estiramientos antes de hacer danza. Yo sólo me quería mover.

Después de un año perdí los arcos en los pies, y entonces tuve algunos problemas de rodilla. Yo
estaba tomando clases de técnica clásica, como ballet, danza moderna Cunningham, Nikolais
y Graham. Tuve que hacer algunos extras con cada clase. Tenía, como he dicho, este problema
con mis rodillas. Fue muy difícil. Hablé con mis maestros para cambiar a otra cosa, para
mantenerme en movimiento, por no ser capaz de tomar estas clases. Tenía que hacer por mi
cuenta. Tenía que hacer estudios independientes. Tuve que tomar un montón de historia de la
danza y clases de kinesiología, y he tenido que aprender mucho sobre lo que sucedió en la
danza moderna, y cómo se había desarrollado, y cómo ser capaz de hacer ballet con estos
problemas de rodilla. Era casi imposible. Tenía que estar en el suelo todo el tiempo, de lo
contrario, tenía que llevar los zapatos con arcos de concreto. No fue muy conveniente. Fui al
gimnasio, sólo para aprender a estirar. Sin embargo, en el gimnasio había un tipo que era un
maestro de Kung Fu y que estaba cerca de los 65. Él me dijo que tenía algunos problemas con
las rodillas cuando él era joven. Lo vi en movimiento y era increíble, era muy rápido, fue
increíble.

Me sentí muy emocionado por eso. Y pensando en ello, ¿cómo puedo moverme tan rápido. Esa
fue la primera pregunta, ¿cómo puedo moverme tan rápido? Entonces, ¿cómo puedo moverme
con mis problemas en mis piernas? No pude usar la rodilla mientras estaba de pie, era muy
doloroso. Tuve que ponerme hielo todos los días, e ir a terapia todo el tiempo cuando estaba en
la universidad que lo hice durante casi un año. Ese fue mi primer año en la universidad, ir a
terapia.

He trabajado mucho en el suelo. Cuando yo trabajaba en el piso estaba poniendo toda la


información física que tenía para ser capaz de mejorar en lo que estaba haciendo. Yo no sé a
dónde iba, pero tuve un instinto de que algo iba a venir de él.

Comencé a tomar toda esta información acerca de la gimnasia, que tiene rollos específicos,
uno de los primeros rollos que comencé a practicar, ¿cómo ir de aquí para allá? Todas esas
cosas, ya sabes, soltar los brazos, etc., y de repente comenzás a recibir, entonces vas a la
derecha sobre los talones y a continuación tu alineación se arma... Era más fácil para mí
hacer esto. Así que dije: esto funciona.
Algo que estaba funcionando. Pero todavía me dolía la espalda. No sabía cómo hacer el
movimiento más eficiente. Después de mantener la práctica de este trabajo de suelo, tenía
moretones todo el tiempo. Descubrí que tenía que respirar. Me enteré de que si exhalaba e iba
al suelo, la estructura muscular y las articulaciones iban mejor al suelo. Entonces era más
fácil para atrás, es más fácil de manipular el centro, e iba parte por parte. Y luego, cuando
vuelvo arriba, puedo tomar la respiración a través de mí. Yo juego todo el tiempo con la
respiración, con cualquier tipo de ruido. Nunca me di cuenta de que de donde vengo, el baile
social es así. Cuando aprendés salsa, sos muy joven y aprendés por los sonidos. Aprendés toda
esta libertad que va con la respiración. Empezar con la respiración fue interesante para mí.
Eso fue lo básico que hice cada vez que improvisaba.

Al mismo tiempo hubo una exploración del movimiento que estaba haciendo. Estaba jugando
con cualquier tipo de movimiento, los ruidos, con otras personas. Siempre fui un bailarín
social, así que tuve todas esas cosas en paralelo, pero aún no sabía cómo ponerlas juntas.

En la universidad tomé clases en Labanotation. No sé si sabés las escalas de Labán o el cubo,


aprendés a abrir los ojos en la forma. Los movimientos específicos significan una cosa
específica. Eso fue muy útil para mí.

Porque entonces podría explorar, como no tenía que caer en la espalda, pero podía caer de
esta manera, o de aquella manera...entonces desde allí puedo traer hasta aquí, viajes de acá
para allá. Al igual que hicimos en la clase de algunos de ustedes, con el cubo. El ejercicio de
base. Eso fue una cosa grande, entonces me relajé y dije: No sólo tengo que subir y bajar,
también puedo viajar con ella.

Fue entonces cuando llegó el Flying Low. Porque ya podía hacer viajar mi centro. No sólo
tenía que traer a mi centro de abajo hacia arriba, pero lo podía bajar, viajar con él y de arriba
a abajo y viajar y, arriba a continuación, y ahí llevarlo alrededor. Así que mejoré mucho en
eso. Al mismo tiempo que yo estaba trabajando en estas conversaciones con Simone Forti, e
improvisadores de Nueva York, sólo salir al escenario e improvisar. Se transformó más y más
parte de mi improvisación. Fue una de las primeras veces que se combinaron, porque antes
todos ellas estaban en paralelo, baile social, la improvisación, la inspiración de este
movimiento, Flying low, y así sucesivamente.

Al mismo tiempo empecé a tomar improvisación de contacto. Yo no sabía cómo cargar a la


gente, pero inmediatamente supe cómo caer al suelo. Esa fue una gran ayuda, era una
herramienta importante. Del contact, por supuesto, tomé las cosas que yo necesitaba para mi
fuente de inspiración del movimiento. Entonces podía seguir volando bajo.
No sabía todavía cómo combinar el baile social, con la improvisación y con el Flying low, con
el fin danzar. Eso fue un gran interrogante.

¿Cómo puedo ir, por ejemplo, a una discoteca o una fiesta de salsa y ser capaz de tener todos
estos ritmos en mi cuerpo y cómo puedo subir al escenario a improvisar y no sentir que salí a
bailar a una disco? ¿Cómo es posible? Es como un estado de ánimo. Algo así como que sucedió
hace mucho tiempo, pero para mí era la pregunta, cómo se puede combinar. Realmente no sé
qué sucedió, pero se reunían. Ahora siento que son más como una unidad.

Yo todavía estaba trabajando con Simone Forti, con KJ Holmes y otras personas en Nueva
York fuimos parte de Simone Forti y compañía. Un día, KJ trajo un ejercicio simple que
aprendió de los nativos americanos. Fue un ejercicio para el calentamiento del espíritu en seis
direcciones. Tú respiras, te quedas ahí y primero te paras hacia el este, y luego hacia el oeste y
luego hacia el sur y luego hacia el norte. Y ahí solo tienes que traer tus poderes masculinos
aquí, traer tu poder femenino aquí y ahí lo pones en el suelo, lo tomas de la tierra, lo pasas por
el aire, lo tomas desde el cielo. Entonces, desde aquí lo ofreces a esta dirección y, a
continuación lo ofreces a aquella dirección. Hacés las seis direcciones. Era como un ritual. Sin
embargo, abrió todos mis sentidos. Yo ya lo conocía, pero no sabía cómo ponerlos juntos. Lo
puse en conjunto, dentro del trabajo que estaba explorando.

Las cosas sobre el arriba, abajo, la parte delantera, la parte de atrás, de lado y lado y el centro
comenzaron a ser muy importantes, enriquecieron mi trabajo de improvisación, y por lo tanto
mi trabajo de Flying low. Desde allí solo fui un poco más lejos, así que yo no estaba volando
bajo para allí, sino que podía volar bajo allí, e incluso llegar más lejos. Luego me di cuenta que
hacer esto era muy similar a la gimnasia que había estado observando durante muchos años.
Pero estaba bien, porque hoy en día los conceptos que encontramos en la investigación de
movimiento aún no existían en ese momento. La gente podía hacerlo debido a sus talentos. Si
tenías un talento sabías cómo hacerlo, pero no sabías cómo explicarlo. Es un instinto. Al
lanzar tu cuerpo, te sientes como un cohete. Hoy en día el conocimiento se pone a cabo en la
teoría y la práctica. Los podés poner juntos. Y aquello comenzó a suceder. Empecé a
encontrarme a mí mismo.

El trabajo era muy similar a lo que estaba viendo del exterior. Por ejemplo, algunos trabajos
de aikido, algunos de Capoeira... Muchas personas vinieron a mí diciendo: lo que usted está
haciendo es muy parecido a las artes marciales. Pero no lo eran. Cómo moverme como ese tipo
que vi en el gimnasio?, cómo moverme tan rápido como pueda?, todavía era mi pregunta.
Hasta el momento, lo que he descubierto es que cuanto menos tensión tiene tu cuerpo, más
fácil es ir más rápido. Por supuesto que necesitas la tensión suficiente, pero la menos tensión
que podría haber, es simplemente como volar.
A través de todos estos años, siempre he estado enseñando. Enseñé incluso antes de ir a la
universidad. Estaba enseñando algunas ideas de movimiento que tenía, estaba enseñando el
baile social y todas esas cosas que estaba estudiando. Yo estaba poniendo todo eso en mis
clases y puse toda la información que estaba recibiendo de los directores, como Simone Forti,
y mis profesores, en un enfoque de moverse muy rápido, y yo empezaba a tener el poder de
ello. Se trataba de extremidades y del centro. Hice ciencias de la computación durante cuatro
años, siempre relacioné la idea de la computadora como mi centro. Tengo todas estas cosas en
el cuerpo, toda la información que viene de allí. Inmediatamente mi inteligencia era en primer
lugar, mi centro. Entonces, el segundo elemento fue el cerebro. Todo esto era inteligencia. Se
trataba de una inteligencia que no podía entender muy bien, pero pude seguir bien
instintivamente, como un animal que está dentro de ti. Esto es algo muy antiguo, algo muy
lejano tal vez, que no podés entender pero que está ahí. Esto llegó a ser muy importante para
mí. Desde allí podría relacionarlo a mis terminales, que es todo lo que pasa a través de mi
cuerpo. Por las partes de mi cuerpo, y aún más lejos. Es por eso que se llama a estos
terminales. Así que digo, aquí podés traer tus articulaciones muy cerca de tu centro, y desde
allí podés explotar afuera...”
.

Links de interés
● https://youtu.be/yh6c9VzGhVc

El siguiente link es una compañía que a mí particularmente me da mucho material a nivel


visual, y quiero compartirla con ustedes para que puedan ver y apreciar en un modo más amplio
y coreográfico las ideas que tomamos en clase y como hacer uso de ambas técnicas.
https://youtu.be/07mq0xhAVFE

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