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Filosofía

Alumno: Chavez, Renzo

Trabajo practico Nº 2

Tema: la realidad como problema filosófico

1) ¿Cuál es la postura de Platón sobre la realidad?

2) ¿Cuál es la perspectiva del escepticismo filosófico? ¿Qué ejemplos de la producción


cinematográfica se pueden mencionar?

3) ¿Qué planteos filosóficos formulo Pirron de Elis? ¿Cuál es el aporte de Sexto empírico?

Desarrollo

1) Platón describió una situación: la alegoría de la caverna. Se trata de un grupo de hombres que
están encadenados en la profundidad de una oscura cueva. Están allí desde el momento en el que
nacieron y estarán allí hasta que mueran. Nunca salen ni logran zafar de sus cadenas, que los
mantienen sentados en el suelo y con el cuello firme, mirando hacia una de sus paredes. A sus
espaldas, a cierta distancia y sin que ellos lo sepan, hay otros hombres que tienen diferentes
objetos y, un poco más lejos, una pequeña fogata. La luz que genera esa hoguera detrás de los
objetos proyecta una sombra en la pared a la que miran los esclavos. Así los hombres
encadenados no pueden hacer otra cosa que ver esas sombras borrosas. Como no conocen otras
cosas terminan aceptando que todo lo que existe son esas siluetas, que van identificando con
objetos como árboles, animales, montañas, personas, etc. Un día, algo inesperado ocurre: uno de
los esclavos encuentra la manera de zafar de su encierro, se libera de las cadenas y trata de huir.
Al hacerlo atraviesa la cueva, descubre la fogata y los objetos que generan las sombras, sigue
avanzando y encuentra una manera de salir de la caverna. Afuera es de día y la luz del sol lo ciega:
nunca había estado fuera de su encierro. Pero, con el correr de los minutos, sus ojos se
acostumbran y termina pudiendo ver lo que hay en la superficie, los verdaderos árboles, animales,
montañas, personas, etc. Y vuelve a entrar a la fosa para liberar a sus compañeros, pero cuando
regresa y les cuenta lo que vio, cuando les explica que ellos están viendo solo sombras de objetos
y no los objetos reales, cuando les cuenta que existe un mundo afuera que es muy diferente al que
conocen, todos lo consideran un loco y no le creen. Es más, le señalan los ojos dañados por haber
visto el sol y le dicen que está enfermo. Cuando insiste y vuelve a explicarles todo una vez más, a
decirles que lo que ellos consideran conocimiento no es más que interferencias a partir de
sombras, los irrita y asusta tanto que lo terminan matando para que no convenza a otros.

Para este filósofo nuestro error es creer que lo físico es lo más verdadero que puede existir, ya que
las cosas que captamos con los sentidos no son más que la sombra de otra realidad, superior y
mucho más difícil de alcanzar. En muchas ocasiones hemos sido como esos prisioneros de la
caverna, absolutamente seguros de que estamos estudiando, conociendo y en contacto con cosas
reales que no son más que sombras de objetos que se o parecen a los objetos reales.
Para platón la manera de liberarnos de las cadenas de nuestras creencias implica reconocer que
mucho de lo que siempre hemos creído en realidad puede ser falso, lo que conduce a una gran
crisis, porque nos fuerza a repensar todo. ¿Cómo salir de la caverna y llegar a la superficie?
Buscando la sabiduría que la provee la filosofía.

2) Todos hemos experimentado alguna vez la sensación de descubrir que algo en lo que creíamos
no era como pensábamos, pero muy pocas veces nos pusimos a pensar si todo lo que nos rodea
no es la realidad, sino una simple apariencia. Frente a esto, el escepticismo filosófico busca volver
todo dudoso.

Si lo pensamos en términos cinematográficos podemos mencionar: The Truman Show, historia de


una vida, en donde Jim Carrey es protagonista de un reality show sin saberlo. Truman vive en una
ciudad llena de cámaras y rodeado de actores que juegan los roles de familiares, amigos, vecinos y
compañeros de trabajo para que el verdadero mundo exterior sea espectador de su vida. Truman
comienza a sospechar que algo no anda bien. La película muestra cómo va recopilando evidencias
que le muestran que lo que conoce es en realidad un escenario y que las personas que lo rodean
son actores.

Matrix, en donde la realidad que percibe Thomas Anderson, quien descubre todo es una ilusión
programada por maquinas, es “Neo”, el elegido para terminar con lo que sucede. Este tipo de
duda es la que alientan los filósofos, que invitan a descreer de todo, incluso de lo más evidente.
Podemos llamar escepticismo filosófico a desconfiar de la realidad incluso cuando no haya
evidencia que pueda ayudarnos.

El conocimiento es simplemente imposible porque no contamos con herramientas para distinguir


las cosas reales de los engaños y las apariencias.

3) Pirron de Elis consideraba a todas las cosas igualmente indeterminadas, sin estabilidad e
indiscernibles, por lo que nuestros sentidos y nuestras opiniones no sirven para decretar si algo es
cierto o falso. No debemos confiar en nada, sino esforzarnos por vivir sin creencias. Si logramos
cumplir con esto, primero nos sentiremos impactados, pero luego nos liberaremos de cualquier
distracción o perturbación y alcanzaremos la ataraxia.

El escepticismo me pide que suspenda cualquier juicio, es decir, que no decida ninguna respuesta,
sino que ponga “entre paréntesis” la cuestión. Para Pirron, esto es un estado de prudencia, en
donde no se afirma ni se niega nada sobre la realidad en sí, a lo sumo el escéptico puede decir
cómo le parecen las cosas o como se le aparecen. Recién allí se llega a la imperturbabilidad propia
de la ataraxia. Logramos ataraxia al suspender la búsqueda del conocimiento y hacer las paces con
eso. La propuesta tampoco es suspender nuestros juicios para quedarnos quietos. El plan es
continuar activamente investigando, preguntando, siendo curiosos, pero sin cerrarnos nunca a que
algo sea de una determinada manera. La forma de purgar nuestra vida y alcanzar la paz es
quitarnos de encima cualquier creencia, cualquier compromiso cognitivo, cualquier certeza.
El filósofo Sexto Empirico, distingue al escepticismo de las otras escuelas que se basan en dogmas
establecidos y lo presenta como una actitud, como un “modo de pensar”, o un determinado
actuar propio de un grupo de filósofos. Y en la actualidad hay muchos escépticos que están muy
lejos de ser hombres sin creencias como Pirron, pero que sí buscan formas de alcanzar el
conocimiento poniendo en duda dogmas o solo aceptando, por ejemplo, lo que dicta el método
científico.

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