INSTITUCION UNIVERSITARIA ANTONIO

JOSE CAMACHO

LUIS FERNANDO ZUÑIGA GARZON

CARLOS ESTEBAN CHAVEZ QUINTERO

JUAN SEBASTIAN GUTIERREZ GUAZA

CONSTITUCION Y CIUDADANIA

ENSAYO CONSTITUCION DEL 91

 Colombia y la renovación: Constitución de 1991

Colombia, a principios de la década de 1990, estaba inmersa en un proceso de transformación que

marcó un hito en su historia moderna: la promulgación de la Constitución de 1991. Este evento no
fue simplemente la creación de un marco legal, sino una respuesta a las dinámicas
socioeconómicas y políticas que moldearon el país en las décadas previas.

A finales de los años 80, Colombia enfrentaba una situación económica compleja. La crisis de la
deuda externa, la inflación descontrolada y una profunda recesión eran retos que afectaban a
todas las capas de la sociedad. La apertura económica liderada por el gobierno de Virgilio Barco
(1986-1990) buscaba integrar al país en la economía mundial, pero también generaba desafíos
internos, como la desprotección de sectores productivos locales y el aumento del desempleo.

Además, el país estaba inmerso en un conflicto armado interno que exacerbaba la inestabilidad.
Las guerrillas, los paramilitares y el narcotráfico contribuyeron a un clima de violencia que
afectaba la vida cotidiana de los colombianos. Este contexto convulsionado creó una urgencia por
redefinir el contrato social y político. Un elemento crucial que marcó este período fue el auge del
narcotráfico. En los años 80, Colombia surgió como uno de los principales productores y
exportadores de cocaína a nivel mundial. Este fenómeno no solo afectó la imagen internacional
del país, sino que también tuvo consecuencias directas en la política y la seguridad interna. La
violencia asociada al narcotráfico agrava el conflicto armado, convirtiéndose en un desafío
multidimensional que requiere respuestas urgentes. La presión internacional y la necesidad de
enfrentar este flagelo fueron factores determinantes que influyeron en la configuración de la
Constitución de 1991.

Fue en este escenario que surgió la necesidad de una nueva Constitución. La Carta de 1991 no solo
buscaba establecer las bases legales para una convivencia pacífica, sino también reflejar la
diversidad de la sociedad colombiana. Se promovió la inclusión de mecanismos que garantizaran la
participación ciudadana y se reconocieron derechos fundamentales, incluyendo aquellos
relacionados con la diversidad étnica y cultural.

A su vez, el cine y la literatura jugaron un papel fundamental en la construcción de la identidad

cultural de Colombia en este período. Narrativas que exploraban las complejidades sociales y
políticas se multiplicaron, reflejando la diversidad de perspectivas y realidades que coexistían en el
país. La obra de escritores como Gabriel García Márquez y su realismo mágico resonaba
internacionalmente, proyectando la riqueza de la narrativa colombiana más allá de sus fronteras.

En el ámbito económico, la Constitución de 1991 también dejó huella. Se determinaron principios

como la función social de la propiedad y se impulsaron políticas de desarrollo sostenible. Estos
cambios buscaban conciliar el crecimiento económico con la equidad y la protección del medio
ambiente, reconociendo que el progreso no debía ser a gastos de los derechos fundamentales ni
del entorno natural.
En conclusión, el período anterior a la Constitución de 1991 en Colombia estuvo marcado por
complejas dinámicas históricas y económicas. La intersección de factores globales y locales, la
desigualdad social, el conflicto armado y el auge del narcotráfico crearon un escenario que
demandaba una transformación profunda. La nueva carta magna no solo buscó establecer
principios democráticos y garantías de derechos, sino también abordar los desafíos económicos y
sociales que impactaban la estabilidad del país.