La planificación territorial participativa es un enfoque colaborativo para el uso y
el desarrollo de la tierra que implica la participación activa de las comunidades locales, las partes interesadas y los tomadores de decisiones. La importancia de este enfoque radica en su capacidad para garantizar que las decisiones de desarrollo se tomen con el aporte y el consentimiento de quienes se verán afectados por ellas, lo que conducirá a resultados más sostenibles y equitativos. La planificación territorial participativa es un proceso que implica la participación activa de las comunidades locales, los interesados y los tomadores de decisiones en el desarrollo de planes y políticas de uso del suelo. Este enfoque reconoce que el conocimiento y la experiencia locales son esenciales para tomar decisiones informadas sobre el uso y la gestión de la tierra y los recursos. También reconoce que las decisiones de desarrollo pueden tener importantes impactos sociales, económicos y ambientales en las comunidades locales, y que estos impactos deben considerarse y abordarse en el proceso de planificación. El concepto de planificación territorial participativa tiene sus raíces en el movimiento de desarrollo participativo de los años 1970 y 1980, que enfatizó la importancia de involucrar a las comunidades locales en los proyectos de desarrollo. Esto incluye no sólo a las comunidades locales y a los tomadores de decisiones, sino también a empresas, ONG y otras organizaciones que puedan tener interés en el desarrollo del área. Los procesos colaborativos de toma de decisiones también son esenciales para la planificación territorial participativa. Esto implica crear espacios para el diálogo y la negociación entre las partes interesadas y garantizar que todas las voces sean escuchadas y consideradas en el proceso de toma de decisiones. En las zonas urbanas, se han utilizado procesos de planificación participativa para involucrar a las comunidades locales en el desarrollo de planes vecinales, lo que lleva a resultados más equitativos y sostenibles. En las zonas rurales, la planificación participativa del uso de la tierra se ha utilizado para promover prácticas agrícolas y forestales sostenibles, al tiempo que se protegen los derechos indígenas y el patrimonio cultural. Un ejemplo de implementación exitosa de la planificación territorial participativa es el caso del proceso de Planificación Territorial Indígena en Colombia.
Consideraciones Practicas para Elaborar Un Programa Ambiental de Participación Comunitaria A Través de La Incorporación de Los Principios de Ecología Social Mi Exposicion