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Discurso sobre la agricultura y el desarrollo en el Perú.

Buenas tardes a todos los presentes a este discurso sobre la agricultura y el desarrollo en nuestro país.
Quisiera comenzar expresando mi gratitud por la oportunidad de dirigirme a ustedes el día de hoy. Estamos
aquí para explorar y comprender la riqueza de la economía agrícola en Perú y su intrínseca conexión con el
desarrollo.

¿Pero que es el desarrollo? El desarrollo se refiere al proceso de crecimiento, cambio y progreso en diversos
aspectos, como económicos, sociales, tecnológicos o personales, con el objetivo de mejorar dos ámbitos, la
calidad de vida y el bienestar, o dicho de otra manera tu calidad de vida y también tu bienestar.

Entonces entendiendo que es el desarrollo, ahora les explicare que tiene que ver el desarrollo con el sector
agrícola.

En primer lugar, permítanme compartir datos que subrayan la contribución del sector agrícola a nuestro
amado Perú. Para esto aremos una comparación entre el aporte de la minería y el de la agricultura en
términos macroeconómicos.

De todo el producto bruto interno(PBI) del Perú de los últimos años, la minería aporto un 10-15% de el PIB y
además representa un 60-70% de las exportaciones, siendo está una industria muy apoyada y promocionada
por el estado peruano, ¿De que manera? Con políticas claramente, pero más específicamente, primero con
marco legal y normativo que establece regulaciones que fomentan la inversión y facilitan la operación de
empresas mineras, brindando seguridad jurídica. Segundo, con incentivos fiscales, ¿que son los incentivos
fiscales? Son beneficios tributarios para promover la exploración y explotación de recursos minerales.
Tercero, infraestructura, invierte en infraestructuras clave, como carreteras y energía, para facilitar el acceso
a las zonas mineras y mejorar las condiciones operativas. Cuarto, promoción de Inversiones, realiza
campañas para atraer inversión extranjera y nacional en el sector minero, destacando las oportunidades y
ventajas de la minería en nuestro país.

Ahora conozcamos al sector agrícola, este aporta el 8-9% del PBI y aporta el 10-15% de las exportaciones
totales en promedio en los últimos años, y que solo represento el 6% en el 2023 siendo actualmente un
sector afectado por el problema ambiental y la paralización de las vías de abastecimiento por el contexto
político. En dónde no ay mucho interés de buscar soluciones. Ahora, ¿Qué apoyos recibe este sector por
parte del estado? Vamos a explorarlo, primero, financiamiento, proporciona líneas de crédito y subsidios
para agricultores, cooperativas y empresas agrícolas, facilitando el acceso a capital necesario para invertir en
insumos, tecnología y maquinaria. Segundo, investigación y desarrollo, financia proyectos de investigación
agrícola para mejorar las prácticas, aumentar la productividad y promover la diversificación de cultivos.
Tercero, asistencia técnica, ofrece servicios de asesoramiento técnico a agricultores, brindando
conocimientos sobre buenas prácticas agrícolas, gestión del suelo y tecnologías adecuadas. Cuarto,
infraestructura agrícola, invierte en la construcción y mantenimiento de infraestructuras como sistemas de
riego, caminos rurales y almacenamiento adecuado para facilitar la producción y distribución. ¿Pero en
realidad esto ayuda al sector agrícola? Analicemos, primero el financiamiento, ¿Ustedes escucharon que a
algún familiar o conocido que labora en este sector que halla sido financiado con algún crédito o subsidio?
¡No!, por qué esto solo está diseñado para para las grandes empresas, que pertenecen a grupos de familia
que me abstendré de mencionar, queda fuera. Segundo, investigación y desarrollo, las investigaciones
tecnológicas en su mayoría las imitamos o copiamos de países potencia que tienen mejores medios, esto
queda, ¡Fuera!. Tercero, asistencia técnica… ¿En serio?, ¡Fuera! Cuarto, infraestructura agrícola: Sistemas de
riego, caminos rurales y almacenamiento, esto si es bueno y necesario. Entonces que nos queda para el
sector agrícola que aporta el 8% del PBI a diferencia del sector minero que aporta el 13% del PBI, solo
infraestructura, solo un poco de infraestructura.
Pero mas allá de las cifras, es crucial reconocer la diversidad de nuestros cultivos, desde los andes hasta la
costa, o ya sea de la región costa, yunga, quechua, sunní, puna, omagua y rupa rupa y cómo cada uno de
ellos contribuye a nuestra prosperidad económica, con toda la diversidad frutal en la ceja de selva , la gran
variedad de tubérculos en la sierra y muchos otros en la costa. Además de la diversidad, la agricultura no
solo es un motor económico, sino también es un pilar fundamental para el desarrollo sostenible. Es una
herramienta poderosa para reducir la pobreza y la desigualdad al impulsar el crecimiento en las zonas
rurales, creando oportunidades y fortaleciendo la base de nuestra sociedad.

No tengo nada en contra de la minera, es más, creo que es un sector que impulsa grandemente el
crecimiento y brinda muchas oportunidades, pero si creo que es necesario que pongamos más intereses en
el sector agrícola ya por la razón de que algunos, por no decir muchos países que son potencias en la
actualidad, pasaron por una base de desarrollo en el sector agrícola, ejemplo de ello son Japón y China, si así
como lo escucharon, Japón fue un país agrícola en el periodo posterior a la segunda guerra, pues su
industria estaba en su mayor parte destruida, y china durante el mandato de Mao Zedong dónde el plan de
desarrollo tubo como base el sector agrícola. Por ello invito a la reflexión y la toma de medidas concretas
para mejorar las condiciones de este sector muy importante, asegurando que este sector sea impulsado
para ser un pilar de nuestro desarrollo y nuestra futura industrialización.

La innovación es la llave maestra que abrirá las puertas hacia un futuro agrícola más próspero. Llamo a una
mayor inversión en investigación y desarrollo agrícola por parte de los economistas e ingenieros para
fomentar la colaboración entre el gobierno, el sector privado y nuestras instituciones académicas. Solo a
través de la innovación podremos superar los desafíos que se presentan.

En conclusión, la economía agrícola de Perú es una joya que merece nuestra atención y cuidado. Al abordar
los desafíos no solo garantizamos un futuro económico próspero, sino que también construimos un país más
equitativo y sostenible.

Agradezco su tiempo y atención. Ahora, más que nunca, es el momento de unirnos en un esfuerzo colectivo
para impulsar el desarrollo de nuestra amada nación a través de la fortaleza de nuestra tierra.

¡Gracias y adelante, Perú!, Gracias.

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