CARTA AL CORONEL La siguiente poesta se la dedicd a su madre, que era mi abuela, y 2 la que le gustaba mucho jugar a la zanga, un juego de cartas muy arraigado en mi pueblo y en otros lugares de Espaia, como Sevilla. Dice asi: Enea fon muchos rogalos (que a los nikos traigo yo tambin le noy a dajar un nape como juguale yunos pocos da billates para que pueda pagar Y el siguiente poema lo escribié Adolfo Bello para aludir a un cambio de ruta que hizo un sacerdote, o cura, alegando que el recorrido que hacian sus parroquianos era muy targo. Dice asi: Coy a exponen mis razonas a loa oscinos det Valle ae puede olvidar las calles pero no tas tradiciones Hablo de las procarionss también de au nacornide Propiadad de loa nacidoa que adonan a su patrono De ta fa nae ol ancono ue hase al putcblo desuniddo al sabor rustro pattono te au tamplo tan divin El sigan por of camino ‘que tiene por thadiciin 10 puteda haber oariaciin an la proceaién diving Hay quien persande se obstina por cambiar ol raconrido oka que nadia ha paride derogar ta ley Divina Coronel, a pesar de que le habfa anunciado a usted que el anterior era el iltimo Poema, voy @ permitirme incluirle alguno més, Se trata de unas felictaciones de Pascus ue me encontré y que creo que usted sabré apreciar. Sé que ustedes son muy religiosos y ue la Navidad la celebran con mucha devocién y respeto, sobre todo a la Madre, reina de blaCARTA AL CORONEL !a casa, lo que explica esa frase tantas veces oida de “me vay corrtenddes 3 mie casa 1 ances a mi mama” Para la siguiente poesia o dedicatoria se inspird en una postal navstena que © habfa enviado desde Venezuela su hija Julia: Como se nod awscinan las Pascuas 4 Newidarea lesen falicitar a sobrinos y sabrina ami padre y a mi madre 4 para que a todos cundre pornos, cunadoa y hermanos tes felicita su pradna Esta es fa dedicatoria de otra postal enviada por Adolfo Bello a su famulia desde Puerto Santiago: Yo fa mando asta postal a necimianta del Niko tambitn con mucho carito un abhayo fradteanal Ea tan bolla cata postal Aus colores, sus maticos pon cao on alla yo quise a todos folicitan Deseo pundan pasar was Pascuas may polices Le repito, Coronel, que ain sigo anclado en mi pasado, apegado a las costumbres y formas de vida de mi época, Dirlamos que es algo que el Canaria aun lleva en sus genes, coma la mejor herencia de sus aborigenes, tos Guanches, me refiero ahora a valores como la caballerosidad y la honradez que derivan de la nobleza de corazén, no de ja noblexa social o sangre azul; una nobleza que en muchos casos deriva en ingenuidad como a mi mismo me ha llegado a suceder. Pero esto preferiria dejarlo a su criterio y recibir su opinién o critica cuando pueda usted honrarnos con su visite & 62CARTA AL CORONEL @ La distribuci6n del terreno en Canarias Estando yo en Venezuela, Coronel, aia hablar de la Reforma Agraria, que consistia o un reparto de la tierra de forma equitativa, evitando asi que unos tuvieran miles de hectareas y otros un pobre conuco, que pertenecia al Estado. Y en el caso de Las Islas Canarias, creo recordar que ya le conté a usted que, después de la Conquista, las Islas puede decirse que eran propiedad de unos cuantos, supuestamente asignado por la Corona conforme a io acordado antes de lograr la derrota ¥ sumnisién de nuestros aborigenes. Pero le estoy hablanda en términos historicos ya que esas grandes extensiones ya no existen por la razon de que a través de las generaciones los grandes lotes se han ido repartiendo y fraccionando en forma de herencias de terrenos cada vez mas pequefios. Y hablanda de nuestros terrenos, se me ocurre también hacer mencién de los nombres que se han utilizada para identificar las diferentes parcelas o fincas que conforman la zona en la que vivimos. Solamente me voy a detener en la extensién de tierra que va desde Los Cristianos y Playa de las Américas - donde usted se alojaria en su visita — hasta la llamada Centinela. De entre tantos y variados nombres he retenido los siguientes: @ Parcelas situadas al Sur del Valle de San Lorenzo Las Madrigueras, El Mojén, Viceche, Chayofa, Timanfaya, El Vallito, Morro Negro, La Cameila, La Asomada de Los Eres, Llano Azul, Charco Redondo, La Trujilla, Las Casas Viejas, Roque Vento, Pinto, la Florida, Las Rosas, Los Toscales, La Cruz del Guanche, El Frontén, E] Callao, Barranco Oscuro, Cardén Alto, El Bailadero, E1 Malpais, Guinea, La Traviesa, Los Castilletes, El Mulito, La Capellania, El Roquete, La Piedra, La Sefora, La Ladera de los Chicharros, La Galga, Caceres, Las Corujas. @ Parcelas localizadas al Norte del Valle de San Lorenzo Los Castellanos, La Montafita, El Hoyo, La Tabaibita, Los Colorados, Los Cercados, El Ancén, £] Barranco del Rio, Garrote, La Fuente, Ei Mermejial, La Degollada, * Se encuentran mas abajo: La Garcia, Las Manchas, Las Altabaquitas, La Granada, Genovés, La Mesa. + Luego encontramos: EI Almacigo, el antiguo Campo de fithol, La Mesita Chica, La Mesita Grande, La Piedra Negra y Los Blanquiales, Antes habia una finquita que se Hlamaba Pedro, Juan, y Diego, La Gambuesa, La Cortada del Pieén. El Lomo Bianco, Cabriales, y el Mirador de la Centinela. 6hCARTA AL CORONEL —2= $$$ —__—_—_ + Algunos de estos nombres que acabamos de citar servian tambign para referirse a la hora, Pero esto necesita una pequetia explicacién. Y es que, sesenta u ochenta afios atrés, los relojes en Canarias eran muy escasos, y cuando los habia, no estaban al alcance de todo el mundo. Yo mismo puedo decirle a usted que mi primer reloj me lo compré en Venezuela. Y eso mismo les sucedia a todos los jévenes de mi edad, alld por los aftos cincuenta dei siglo pasado. Entonces se desarrollé en mi tierra la costumbre de guiarse por la sombra. Asi, cuando el sol Hegaba al Almécigo se calculaba que eran més o menos las ocho, cuando alcanzaba Ja Mesita Chica eran las nueve, si habia llegado a la Mesita Grande eran ya las diez Alas once era cuando se calculaba que llegaba el sol a la Piedra Negra, y @ las doce mas 0 menos, estaba ya el sol a la altura de Los Blanquiales. Como siempre le suelo decir, no sé hasta qué punto estaria usted interesado en estas ‘cuestiones 0 peculiaridades de mi tierra. Unicamente que entretanto, valiéndome de usted ‘como interlocutor ideal, tengo acasién de ir repasando muchos aspectos de mi pasado, de mi tierra y su gente, no por pura nostalgia sino con el espiritu critico del que intenta ‘comprender la razén de ser de las cosas. @ El habla canaria Dentro de nuestra cultura, otro aspecto que llama mi atencién dentro de la lengua es Ja abundancia de Canarismos, es decir de términos propios de las Islas Canarias. Quizds a veces, Coronel, es dificil precisar si es un verdadero canarismo, teniendo en cuenta que en. muchos casos lo que ha habida es una deformacién de la palabra castellana 0 que estamos ante un portuguesismo, dada la importancia de los Portugueses en la historia de nuestras islas. De cualquier forma, Coronel, he ido elaborando una lista de términos que se utilizaban en el entorno de mi nifiez y juventud y que poco a poco han ido cayendo en desuso, llegando incluso a ser desconocidos por parte de muchos jévenes de hoy. También habria que afiadir un niimero de términos que son simples incorreceiones._ por parte de hablantes con una formacién muy escasa. Entre las palabras seleccionadas hemos reunido las siguientes: grano de wa ccesta de paja Jabios lexcremento caracol torcido rremiendo de zapato GheeCARTA AL CORONEL aguacero De relance' ue de cosuatidad Enchumbadot.. omempapato de agira Enguruitado: agachado Engod cebo que se tira al mar Entulio: escombro: Empenado: no derecho, torcido PE)O nen pez Escarranchado: abierto de piernas FINA so hoja que recubre la pitta del milla Faitosa:, que habla por ta nariz Fechillo: wpestilto Ferruja:. herrumbre Fogatera:... hoguera Fondaje i... tinaja de barro -.taberna poco aseada labios jolpe en la cara smecanimacion Encachasado: sucioy sudado ESCOFFOS0. ruido Guanajo:.. -atontado Machango: -individuo mal vestido Monifato:. chico sin experiencia Chuchanga: m.caracol de tierra I corral escondido retrete 0 excusado smtza ¥ junto a estos términos anteriores, usados por gente de una determinada edad y | podriamos citar también algunos ejemplos de en dla en le habla cotidiana de un sector de ia Poblacién campesina especialmente. Asi es corriente utilizar *semos” por somos “disir” Por decir, “drento” por dentro, *jacer’, por hacer, a lo que podriamos afta mas 65 osCARTA AL CORONEL incorrecciones, tales como estégamo, melesina, dir, etc,, propizs de personas o hablantes Que carecen por completo de la referencia escrita y sobre todo porque su marco social se expresa con sus mismas deformaciones. Pero dejando siempre claro que mis madestas Comentarios se limitan al aspecto linguistico y que son sélo seal de la deformacién propia del habla, por un lado, y de nuestro bajo nivel cultural por otro, Nada tendria esto que ver con los valores de nuestra gente, que tratandose en la mayoria de los casos de personas de mas de ochenta afios actualmente, no tuvieron oportunidad de ir a la escuela, o de tener unos padres cultos que les guiaran en ese aspecto. Pero sf los educaron en el respeto y la honradez con los demas. Y que cuando dicen “palabra de honor” hay que tomarlo en su sentido exacto. Coronel, como estay casi seguro que no declinaré usted mi invitacién a venir a nuestras Islas, quiero ahora advertirle algo. Y es que cuando le presente a usted a alguien mayor que yo, de noventa aiios o més, no se extrafe de ofr alguna palabra distorsionada, que ya en la conversaci6n quedard usted sorprendido de la naturalidad y sinceridad de estas personas, a mi juicio maravillosas. La juventud canaria actual, por su parte, ya es capaz de expresarse con bastante correcciéa, atin sin haber recibido en muchos casos una instruceién muy intensa. Sin embargo, creo honestamente que en muchos de ellos han descendida los valores respecto a generaciones como la mia que tuvieron que enfrentarse a la pobreza y a la misecia. Por 280 quizas oigo decir con una cierta frecuencia que los jévenes de ahora prefieren ontar luna fiesta que una empresa. Pero tampoco se puede generalizar, que un buen niimero de Jévenes en la actuatidad, bien formados y capacitados laboralmente, tienen que intentar abrirse camino en otros patses debido ala profunda crisis econémica que aqui se vive. @ VILAFLOR Relacionado con esto que le acabo ce decir, se me ocurre proponerle a usted, en su visita a nuestra Isla, una visita también al pueblo de Vilaflor, del que ya le dije a usted que se trata del pueblo més alto de Espafia pero con uno de los Ayuntamientos més pobres, Y mi interés en darselo a conocer me viene de que alli tendria ocasién de conocer a unos habitantes que son los més solidarios que yo he conocido, son como una auténtica cooperativa, colaborando unos con otros; un pueblo unido, en definitiva. Alli se vive de la agricultura principalmente. Sus vines son exceientes, todos tienen sus bodegas, unas mayores que otras, por supuesto, y todo artesanal, como hace ochenta o cien afios,CARTA AL CORONEL Crs Estando en el pueblo aprovecharé, Coronel, para presentarle a usted a algunos de Sus incansables luchadores en el campo, amantes de una tierra de la que sélo la muerte los. separard. Hay incluso gente con carreras 0 diferentes oficios que siguen sienda fieles al cultivo de sus fincas, sobre todo a sus vifiedos, que s6lo abandenaran cuando les faiten sus fuerzas. Yo, por mi parte, encuentro admirable que cuando esa gente -todavia joven — llegan o vueiven de sus trabajos se cambien de ropa y se empleen en sus fincas. De elles the cuentan que generalmente tienen sus oficinas, consultorios o bufetes en ta Costa, que es donde més ventajas encuentran para desarroilar su profesin, ¥ nunca imaginé yo que en un puehio tan pequefio como Vilaflor hublera 0 se concentraran tantos profesionales, con titulacién universitaria, capaces ademés de alternar el ejercicic de su profesién con las actividades agricotas propias de un pequeiio o mediano propietario, Param( son todo un ejemplo, y sobre todo para las nuevas generaciones, que ayuda a comprender que con voluntad y organizacién se puede levar adelante una vida plena, sin olvidar las ensefianzas recibidas de sus padres en cuanto al cultivo de la tierra se refiere,CARTA AL CORONEL Y digo todo esto porque me considero un enamorado de la tierra, reconociendo que llevaria muy mal que ese espiritu se perdiera. Se me ocurre también pensar ahora que quizas nosotros, y los padres, somos en cierto modo los culpables de alejar a nuestros hijos del contacto con esa tierra que tantos beneficios nos puede dar. Y el pretexto que damos en muchos casos es que habiendo sido nosotros mismos esclavos libres no queremos que eso se repita en nuestra descendencia. Pero esta claro que no es a eso alo gue aspiramos sino a un contacto sano y equilibrado con la naturaleza que nos rodea y que tanto nos puede ensefiar. Ahora me gustaria hablarle a usted de un proyecto o ilusién, recordando de nuevo a Martin Luther King cuando decia que “a pesar de las muchas dificultades ain tengo un suefio’, ¥ puedo decirle a usted que también yo tengo esa capacidad de sofiar, aunque sea con proyectos muy modestos. Por eso le doy muchas vueltas a Jo que serla una formacién integral en los jévenes de hoy, tratando de hacer compatible una posible formacién universitaria con conocimientos del medio y del entorno que incluyeran experiencias agricolas y ganaderas. Y llegados a este punto, Coronel, suefio también con un espacio para la cria de animales, camo la vaca, la cabra, las gallinas, los pavos, 0 los conejos, por citar s6lo algunos ejemplos, y donde los jévenes en formacién pudieran observar y conocer la uutilidad y los beneficios que cada especie animal nos proporciona, ‘Tratando también de rejacionar estos ideales mios con la realidad de mi pueblo, puedo decirle que todavfa se encuentra gente de edad avanzada, entre los que me incluyo yo, y algiin Joven también, que atin no se ha divorclado, por decirlo asf, de su pequetio huerto, huerta o finca, ¥ es curioso observar también que la mayorfa de esas personas frecuentan muy poco Ios centros de salud, lo que nos hace pensar en el enorme beneficio que sobre la salud ejerce el efercicio sano del contacto con la naturaleza. Por lo demés, tampoco yo he tenido otra opcién dado que mi corta formacién no me permitia tomar un camino muy diferente del de las labores del campo, del que tanto ademés sigo disfrutando, ahora que mi relacién con él es de absoluta libertad y que la vive como una bendicién, A BKCARTA AL CORONEL tratando de combinar 2 mis ochenta y tres afios, mis conocimientos dei pasado con alguno de los adelantos del presente, © Venezuela, mi segunda patria Creo que Ultimamente, Coronel, le he hablado a usted bastante de la realidad de mi tierra Canaria, Sin embargo, no puedo dejar de pensar en mi otra segunda patria que es Venezuela. Creo haberle dicho ya que alif estuve cuarenta y nueve afios, lo que significa una gran parte de mi vida, Siento por ese pa(s algo casi imposible de describir con palabras. Considero que atin tengo raices alli, pues en ella vive todavia una de mis hijas. ‘También me quedaba un hermano en esa tierra, pero lamentablemente ya fallecid, aunque siguen en Venezuela su esposa, hijos y nietos. Coronel, aunque no sea tema de su interés, me es muy dificil dejar de comentarle que considero a Venezuela como la Republica hermana y que todo aquel bien nacido tendria que sentir que es una ldstima que una nacién como no hay otra en el mundo haya caido tan bajo por culpa de un mandatario y luego por sus sucesores, Es cierto que no soy politélogo, ni entiendo de asuntos de Estado. Pero por lo que tino mismo vive a través de los afios, por io poco que lee y oye, por los sucedidos de la historia y todas esas razones va uno comprendiendo algo de las raices del mal, De sobra conoce usted todo lo sucedido, siendo usted como es militar y con rango de Coronel, Pero atin asi me es muy dificil dejar de darle vuelta a los hechos y recordar aquellos ahos sesenta, mas o menos, cuando empezaron las guerrillas o revoluciones con e! objetive de acabar con las dictaduras y caciquismos de Latinoamérica, Indiscutiblemente, América ama la libertad, lo que explica que hace ya cincuenta afios un gran iider o guerrillere prometiera acabar con la dictadura en su pa implantado la democracia. Y Iégicamente Jos pueblos le creyeron, aunque fueron engafiados. AGn recuerdo, Coronel, cuando pedian P69 acolaboracién financiera para la guerrilla; y Venezuela, un pueblo solidario y amante de la democracia y la libertad, colaboraba. Hoy hay mucha gente mayor arrepentida de haber crefdo en la mentira del que nunca dijo la verdad de sus intenciones hasta convertirse en el dictador que ha tenido América. Todo esto ya lo sabe usted y hasta estoy seguro de que lo ha vivido en sus propias carnes. Afortunadamente también, esa semilla 0, mejor dicho, esa mala semilla esté aparentemente en vias de extincién. Eso serfa lo mejor que podria pasar a su querida patria, donde tantos jévenes desperdiciaron su vida o destrozaron a muchos inocentes sin ningiin sentido, s6lo por seguir las ideas de unos radicales que sofiaban con hacer frente a un Imperio. Una historia que usted muy bien conoce y que, aunque empez6 hace cincuenta affos, todavia no ha terminado. Pudiéramos decir que es un pasado y un resente. En muchos paises del sur y de Centroamérica se extendiG la llamada Revolucién, Adin recuerdo cuando lleg6 a Venezuela, y ya sabe usted, Coronel, quién explotaba esas guerrillas, Cuando trato de revivir todo esto que acabo de decir, ain recuerdo que todo eso de Dictadura y Democracia era para m{ algo extrafio en cuanto a su significado. Lo que si me quedé claro es que fue durante la dictadura cuando més progreso social y econémico conoci en ese bello pafs. Pero también de forma ingenua, como siempre, celebré con unos ‘uantos amigos las nuevas propuestas hasta que no tardé mucho en verse los frutos de la pretendida democracia. Se sabe también que los llamados patses bolivarianos son amantes de la libertad que proporciona una verdadera democracia, aunque nunca fo han podido lograr. Habria que recordar ahora al presidente Rémulo Bethencourt, quien gané unas elecciones allé por los afios sesenta, sofiando también él con una democracia y con el fin de la dictadura. Pero la paz le duré muy poco. La guerrilla le organizé un atentado del que salié ileso por pura casualidad. Y sabe usted muy bien, Coronel, que todos los que se metieron en la guerrilla estan en el origen del partido politico venezolano de tzquierda conocido como Bandera Roja. En sus comienzos fue un frente guerrillero revolucionario que trataba de difundir su ideologfa a través de algunas universidades puiblicas y liceos puiblicos de Venezuela. Todo ello fue una simple aventura y duré muy poco. Es Kigico pensar que los cabecillas se hablan dejado seducir por el jefe. Pero pronto volvié la paz, desde el preciso momento en que comprendieron que lo que estaban haciendo no les conducia a ninguna parte, que se habian equivocado y que procedia tomar el camino de la sensatez. Asf las cosas, unos fueron ministros y otros se postularon para presidentes de la Repiblica, incluso. ¥ ya sabe usted que lo de las guerrillas no dio resultado en Latinoamérica. Lo triste de todo esto es haber causado tanto dajio indtil con la pérdida de tantas vidas. Una vez més vuelvo a plantearme el interés que estas historias podrlan tener para usted y mucho lamentaria que més bien provocaran en usted cansancio 0 aburrimiento, por no ser historias 0 cuentos imaginarios sino un relato de la Pura realidad. Mi momento preferido para entregarme a esta tarea es por las noches. Y es que no me gusta acostarme temprano sino prepararme para dormir durante el tiempo que dura mi escritura y toméndolo a usted, Coronel, como mi interlocutor ideal. ¥ volviendo al tema que venia yo comentando, el propulsor de todo ese dafio y de ‘todas esas aventuras infructuosas ya sabe usted quién fue. Esta de més recordarle que 70CARTA AL CORONEL después de esa amnistia, Venezuela, politicamente, vivié en paz con sus formas de gobierno, buenas o malas. Abi es donde aplicamos aquel adagio que dice que “mds vale un malo conocido que bueno por conocer". ¥ es conocido que en mil novecientos noventa y nueve, el pueblo venezolano eligié a un Presidente con el mayor porcentaje de votos a su favor, algo que, segiin se decta, nadie habia obtenido hasta entonces. Haciendo memoria ahora, recuerdo también que el mencionado presidente prometia en sus mitines acabar con los partidos politicos y con todos los corruptos. ¥ lo de los partidos lo logré aunque nunca desaparecieron del todo sino que ha habido momentos en que se han ido fortaleciendo debido a que [a gente, en general se siente engafiada y defraudada. Y ya sabe usted que nada de lo que el Presidente prometié se cumplié. Todo lo contrario: aumento de Ja corrupcién, del ntimero de asesinatos, la mayor inseguridad de ‘América Latina y la mayor inflacion. Me he atrevido a darle mi modesta opinién, Coronel, sabiendo de antemano que son cuestiones que conoce usted mejor que yo. Pero quiz4s es para mi un pequefio éjercicio mental esto de volver sobre las hechos histéricos que condicionan la realidad de los paises. ¥ asi sigo pensando yo que a este sefior le encargaron la misién de luchar contra el Imperio para convertirse de ese modo en el Libertador de Latinoamérica, implantar sus ideas radicales en todos esos paises o, mejor dicho, vestirlos de rojo. Pero es bion sabido, que todas esas ideas politicas no han tenido ningtin éxito sino que, al contrario, han sido un fracaso, Me refiero a las politicas populistas y demagégicas que utilizan esos lideres, encantadores de serpientes, para lograr el voto del pueblo. Y también se comprende que ese pueblo se deje seducir por sus promesas, tratandose de una mayoria de personas que no dispone de necesidades tan elementales como la vivienda 0 el puesto de trabajo, to que hace imposible cumplir con un alquiler o hipoteca. ¥ llega entonces la aplicacién de la ley, los desahucios ordenados por los jueces y, junto a ello también, el clima de anarquia por lo que pudiera llamarse desobediencia civil. Esto es lo que justifica en gran parte la aparicién de las Plataformas politicas. He ofdo también, Coronel, que el gobierno Revolucionario traté de exportar sus politicas a Espatia. Y como yo sufri en carne propia las consecuencias de esa forma de Bobierno, ni en suefios quisiera yo ofr hablar ahora de Revolucién. ¥ otro ejemplo de lo que son las revoluctones lo tiene usted en su propio pais, donde los que se hacen llamar revolucionarios ponen trabas para negociar la Paz, y todo ello después de cincuenta afios secuestrando, asesinando y financléndose a través del tréfico de drogas, psicatrépicos y estupefacientes, y que no es mas que otra forma de asesinar directa o indirectamente. Por so, se atreve uno a pensar que, més gue revolucionarios que huchan por causas justas, estamos ante una banda de forajidas y facinerosos, practicando una politica muy alejada de los principios democraticos, buscando berpetuarse en el poder, por tiempo. indefinido, ¥ practicanco una supuesta democracia tal como ellos la entienden, Comprendo ahora, después de lo que acabo de escribirle, que quizés estoy Invadtendo terrenos que no debiera, Pero soy consciente también de que esta larga carte, que me he propuesto escribirtea usted, con algo hay que completarls, sobre todo sabiends ademas que uno ya esté pasadito de afios y que quizas no tenga ya ocasiOn de seguir eseribiéndole un poco més adelante. Ojald esta conversaci6n continde, y que pueds usted, con toda confianza, decirme si cree que he cometido imprudencias, eTARTA AL CORONEL Pero por encima de todos mis deseos, le rogaria a usted, que en cuanity reciba esta carta vaya preparando su visita a nuestras islas. Y, coma estoy 3 punto de jubilarme, 49 tendria yo para entonces toda la libertad que se necesita para acompafarle en el recurride de nuestro archipiélago. Y, contando con que aceptaré m: invitacion. fe incluyo en ext carta mi ntimero de teléfono, para que me avise de tan deseada visita. Entre tanto, Coronel, me voy a permitir seguir contindole lo que esta sucediendo hoy en Espafia y que es algo a lo que por aqui no estabamos acostumbradus. Me refier a partidos politicos, recién nacidos, y a su forma de hacer politica, que no es otra que la que ya conoci en Venezuela, y que siguiendo su mismo estilo basan su éxito, o cratan de conseguirlo, a base de promesas frente a una realidad del pueblo realmente dura, provocada por partidos corruptos, que nada hacen por remediar Ia miserias derwadas de fuertes crisis econémicas. Y se puede llegar a comprender que un pueblo hastiado y desesperanzado deposite toda su confianza en las promesas de ese lider astuto, que ademés garantiza acabar con la corrupcién y devolverle al pueblo formas de vida dignas a través de garantias en el empleo, en educacién, y en sanidad, por referirnos solv a lo mas elemental Y bien sabe usted, cudles han sido los logros de esos gobiernos populisias, que han permitido que una nacién tan rica haya cafdo tan bajo, permitiendo que en una poblacion de casi treinta millones de habitantes, como sucede en Venezuela, sélo unos ocho millones tributan y el resto est exento de todo tipo de impuestos, sin olvidar el alto coste que ha tenido exportar la Revolucién. Y aqul en Espafia se dice también que son tos lideres de los nuevos partidos espafioles los que en su dia asesoraron al gobierno de Venezuela en economia y en otros asuntos. Soy consciente de las posibles repeticiones y de mi insistencia sobre determinados temas, y hasta de muchas incoherencias por mi parte al tratar de describirle a usted muchos hechos que yo mismo he vivido. De su generosidad dependerd el que pueda usted soportar lo que pueda resultarle incongruente. ¥ es que aunque tengo las ideas en mi cabeza, me falta el talento para expresarlas, como ya le he comentado a usted tantas veces. Permftame también, Coronel, unas lineas sobre la politica espafiola, donde los mismos encantadores de serpientes, es decir, los partidos populistas siguen predicando, como en Venezuela un gobierno mejor, que acabard con la corrupeién que garantizard salarios més elevados y més seguros, vivienda y luz gratis para los mas desfavorecidos, sanidad eficaz, igualdad de oportunidades en materia de educacién, reduccién de ta jornada laboral y de los impuestos, llegando incluso en este dltimo punto a eliminarlas totalmente cuando la situacién econémica del ciudadano as! lo aconseje. Y digo yo ahora que, como el gobierno no podria soportar tanta generosidad demagégica, tendria que hacer como Robin Hood y expropiar a los ricos para darle 2 los pobres, y cuando se acabe con los ricos, ocurriré como en Venezuela 0 en Grecia, donde el sistema establecido por la Constitucién no reconocera nunca lo que se denomina antisistema, anarqufa o desobediencia civil. Y yale decla yo anteriormente, o mas bien le mencionaba, algo que usted ya sabla muy bien y era que en la historia de Espaita habia un antes y un después de la guerra cil eneCARTA AL CORONEL y que de ese hecho convenia guardar memoria histérica, para que no se volviera a repetir Jo que tantos males y sufrimientos ocasion6 al pueblo espafiol. Ami modesto entender, se me haria muy dificil pensar que Espafia pudiera pasar de nuevo por épocas tan amargas. Y me hace pensar asi el hecho de que este pais es actualmente una gran nacién, con gente muy madura y muy sensata democraticamente, que por encima de todo desea que la ley se cumpla y sea respetada por todos e igual para todos. Querria insistir en el hecho, Coronel, de que no dudo de la solidez de los partidos politicos espafioles tradicionaies y de sus creencias democrdticas; pero sf dudo, y mucho, de estos nuevos partidos politicos de planteamientos populistas, y que me hacen recordar aquellos que antecedieron 0 motivaron una guerra, la guerra civil espafiola, y que no sé hasta qué punto fue necesaria o innecesaria. Continuando con un analisis superficial de Ia situacién actual de Espatia, también quisiera yo decirle, Coronel, que no me gusta mucho la proliferacién de partidos politicos ues creo que ya le mencioné a usted anteriormente que a los Espaiioles les gusta mucho ser independientes, y tener cada uno su propio reino. Y segin permite la ley electoral como sabe usted, cuando muchos partidos politicos y perdedores se unen pueden arrebatarle el triunfo al auténtico ganador, como ha sucedido ya en més de una acasién, Y es evidente que es asi como pueden triunfar los que predican el falso altruismo y Ja falsa filantrapia, ofreciendo un sinfin de derechos ¥ ninguna obligacién como ciudadano. Porque de sobra sabemos que el lenguaje de los partidos populistas no pone el menor esfuerzo 0 interés en recordarle al ciudadano que también tiene obligaciones que cumplir, que todo se consigue mediante el trabajo y el esfuerzo, que hay que cuidar la empresa como si fuera propia, porque es la que ie permite vivir con digni¢ad, y que por lo demés la tmica forma de crear riqueza es trabajando, produciendo riqueza, y que se mantengan las buenas relaciones entre patronos, empleados y obreros. Razones todas ellas que garantizan el verdadero progreso, que no es otra cosa que poder vivir con dignidad en todos los érdenes de la vida. Soy consciente, que sobre una misma cuestién, todos no pensamos lo mismo ni opinamos lo mismo. Por eso le ruego que sepa usted comprender las discrepancias que pueda haber. Ya le he repetido que yo concibo esta carta como vna larga conversacién entre usted y yo, o mas bien un monblogo hasta atiora, nando todavia no ha llegado a sus iranos. ¥ también comprendo que sl esta misma carta fuera a parar a otras manos y fuera leida por otras personas también tendrfa que admitir yo de nuevo que podrian Sorprenderse por estar en desacuerdo con ml forma de interpretar los hechos 0 de decir las cosas. Que usted esté acostumbrado a leer auténtica literatura es un hecho. Yo me habria onformado con poder calificarme de regular en el terreno de la escritura. ¥ también tengo Ja esperanza de que no le desagrade a usted la literatura epistolar y de que su cuiosidad le eve a leer mis modestas opiniones. ¥ siguiendo con lo anterior, me habia detenido a analizar las propuestas de los \ideres populistas, que cuentan coa la riqueza de unos para repartiia a los otros y lograr asi un mundo mejor, como quien hace milagros o magia. Pero cl paso de ia promnesa a la realidad acabs en Fracaso total, desgraciadamente. De esta larga conversacién ha podide 73 8CARTA AL CORONEL —_—_———— usted ya deducir la importancia y el lugar que en mi mente ocupa Venezuela y todas las vivencias que all{ acumulé durante cuarenta y nueve afios. He pasado més afios en ese pais que en Espafia y puedo decirle a usted, Coronel, que mucho fue lo que aprendi: a sentirme hombre primero, y luego también a sentir y a amar, 0 a querer 0 a saber Jo que es una Patria, a sentir sus simbolos, cuando oyes el himno nacional o cuando ves la bandera enarbolada, cuando haces amigos, cuando nacen tus hijos, o simplemente cuando sientes que aquella es tu segunda patria. La mejor sefial era que cuando ofa el himno de Espaia 0 vefa la bandera me daban ganas de llorar. Pero de todo esto sabe usted mds que yo, Coronel, traténdose de la Reptblica hermana, la més rica de las cinco hermanas que por equivocadas pretensiones politicas de Jos gobernantes, queriendo luchar contra el Imperio que representan los Estados Unidos, hha descendido al nivel en el que se encuentra hoy. ¥ todo por no haber comprendido a tiempo que para emprender esa lucha hace falta tener un gran poderfo econémico 0 repetir las hazafias de David y Goliat. Me vienen ahora a la memoria aquellas palabras que decian “Patria, socialismo 0 muerte”. Y bien sabe usted también dénde nacieron y cuanto dafio han hecho sobre todo en su pals, y en Venezuela, 0 en algin pals europeo que no le quiero mencionar a usted. Pero, légicamente, pronto rectificaron y volvieron a gobernar como los socios restantes. Pero perdéneme que me esté metiendo yo en terrenos que no sé cultivar. Ya le dije que no soy politélogo, y que si me atrevo a opinar es por tratarse de algo que lo estamos viviendo en nuestro presente y que quizds, incluso, se extienda a un futuro. Y volviendo a la idea de Espafia, creo que le decia yo, Coronel, que es una gran nacién pero que el quid de la ‘cuestién est en su gente, que en vez de ser més gobernables van generando problemas de gobernabilidad. Ya en esta larga conversacién, le decfa yo a usted que el Espafiol aspira a tener su propio reino y que incluso una minorfa aspira a tener ademds su propia nacién. Y Wegados a este punto, hasta me atreveria a decirle que he ofdo que estos nuevos politicos, que estuvieron asesorando al gobierno de Venezuela, estén apoyando ahora el desmembramiento de Espafia, en medio de un clima antipatriético, anarquia y populismo radical. Admito también e] derecho que todos tenemos a opinar y a expresar nuestras ideas, por contrarias que puedan ser a otras igualmente expresadas. Es un derecho que nos da la Constitucién Espafiola. Como también nos seffala los deberes que tenemos que cumplir, entre ellos el respeto a las leyes y a los representantes elegidos democré- ticamente. Todo esto que le acabo de contar no es més que mi forma de pensar y de enfocar una realidad que yo considero perniciosa para una Espafia que ya derramé mucha sangre, por aspirar a una Espaiia Grande y Libre y que fuera gobernada por gente que volara alto, como el aguila 0 el céndor, y no como el cocodrilo o el lagarto. Pero también me gustaria que no tomara usted en cuenta esto iiltimo que acabo de decir, ya que los reptiles son también parte de la naturaleza y, por supuesto, matan para sobrevivir y dentro de lo que pudiéramos considerar un equilibrio ecolégico. Sin embargo, esos que yo creia que volaban alto no han hecho més que defraudar a una grandisima parte de los Espafioles, que ya han visto en ellos a unos verdaderos depredadores de lo que es patrimonio comin. ebbCARTA AL CORONEL Por supuesto que no se puede generalizar, tratandose de un miimero limitado y det cual la Justicia daré buena cuenta cuando se den ias circunstancias favorables. Ahora quisiera yo también recordar aqus, Coronel, lo que me conto un compatriota Suyo acerca de un hecho que se produjo en la historia de la Conquista de América relacionado con ta forma de obtener riqueza, donde el trabajo era para los esclavos, el comercio para los judios y la mayor riqueza para los conquistadores. Y si queremos dar un salto en la historia, y situarnos en la actualidad, son muchos los que ahora quieren enriquecerse pero a través de un cargo piblico, es decir, mediante la apropiaci6n indebida de dinero piblico, Porque como me contaba también su paisano, hoy no hay guertas, ni Palses que conquistar, no hay oro del que apropiarse como en el caso de los Aztecas, los incas y los Mayas, sino que las riquezas se consiguen en ta propia patria y a través de gobiernos corruptos. © Elorigen del car&cter espafiol y su ingobernabilidad Dandole vuelta a otras ideas, y a la idea de Espafia como concepto, Coronel, me Pregunto con frecuencia por qué el Espafiol es tan distinto. Y se me ocurre pensar si serd debido a la cantidad de razas que han pasado por esta bendita Espafia y que de alguna forma han podido condicionar y conformar un determinado cardcter y una determinada forma de ser. Con frecuencia me gusta retroceder en la historia y situarme en el debilitamiento del Imperio Romano con tas consiguientes invasiones de los Barbaros, Suevos, Vandalos y Alanos, cruzando los Pirineos hasta asentarse en el caso de los Vandalos y Visigodos en el sur. Suevos y Alanos se dominados por Godos y Visigodos. Esta dominaci6n duré casi tres siglos, y se cree que es la razén por la que Cataluiia se considers como “Tierra de Godos”. Luego vendria la intencién de Atila, rey de los Hunos, de atacar a los poderosos Visigodos. Sabido es que los pueblos romanos perdieron su unidad politica ¥ que la barbarie Se manifest por todas las tierras conquistadas. No obstante, como el desarrollo cultural de los invasores era muy inferior al de los Romanos, la lengua que estos hablaban no logré destruirse sino que hubo que adoptarla como lengua oficial. Pero no era mi objetivo aheva detenerme en cuestiones de lengua sino insistir en el hecho de la cantidad de pueblos que hhan Invadido Espafa a lo largo de su historia, siendo los Iberos los primitivos habitantes que le dieron su nombre a la Peninsula. Sin olvidar a los Fenicios, que afios antes de Cristo Penetraran por el sur y que con dniimos comerciales fundaron ciudades como Sevilla, die © Jerez; y los Celtas, conviviendo con los Iberos y fusionando su lengua y su raza, confgurarian un grupo étnico lamado Celtbero, y cuyas caracteristicas han perdurado or et espiritu del pueblo espaiiol. Ya continuacién con la legada de los distintos pueblos, es de destacar igualmente ta importancia de los Griegos que avanzaron hasta la region de Valencia. ¥ por su parte los Cartagineses, africanos de raza fenicia, penetraron en la Peninsula por el Estrecho de Gibraltar. Se sabe que este grupo se extendié por las proximidades de Cartagena, y que ereid infuencia étnica, mucho més que idiomatica, a base de imponer sus costunioree y Sus usos. 75CARTA AL CORONEL — Como ya ha podido usted deducir, lo que le acabo de decir se ha quedado en este punto concreto en una visién muy somera por mi parte traténdose de un tema de tanta envergadura y sobre todo contando también con sus extensos conocimientas en esta materia ¥ dando otro gran salto en la historia de Espafia, Coronel, siento necesidad de insistir en lo ingobernable que ha sido el pueblo espaftol, a la vez que me pregunto en donde habria que buscar las causas, Sabido es que en el period comprendido entre mil ‘ochocientas catorce y mil ochocientos setenta y seis hubo siete Constituciones, dos guerras civiles y treinta y cinco intentos militares de derrocar al Gobierno, once de ellos con éxito, ¥ también que fue el primer pais que ante el caos politico y el derramamiento de sangre estableci6b un sistema bajo el cual los liberales y conservadores se alternaban en el poder, con la amarga experiencia de seis revueltas campesinas y cuatro levantamientos urbanos entre mil ochocientos veintisiete y mil novecientos diecisiete. Un siglo de luchas civiles, que seria la clave para la entronizacién de una dictadura que durarfa unos cuarenta afios, Siguiendo con mi pensamiento puesto en Espaiia, Coronel, trato de buscar palabras que nos ayuden a explicar algunos hechos. Por eso me pregunto a veces si seria correcto explicar la realidad del pueblo Vasco y Catalan desde una perspectiva étnica, dadas las distintas razas de las que da cuenta la historia de nuestro pueblo. Y como quiera que ya voy teniendo una edad avanzada, mucho me gustaria que en nuestro territorio acabaran los problemas separatistas, sabiendo ademas que cuando el pueblo espafiol quiere es capaz de volver a la unidad, segiin dio muestras para expulsar a los Franceses al frente de José Bonaparte. En toda esta conversacién que trato de mantener con usted, trato de hacer autocritica también de mis limitados conocimientos histéricos y de mi nula capacidad literaria. Pero me contento con tener conciencia de que puede gozar de la belleza literaria que escritores como Gabriel Garcia Marquez nos han sabido regalar. Y por mi parte, y dadas mis circunstancias, me conformo con lo que de mf he podido dar y con lo que soy. Querfa afiadir ahora que con anterioridad le he hablado de algunos préceres de su pais y de Venezuela. Yo fui una vez a la Gran Colombia. Y leyendo un libro me acordé de usted porque trata de un militar de alto rango, de una persona muy culta y con talento segiin puedo deducir de su discurso de despedida en el momento de su retiro. EstA fechado el diecisiete de diciembre de mil ochocientos veinte, y dice asi: “EI gobierno se ha dignado concederme el relevo a vuestro mando y yo parto para Espaia quedando a vuestro mando y vuestra cabeza el Mariscal de campo Miguel de la Torre, Después de muchas aifos de estar con vosotros y de ser testigo de vuestro valor en combate y de yuestra constancia en fos sufrimientos siento en tan cruel separacién de todo el dolor que debe aumentar la administracién de tantas virtudes. Conmigo va vuestra heroica memoria y gratitud a trabajos y victorias, a trabajos que habéis padecido por mi honor, por mi fortuna, mi gloria, conmigo el ansia inextinguible de ver recompensadas vuestras tareas por un gobierno cuya divisa es la justicia y magnificencia. Vosotros algiin dia os acordaréis con placer de que no os engaito, soldados. oe 76 teCARTA AL CORONEL ————$ $$ —————— La guerra en Venezuela debe ser terminada para siempre. El genio de la discordia que la ha asolado por diez afios se ha apartado de sus comarcas leno de espanto, Las rimeras bases de esta suspirada paz estan puestas. El jefe del Gobierno disidente, el general ‘Simén Bolivar, ha concurrido a ponerlas; poco resta que hacer, lo més esté hecho y es en estas afortunadas circunstancias en que vuelvo al centro de fa nacién Espaftola a decirle lo ‘que soy, lo que valen vuestras virtudes y de lo que son dignos vuestros sacrificios. Ella, el Rey, vuestros compatieras de armas, y los simples particulares, todos oirdn de mis labios ta gloriosa historia del ejército expedicionarto; yo parto seguro de que al volver vuestros ojos al general que me sucede, se presentarén con él a vuestra memoria las Lianuras de Cojedes y las Colinas de Ortiz. Ali visteis su valor, como en todas partes, y sus virtudes militares. Soldados, un inmenso océano va a separarme de vasotros; pero en cualquier parte ‘adonde la suerte me conduzca, alli estard siempre conmigo mi ejército de costa firme. Sed siempre lo que habéis sido, conservad vuestra disciplina y ni mis afectos serén burlados ni mis esfuerzos por vuestra recompensa y fortuna serdn injustos.” Y ahora que he terminado de copiar este hermoso texto, Coronel, cmo me gustaria oir de sus propios labios cémo fue e] retiro que usted vivié ya fuera del ejército revolucionario, si se dio usted de baja o qué sucedié. Creo que ya le habia dicho que lo poco sé de usted se lo debo a su compatriota Gabriel Garcia Marquez, al que admiraré hasta mi Ultimo suspiro. Por él supe de las dificultades que tuvo usted cuando dejé el ejército. Pero al margen de esto, quiero pensar en las compensaciones que deben ser para su espirita, su inteligencia y sus conocimientos literarios. A mi mismo, contando con mi modesta instruccién, mucho me gustaria poder hacer el mejor uso de tantas sencillas y bonitas palabras que nos ofrece nuestra lengua. @ La amistad entre Sim6n Bolfvar y Alexander von Humboldt Dentro de esta larga carta, se me ocurre contarle también a usted, Coronel, algo que a mi me gusté por la cantidad de halagos y enaltecimientas que al hombre, por pequeio que sea, lo hacen grande; se trata de la relacién que hubo entre Simén Bolivar y Alexander Humboldt, del que ya le hablé también en pérrafos anteriores. Como comprenderd todo lo que ya aqui pueda recoger no son mis que datos, tomados de distintos libros, y que usted, como buen conocedor de la cuestién, no solamente me podria corregir sino completar con conclusiones suya bien contrastadas. Y segiin esas lecturas mias, parece ser que fue en 1804 cuando Simén Bolivar conoci6, en un refinado salén de tertulia, al sablo Humboldt. Ambos eran jovenes, 21 afios Bolivar y Humboldt unos 35. Y no tardé Bolivar en darse cuenta de que aquél ilustrado que acababa de legar de América sabia muchisimo de la Gran Colombia, que incluis Venezuela, y de los pueblos de América en general. Y es que con una gran curiasidad ctentifca, Humboldt habia recorrido toda la geografia americana de norte a sur caneclendo ai no sslo una fauna una flora exbticas sino que fue para él una ocasién muy vallosa pata observar otras costumbres y para intercambiar opiniones con americanoe de todas las clases sociales.CARTA AL CORONEL TF Y de sobra conoce usted, la conclusién de Humboldt de que se trataba de pueblos maduros ya para la independencia; lo que no habia visto hasta entonces era al hombre capaz de llevar adelante una tarea de tal envergadura. Hasta que conocié a Bolivar. Y vuelvo a leer que las conversaciones que luego mantuvieron entre ellos, tanto en Francia como en Italia, fueron decisivas en la visién del joven Bolivar de luchar por la libertad de los pueblos americanos. Otro ilustrado europeo que habria que mencionar aqui, es Aimé Bonpland, naturalista, médico y botdnico francés, que se hizo célebre especialmente por haber participado, junto a Humboldt, en esa expedicién a América de la que acabamos de hablar. Y también me encontré en un libro, Coronel, algo de la correspondencia mantenida entre Humboldt y Bolivar y que me he permitide copiar aqui dando por hecho de que se trata de una muestra que bien sabra apreciar usted en toda su dimensién. La carta de }6n Bolivar, escrita a Humboldt en mil ochocientos veintiuno, dice asi: “Muy sefior mio y respetable amigo: Mr. Bonpland, que parte maftana para Europa, ha querido encargarse con placer de estas letras que ilevardn a usted la expresién de mi recuerdo y de mi afecto y mi consideracién. El barén von Humboldt estaré siempre con los dfas de América presente en el corazén de los justos apreciadores de un gran hombre, que con sus ofos la ha arrancado dela ignorancia y con su pluma la ha pintado como la propia naturaleza. Pero no son estos los titulos que usted tiene a los sufragios de nosotros los americanos. Los rasgos de su cardcter moral, las eminentes cualidades de su carécter generoso tienen una especial existencia entre nosotros: siempre los estamos mirando con encanto. Yo por lo menos, al contemplar cada uno de los vestigios que recuerdan los pasos de usted en Colombia, me siento arrebatado de las poderosas impresiones. Asi, estimable amigo, reciba usted los cordiales testimonios de quien ha tenido el honor de respetar su nombre antes de conocerlo, y de amarlo cuando 10 vio en Paris y en Roma. Soy de usted con la mayor consideracién y respeto su mds obediente servidor.” Paso ahora a copiarle a usted, Coronel, la carta que Alexander von Humboldt le escribié a Sim6n Bolivar, siendo ya Presidente de la Gran Colombia. Dice asi:CARTA AL CORONEL oo 29 de julio 1882 “Seftor Presidente, La amistad con la cual el General Bolivar se digné honrarme después de mi regreso a Méjico, en una época en que hacfamos votos por la independencia y libertad del nuevo continente, ime hace esperar que en medio de los triunfos coronados por una gloria fundada por grandes _¥y penosos trabajos, el Presidente de la Reptiblica de Colombia recibird todavia con interés el ‘homenaje de mi admiracin y de mi devocién afectuosa, ‘Me atrevo.a recomendar a la gran bondad de Vuestra Excelencia a los portadores de estas lineas, dos jévenes sabios cuya suerte y éxito me interesaron mucho: el sefior Rivero, natural de Arequipa, y el seiior Boussingault, educado en Paris, y pertenecientes ambos al reducido niimero de personas privilegiadas, cuyos talentos y sélida instruccién ltaman la atenci6n piblica a la edad en que otros no se han ocupado todavia sino en el desarrollo lento de sus facultades, Quémicos y mineralogistas muy distinguidos, estos seitores llegartn a ser los Fundadores de la Escuela de Minas que destina y con tanta sabiduria en la parte montafiosa de Cundinamarca. Y unidos por el talento y por el amor al trabajo, harén bajo los auspicios de Vuestra Excelencia la descripcién geognéstica det ditatado territorio de la Reptiblica de Colombia.” Yuna tercera carta, dirigida también a Simén Bolivar dice asf: Ocho de noviembre de mil ochocientos veinticinco General: Una persona muy recomendable por su cardcter y su espiritu de observacién, el sefior Kiener, natural de Colmar, en el Rhin, cuyos negocios mercantiles le laman a los bellos paises que habéis levantado a tan altos destinos y a los que amo como a mi segunda patria. Sé que mi amigo Rocafuerte ha pensado dar al sefior Kiener algunas lineas. ‘para vos, General. No me habria atrevido a escribiros en estos momentos en que recogiendo los frutos de la victoria corondis como gran ciudadano la que habfas comenzado al frente de vuestros ejércitos; pero, ccémo no agregar a estas lineas escritas por un amigo (Vicente Rocafuerte) el homenaje repetido de mi admiracién y simpatia? La carta vuestra que recibt,escrita al pasar or Quito ha sido para mf un gaje precioso de vuestra antigua amistad hacia mi persona; y es con el titulo de amigo que os hablo de mi reconocimiento, y os recuerdo que en Bogoté se ha establecido, hace tres afios, un joven sabio, el seitor Boussingault, que esté al servicio de la Reptblica de Colombia, y cuyos trabajos mineralégicas, quimices y geodésicos merecen la mds honrosa aprobacién del Instituto de Francia. La suerte del sefior Boussingault me interesa de forma especial; no tengo necesidad de decir mds a mi amigo el General Bolivar. Yo le agradezco desde el fondo de mi alma los nobles esfuerzos que ha hecho por la libertad del pobre Bonpland que continiia prisionero en el imperio misterioso del Doctor Francia, Soy con 1a més respetuosa adhesién, de Vuestra Excelencia el mds humilde y obediente servidor.”CARTA AL CORONEL V—_—_—_—_— Cornet, me progunto yo ahora hasta qué punto padrla estar usted interesado en la lecture de estas muestras de correspondencta, mantenida entre personajes de tanta Felevancia instore, Pero si puedo asegutatle a usted que el Lone en que estan escritas las eartas y las maneras tin delicadas de pedi un favor, con lay palabras mejor escogidas, son Para mt todo un eemplo del que todavia quizals algo pu Porque sabe usted tambien que eso de I instracewin o educacion le day yo toda la importaneia que se sistencia sobre este particular de forma tan ndi mas no fue porque no quisiera sino ida aprende merece, Io que exphica, Caronet, mi sontinuada, Y creame ima vez mas que sino apr Por las cirvunstancias adversas de mi nitiez donde lo verdaderamente urgente era ia supervivencia, no 1a ilustraciéin dei nifio que fui. ¥ son todas esas carencias de nifiez y luventud las que me hacen volver continuamente sobre el pasado, no para remediarlo, que seria imposible, sino tratando de comprender ahora, desde la madurez y la experiencia de mi avanzada edad, la verdadera causa de las cosas o de los hechos que nos han podido perjudicar en nuestra formacién como personas. Y por eso también, mi constante admiracién por personas que saben hacer un buen uso del lenguaje y de las palabras sin pretensién de llegar, por lo menos, al talento de su paisano Gabriel Garcia Marquez. Como esta carta o larga conversacién se va prolongando mucho, y mi memoria no Fetiene ya por mucho tiempo lo que se ha escrito, espero de su amabilidad y generosidad ue sepa usted excusarme. Aparte de que también hay en toda esa serie de repeticiones una prueba de Ja necesidad que tengo, de sacar una y otra vez a relucir lo que mas me Preocupa y que con mas urgencia necesitarfa resolver con un interlocutor de la categoria que a usted, por su rango, le pertenece. Y a estas alturas de nuestra conversacién 0, mejor dicho, de mi mondlogo, habré observado usted, Coronel, mi tendencia a contacle diferentes historias, yo diria a recordarie, mas bien, tratandose de hechos mis que conocidos por usted y con mucha mas Precisién, dados sus conocimientos, Por eso encuentro en usted el mejor interlocutor, esperando sus oportunas correcciones, sus sabias criticas a todo aquello en que pudiera usted discrepar respecto a mis creencias u opiniones. © Napaleta Dentro de este pequefio recorrido por temas de historia, me ha llevado la eunosidad a la Guerra de la Independencia, cuando Espaiia tuvo que luchar contra tos Franceses dirigidus por el hermano de Napoleén, José Bonaparte, o Pepe Botella, como era conocide popularmente. ¥ la verdad es que me he interesado por el desarrollo de unos hechas que cast desconocta. ¥ referente a ello, he leido que cuando el Imperio Napoleénico estaba a punto de desmurunarse, José Bonaparte sufrié en Vitoria una decisiva derrota a manos de un ejército comandado por ¢] duque de Wellington, £119 de juno de 1813 un eército francés de setenta anil hombres lleg6 a las Cercanias de Vitoria, Al frente iba José Bonaparte, con el que Napoleén habla contado en 1808 para colucar en el trong de Espana. Pero tras el desastre de la campaia de Rusia, el ciperador (rataha de frenar el avance de sus enemigos sobre la misma Francia, razén por 0H