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21-1-22
VACUNAS
La vacuna es un preparado que se basa en microorganismos (muertos, debilitados o
vivos) como bacterias, hongos, parásitos y, en forma más limitada, virus, que se
administra a una persona para prevenir, atenuar o tratar las enfermedades infecciosas.
Antígeno: Todas las vacunas contienen un componente activo (el antígeno) que
genera una respuesta inmunitaria, o las instrucciones para producir ese
componente activo. El antígeno puede ser una pequeña parte del organismo
causante de la enfermedad, por ejemplo, una proteína o azúcar, o bien el
organismo completo atenuado o inactivado.
Conservantes: Impiden que la vacuna se contamine cuando se abre un vial que
se utilizará para vacunar a más de una persona. El conservante más comúnmente
utilizado es el 2-phenoxyethanol.
Estabilizantes: Impiden que se produzcan reacciones químicas en la vacuna y
evitan que los componentes de la vacuna se adhieran al vial. Los estabilizantes
pueden ser azúcares (lactosa, sacarosa), aminoácidos (glicina), gelatina y
proteínas (albúmina humana recombinante, derivada de levaduras).
Sustancias tensioactivas: Mantienen mezclados todos los ingredientes de la
vacuna. Esas sustancias impiden que los elementos presentes en la forma líquida
de la vacuna se asienten o se aglutinen.
Sustancias residuales: Son ínfimas cantidades de diversas sustancias utilizadas
durante la fabricación o producción de la vacuna, que no son ingredientes activos
en la vacuna final. Las sustancias variarán en función del proceso de fabricación
utilizado, y pueden incluir proteínas de huevo, levaduras o antibióticos.
Diluyente: Es un líquido utilizado para diluir una vacuna en la concentración
correcta, inmediatamente antes de su uso. El diluyente de uso más generalizado
es el agua esterilizada.
KATTY ANDRADE
21-1-22
VACUNAS
Coadyuvante: Mejora la respuesta inmunitaria a la vacuna, bien sea reteniendo la
vacuna en el lugar de la inyección durante algo más de tiempo, o mediante la
estimulación de células inmunitarias locales. Puede ser una ínfima cantidad de
sales de aluminio (por ejemplo, fosfato de aluminio, hidróxido de aluminio o
alumbre potásico).
CADENA DE FRÍO
Son los elementos y actividades necesarios para garantizar la potencia inmunizante de las
vacunas desde su elaboración hasta su administración mediante su conservación a
temperatura apta o entre +2º y +8º en todo momento. Las vacunas son “productos
biológicos”, su correcta conservación es indispensable para garantizar su efectividad y
evitar eventos adversos.
TIPOS DE VACUNAS
Aunque el objetivo es el mismo, existen diferentes tipos de vacunas que se distinguen por
varios motivos: la forma en la que la vacuna se crea o la manera en la que el sistema
inmunitario responde al patógeno.
Las vacunas de virus vivos utilizan la forma debilitada (o atenuada) del virus.
Estas vacunas crean una respuesta inmunitaria fuerte y de larga duración, ya que
son muy parecidas a la infección natural. Tratan enfermedades como el
sarampión, las paperas y la rubéola (triple viral) y la varicela (viruela). Sin
embargo, una de las grandes limitaciones es que necesitan refrigeración, lo que
dificulta su distribución en países calurosos en vías de desarrollo.
Las vacunas muertas (inactivadas) se elaboran a partir de una proteína u otros
pequeños fragmentos tomados de un virus o bacteria. Se utiliza la versión muerta
del patógeno que crea la enfermedad. La inmunidad es menor que las vacunas de
virus vivos y por ello se necesitan varias dosis que se administran en varias tandas
(vacunas de refuerzo). La hepatitis A, la gripe o la rabia son tratadas con este
tipo de vacunas.
Las vacunas toxoides contienen una toxina o químico producido por ciertas
bacterias. En este tipo de vacunas, la inmunidad no se crea contra el germen, sino
directamente contra la toxina de la bacteria. Como otras vacunas, pueden ser
necesarias dosis de refuerzo. La difteria y el tétanos son ejemplos de
enfermedades tratadas por esta vía.
Por su parte, las vacunas biosintéticas contienen sustancias artificiales,
fabricadas por el ser humano, que son muy similares a trozos de virus o bacterias.
La vacuna contra la hepatitis B es un ejemplo.