16 DE SETIEMBRE

¿Tener esperanza?
LECTURA: SALMOS 146
“Bienaventurado aquel cuyo ayudador es el Dios de Jacob, Cuya
esperanza está en Jehová su Dios.” v.5

No hay duda que estamos viviendo en un mundo con-

vulsionado, sobre todo cuando nos encontramos enfren-
tados a esta pandemia mundial. Todo parece indicar que
la única forma de vivir con esperanza en el mundo de hoy,
es confiar y esperar en Dios.
Este es un buen momento para tomar la firme deci-
sión de confiar en Dios, como dice el Salmo 91:2, “diré yo
a Jehová: esperanza mía, y castillo mío; mi Dios, en quien
confiaré”. Este texto indica que nuestra esperanza en Dios
implica a lo menos cuatro cosas importantes.
Lo primero es que pase lo que pase en este mundo
nada nos podrá separar del amor de Dios según nos cita
San Pablo en Romanos 8:38-39.
Lo segundo es que nuestra esperanza se encuentra en
creer por medio del Santo Espíritu que está en nosotros,
que en Dios tenemos esperanza. Romanos 15:13 dice, “y el
Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer,
para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu
Santo”.
Nuestra esperanza nos está en lo que tenemos, ni en
lo que seamos capaces de hacer humanamente. Nuestra
esperanza se encuentra en quien por medio del Espíritu
Santo hemos creído y en la esperanza que nos asegura
tenemos.
Lo tercero es que nuestra esperanza no es solamente
para esta vida, sino para la eternidad. Dice la Biblia en la
carta a Tito 1:2, “en la esperanza de la vida eterna, la cual
Dios, que no miente, prometió desde antes del principio
de los siglos”.
Gabriel Ibáñez, Chile

Sea que vivamos o que muramos, del Señor somos

(San Pablo)