La división del trabajo permite que las personas se ocupen de aquella actividad en la cual maximizan su productividad y no pierdan tiempo ni esfuerzo realizando otras actividades que otras personas podrían hacer mejor. la división del trabajo es la separación de tareas en cualquier sistema económico para que los participantes se especialicen. Los individuos, las organizaciones y las naciones están dotados o adquieren capacidades especializadas y forman combinaciones o intercambios para aprovechar las capacidades de otros además de los suyos. Las capacidades especializadas pueden incluir equipo o recursos naturales, además de destrezas y entrenamiento, y combinaciones complejas de tales activos que a menudo son importantes, como cuando se usan múltiples artículos de equipo especializado y operadores especializados para producir un solo producto. 2. Ley fundamental de la producción capitalista LEY ECONÓMICA FUNDAMENTAL DEL CAPITALISMO: es la ley, descubierta por Marx, de la producción y apropiación de la plusvalía; refleja la relación principal del modo capitalista de producción, a saber: la de explotación del trabajo asalariado por parte del capital. El fin inmediato de la producción capitalista estriba en crear plusvalía para que de ella se apropien los capitalistas. 3. Ley fundamental de la producción socialista La ley económica fundamental del socialismo, a diferencia de otras leyes económicas, determina la dirección principal de la economía socialista, todo el proceso de la reproducción socialista ampliada (ver): producción, distribución, circulación y consumo. Por esto desempeña una función rectora en todo el sistema de las leyes económicas del socialismo. 4. Ley fundamental de la producción esclavista De acuerdo al pensamiento marxista, el modo de producción esclavista fue uno de los modos de organización político-social de las sociedades pre capitalistas. En ellas, la producción era mayormente desempeñada por personas despojadas de derechos ciudadanos y reducidas a la servidumbre obligatoria, llamados esclavos. 5. Ley fundamental de la producción feudalista En estas sociedades, el poder político estaba descentralizado y era ejercido de manera independiente por los señores feudales: la aristocracia o nobleza que transmitía el poder consanguíneamente, y que era dueña de las tierras cultivables.
Según las teorizaciones de Karl Marx, el feudalismo
antecede históricamente al modo capitalista de producción. Consistía en una dinámica económica de sumisión y explotación del campesinado por parte de la aristocracia y los terratenientes.
Sin embargo, los terratenientes también se hallaban en
relación de sumisión con un poder político superior, que era la corona, la cual permitía a los aristócratas la autonomía política en sus territorios feudales, a cambio de lealtad en el ámbito militar. El modo de producción feudal era esencialmente un modelo de explotación agropecuaria. Era sostenido por una masa campesina encargada de la producción de bienes y gobernada por un señor feudal: un terrateniente que les imponía su orden particular, ejerciendo a la vez el poder político y legal, aunque en esto último intervenía también la Iglesia (el clero).