Está en la página 1de 20

FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS,

POLITICAS, SOCIALES Y RR.II.

• CRISIS DE AGUA EN EE.UU


• CRISIS DE AGUA EN EUROPA

Docente: Marcos Javier Llano Burgos


Materia: Derecho del Medio Ambiente y su
Procedimiento
Sigla: Der 302
Turno: Mañana
Integrantes:
1. Seneida Rivero Charupá
2. Valeria Carminia Terceros Velasquez
Fecha:
CRISIS DE AGUA EN ESTADOS UNIDOS Y EUROPA

Introducción:
La disponibilidad de agua limpia y segura es un recurso vital para la vida humana
y el desarrollo sostenible. Sin embargo, tanto en Estados Unidos como en
Europa, se han enfrentado a desafíos significativos en la gestión y provisión de
agua en las últimas décadas. Esta crisis de agua ha sido impulsada por una
combinación de factores, como el cambio climático, el crecimiento demográfico,
la contaminación, la mala gestión de los recursos hídricos y la falta de
inversiones adecuadas en infraestructuras. En este trabajo de investigación,
exploraremos la crisis de agua en EE.UU. y Europa, analizando sus causas,
impactos y posibles soluciones.

Crisis del agua en EE.UU


La crisis del agua en Estados Unidos es un problema creciente que ha afectado
a diversas regiones del país en los últimos años. La disponibilidad de agua dulce
es crucial para la supervivencia y el desarrollo sostenible de una nación. Sin
embargo, en Estados Unidos, se ha experimentado una creciente crisis del agua
que ha afectado a diferentes estados y comunidades. Esta crisis es causada por
una combinación de factores, como la escasez de agua, la contaminación, el
cambio climático y la mala gestión de los recursos hídricos. Este trabajo de
investigación analizará en detalle estas causas, los impactos que han surgido
como resultado y las posibles soluciones para abordar la crisis del agua en
Estados Unidos.

• Millones de personas afectadas: Se estima que 2,2 millones de


personas en EE.UU. carecen de agua corriente y plomería básica en el
interior, mientras que más de 44 millones tienen sistemas de agua
inadecuados.

• Regiones en riesgo: La crisis se concentra en el oeste del


país, especialmente en California, Arizona, Nevada y Utah, donde las
sequías extremas y el cambio climático intensifican la escasez.

• Impacto en la salud pública: La falta de agua potable segura aumenta


el riesgo de enfermedades, especialmente para las comunidades más
vulnerables.
Causas y factores agravantes:
• Cambio climático: El aumento de las temperaturas y la intensificación de
las sequías reducen la disponibilidad de agua superficial y subterránea.

• Agotamiento de las aguas subterráneas: La extracción excesiva de


agua de los acuíferos está agotando este recurso vital a un ritmo
alarmante.

• Problemas de infraestructura: Fugas en las redes de agua potable y


sistemas de riego deficientes generan un desperdicio significativo.

• Contaminación: La agricultura industrial, la actividad minera y el fracking


contaminan las fuentes de agua potable.

• Crecimiento poblacional: El aumento de la población en zonas con


estrés hídrico intensifica la demanda de agua.

Consecuencias devastadoras:
• Impacto en la agricultura: La escasez de agua amenaza la producción
de alimentos, poniendo en riesgo la seguridad alimentaria.

• Daños económicos: Las sequías y la escasez de agua generan pérdidas


millonarias en diversos sectores económicos.

• Conflictos por el agua: La competencia por este recurso vital aumenta


el riesgo de conflictos sociales y políticos.

• Desplazamiento de población: La falta de agua potable puede obligar a


las personas a abandonar sus hogares y comunidades.

Zonas más afectadas:


1. California:
• Sequía extrema: El estado se encuentra en su tercer año de sequía
consecutiva, con los niveles de los embalses en mínimos históricos.

• Restricciones al uso del agua: Se han implementado restricciones en


varias ciudades, incluyendo la prohibición de regar el césped y lavar el
coche.

• Incendios forestales: La sequía aumenta el riesgo de incendios


forestales, que pueden devastar comunidades y contaminar el agua.
2. Texas:

• Crecimiento urbano: El rápido crecimiento de la población aumenta la


presión sobre los recursos hídricos.

• Escasez de agua en el oeste de Texas: Algunas ciudades del oeste de


Texas se están quedando sin agua, lo que obliga a buscar nuevas fuentes
de suministro.

• Conflictos por el agua: La competencia por el agua entre diferentes


sectores aumenta.

3. Arizona:
• Niveles bajos del río Colorado: El río Colorado, que abastece a millones
de personas en el oeste de Estados Unidos, se encuentra en un nivel
históricamente bajo.

• Conflictos por el agua: Los estados que dependen del río Colorado
están en disputa por cómo distribuir el agua.

• Medidas de conservación: Se están implementando medidas para


reducir el consumo de agua en la región.

4. Midwest:
• Inundaciones: Las fuertes lluvias e inundaciones han causado daños a
la infraestructura y contaminado el agua potable.

• Contaminación del agua por la agricultura industrial: El uso de


fertilizantes y pesticidas en la agricultura industrial contamina las aguas
superficiales y subterráneas.

• Problemas de salud pública: La contaminación del agua puede causar


problemas de salud como diarrea, vómitos y enfermedades
gastrointestinales.

5. Información reciente:

• La EPA propone reemplazar todas las tuberías de plomo del país en


una década: Esta iniciativa busca proteger la salud pública y garantizar
el acceso a agua potable segura.

• Las comunidades indígenas de Estados Unidos sufren la peor parte


de la crisis del agua: Las comunidades indígenas tienen menos acceso
a agua potable segura y saneamiento adecuado.
• Un nuevo estudio advierte que la escasez de agua podría afectar a la
mitad de la población mundial en 2030: El cambio climático y la mala
gestión del agua son los principales responsables de esta crisis.

Comparación legislada de EE.UU. y Bolivia sobre el agua

Acceso al agua:
• EE.UU.: No existe un derecho humano al agua reconocido a nivel
federal. El acceso al agua potable se rige por la Ley de Agua Potable
Segura (SDWA) y la Ley de Protección del Agua Potable (SWPA). Estas
leyes establecen estándares para la calidad del agua potable y otorgan al
gobierno federal la autoridad para regular los sistemas de agua potable.

• Bolivia: La Constitución boliviana reconoce el derecho humano al agua


potable y al saneamiento básico. La Ley de Agua Potable y Saneamiento
Básico establece que el Estado debe garantizar el acceso universal al
agua potable y al saneamiento básico.

Gestión del agua:


• EE.UU.: La gestión del agua en EE.UU. es un sistema complejo y
fragmentado que involucra a diferentes niveles de gobierno y al sector
privado. La Agencia de Protección Ambiental (EPA) tiene la
responsabilidad principal de proteger la calidad del agua, mientras que el
Cuerpo de Ingenieros del Ejército (USACE) tiene la responsabilidad
principal de la gestión de los recursos hídricos.

• Bolivia: La gestión del agua en Bolivia está descentralizada y se basa en


la participación de diferentes actores, incluyendo el gobierno central, los
gobiernos departamentales, los municipios, las comunidades indígenas y
los usuarios del agua. La Ley de Agua Potable y Saneamiento Básico
establece un marco legal para la gestión integrada de los recursos
hídricos.
Financiamiento del agua:
• EE.UU.: El financiamiento del agua en EE.UU. proviene de una variedad
de fuentes, incluyendo las tarifas cobradas por los sistemas de agua
potable, los impuestos y las subvenciones del gobierno.

• Bolivia: El financiamiento del agua en Bolivia proviene del gobierno


central, los gobiernos departamentales, los municipios y la cooperación
internacional.

Algunos puntos clave de comparación:


• Acceso al agua: Bolivia tiene un marco legal más fuerte que EE.UU. para
garantizar el acceso al agua potable y al saneamiento básico.

• Gestión del agua: La gestión del agua en Bolivia es más descentralizada


y participativa que en EE.UU.

• Financiamiento del agua: El financiamiento del agua en Bolivia es más


dependiente del gobierno que en EE.UU.

Es importante tener en cuenta que esta es una comparación general y que


existen diferencias significativas dentro de cada país.
Crisis del agua en Europa

El agua es un recurso vital para la vida en nuestro planeta, y Europa no es una


excepción.
En los últimos años, el continente Europeo ha enfrentado una creciente crisis del
agua que amenaza la disponibilidad y calidad de este recurso esencial. Esta
crisis se deriva de una combinación de factores, como el cambio climático, el
crecimiento de la población, la contaminación y la mala gestión de los recursos
hídricos.

En torno al 80 % del agua dulce consumida en Europa (para consumo humano


y otros usos) procede de ríos y aguas subterráneas, lo que hace que estas
fuentes sean extremadamente vulnerables frente a las amenazas que suponen
la sobreexplotación, la contaminación y el cambio climático.
La demanda de agua en Europa ha aumentado de manera constante a lo largo
de los últimos 50 años, debido en parte al crecimiento de la población. Ello ha
dado lugar a un descenso global de los recursos hídricos renovables por
habitante cifrado en un 24 % en toda Europa.

En el verano de 2015, los recursos de agua dulce renovable (a saber, agua


subterránea, lagos, ríos o embalses) fueron un 20 % menores que los registrados
en el mismo periodo de 2014, debido a un descenso neto de las precipitaciones
de un 10 %. La afluencia de más gente a zonas urbanas también ha repercutido
en la demanda, especialmente en zonas densamente pobladas.

La AEMA (Agencia Europea de Medio Ambiente) estima que alrededor de un


tercio del territorio de la UE (Unión Europea) está expuesto a condiciones de
tensión hídrica, ya sea de forma permanente o temporal. Países como Grecia,
Portugal y España han sufrido ya graves sequías durante los meses estivales,
pero la escasez de agua también se está convirtiendo en un problema en
regiones septentrionales, incluidas partes del Reino Unido y Alemania. Se
considera que las zonas agrícolas de riego intensivo, las islas del sur de Europa
de gran atractivo turístico y las grandes aglomeraciones urbanas son las zonas
más afectadas por la tensión hídrica. Está previsto que la escasez de agua se
vuelva más frecuente debido al cambio climático.

El agua en la economía: Uso y abuso

Todos los sectores económicos consumen agua, aunque de formas y en


cantidades diferentes. El acceso a un suministro de agua dulce suficiente es
esencial para muchos sectores económicos clave y para las comunidades
dependientes de sus actividades.
Las actividades económicas en Europa consumen un promedio de alrededor de
243 000 hectómetros cúbicos de agua anualmente, de acuerdo con el índice de
explotación del agua. Aunque la mayor parte de esta agua (más de 140 000
hectómetros cúbicos) se devuelve al medio ambiente, suele contener impurezas
o contaminantes, incluidos productos químicos peligrosos.

El mayor consumo de agua corresponde a la agricultura: en torno al 40 % del


agua total consumida anualmente en Europa. A pesar de la mejora de la
eficiencia en el sector desde el decenio de 1990, la agricultura seguirá siendo el
mayor consumidor a lo largo de los próximos años, lo que aumentará la tensión
hídrica en Europa. Ello se debe a que cada vez es necesario regar una mayor
superficie de tierras agrícolas, sobre todo en los países del sur de Europa.

La generación de energía también consume gran cantidad de agua y representa


alrededor del 28 % de su consumo anual. El agua se utiliza principalmente como
medio de enfriamiento en centrales nucleares y de combustibles fósiles. También
se utiliza para generar hidroelectricidad. La minería y la industria manufacturera
representan el 18 %, seguida del consumo doméstico, al que corresponde en
torno al 12 %. Se suministra un promedio de 144 litros de agua por persona y
día a los hogares europeos.

Causas de la crisis del agua:


• Cambio climático:
El cambio climático ha alterado los patrones de precipitación en Europa,
lo que ha llevado a sequías más frecuentes y prolongadas en algunas
regiones, mientras que otras han experimentado inundaciones
devastadoras. Estos eventos extremos ponen en peligro la disponibilidad
de agua dulce y agravan la escasez de agua en determinadas áreas. Para
hacer frente a esto, es necesario implementar políticas de adaptación al
cambio climático que incluyan la gestión sostenible del agua y la
promoción de prácticas de conservación.

• Crecimiento de la población:
El crecimiento demográfico y la urbanización acelerada en Europa han
aumentado la demanda de agua. Esto se refleja en un mayor consumo en
hogares, industrias y agricultura. Para garantizar un suministro adecuado
de agua para todos, es esencial adoptar medidas de eficiencia hídrica,
fomentar la reutilización y el reciclaje del agua, y promover una agricultura
más sostenible y menos dependiente del riego intensivo.

• Contaminación:
La contaminación del agua es otro desafío importante en Europa. La
descarga de sustancias químicas y contaminantes agrícolas e industriales
ha afectado la calidad del agua y los ecosistemas acuáticos. Para abordar
este problema, es fundamental fortalecer las regulaciones ambientales y
promover prácticas de producción y consumo más sostenibles.
• Mala gestión de los recursos hídricos:
La mala gestión de los recursos hídricos es uno de los principales
obstáculos para abordar la crisis del agua en Europa. La falta de
coordinación entre los diferentes actores, la ausencia de una gobernanza
efectiva y la falta de inversión en infraestructuras hídricas son algunos de
los problemas más comunes. Es necesario promover una gestión
integrada del agua que involucre a todos los sectores relevantes, incluidos
los gobiernos, las organizaciones civiles y el sector privado.
• Impacto del turismo:
El turismo masivo en Europa también ejerce presión sobre los recursos
hídricos, especialmente en destinos populares. El aumento en la
demanda de agua para el consumo, la higiene y las actividades turísticas
agotan los suministros locales y afecta negativamente a las comunidades
locales y los ecosistemas. Es importante implementar medidas de gestión
del agua en destinos turísticos para garantizar un uso responsable y
sostenible de este recurso.
• Agricultura intensiva y agotamiento de acuíferos:
La agricultura intensiva, especialmente en áreas como el norte de Europa,
puede agotar los acuíferos subterráneos a medida que se extrae agua
para el riego. Esto lleva a la disminución de los niveles de agua
subterránea, la salinización del suelo y la degradación de los ecosistemas
acuáticos. Promover prácticas agrícolas sostenibles, como la agricultura
de conservación y la rotación de cultivos, puede ayudar a reducir la
presión sobre los recursos hídricos.
• Infraestructuras obsoletas:
En algunos lugares de Europa, las infraestructuras de agua están
obsoletas y requieren actualizaciones. Las pérdidas de agua debido a
tuberías rotas o viejas y sistemas de distribución ineficientes son comunes
en muchas redes de suministro de agua. La modernización de las
infraestructuras de agua, incluida la reparación de fugas y la
implementación de tecnologías más eficientes, es crucial para minimizar
las pérdidas y garantizar un suministro confiable.

Efectos negativos en el medio ambiente

Todo este consumo del agua es bueno para la economía y, consiguientemente,


para nuestra calidad de vida. Sin embargo, los recursos hídricos locales de una
zona pueden tener que hacer frente a la demanda competitiva de diversos
usuarios del agua, lo que puede dar lugar a que se ignoren las necesidades de
agua del medio natural. La sobreexplotación de los recursos hídricos puede ser
dañina para los animales y las plantas dependientes de ellos. También pueden
producirse otras consecuencias en el medio ambiente.

En la mayoría de los casos, una vez que la industria, los hogares o la agricultura
utilizan el agua extraída, las aguas residuales resultantes pueden causar
contaminación a través de vertidos químicos, aguas residuales y escorrentías de
nutrientes o plaguicidas procedentes de tierras de cultivo. En el caso de la
generación de energía, el uso de agua para producir hidroelectricidad perjudica
su ciclo natural en ríos y lagos, mientras que las presas y otras barreras físicas
pueden impedir que los peces migren aguas arriba.

Del mismo modo, el agua utilizada con fines de refrigeración en centrales


eléctricas suele estar más caliente que el agua del río o de los lagos cuando se
libera al medio ambiente. Dependiendo de la diferencia de temperatura, el calor
puede tener efectos adversos en las especies locales. Por ejemplo, puede actuar
como barrera térmica que impida la migración de peces en ciertos cursos de
agua.

• Impacto en la salud humana:


La crisis del agua también tiene un impacto significativo en la salud
humana. La falta de acceso a agua potable segura y saneamiento
adecuado puede aumentar el riesgo de enfermedades transmitidas por el
agua, como la diarrea, el cólera y la fiebre tifoidea. Además, la
contaminación del agua por productos químicos y microorganismos puede
tener efectos perjudiciales para la salud a largo plazo. La mejora de la
infraestructura de agua y saneamiento, junto con la educación sobre
prácticas higiénicas, son clave para proteger la salud de las poblaciones
afectadas.
• Impacto en los ecosistemas:
La crisis del agua también tiene un impacto significativo en los
ecosistemas acuáticos. La sobreexplotación de los recursos hídricos, la
contaminación del agua y la alteración de los caudales de los ríos pueden
afectar la biodiversidad y la salud de los ecosistemas acuáticos. Esto, a
su vez, puede tener consecuencias negativas para los servicios
ecosistémicos, como la provisión de agua limpia, la regulación del clima y
la protección contra inundaciones. La conservación y restauración de los
ecosistemas acuáticos son cruciales para mantener el equilibrio de los
ecosistemas y garantizar la sostenibilidad del agua.

• Impactos en la agricultura:
La agricultura es un sector que enfrenta desafíos significativos en relación
con el agua en Europa. El riego agrícola representa una gran parte del
consumo total de agua en el continente, y la escasez de agua puede tener
un impacto negativo en la producción de alimentos y el sustento de los
agricultores. Para abordar esto, se están implementando técnicas de riego
más eficientes y sostenibles, como el riego por goteo y la agricultura de
precisión.
• Impacto en la biodiversidad:
La escasez de agua y la contaminación pueden tener efectos negativos
en los ecosistemas acuáticos y la biodiversidad en general. Los ríos, lagos
y humedales que son hábitats vitales para muchas especies pueden sufrir
daños, lo que afecta la salud de los ecosistemas en su conjunto.
• Impacto económico:
La crisis del agua también tiene un impacto significativo en la economía
europea. La escasez de agua puede afectar la producción y la
competitividad de las industrias agrícolas y manufactureras, así como el
turismo y otros sectores que dependen del suministro de agua. Además,
los costos asociados con la infraestructura de agua, como la construcción
y el mantenimiento de sistemas de distribución y tratamiento del agua,
pueden ser significativos.

Países más afectados en Europa:


1. Francia vive un mes sin lluvias (2022)

El 20 de febrero, Francia batió un récord al pasar treinta y dos días consecutivos sin
llover. El país vivió su invierno más seco en más de sesenta años.

Las nevadas en los Alpes, los Pirineos y otras cadenas montañosas también han
sido muy inferiores a lo habitual. Estas precipitaciones son vitales para llenar los ríos
y embalses, lo que hace temer por el abastecimiento durante el resto del año.

Casi todos los departamentos franceses sufrieron restricciones de agua en 2022, y


setecientos municipios tuvieron problemas de suministro de agua potable. Varias
localidades ya han introducido restricciones este año. Drôme y Ardèche están en
alerta temprana por sequía

Los Pirineos Orientales, Ain, Bouches-du-Rhône y Var también están en alerta. Sus
habitantes tienen prohibido regar el césped, llenar las piscinas o regar los
cultivos.

El Ministro francés de Medio Ambiente Christophe Béchu anunció a principios de año


que el Gobierno estaba trabajando en un plan "antisequía". Aseguró que el
consumo medio de ciento cincuenta litros de agua por persona y día no era
sostenible y pidió a todos los sectores que lo recortaran.

Una de las soluciones que estudia Francia es reciclar más aguas residuales.
2. España se enfrenta a una sequía prolongada (2022-2023)

En el noreste de España, la sequía ha alcanzado proporciones "extraordinarias",


según Aemet, el servicio meteorológico del país. Las altas temperaturas y las
escasas precipitaciones de los últimos tres años han llevado a esta situación.

El suministro de agua potable a los seis millones de habitantes del área


metropolitana de Barcelona podría estar en peligro. El embalse de Sau está al 9
% de su capacidad. Se ha retirado a los peces para evitar que se asfixien.

A pesar de una ligera recuperación durante el invierno, la sequía ha continuado en


toda España desde enero de 2022.

La situación en Cataluña es la más grave. Los niveles de agua en los embalses


de la región están muy por debajo de la media. Se han establecido restricciones en
su uso para la agricultura y la industria. Está prohibido emplear agua potable para
lavar coches o llenar piscinas.

En España las lluvias han sido un 24% inferiores a la media en el período


comprendido entre el uno de octubre de 2022 y el 25 de abril de 2023.

3. Italia (2022-2023)
Italia prepara un paquete de 7800 millones de euros para la crisis del agua

Italia fue uno de los países europeos más afectados por la sequía del año pasado.
El Gobierno declaró el estado de emergencia en cinco regiones.

El Po es el río más largo del país: lo cruza desde la frontera con Francia y Suiza
hasta el mar Adriático. En 2022, sufrió la peor sequía de los últimos setenta años.

En Italia, la terrible combinación de falta de agua e inundaciones ha afectado


gravemente a actividades ganaderas, viñedos, cultivos de cereales y a la
producción de frutas y verduras. (2023)

Italia extrae más agua potable de sus lagos, ríos y embalses que cualquier otro
país de la Unión Europea, según el Instituto Nacional de Estadística de Italia (ISTAT).

Desalinización del agua del mar


¿Qué es la desalinización del agua del mar?
La desalinización es el proceso por el cual se elimina las sales minerales
disueltas en el agua.

En la actualidad, dicho proceso, aplicado al agua del mar, es uno de los más
usados para obtener agua dulce para el consumo humano o agrícola.
¿La desalinización del agua del mar es una posible solución?
La desalinización del agua de mar puede tener varios impactos ambientales,
aunque su magnitud y gravedad pueden variar según el tipo de tecnología
utilizada y la forma en que se implemente.

¿Cuáles son los impactos ambientales de la desalinización del


agua de mar?
1. Descarga de salmuera: Durante el proceso de desalinización, se produce
una corriente de salmuera concentrada que contiene altas concentraciones de
sal y otros productos químicos. La descarga de esta salmuera nuevamente al
mar puede tener efectos adversos en los ecosistemas marinos locales. Las altas
concentraciones de sal pueden alterar la salinidad del agua circundante, lo que
puede afectar la vida marina y los organismos que dependen de ella.

2. Introducción de productos químicos: La desalinización puede requerir el


uso de productos químicos, como productos químicos de limpieza, agentes
antiincrustantes y desinfectantes, para mantener el funcionamiento adecuado de
las plantas desaladoras. Si estos productos químicos no se manejan
correctamente, pueden filtrarse hacia el medio ambiente, lo que puede tener
efectos negativos en los ecosistemas marinos y en la calidad del agua.

3. Consumo de energía: La desalinización es un proceso energéticamente


intensivo. La mayoría de las plantas desaladoras dependen de fuentes de
energía no renovables, como los combustibles fósiles, para alimentar sus
operaciones. Esto puede contribuir a la emisión de gases de efecto invernadero
y al cambio climático. Además, el consumo de energía también puede tener otros
impactos indirectos, como la liberación de contaminantes atmosféricos y la
generación de residuos asociados con la producción de energía.

4. Impacto en los ecosistemas marinos: La toma de agua de mar para la


desalinización y la posterior descarga de salmuera pueden afectar a los
ecosistemas marinos locales. La toma de agua puede succionar y dañar
organismos marinos, especialmente en el caso de las tecnologías de toma de
agua de mar a través de sistemas de filtración. Además, la descarga de salmuera
puede alterar las condiciones del agua circundante, afectando la vida marina y
los hábitats costeros sensibles.

5. Entrada de sedimentos y organismos marinos: Durante el proceso de toma


de agua de mar, es posible que se capturen sedimentos y organismos marinos,
como larvas y huevos, junto con el agua. Estos sedimentos y organismos pueden
sufrir daños o incluso morir debido al proceso de filtración y tratamiento. Esto
puede tener un impacto en los ecosistemas marinos, especialmente si se trata
de especies sensibles o en peligro de extinción.
6. Consumo de recursos naturales: La desalinización del agua de mar requiere
grandes cantidades de recursos naturales, como energía y agua dulce. El agua
dulce se utiliza para limpiar los equipos y mantener las operaciones de la planta.
Además, la generación de energía para alimentar las plantas desaladoras puede
requerir la quema de combustibles fósiles, lo que contribuye a la extracción y el
agotamiento de estos recursos no renovables.

7. Impacto en el paisaje costero: La construcción y operación de plantas


desaladoras pueden tener un impacto visual en el paisaje costero. Las plantas
desaladoras a gran escala a menudo requieren infraestructuras significativas,
como tuberías, tanques de almacenamiento y torres de enfriamiento, que pueden
alterar la apariencia del entorno natural y afectar la experiencia estética de la
zona costera.

8. Cambios en la salinidad y la temperatura del agua: La descarga de


salmuera concentrada en el entorno marino puede aumentar la salinidad del
agua circundante. Esto puede tener consecuencias negativas para las especies
marinas que dependen de condiciones específicas de salinidad para su
supervivencia y reproducción. Además, algunas tecnologías de desalinización
utilizan procesos de enfriamiento que pueden cambiar la temperatura del agua,
lo que también puede afectar a los organismos marinos y a los ecosistemas
costeros.

9. Emisiones de gases de efecto invernadero: La desalinización del agua de


mar puede generar emisiones significativas de gases de efecto invernadero,
especialmente si se utiliza energía proveniente de combustibles fósiles.
La quema de combustibles fósiles para generar electricidad o impulsar las
plantas desaladoras emite dióxido de carbono (CO2) y otros gases que
contribuyen al cambio climático. Sin embargo, se están explorando opciones de
energía renovable, como la energía solar y eólica, para reducir las emisiones
asociadas con la desalinización.

10. Costo económico: La desalinización del agua de mar puede ser costosa
tanto en términos de inversión inicial como de operación y mantenimiento
continuos. Esto puede limitar su viabilidad en algunas regiones y dificultar el
acceso a agua potable para comunidades más pobres. Además, el costo
económico puede llevar a un enfoque excesivo en la desalinización como
solución única, en lugar de abordar otras estrategias de gestión del agua más
sostenibles y menos costosas.

Estrategias de gestión del agua más sostenibles y menos


costosas que podrían complementar la desalinización:
Existen varias estrategias de gestión del agua más sostenibles y menos costosas
que pueden complementar la desalinización.

Algunas de estas estrategias incluyen:


1. Conservación del agua: La conservación del agua se centra en reducir el
consumo y el desperdicio de agua a través de prácticas eficientes. Esto puede
incluir la promoción de hábitos de consumo responsables, la reparación de fugas
en las tuberías, la instalación de dispositivos de ahorro de agua en los hogares
y la implementación de políticas de uso eficiente del agua en la industria y la
agricultura. La conservación del agua puede reducir la demanda total de agua,
lo que a su vez puede disminuir la necesidad de recurrir a la desalinización.

2. Reutilización de aguas residuales: La reutilización de aguas residuales trata


de tratar y reciclar las aguas residuales para su uso en actividades no potables,
como riego de áreas verdes, lavado de vehículos o procesos industriales. Al
reciclar y reutilizar las aguas residuales tratadas, se reduce la demanda de agua
dulce y se minimiza la carga sobre los recursos hídricos naturales. Esta
estrategia puede ser especialmente beneficiosa en áreas donde hay escasez de
agua.
3. Captación y almacenamiento de agua de lluvia: La captación y
almacenamiento de agua de lluvia implica recolectar el agua de lluvia y
almacenarla para su uso posterior. Esto se puede hacer mediante la instalación
de sistemas de recolección de agua en los tejados de los edificios, la
construcción de embalses o la implementación de técnicas de recarga de
acuíferos. La captación y almacenamiento de agua de lluvia es una forma
efectiva de aprovechar un recurso natural renovable y reducir la dependencia de
fuentes de agua externas, como los ríos o los acuíferos subterráneos.

4. Gestión integrada de los recursos hídricos: La gestión integrada de los


recursos hídricos es un enfoque holístico que considera todos los aspectos
relacionados con el agua, incluyendo la disponibilidad, la calidad y la
sostenibilidad. Este enfoque implica la coordinación y colaboración entre
diferentes sectores, como la agricultura, la industria y el medio ambiente, para
garantizar un uso equitativo y sostenible del agua. La gestión integrada del agua
puede incluir la implementación de políticas de asignación de agua, la protección
de ecosistemas acuáticos y la promoción de prácticas agrícolas y tecnologías
más eficientes en el uso del agua.

5. Agricultura eficiente en el uso del agua: La agricultura es uno de los


sectores que consume la mayor cantidad de agua. Promover prácticas agrícolas
más eficientes en el uso del agua, como el riego por goteo o la agricultura de
precisión, puede reducir significativamente la cantidad de agua necesaria para
la producción de alimentos. Además, se pueden implementar técnicas de manejo
del suelo y de cultivos que minimicen la evaporación y el escurrimiento,
optimizando así el uso del agua.

6. Restauración y protección de ecosistemas acuáticos: Los ecosistemas


acuáticos, como los humedales y los bosques ribereños, desempeñan un papel
crucial en la regulación y la disponibilidad del agua. La restauración y protección
de estos ecosistemas puede ayudar a mantener la calidad y cantidad del agua,
así como a conservar la biodiversidad. Los servicios ecosistémicos que ofrecen,
como la filtración natural del agua y la retención de la humedad del suelo, pueden
contribuir a una gestión más sostenible del recurso hídrico.

7. Educación y concienciación pública: La educación y la concienciación


pública son fundamentales para promover prácticas de uso responsable del
agua. A través de campañas de sensibilización, programas educativos y
capacitación, se puede informar a la población sobre la importancia del agua,
fomentar prácticas de conservación y promover un cambio de comportamiento
hacia un uso más sostenible del recurso. Esto puede incluir consejos prácticos
sobre cómo reducir el consumo de agua en el hogar, en las empresas y en la
comunidad en general.

8 Políticas y regulaciones para la gestión del agua: El establecimiento de


políticas y regulaciones sólidas es fundamental para una gestión sostenible del
agua. Esto puede incluir la implementación de leyes que promuevan el uso
eficiente del agua, la protección de los recursos hídricos y la asignación
equitativa de los mismos. Asimismo, se pueden establecer incentivos
económicos para fomentar prácticas de conservación y uso responsable del
agua. La gobernanza eficaz del agua a nivel local, regional y nacional es esencial
para garantizar una gestión adecuada y equitativa del recurso.

9. Investigación y desarrollo de tecnologías más sostenibles: La


investigación y el desarrollo de tecnologías más sostenibles pueden impulsar
avances significativos en la gestión del agua. Por ejemplo, se están investigando
nuevas técnicas de desalinización más eficientes y menos energéticas, como la
desalinización por presión osmótica y la desalinización asistida por energía solar.
Además, se están explorando métodos de tratamiento de agua más naturales y
basados en la naturaleza, como la infiltración y filtración en humedales
artificiales, que pueden ser más sostenibles y menos costosos a largo plazo.

Estas estrategias no solo ayudan a reducir la demanda de agua dulce, sino que
también pueden ser más sostenibles y menos costosas que la desalinización. Al
implementar un enfoque integral de gestión del agua que combine estas
estrategias, se puede lograr una gestión más eficiente y sostenible de los
recursos hídricos. La desalinización del agua de mar puede desempeñar un
papel importante en situaciones donde estas estrategias no son suficientes para
satisfacer la demanda de agua, pero es fundamental considerarla como parte de
un enfoque integral y equilibrado.

Es importante destacar que no existe una solución única para la gestión


sostenible del agua. Cada región y comunidad puede requerir un enfoque
adaptado a sus circunstancias específicas. La combinación de estas estrategias,
junto con una gestión responsable y una planificación a largo plazo, puede
contribuir a garantizar un suministro adecuado y sostenible de agua para las
generaciones presentes y futuras.

Legislación Europea para la protección del agua:

A lo largo de los últimos 30 años, los Estados miembros de la UE han logrado


importantes avances en la mejora de la calidad de las masas de agua dulce de
Europa gracias a actos legislativos de la UE cómo:

• La Directiva marco sobre el agua,


• La Directiva relativa a las aguas residuales urbanas
• La Directiva relativa a la calidad de las aguas destinadas al consumo
humano.

El objetivo de las políticas de la UE consiste en reducir significativamente los


efectos negativos de la contaminación, la captación excesiva y otras presiones
sobre el agua y garantizar que se disponga de una cantidad suficiente de agua
de buena calidad para el consumo humano y para el medio ambiente. El
tratamiento de las aguas residuales y las reducciones del uso agrícola del
nitrógeno y el fósforo han dado lugar, en concreto, a mejoras significativas de la
calidad del agua a lo largo de los últimos decenios.
España:

• La regulación vigente sobre usos y aprovechamientos del dominio público


hidráulico la encontramos en el título IV del Real Decreto Legislativo
1/2001, de 20 de julio, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley
de Aguas (TRLA) y el título II del Real Decreto 849/1986, de 11 de abril,
por el que se aprueba el Reglamento del Dominio Público Hidráulico
(RDPH).
• Real Decreto 3/2023, de 10 de enero, por el que se establecen los criterios
técnico-sanitarios de la calidad del agua de consumo, su control y
suministro.

Italia:
• La norma italiana (n. 36/94) ha establecido la adopción de una
tarifa para el servicio hídrico y la definición de cánones diferenciados por
usos, que no son suficientes para regular la demanda y hacer que las
aguas de mejor calidad sean destinadas al consumo humano.

Legislación Boliviana para la protección del agua:


Constitución Política del Estado:
• El artículo 373.- Consagra el agua como un “derecho fundamentalísimo
para la vida” y culmina un proceso comenzado en el año 2000 cuando la
ciudad de Cochabamba se opuso a la privatización del agua en los días
recordados como la “Guerra del Agua”. La regulación constitucional de
los recursos hídricos ha sido recibida como un grande alcance por las
organizaciones sociales que lucharon para recuperar la soberanía
pública sobre el agua.
• Artículo 374. I.- Es deber del Estado gestionar, regular, proteger y
planificar el uso adecuado y sustentable de los recursos
hídricos, con participación social, garantizando el acceso al agua a todos
sus habitantes

• Ley de Riego 2878.- Para reglamentar el uso del agua en el sector


agrícola ha sido aprobada, en 2004, la Ley de Riego 2878 tras un
proceso de concertación con las organizaciones de regantes. La Ley
2878 tiene como objetivo administrar los recursos hídricos para regadío,
establecer un nuevo marco institucional descentralizado y asegurar los
derechos de uso del agua a través de un registro. Los registros sobre las
fuentes de agua son concedidos a las familias o comunidades indígenas
y locales y tienen como finalidad garantizar el acceso al agua para el uso
doméstico o la agricultura tradicional.

Ley del medio ambiente No 1333


Art.32

Es deber del Estado y la sociedad preservar, conservar, restaurar y promover el


aprovechamiento de los recursos naturales renovables, entendidos para los fines
de esta Ley, como recursos bióticos, flora y fauna y los abióticos como el agua,
aire y sueño con una dinámica propia que les permite renovarse en el tiempo.

Art.33

Se garantiza el derecho de uso de los particulares sobre los recursos naturales


renovables, siempre y cuando la actividad que se establezca sobre los muslos
no sea perjudicial al interés colectivo y asegure su usos sostenible y de
conformidad con el art 34 de la presente ley.

Art.37

Constituye prioridad nacional la planificación, protección y conservación de las


aguas en todos sus estados y el manejo integral y control de las cuencas donde
nacen o se encuentran las mismas.
Conclusiones:
La crisis del agua representa un desafío multidimensional que requiere una
respuesta integral.

Para superar estas crisis, es necesario abordar el cambio climático, promover


prácticas sostenibles de uso del agua, mejorar la gestión de los recursos hídricos
y fortalecer las regulaciones ambientales.

Hay varios factores que contribuyen a la crisis del agua. El crecimiento de la


población, el aumento de la urbanización, la expansión de la agricultura y la
industria, así como el cambio climático, están ejerciendo una presión significativa
sobre los recursos hídricos. Además, la mala gestión y la contaminación del agua
agravan aún más la situación.

Es importante destacar que la crisis del agua no afecta solo a los países en
desarrollo. Incluso en las naciones más desarrolladas, hay regiones que
experimentan escasez de agua debido a una combinación de factores naturales
y humanos.

Además, es crucial fortalecer la gobernanza del agua a nivel local, regional y


nacional, involucrando a todas las partes interesadas, incluidos los gobiernos,
las comunidades locales, el sector privado y las organizaciones no
gubernamentales. Se deben establecer políticas y regulaciones claras para
garantizar un uso equitativo y sostenible de los recursos hídricos.

La crisis del agua en el mundo es una amenaza seria que requiere una atención
inmediata y un enfoque integral. Solo a través de la cooperación global y la
implementación efectiva de medidas adecuadas, podremos garantizar un
suministro de agua adecuado y sostenible para las generaciones presentes y
futuras.
Bibliografía:
• https://news.un.org/es/story/2023/08/1523667
• https://es.weforum.org/agenda/2023/02/esa-es-la-razon-por-
que-no-podemos-descartar-la-escasez-de-agua-en-ee-uu/
• https://www.iagua.es/noticias/redaccion-iagua/ee-uu-presenta-
plan-afrontar-escasez-agua-como-prioridad-seguridad-
nacional
• https://es.euronews.com/2023/10/16/crisis-del-agua-en-europa-cual-es-
su-gravedad-y-que-se-puede-hacer
• https://www.nationalgeographic.es/medio-ambiente/2022/12/la-crisis-del-
agua-en-europa-es-mucho-peor-de-lo-que-pensabamos
• https://www.plataformatierra.es/actualidad/escasez-de-agua-y-sequia-en-
europa
• https://eur-lex.europa.eu/ES/legal-content/summary/drinking-water-
essential-quality-
standards.html#:~:text=Los%20pa%C3%ADses%20de%20la%20UE,pot
encial%20para%20la%20salud%20humana.
• https://www.retema.es/articulos-reportajes/como-protegemos-nuestras-
aguas-legislacion-europea-para-cambiar-el-rumbo-de-
la#:~:text=Directiva%20(UE)%202020%2F2184,potenciales%20databa%
20originalmente%20de%201998.
• https://www.actualidadjuridicaambiental.com/es/legislacion-al-dia-
espana-calidad-del-agua/
• http://www.revistaestudiosregionales.com/documentos/articulos/pdf1111.
pdf
• Constitución Política del Estado.
• Ley de Riego 2878.
• Ley del Medio Ambiente No 1333.

También podría gustarte